Relato: El conserje de la prepa
No acostumbro narrar mis experiencias sexuales, pero en esta ocasi�n lo voy a hacer debido a que la �ltima que tuve me dej� muy gratamente impresionada. Empezar� diciendo que me llamo Beatriz, tengo 19 a�os, mido 1.75 m, soy blanca de pelo rubio y ojos verdes.
Asisto a una academia comercial en el horario vespertino, entro a las 4 de la tarde y salgo a las 10 de la noche, en esta escuela desde el primer semestre es obligatorio el uso de uniforme tipo ejecutivo, el cual consta de una minifalda caf� claro, una blusa amarilla de botones, un saco caf� claro y zapatos de tac�n alto de 10 cm caf�s que pueden ser zapatillas o sandalias, el uso de medias es optativo, ya que podemos andar sin ellas, pero si las usamos siempre deben ser transparentes, est�n prohibidas las medias negras, oscuras y las mallas.
En esta escuela hay un conserje que se encarga de la limpieza, la jardiner�a, la mensajer�a y la vigilancia, es decir, es un tod�logo, se trata de un se�or maduro (m�s bien ruco) de unos 60 a�os, pero bastante fuerte y din�mico, lo malo es que es bastante feo, chaparro y panz�n y se rumora entre las compa�eras que tiene una verga muy larga y muy gruesa, bueno, eso dicen aquellas que lo han espiado mientras orina y aseguran que cuando se la sacude le cuelga bastante abajo, a mi nada m�s de imaginar el tama�o que tendr� cuando se le para me causa estremecimiento y cosquillas entre las piernas.
En una ocasi�n que la �ltima clase se demor� m�s de lo acostumbrado (esa vez termin� como a las 10:30 de la noche), yo todav�a me entretuve otro rato copiando lo que el maestro hab�a dejado en el pizarr�n y en lo que acomod� mis cosas dieron casi las 11, en ese momento el conserje que se llama Bonifacio (pero todos le dicen don Boni) entr� y me pregunt� si todav�a me iba a tardar mucho en salir, yo le contest� que ya me iba, al momento de recoger mis cosas y mi bolsa, se me cayeron al piso algunos cuadernos y me puse de cuclillas para recogerlos, don Boni se apresur� a ayudarme y vi como clavaba su mirada en mis piernas que estaban entreabiertas y mi falda de por si corta se me subi� m�s dejando que se me viera mi pantaleta.
Nos incorporamos juntos y not� como a don Boni se le hab�a formado un bulto en su pantal�n, yo sab�a que eso indicaba que se le hab�a parado la verga y record� los comentarios que hab�a escuchado antes acerca de cuan larga la ten�a, me sent� excitada de s�lo pensar el tama�o que tendr�a en ese momento, le mir� el bulto y �l como adivinando mis pensamientos me tom� de la cintura para acompa�arme a la salida mientras recargaba su verga entre mis nalgas, al sentir aquel �rgano me emocion� y camin� despacio, don Boni me pregunt� si viv�a muy lejos y yo le dije donde viv�a, �l se ofreci� de inmediato a llevarme en su camioneta, acept� la propuesta y nos dirigimos al estacionamiento que ya estaba pr�cticamente vac�o salvo por 2 cohes m�s que a�n estaban ah�.
Don Boni abri� la puerta de su lado y me pidi� subiera por ahi argumentando que la otra puerta no pod�a abrirse por fuera, as� es que me par� adelante de �l para subir, pero antes de hacerlo sent� como de nuevo recargaba su verga en mi culo, �sta vez me qued� quieta unos momentos sintiendo como se apretaba entre mis nalgas, luego sub� y me sent� con las piernas abiertas, don Boni al subirse luego de encender su camioneta me dijo que en lo que �sta se calentaba platic�ramos un poco, empez� a chulearme mi cuerpo y a decirme que yo era muy bonita y que estaba bien buena, mientras hablaba me acariciaba las piernas metiendo su mano en medio hasta llegar a mi concha, yo le detuve la mano pero despu�s lo dej� continuar y sent� como frotaba mi hendidura produci�ndome mucho placer.
Luego de sobarme un rato arranc� su camioneta y nos fuimos por una ruta que no era la que conduc�a a mi casa, iba a protestar cuando don Boni me dijo que no fuera malita que lo acompa�ara unos momentos a su casa y enseguida me llevaba a la m�a, yo acept� mientras la mano derecha de don Boni recorr�a mis piernas desde las pantorrillas pasando por mis rodillas, mis muslos hasta mi concha.
