Que Delicia Hacerlo Con Un Velludito Grande Y Fornido Por
Primera Vez
Hola estimados lectores, esta es la segunda historia que
publico, no pensaba hacerlo sino es por esa receptividad que tuve de ustedes al
leer mi primera historia, quienes fueron los que me motivaron a seguir
escribiendo para ustedes.
No les hago mas largo el cuento y aqu� esta mi historia.
Todo comenz� cuando me vine a vivir a la capital del estado
Gu�rico, Venezuela, a cursar estudios en la universidad, como muchas personas
que emigran hacia esta zona, no tenia familia aqu� y por ende, tuve que buscar
residencia para hospedarme durante los a�os de estudio que iba a cursar. El
primer a�o transcurri� sin novedad, muchas clases, dificultades para adaptarme a
un nuevo ambiente y sobre todo muchos hombres ricos y bellos, que provocaban en
mi el deseo de devor�rmelos uno a uno, hasta quedar sin fuerza en los brazos de
cada uno. Pero no paso de un simple deseo.
El a�o siguiente, ya estaba cursando el segundo a�o de la
carrera y fue entonces cuando lo conoc�. La primera vez que lo vi, me impacto de
inmediato, estaba entrando a la casa, acompa�ado de la due�a de la residencia,
me pude enterar que estaba interesado en una habitaci�n que hab�a disponible
para vivir all�, ya que ese a�o ingresar�a a la universidad. Realmente me
impresiono ese ejemplar de hombre que escasamente se consigue a la vuelta de la
esquina, era todo un portento de macho, bello, grande, robusto, fuerte, de
bell�simos ojos color �mbar, piernas gruesas pero con una definici�n de
futbolista que puede apreciar por lo ce�ido de sus pantalones, con unas nalgas
que provocaban morder y acariciar, un enorme paquete que se mostraba como una
deliciosa golosina para ni�os, y lo que me volv�a loco de �l, sus vellos por
todo el cuerpo, era el hombre peludo mas hermoso y varonil que jam�s hab�a
visto. Tenia vellos por toda la espalda, el pecho, brazos, piernas, y yo me
imaginaba como seria ese culito inundado de vellos, que delicia pensaba, ��C�mo
me gustar�a comerme ese recto peludo de macho!! Que esp�cimen tan espectacular
tenia frente a m�.
Breves segundo pasaron y yo hab�a pensado todo eso de �l,
entonces me dije: ��ese hombre me gusta mucho, espero que alquile la
habitaci�n!!. Yo estaba en la sala de la casa haci�ndome el que no sabia que
estaba pasando, cuando pas� a mi lado con la se�ora Maria, la due�a de la
residencia, venia a mostrarle el cuarto que casualmente quedaba al lado de mi
habitaci�n. Cuando se acercaba me levante para saludar a la se�ora Maria y por
supuesto con la intenci�n de que me presentaran a ese machote delicioso.
Yo: Buenas tardes se�ora Maria, como esta?
Sra: hola hijo, como esta todo por aqu�, no tuviste clases
hoy?
Yo: no tengo el d�a libre
Sra: que bien, fue entonces cuando me lo presento, cre�a que
no lo iba hacer nunca.... Te presento a Cesar, el vino por el cuarto que esta
desocupado.....
Yo: que bueno, otro compa�ero de residencia, espero que se
quede con nosotros, somos todos aqu� muy amigos, y tratamos bien a la
gente...... yo me llamo Rafael...... le dije extendi�ndole la mano.
Cesar: hola Rafael, mucho gusto en conocerte, me gusta mucho
la casa, voy a ver el cuarto y decidir ahora mismo si me quedo o no.
Pude sentir en aquel estrech�n de manos, una piel de macho
inolvidable, su mano era grande y fuerte, velluda como toda su piel, y adem�s
logre percibir su colonia rica y penetrante y que luego seria objeto de mi
obsesi�n. Que delicia sentir por primera vez el contacto de su mano con la m�a,
era una sensaci�n estremecedora.....
Al mismo tiempo, nuestras miradas se cruzaron fijamente y nos
miramos a los ojos como uno esperando alguna reacci�n del otro. Yo no quer�a
dejar de verme en esos ojitos lindos color miel, que tanto me atra�an y no
permit�a que volteara la vista, y al parecer a �l le ocurr�a lo mismo. Estuvimos
as� un ratito y fue entonces cuando desviamos la mirada para no confundir las
cosas. Pero esa situaci�n me hab�a parecido extra�a, �ser�a que yo le gustaba
a aquel ejemplar de macho varonil?
