Esta historia comenz� hace veinte a�os. Entonces viv�a con
pap� y mi hermano Emilio, ya que mi madre hab�a muerto al tenerme a m�. Emilio
me llevaba diez a�os y entre los dos me criaron como buenamente pod�an. Cuando
iba a cumplir trece a�os, en casa de una amiga del colegio, vimos una pel�cula
er�tica en la que hac�an de todo. As� empec� a masturbarme. Aunque me apetec�a
mucho hacerlo, me daba un poco de miedo.
Un d�a en que cre�a que iba a estar sola toda la tarde,
estaba viendo una pel�cula porno y masturb�ndome. Estaba completamente desnuda
en la sala. De improviso, se present� Emilio. Le hab�a fallado el plan que ten�a
para esa tarde y volvi� a casa.
Justo cuando entr� en la sala, yo estaba en un punto en que
no pod�a parar. Al principio no me di cuenta de que estaba all�. Se qued�
mir�ndome y mirando la televisi�n y a los pocos segundos ya estaba completamente
excitado. Se acerc� a m�. Me qued� cortada al verlo. Era la primera vez que ve�a
un hombre completamente excitado en vivo. Y mi propio hermano.
--�Te gustan estas cosas? �me pregunt�.
--S�...
--Tranquila, cari�o �dijo acerc�ndose a m� y abraz�ndome-. Si
quieres puedo darte un inmenso placer que no se consigue masturb�ndose uno
mismo.
--Pero...
--�Has follado alguna vez?
--No, nunca...
--Sssshhh. Dime, �quieres que te ense�e? �me volvi� a
preguntar, poniendo un dedo de una mano en mi ardiente y mojado sexo y un dedo
de la otra mano en el agujero de mi culito, acariciando suavemente mi rajita y
mi ano.
Eso me produjo un inmenso placer y asent� con la cabeza. Se
desnud� r�pidamente.
--�Has mamado alguna vez una polla? �me pregunt�.
--No, pero he visto hacerlo �le dije-. S� c�mo se hace un 69.
Eso lo puso a mil.
--Espera un segundo �me dijo y sali� de la habitaci�n.
Al minuto ya estaba de vuelta con un consolador en la mano.
Nos tumbamos en el suelo con Emilio debajo de m� e hicimos un incre�ble y
delicioso 69. No entraba su tremenda polla entera en mi boca, aunque la disfrut�
enormemente. Tan dura, tan suave, tan caliente, TAN ENORME...
Cuando lleg� el orgasmo, me tragu� toda su leche. Me sab�a
muy raro, pero me gust�. Luego, me tumb� boca arriba y se puso encima de m�. Me
abri� completamente de piernas, me pas� su enorme verga (mide 21 cm y es muy
gorda) con pasadas lentas por mi rajita varias veces y empez� a penetrarme. Me
dol�a much�simo, mientras que con un dedo acariciaba mi cl�toris, un dedo de su
otra mano entraba y sal�a despacio por mi ano y su boca lam�a mis pechos. Poco a
poco se me fue pasando el dolor. Seguidamente cogi� impulso y entr� hasta el
fondo. Sentir el roce de su tremendo pene rozando las paredes de mi vagina me
puso a mil por hora. Se qued� unos instantes quieto. Luego empez� a moverse
lentamente para poco a poco ir aumentando la velocidad de sus embestidas
mientras que sus dedos no paraban quietos en mi cl�toris y en mi ano. Eso me
provoc� un inmenso orgasmo. A los pocos instantes se vino �l derramando sus
potentes chorros de semen en mi interior lo que me provoc� otro inmenso orgasmo.
Descansamos unos momentos, pero sin sacar su inmensa polla de mi vagina
abrazados, bes�ndonos. Me dijo que me iba a ense�ar en todas las posturas que
conoc�a, que hac�a mucho tiempo que me deseaba, pero que se cortaba porque era
su hermana y no sab�a c�mo iba a reaccionar yo.
Yo le confes� que llevaba bastante tiempo fij�ndome en �l,
que una vez ten�a la puerta de su habitaci�n entreabierta y le espi� haci�ndose
una paja y otra vez que se trajo a una chica a casa creyendo que no hab�a nadie
los espi� y vi todo lo que hac�an. Esas confesiones lo volvieron loco y al
instante ya estaba con la pija totalmente tiesa dentro de mi vagina. En ese
intermedio, hab�a sacado su dedo de mi ano y hab�a metido el consolador por lo
que ten�a el agujero del ano dilatado y me hab�a ido calentando cada vez m�s.