Llegamos a su casa, era una casa vieja y descuidada en un barrio popular, entramos y encendi� una tenue luz, en medio de la penumbra vi que las ventanas estaban todas cerradas con cortinas muy gruesas tambi�n cerradas, las paredes estaban descarapeladas y los muebles que ah� hab�a eran viejos y estaban polvorientos, se ve�a que hac�a mucho tiempo no se hac�a limpieza en ese lugar; subimos a la planta alta por una escalera recta, yo sub� por delante y vi como don Boni se agachaba para mirar por debajo de mi falda, yo lo dej� mirar, total que ten�a de malo que un hombre mirara por debajo de la falda de una mujer, eso era muy normal.
Arriba las condiciones de la casa eran iguales que en la planta baja, todo en penumbra, sucio, polvoriento y l�gubre, don Boni me hizo entrar en una habitaci�n donde hab�a una cama de lat�n con cabecera y piecera, muy ancha y con el colch�n muy alto, sin decir palabra simplemente se par� atr�s de mi y me recarg� una vez m�s su verga entre mis nalgas, pero en esta ocasi�n me retuvo bien apretada mientras me embest�a con su �rgano erguido, a la vez que sus manos �vidas acariciaban mis piernas levantando mi falda hasta sobarme mi concha y restregar mi hendidura, yo volv� a recordar los comentarios anteriores y me dej� hacer todo lo que don Boni quer�a, lleg� el momento en que me arrodill� frente a �l y me mostr� su verga �ay que vergota tan enorme! la ten�a ah� frente a mi cara toda ella erguida, larga, gruesa, dura y humeda, don Boni me puso la cabeza de su verga en mi boca y yo por instinto la abr� para met�rmela toda hasta mi garganta, se la mam� largo rato sintiendo como me ahogaba cada vez que me la met�a toda, despu�s de un rato de mamarle su tremenda verga, don Boni me levant� y me tendi� en la cama, me acarici� de nuevo las piernas mientras me levantaba la falda hasta arriba de mi cadera, me baj� la pantaleta y me abri� las piernas, se inclin� sobre mi y empez� a lamerme mi bello p�bico (que lo tengo muy abundante y rubio) luego abri� mi vulva y procedi� a lamerme mi concha jalando y mordiendo mi cl�toris e introduciendo su lengua en mi agujero haci�ndome gemir de placer.
Cuando ya estaba yo bien mojada se me ech� encima, se acomod� entre mis piernas y me ensart� con su vergota meti�ndomela de dos embestidas, yo grit� con la primera y gem� con la segunda, luego que la tuve toda adentro, sent� como don Boni se frotaba r�tmicamente dentro de mi produci�ndome un enorme placer, era tal la emoci�n que yo sent�a que lo abrac� y lo bes� con infinita pasi�n mientras sent�a como su verga se me enterraba toda hasta lo m�s profundo de mi agujero. En un cierto momento sent� a don Boni ponerse r�gido y fue entonces cuando sent� sendos chorros de semen saliendo de su verga e inundando mi concha, fue delicioso sentir ese caudal de semen dentro de mi, espeso, caliente, pegajoso, impregn�ndose en mi interior.
Cuando don Boni termin� de venirse me pregunt� que me hab�a parecido la cogida que acababa de darme y la llenada de mocos blancos en mi pepa, yo le dije que me hab�a encantado la forma como me hab�a cogido y sentir su leche dentro de mi y �l me corrigi� dici�ndome "no es leche mamacita, son mocos blancos, espesos y calientes". Bueno leche o mocos, es igual los sent� dentro de mi y me encantaron.
Despu�s de esa ocasi�n a los pocos d�as tuve sexo con un compa�ero de la escuela, pero que decepci�n, no es que su verga no estuviera rica, sino que no me cogi� con �l mismo �mpetu que lo hizo don Boni, mi compa�ero me cogi� de una forma sosa, sin chiste y se vino muy pronto dentro de mi arroj�ndome unos simples chorritos, en cambio don Boni a pesar de su edad que manera tan suculenta de cogerme, someterme y dominarme, adem�s su verga estuvo deliciosa y dur� largo dentro de mi y que decir de sus mocos, se vino en abundantes chorros.
Que cierto es aquel c�lebre adagio que dice "gato viejo rat�n tierno", don Boni un ruquito de 60 a�os y yo una jovencita de 19, una verga de 60 a�os frot�ndose y vini�ndose dentro de una concha de 19, �que rico!