No creo, pensaba, ser�a pura casualidad.......
Acabadas las presentaciones, la se�ora Maria lo llev� a la
habitaci�n y mientras la ve�a, le iba explicando las reglas de la casa, para mi
felicidad era una residencia de puros machos, es decir, solo pod�an vivir en esa
residencia hombres. Una vez realizado el recorrido, lleg� el momento de la
decisi�n:
Cesar: para m� esta bien, me gusta la casa y la gente que
vive aqu�, as� que me quedo, se�ora Maria.
Mis o�dos no pod�an creer lo estaban escuchando, aquel
hermoso hombre hab�a tomado la mejor decisi�n que hab�a escuchado en mucho
tiempo, lo tendr�a de ahora en adelante todo para m�, para buce�rmelo con
detenimiento, pod�a recorrer cada cent�metro de su cuerpo con mis ojos, y mejor
aun me har�a su mejor amigo y confidente.
Aprovechando la ocasi�n de que la se�ora Maria estaba bajando
las escaleras para hacerle el recibo correspondiente, no me pude aguantar y lo
abrace fuertemente con la excusa de darle la bienvenida, pero lo que quer�a
realmente era sentirlo por completo junto a m�, �l abri� sus brazos de forma
natural y no esperaba que yo lo abrazara tan fuerte, fue entonces cuando lo
sent� por primera vez.
Era riqu�simo tocar ese enorme cuerpo, caliente, sudado,
velludo, y percibir esa colonia que ya me estaba volviendo loco. Logre palpar su
espalda marcada por sus m�sculos, la cual parec�a una monta�a por las deliciosas
curvas que se le formaban, sentir su rostro tan cerca al m�o, sus brazos
rodeando mi cuerpo, ...que sensaci�n tan maravillosa..... aunque solo haya
durado unos segundos. �l respondi� a mi abrazo de la misma manera, quiz�s estaba
confundido por la situaci�n, apenas me acababa de conocer y ya lo estaba
tratando cono si fu�ramos algo mas que amigos... pero su abrazo tambi�n fue
emotivo y eso me cautiv�.
Nos separamos de nuestro idilio, y �l se despidi� en mi o�do
dici�ndome con voz grave:
Cesar: gracias por la bienvenida, hacia mucho tiempo que no
me recib�an con tanto cari�o, regreso ma�ana para mudarme, espero que est�s aqu�
para recibirme... chao.
Mi coraz�n parec�a que iba a estallar de la emoci�n, ��seria
cierto lo que estaba viviendo!! O seria solo imaginaci�n m�a? Al d�a siguiente
lo averiguar�a, todo lo que suceder�a iba a depender de su actitud.
Esa noche no pude dormir pensando en lo que iba a pasar al
d�a siguiente, y recordando sus palabras, su olor, el contacto de su piel, su
cuerpo. Era un mar de recuerdos que no permit�a que conciliara el sue�o. �Y si
todo lo que hab�a pasado era solo mi imaginaci�n y yo confund� la situaci�n?
Adem�s no pod�a permitir que �l pensara que yo tenia alg�n inter�s oculto en �l,
porque pod�a alejarlo de m�. En fin pensando en tantas cosas me quede dormido.
Al d�a siguiente, me deserte a eso de las 9:30 de la ma�ana,
desarrolle mi rutina de costumbre, me lave los dientes, me afeite, me rasure
pensando en que pudiera suceder alguna situaci�n de imprevisto, y me dispuse a
darme un ba�o.
Ya les hab�a comentado que el cuarto de Cesar esta junto al
m�o y para mi suerte, ambos compartimos un ba�o, que tiene dos puertas, una de
ellas da a su cuarto, y la otra da a mi cuarto, es decir que los ba�os se
comunican. Como la habitaci�n estaba sola, yo no cerraba la puerta del ba�o que
daba a la habitaci�n de Cesar, simplemente no era mi costumbre. Lo cierto del
caso es que como me levante tarde, no me percate que Cesar hab�a llegado y
estaba arreglando sus cosas, la m�sica que acostumbro a poner en mi cuarto
cuando me ba�o, no me dejaba escuchar que �l estaba all�.
