Tentaciones / Revision Final

Bueno, como todo inicio debo empezar por la raz�n que me llevo a tomar la decisi�n de escribirles este relato y esta tiene que ver concretamente con la necesidad de exteriorizar mi vivencia, aquellas personas que est�n acostumbradas a leer sobre mujeres de certamen o hombres de penes descomunales, les recomiendo no leer este texto, a aquellas personas que mas all� de compartir mis gustos o no, pero que se atrevan a leerlo lo �nico que les puedo adelantar es que fuera de algunas modificaciones que de sobra se entender�n, es un escrito muy honesto. A, se me olvidaba, de origen soy aficionado al erotismo mas que a las palabras contundentes.

A la edad de 17 a�os pensaba estudiar la carrera de medicina, era un joven inquieto y amante del deporte, en el terreno de lo sexual, aun que parezca mentira me manten�a totalmente limpio, no tenia ni la mas m�nima experiencia, lo mas cercano a relaciones sexuales, se remontaba a mis 9 o 10 a�os �pocas en las que jugaba con una vecinita m�a a ser marido y mujer y lo mas audaz que llegamos a hacer fue a darnos algunos besos.

En mi ciudad de origen fronteriza con los EUA aun no hab�a escuela de medicina, por lo que para acceder a esta tuve que cambiar mi residencia a nuevo le�n, esto con apoyo de mis padres, mi familia era de clase media, por lo que mas all� de mis gastos escolares y lo mas b�sico de hospedaje y alimentaci�n, no contaba con recursos, deseoso como estaba a esta edad de divertirme y conocer todo lo que aquella industriosa cd me brindaba decid� buscar un empleo, explore de todo, vend� cervezas en el estadio local de fut bol, trabaje en restaurantes de lava platos, etc, cerca del edificio donde alquilaba un cuartito modesto, hab�a un edificio, en la contra esquina de 8 departamentos que era cuidado y administrado por do�a petra, una mujer de poco mas de 55 a�os, con rasgos de haber sido una mujer muy atractiva, pero por su mismo traj�n ya solo quedaba eso, rasgos, conservaba un par de tetas que para su edad y las batallas que escenifico se manten�an muy deliciosas, grandes y consistentes.

Do�a petra hab�a sido en mejores �pocas amante del due�o de los departamentos, en consideraci�n este le otorgo en comodato el departamento que ella ocupaba y la autoridad para encargarse de las rentas y el mantenimiento del edificio.

Yo entable una amistad con esta dama a base de convertirme en su mandadero, al grado de convencerla de darle mantenimiento al edificio, as� fue como consegu� mi primer empleo estable, a los pocos d�as de haber iniciado a trabajar descubr� las razones que llevaron a do�a petra a hacerse de mis servicios, la principal raz�n era que a ella le causaba mi desconocimiento sobre el tema sexual y ella necesitada de reeditar viejas �pocas se autoasigno a ser mi madrina en esos menesteres.

Llego el DIA en que sin previo aviso me invito a quedarme en el departamento que ocupaba ella en compa��a de una hermana, ya entrada la noche de ese DIA fue cuando sent� su agitada respiraci�n cerca de la cama que me asigno, se hab�a puesto de rodillas y trabajaba por desabotonar un short que usaba como pijama, me deje hacer y a los pocos minutos su boca hab�a digerido mi pene que recib�a su primera de una larga serie de felaciones de parte de do�a petra, que al DIA de hoy debo reconocer que en pocas ocasiones recuerdo haber recibido un tratamiento tan eficaz como el de la vieja.

Regresando a esa noche solo puedo decirles que despu�s de haberse aplicado en mi miembro hasta hacerme eyacular, ella se encargo de volverlo a estimular, hasta tenerlo de nuevo erecto, cuando esto sucedi�, ella misma se me encimo y con uso de una maestr�a muy depurada se mantuvo encima de mi por espacio de poco mas de 20 minutos hasta que sintiendo que me estaba por llegar mi segunda explosi�n, ella se retiro para recibirla en su boca.