Despu�s de unos cuantos embistes, sac� su inmensa polla de mi
vagina, me hizo ponerme en posici�n de perrito, y me la embisti� por el ano. Al
principio fue un verdadero suplicio, pero cuando empez� a moverse y su mano
empez� a acariciar mi cl�toris, me olvid� de todo dolor. Ya solamente gem�a y me
estremec�a de placer. A los pocos instantes, los dos gritamos "me vengoooo" y
nos corrimos a la vez. Fue tal placer que sent� al fluir su leche dentro de mi
culito que tuve varios orgasmos seguidos. Todav�a le quedaba leche. Le hice
salir, me puse encima de �l y me incrust� su pija. Empec� a subir y a bajar mis
caderas. Eso lo volvi� a excitar. Lo cabalgu� de una manera tan inocente que el
placer que sinti� lo hizo tener un inmenso orgasmo.
Despu�s de un rato, nos vestimos antes de que viniese pap�.
As� seguimos durante un par de meses hasta que una tarde est�bamos haciendo el
69 cuando entr� pap� en la sala.
Durante un rato no nos dimos cuenta ya que no hizo ruido
alguno, y para cuando nos dimos cuenta ya estaba mene�ndose su enorme polla.
--�Pap�! �exclamamos sorprendidos.
Por un momento nos quedamos quietos, pero pap� se iba
desnudando.
--Seguid hijos m�os, seguid �nos dijo, y a continuaci�n me
pregunt�-: �Te han enculado alguna vez?
--Sacando la polla de mi hermano por un instante le contest�
afirmativamente.
Entonces, se puso detr�s de m�, ya que yo estaba encima de
Emilio, y me encul� con una potente embestida. Eso hizo que me excitase m�s a�n
y a los pocos instantes, tuve un inmenso orgasmo. Eso provoc� que tanto Emilio
como pap� se corriesen dentro de m� al mismo tiempo lo que hizo que volviese a
tener otro tremendo orgasmo. Despu�s, me qued� tumbada sobre la alfombra boca
arriba, con mis dos hombres a cada lado, acarici�ndome y bes�ndome. Al rato,
pap� me pregunt�:
--Ya me has dicho que has sido enculada y �has sido follada
por delante? �Lo has hecho con dos o m�s hombres?
--S� a lo primero, pap�. Pero nunca lo hecho con dos o m�s.
Solamente lo he hecho con Emilio.
--�Y te gustar�a probar? Te aseguro que el placer es mucho
mayor.
--S�, pap�, me gustar�a probar con vosotros dos. Pero antes,
quiero hacer lo mismo que hemos hecho ahora pero cambiando. Quiero probar el 69
contigo mientras que Emilio me encula.
Dicho y hecho. Pap� se puso debajo de m�. Tiene barba y
bigote y sentir sus pelos junto a su boca en mi sexo, fue el delirio. Tuve un
primer orgasmo enseguida, casi incluso antes de que mi hermano me enculara.
Luego seguimos mam�ndonos mientras sent�a la polla de mi hermano dentro de m�.
Al rato, nos vinimos los tres juntos. Despu�s de unos instantes de recuperar el
aliento, me mont� sobre la verga de pap� y Emilio volvi� a encularme. Fue
inmensamente delicioso.
--S�iiiiiiii, as�iiii, m�ssss, quiero mucha leche, m�s
fuerte, met�dmelo m�s adentro, as�iiii....
--As� cari�o, sigue as�, tienes un chocho riqu�simo hija m�a,
as�iii, d�melo todo, quiero hacerte un hijo, aaagghhh... �me dec�a pap� mientras
que mi hermano dec�a las mismas palabras entre gemidos de placer. La corrida que
tuvimos fue impresionante.
As� han pasado veinte a�os. Seguimos viviendo en la misma
casa. A a�o de relaciones con los dos, me qued� embarazada. Tuve una preciosa
hija, Beatriz, al que sigui� al a�o otro varoncito, Mauro. Posteriormente
nacieron otros cinco hijos, todos chicos, teniendo en cuenta de que siempre nos
gust� hacerlo a pelo. Cuando los mayores tuvieron edad suficiente y dado que
durante toda su vida nos hab�an visto hacerlo, ellos mismos empezaron sus
propias relaciones. Posteriormente, tambi�n los chicos quisieron probar con los
"mayores". En fin, que con tanto hombre en casa, ya que el peque�o tiene catorce
a�os y es un fuera de serie, Beatriz y yo no nos aburrimos nunca en casa.