Me termino de acicalar y lentamente me voy quitando la ropa
para ba�arme, pero sin dejar de pensar en Cesar y en lo que hab�a pasado el d�a
anterior. A medida que me quito la rapa, me acaricio pero pensando que era Cesar
el que lo hacia, situaci�n que me puso caliente, toque mis erectas tetillas, las
cuales lam�a con mi propia lengua, me quite el short y posteriormente el b�xer
negro que se ajustaba a mis piernas, pen� y culito, toque mi caliente pene y el
poco vello que poseo en esa zona producto de la rasurada, esas caricias me
permitieron alcanzar una erecci�n descomunal, mi pene estaba totalmente erecto,
se pod�a ver claramente sus venas marcadas por todo el tallo, su cabeza de hongo
rojiza y caliente y pod�a sentir como vibraba en mi mano, de la calentura que
hab�a alcanzado con solo pensar el aquel cuerpo de los dioses.
Todo mi cuerpo estaba electrizado y deseoso de hacerle el
amor a aquel portento de hombre que apenas conoc�. Abr� la regadera para tratar
de sacarme la calentura, y puse el agua fr�a, y me fui metiendo bajo la regadera
poco a poco, hasta que ya estaba completamente mojado, el agua corr�a por mi
cuerpo y con ella mi mano que no paraba de acariciarme, tome el jab�n y me lo
fui estregando por todo el cuerpo, lo pase suavemente por mi pecho, las
tetillas, las enjabone de forma circular, primero una y luego la otra, enjabon�
mi abdomen, mi ancha espalda, luego baje a los pies y las piernas, que temblaban
tanto por el fr�o como por lo excitado que estaba, y finalmente enjabone mi pene
y culito, que ambos estaban deseosos de actividad, uno quer�a comerse un culito
y el otro quer�a ser comido por un descomunal pene. Con el jab�n recorr�a todo
el tallo de mi miembro, lo descubr� por completo para lavarlo y toc�rmelo,
acaricie mi frenillo que aun lo conservo, sub�a y bajaba mi mano con el jab�n,
sensaci�n que disfrutaba al m�ximo, pero sin dejar de pensar en Cesar, en ese
hombre, ese cuerpo que tanto me gustaba.
Pas� a lavar mi culito, lo llenaba de jab�n, acariciando mis
redondas y firmes nalgas, abriendo cada una de ellas para dejar al descubierto
mi arrugadito y estrecho ano, me inclinaba y met�a un dedo lleno de jab�n, luego
dos, entraban y sal�an de mi culito, lo estaba dilatando, luego entraron tres
dedos, era una sensaci�n riqu�sima, me estaba cogiendo yo mismo con mis propios
dedos, que rico, as� segu� un buen rato, cuando decido colocarme shampoo en el
cabello, mi cuerpo estaba todo lleno de jab�n lo que me faltaba era la cabeza.
Proced� a colocarme el shampoo y cuando me estaba masajeando
el cuero cabelludo, siento que est�n abriendo la puerta del ba�o, yo no pod�a
ver por el shampoo que me hab�a ca�do en el rostro, as� que me quede paralizado,
tenia todo el cuerpo cubierto de espuma blanca y adem�s estaba erecto de pies a
cabeza cada parte de mi cuerpo. Como pude me met� a la regadera a sacarme el
jab�n y pude ver a mi deseado hombre parado frente a mi, semidesnudo, solo
llevaba puesto un b�xer negro muy pegado y que me mostraba esa delicia de m�stil
que pose�a. Ambos nos quedamos estupefactos, �l al ver mi cuerpo totalmente
desnudo y completamente erecto, y yo al verlo frente a m�, observando fijamente
cada rinc�n de mi cuerpecito tembloroso. ��Que fant�stico pens�, mi macho me
est� viendo como dios me trajo al mundo y si se anima, todo esto puede ser
suyo!!!
Por unos instantes nos quedamos mudos, hasta que yo hable:
Yo: hola Cesar, veo que te has impresionado al verme
ba��ndome, espero que supieras que compartimos el ba�o, o te ha sorprendido otra
cosa?
Cesar: no... bueno.... yo, no s� que decir ante esta
situaci�n, respondi� sin dejar de mirar mi descomunal erecci�n.
Yo: que te pasa, nunca hab�as visto a un hombre ba��ndose?
Cesar: si, lo que pasa es que nunca hab�a visto a un hombre
tan cerca con una erecci�n como esa.
Yo: ahh... lo que te impresiona es mi pene?
Cesar: si en realidad si, es muy llamativo, y se ve que estas
muy caliente, se puede preguntar en quien pensabas para que te pusieras as�....
pregunt� aun si dejar de recorrer mi cuerpo con sus ojos.
Yo: si puedes preguntar, pero antes de responder, pienso que
ibas a tomar un ba�o igual que yo, te animas a ducharte con otro hombre
completamente desnudo?
Cesar: ya estoy aqu�, no tiene caso irme no crees?