Minutos despu�s charl�bamos al amparo de la oscuridad y ella me dec�a lo necesitada que estaba de una buena raci�n de leche matutina, se ofreci� a ense�arme sus experiencias en materia sexual y se comprometi� a respetar mi espacio vital, por lo que acordamos que solo esa noche me quedar�a ah�, yo regrese a mi cuarto, pero ahora tenia un trabajo muy agradable, pues la do�a solo en ocasiones me encargaba tareas simb�licas, yo a cambio recib�a un modesto sueldo, pero suficiente para mis 17 a�os.

Poco tiempo transcurri� para que le tomara un afecto muy especial a do�a petra, pues esta fue muy generosa en todos los aspectos con su servidor, pues al poco tiempo invito a vivir en su departamento a una sobrina suya mayor que yo solo 2 a�os riqu�sima de nombre patricia, con la que ella se turnaba en atenderme sexualmente.

Pero lo que habr�a de marcarme en mi vida para siempre sucedi� cercas de 2 a�os despu�s.

Por un lado desist� de estudiar medicina la carrera era muy absorbente y yo estaba viviendo una etapa que antes de salir de mi tierra jam�s habr�a imaginado, a cambi� opte por estudiar historia en la escuela de ciencias sociales, por otro aparecieron en mi mundo 2 personitas que me convirtieron sin quererlo en un amante empedernido de bellas princesitas.

Do�a petra hab�a aceptado a hacerse cargo de dos hermosas nenitas de 6 a�os, hijas de 2 mujeres dedicadas a la profesi�n que ella hab�a ejercido, la verdad es que a las pobres no les hiba bien del todo, aun que no eran abusadas f�sicamente la verdad es que el car�cter de la do�a, fuera de para conmigo no era muy agradable, les hablaba muy fuerte y las tenia muy disciplinadas, sin embargo estas lo prefer�an a los maltratos que recib�an de sus mamas.

Yo les tome un genuino cari�o, les ayudaba con sus tareas y para no enfrentar a la do�a las convenc�a con buen trato de hacer lo que se les indicaba para que no la irritaran y las dejara jugar un poco, ellas 2 tambi�n se dieron cuenta de la influencia que yo ejerc�a sobre la do�a, por lo que desde que yo llegaba ellas buscaban estar cerquita de mi, yo las veia como unas ni�as inocentes y a veces jugaba con ellas, pero sin malicia de mi parte, no le daba importancia cuando ellas me rozaban mi verga durante los juegos ni me daba morbo andar en calzoncillos delante de ellas porque para mi eran unas nenitas.
Recuerdo que el cuarto de ba�o estaba hasta el fondo de la casa, asi que envuelto con la toalla de la cintura para abajo me dirigia a ducharme, las ni�as se reian entre ellas, pero no les di importancia, lo que no sospechaba es que las ni�as sentian cierta atracci�n por mi, en ese entonces mi cuerpo era mas atletico que hoy, ya que hacia mucho ejercicio, media 1,80 mts y pesaba 75 kilos dotado de una verga normal osea tampoco tenia el super vergon je je je
Una tarde en la que me estaba ba�ando para irme a la escuela, do�a petra hab�a salido a hacer unas compras, las nenas jugaban en la sala de la casa ( o eso pensaba yo) cristina una de las nenas se hab�a asomado por debajo de una cortina que hacia las veces de puerta del ba�o y me espiaba, nunca antes de ese momento yo hab�a tenido un pensamiento er�tico con las nenas y aquello me puso muy nervioso, no sabia que hacer, por lo que intente persuadir a la chiquita para que se alejara haciendo ruido en se�al de terminar mi ducha, para darle ocasi�n a que se retirara de ah� y as� lo hizo.
No hice mas al respecto pues pens� que se deb�a a una simple travesura infantil y a la natural curiosidad de los ni�os y conclu� que no lo volver�a a hacer, que equivocado estaba yo.
En esas �pocas yo me encontraba, d�ndole una mano de pintura a todos los departamentos, por lo que por la tarde antes de ir a la escuela, era obligado darme una ducha y para no perder tiempo entre mi depto y mi trabajo, me llevaba ropa y me ba�aba en casa de do�a petra, quien llevada en la confianza que me tenia, sal�a todas las tardes sin mas preocupaciones dej�ndome a solas con las 2 peque�as a su encargo y solo regresaba a la hora en que sabia me iba yo a la escuela, juanita que as� se llamaba la otra nena tenia por costumbre dormir siesta entre las 3 y las 5 de la tarde, por lo que era cuando cristina aprovechaba para darse a sus tareas de investigadora.

Y lo volvi� a hacer no sabr�a explicar la raz�n pero comenc� a disfrutar de saberme espiado y entonces fue cuando me decid� a dar el siguiente paso, ya que la nenita queria verme en pelotas le iba a dar lo que queria, lentamente enjabonaba mi verga que empezaba a ponerse dura, de reojo podia darme cuenta que la ni�a no dejaba de observarme, masajeaba mi verga mientras caia el agua sobre mi cuerpo, aceleraba mis moviemientos masturbatorios hasta eyacular abundantemente casi en las narices de la ni�a, asi me pude dar cuenta de que cuando jugaba con las dos nenitas no era accidente que sus manos se posaran en mi paquete, yo me hacie el desentendido y jugando las levantaba en el aire y ponia sus nalgutas en mi verga ellas solo se reian y se turnaban para que las levantara, a veces las acostaba y me ponia encima de ellas sobando mi verga en sus capullitos tiernos.
Una tarde sorprend� a cristina en su espionaje y amenace con delatarla con do�a petra y peor a�n con su mama, eso lleno de terror a la nenita quien llena de angustia, me ped�a con un llanto mudo que no la delatara, que si quer�a yo le impusiera un castigo pero que lo prefer�a al de su mama.
Me sent� a platicar con la peque�a y le explique que era natural que le llamara la atenci�n el cuerpo de un hombre pues despu�s de todo ella era una mujercita, peque�a, pero al fin mujer, pero lo malo era espiar, por que ella sabia que en cualquier momento pod�a llegar la do�a y si la sorprend�a como lo hab�a hecho yo la iba a pasar mal, ella acepto el se�alamiento en silencio y con sus ojitos me dec�a en silencio que aceptar�a mi sanci�n.
La acerque hacia a mi, su cuerpecito temblaba no se si de miedo o de excitacion, le bese su cuellito y sus mejillas, acerque mi boca a sus labios y le di un tierno beso a lo cual ella se apreto mas hacia mi cuerpo, no habia duda la ni�a era muy fogosa al igual que la puta de su madre. Meti las manos debajo de su faldita y acaricie sus nalguitas que estaban muy suavecias, ella correspondia mansamente a mis caricias, meti la mano por debajo de su calzoncito y acaricie su diminuta vagina sin pelos, estaba tibia y con mi dedo recorri sus labios vaginales, me estaba calentando con la nenita.
Era el momento de poner las cosas en claro con la nenita.
Grande fue su sorpresa cuando le explique que desde aquel DIA ella y yo ser�amos novios y que si quer�a conocer mejor el cuerpo de un hombre yo la ense�ar�a, pero sin mas riesgos para ninguno de los 2, ella me dijo que si pero yo me di cuenta que lo hizo incr�dula aun de mi explicaci�n, por que se manten�a muy tensa y con sus ojos muy abiertos, la nenita vestia una blusita de tirantes, se la quite y le bese sus tetitas suavemente mientras acariciaba su diminuta cintura, entonces le propuse que cerrara sus ojos, ocasi�n que aproveche para sacarme mi verga que ya estaba a mil y decirle que sin abrirlos, la agarrara con sus manos, ella as� lo hizo y a los pocos minutos guiada por mi, la nenita me estaba dando una rica chupada, yo mismo la animaba a meterse mas verga en su boquita, la tome con ambas manos de su cabeza y le marque el ritmo que deseaba, la nenita ya se metia casi media verga en su boquita, la cual termin� con una escandalosa eyaculaci�n de mi parte, ella se sinti� atragantar por tal cantidad de leche en su boquita, y la bebi� obligada por mis palabras, pues el sabor en aquella primer ocasi�n le result� un cuanto desagradable.