Yo: tienes raz�n, ahora si te respondo la pregunta, estaba
pensando en ti, en muestro abrazo de ayer, en tu cuerpo junto al m�o, y en tu
voz dici�ndome lo mucho que te hab�a gustado la bienvenida que te di, es mas, no
puede dormir anoche pensando en eso y en lo que pasar�a hoy. Tu eres el culpable
de esta erecci�n, y si te quieres salir del ba�o yo te comprender�.
Cesar: nunca pens� que pod�a causar esas reacciones en un
hombre, tengo que confesarte que tu tambi�n me has impactado, y que tambi�n
desee que amaneciera m�s r�pido para poder verte de nuevo. Diciendo esto, se dio
la espalda y pude contemplar su velluda pero bien marcada espalda y luego se fu�
bajando lentamente el b�xer que tenia, descubriendo unas grandes, redondas,
velludas y blancas nalgas, que quer�a devorar de inmediato. Todo su cuerpo era
el de un Dios, sus definidas piernas, me enloquec�a, su espalda ancha y fuerte,
si delicioso culo, era lo que hab�a so�ado toda la noche.
Cuando se di� vuelta, puede observar el objeto de mi
devoci�n, un fl�cido pero grande pene que media aun dormido unos 15 cm de largo,
grueso y con mucho vello, su pecho y abdomen varonil, marcado por el ejercicio,
que ejemplar de hombre tenia solo para m�. Cuando logr� voltearse, me dice:
ahora vas a conocer lo que es un verdadero macho, lo vas asentir todo y cada uno
de mis 25 cm de largo y descomunal pene, en tu boca, en tu culo, y yo tambi�n te
quiero sentir a ti, hace mucho tiempo que he querido estar con un hombre como t�
y no hab�a podido, pero esta es nuestra oportunidad.
Dici�ndome esto, se dirige hacia la regadera donde yo estaba
y me agarra por la cintura y la espalda y su boca se funde en un c�lido y
delicioso beso, donde nuestras leguas se encontraban y acariciaban,
intercambi�bamos fluidos salivales, se com�an la una a la otra. Despu�s de
besarme de la forma mas apasionada, como devor�ndome, no vimos fijamente a los
ojos y me dice:
Cesar: yo nunca lo he hecho con hombre, pero siento que
contigo me abrir� como nunca y espero que esta relaci�n sea para toda la vida,
quiero que seas mi hembra y yo tu macho y viceversa. Te quiero poseer para
siempre y cada momento, te deseo con locura. Sus palabras me calentaban mas y
m�s, yo le dec�a que hiciera conmigo lo que �l quisiera, que de ahora en
adelante seria solo suyo, que en apenas dos d�as ya lo amaba como a nadie. Nos
ba�amos juntos bajo la ducha y �l enjabon� mi cuerpo con un liquido que ol�a a
jazm�n, leche de hombre, coco, y vainilla y all� bajo el agua fr�a que nos
mojaba.
De pronto empiezo a bajar bes�ndole el cuello, y del cuello a
su pecho. Disfrutaba mucho cada rinc�n que besaba de su piel, de ah� a su
abdomen bien formado, su velludo y delicioso ombligo, su enorme tronco de 25 cm
de largo y muy hermoso lo saboree, lo bese, le lam� la cabecita, la cual ya
estaba lubricada. Sent� el olor de sus fluidos, y el sabor de su verga era
delicioso. Empiezo a hacer movimientos con la boca. �l mientras me acariciaba el
cabello y la espalda. Lo cual es muy excitante. Antes de que se venga beso su
verga, la lamo, la chupo la disfruto en cada rinc�n. Cundo siento dentro de mi
boca un liquido caliente y espeso, rico, una sensaci�n muy agradable. Mientas le
hac�a esto le acariciaba sus musculosas y bien torneadas nalgas que me pon�an
loco. Baje a sus piernas y me las com� a besos as� como sus pies. Me incorporo y
le digo que me haga suyo, que quiero sentirlo por completo.
Fui dilatando mi orto nuevamente, y sin preguntarme nada me
la mand� guardar y sent� su hombr�a hundi�ndose en mi agujerito, sent� un dolor
inmenso, eran 25 cm de dura carne ardiente, una quemadura que se hizo incendio,
se hizo terremoto de placer y dolor en mi, y llorando de placer y locura, grit�
su nombre, CESAR; CESAR, hazme tuyo, solo tuyo, y al hacerlo sent� el chorro
caliente de su leche bautizando mi culo de macho, mi orto de macho, mi agujero
de macho, ay mi Cesar, que feliz me siento por entregarte todo mi ser....... Y
segu� gimiendo hasta que el saco su descomunal pene de mi adolorido culito,
sintiendo un vac�o que no quer�a sentir, pero �l me comenz� a besar de forma
apasionada, haci�ndome olvidar el vac�o que me hab�a dejado su enorme
herramienta.