Despues era normal que al ba�arme y si no se encontraba en casa do�a Petra, la nenita se metia a la ducha conmigo, ya no le daba asco que yo me viniera en su boquita, al contrario ponia mas dedicacion a la mamada que me proporcionaba hasta tener su recompensa, una descarga de leche de un hombre de 17 a�os, Cristina se habia convertido en una adicta al sexo oral, aprovechaba cualquier ocasion en que nos quedabamos a solas para ella misma bajarme el cierre del pantal�n liberar mi verga y darme una deliciosa mamada, a veces hasta dos o tres veces en un dia, pero a esa edad tenia leche para dar y regalar
Mis avances con la nenita se sucedieron de manera gradual y cada DIA mas intensos y deliciosos, hasta que a sus 9 a�itos lleg� el momento de la penetraci�n, cosa con la que batalle menos de lo que yo esperaba, debido a las ocasiones en las que con mis dedos hab�a jugado con el capullito de aquella mu�equita.
Recuerdo esa tarde en particular con la nenita, su vagina ya estaba un poco mas crecida, su culito se estaba poniendo suculento, pero yo queria ser el primer hombre que le metiera la verga en su rico capullito, habia estado toda la ma�ana bien caliente, asi que le dije a cristina que la esperaba en mi cuarto, do�a petra iba a estar fuera toda la tarde, me desnude completamente y me acoste en la cama esperando a mi noviecita.
En cuanto llego le dije que se desnudara y se acostara conmigo, cristina no dejaba de mirar mi verga que estaba como piedra, en cuanto se acosto le abri sus piernitas y me dedique a chupar su rajita, metiendo mi lengua en su vagina infantil, el aroma de su peque�o sexo me llegaba hasta los huevos, ya me andaba por desflorar aquel capullito, en cuanto estuvo bien mojada coloque mi verga a la entrada, -te va a doler un poco- le dije para que se preparara, ella solo cerro sus ojitos, lentamente fui entrando en aquel deliciosos huequito.
En cuanto meti la punta de mi verga, ella solto un quejido, un poco mas y ya tenia media verga adentro de su cuerpecito, era natural que solo entrara la mitad dada la diferencia de edades, no quise lastimarla y poco a poco me la fui cojiendo, es increible lo bien que su vagina se adapto al grosor de mi verga, si bien mi verga no entraba completamente si podia acomodar casi medio miembro dentro de su vagina, asi estuvimos cojiendo hasta que ya no pude aguantar mas y me vine abundantemente en su capullito el cual quedo rebozante de semen.
A partir de ese dia la nenita se convirtio en mi peque�a putita, me la cojia en la ma�ana y en la tarde me la chupaba despues de la ducha, a veces solo era cuestion de cargarla, le hacia su calzoncito a un lado y le metia media verga en su vaginita hasta que terminaba mi leche en su interior, ella corria al ba�o a descargar en el inodoro todo el semen.
Con juanita resulto todo mas f�cil, result� que una tarde charlando con la do�a esta me explicaba que la mama de cristi, era una mujer de temperamento muy ardiente y eso la hacia muy famosa entre sus clientes, pues estos sal�an siempre satisfechos de con ella, pero como los servicios de ella inclu�an el no ir a los hoteles si no que lo hacia en su casa, ella hab�a optado por mandar cuidar a la nena para que la dejara maniobrar con libertad, mientras que la mama de juanita ten�a otras razones.

La mama de juanita muy joven a�n estaba de amante de planta de un pol�tico que le pasaba una buena suma de dinero mes con mes, lo que le permit�a a ella darse el lujo de tener una nana al cuidado de un bebe de 6 meses de nacido de aquel personaje, de tener a cristi al cuidado de la do�a y a ella pasarse buena parte del DIA entre masajes y gimnasio, para mantenerse en buena presencia para su don.

Pero hab�a algo mas con relaci�n a la tal juanita

Resulta que esta nena siempre buscaba cualquier ocasi�n para quitarle el pa�al y mirarle el peque�o pollito a su hermanito, esa fue la raz�n por la que la llevaron a la casa de la do�a, una tarde en la que do�a petra me pidi� que llevara a juanita a casa de su mama, esta me solicit� cuidarla un poco junto con el bebe, por que su gal�n la hab�a invitado a pasear y la ni�era del bebe no se encontraba, yo acept� .

Cuando se hubo marchado la mama y con el conocimiento que ten�a de su punto d�bil, adem�s del apetito que hab�a adquirido yo con las peques a consecuencia de mi relaci�n con cristi, invite a juanita a que ba��semos al bebe ella acepto gustosa, yo observaba como la peque�a se emocionaba cuando yo le pasaba una esponjita al pollito de el bebe as� que decid� tentarla y ver su reacci�n.

Con el pretexto de ir por pa�ales y ropita me aleje de ella y la deje a solas con el bebe ocasi�n que esta peque�a bribona no desaprovecho, y de inmediato estaba jugando con el pollito del bebe, yo me acerque en silencio y la sorprend� en la faena, ella se asust� de manera may�scula, pues de inmediato sus miaditos comenzaron a correrle por sus piernitas, de solo adivinar el castigo que le esperaba con su mama cuando yo le comunicara lo ocurrido.

Yo fui directo con ella, terminamos de vestir al bebe y con su mamila este enseguida se durmi�, inmediatamente le dije que si no aceptaba jugar con migo en lugar de con el bebe la delatar�a, no batalle mucho en convencerla, ya que esta nena era muy precoz y directo de su mama hab�a adquirido un gusto muy temprano por el sexo.
No me anduve por las ramas, la subi a una mesa que estaba cerca y le quite el calzoncito lentamente me com� su rajita mezclada de sus miaditos y su rica miel que comenz� a desprenderse de ella a consecuencia de la rica lamida que le estaba dando, fue delicioso sentir temblar de la exitaci�n su cuerpecito de 6 a�os a consecuencia del orgasmo que la peque�a juanita alcanzo a los pocos minutos, acto seguido del cual ahora le toco el turno a ella de pagarme de la misma manera, le tome su peque�a mano y la puse en mi verga que ya estaba durisima, ella misma me la apretaba sintiendo su grosor, me desabroche el pantalon y me lo baje hasta los pies quedando unicamente en calzoncillos, ella miraba mi bulto con los ojos muy abiertos, le dije que me bajara los calzoncillos ella misma, ni tarda ni perezosa me desnudo, quedando mi vergota a la altura de su cara, le dije: habre la boquita que te la voy a meter, al principio la vi temerosa, acerce mi polla a sus infantiles labios y lentamente abrio su boquita, es indescribtible la sensacion tan maravillosa de ver a esa ni�a chupando mi verga hasta que me provoco una rica eyaculaci�n, que a diferencia de cristina, juanita se bebi� con mucha pasi�n desde la primer ocasi�n.
Asi fue como disfrute de dos nenitas, me turnaba para estar con cada una, con Cristina cojia y con Juanita por ser mas peque�a solo era sexo oral, a veces era mucha mi calentura y me encerraba con las dos nenitas para ponerlas a las dos a chuparme la verga hasta llenarles la boquita de semen.
Desde ese momento y hasta que retorne a mi cd de origen despu�s de haber terminado la universidad, fueron 5 deliciosos a�os en los que pude disfrutar de las atenciones de estas bellas criaturitas, y desde luego de mi rica y madura madrina DO�A PETRA.

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