Sus besos eran cada vez mejores, su lengua produc�a en la m�a
una energ�a el�ctrica que se expand�a por todo mi cuerpo, y yo no daba mas de la
calentura, del deseo. Y �l recorr�a con esa lengua �vida mi cuerpo como
ador�ndolo, y yo acariciaba su culo redondo y suave y �l me dec�a cosas
incre�bles nunca escuchadas por m�. Cuando siento que pone mi pene entre sus
labios y comenz� a lamerme la cabecita con delicadeza y sensualidad infinitas,
casi me vengo de la desesperaci�n, pero se la fue metiendo en su boca hasta su
garganta y sent� sus chupadas fuertes y dulces como nunca imagin� que podr�a
sentir, ay mi macho, me vuelves loco gritaba y �l segu�a succionando hasta que
el hurac�n de mi orgasmo le llen� la boca de mi leche hecha crema de tanto
reprimir mi deseo, la cual se trago sin desperdiciar ni una sola gota.
Entonces le dije: a cesar, quiero que sepas lo que es sentir
un hombre dentro de ti, quiero hac�rtelo......, �l acepto de forma dudosa, por
el sufrimiento que hab�a causado en mi, pero al recordar el placer que vino
despu�s, accedi� gustosamente. Deja que suceda; te doler� un poco pero despu�s
lo gozaras, ya veras, le dije mordi�ndole sus hombros. Cesar aflojo su culito al
sentir que aquellas mordidas cada vez eran m�s hirientes; entr� el glande y
Cesar grito de dolor rogando que lo sacara pero le puse mis manos en su cintura
y apoyado con mis piernas le met� aproximadamente 10 cm de mi pene. Cesar no
dejaba de gritar deseando que lo sacara; entonces lo comenc� a masturbar y Cesar
respondi� meneando su trasero dejando que lentamente ingresara ese pene enorme y
grueso en �l.
Sabr�a que te gustar�a y ahora gozaras mas, le dije con voz
dominante, sacando un poco mi pene para meterlo de nuevo con mas fuerza. Yo
continu� embisti�ndolo y cesar comenz� a disfrutar de aquello, hasta �l mismo se
mov�a para sentir aquel pene invasor mas dentro de �l; Cesar sinti� debilidad en
sus piernas al mismo tiempo que sinti� los test�culos de mi pene rozarse con sus
nalgas. Era tanto el gozo que sent�a Cesar que comenz� a mover su trasero de
manera circular y vertical provocando gritos de placer en mi.
Cesar con mi enorme herramienta dentro de �l dice: As� que
deseabas tener mi culo, no; pues ahora ser� a mi modo, amenaz�, haciendo m�s
intenso sus movimientos como su estuviera montando un caballo salvaje. Cesar
continu� haci�ndolo aun cuando sintiera las paredes de su ano humedecido por mi
semen; quer�a dejarme vac�o como lo hab�a dejado yo a �l, me tumbo boca arriba
en el piso, con mi pene apuntando al techo y el agua cayendo en los dos, y se
mont� de nuevo pero mir�ndolo de frente. Ambos nos besamos y nos acariciamos las
tetillas mientras continuaba con sus movimientos p�lvicos, su ano ya se hab�a
acostumbrado a tener ese enorme pene dentro de el y con la ayuda del semen, era
m�s sencillo y menos doloroso. Mi pene volvi� a sacar su semen contenido dentro
de Cesar y estaba agotado, pero Cesar me llev� a la regadera y ahora �l enjabon�
mi cuerpo, para enjuagarlo sobre la ca�da de agua. me bes� en la boca
penetr�ndole con su lengua y me recost� en una de las paredes del ba�o, y nos
quedamos acarici�ndonos y besando nuestros cuerpos por un buen rato, dici�ndonos
lo que sent�amos el uno por el otro, y as� comenz� una de las relaciones m�s
calientes que he tenido en mi vida. Cada vez que lo veo, las piernas todav�a me
tiemblan y no puedo controlar mi pene que siempre termina erecto cada vez que lo
ve......................
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Soy de Venezuela y vivo en San Juan de los Morros, me
gustar�a compartir mas historias contigo, aunque esta es la segunda que escribo.