Relato: EL PRECIO DE LA LEY



Relato: EL PRECIO DE LA LEY

Hola a todos, soy Yuli de nuevo gracias a los que me han comentado mi primer relato, hagoi una pausa en ese primer relato y les comparto esta otra anectoda, dice asi....
Todo sucedi� una noche de viernes, despu�s de haber asistido a una fant�stica fiesta de la escuela. Estaba con mi novio y un grupo de amigos celebrando el �ltimo d�a de clases; hab�amos bebido un poco (lo suficiente para no ser detectados por los padres) y bailado toda la noche. Eran ya las 2:00 de la ma�ana cuando mi novio me dijo que nos fu�ramos a casa para que mis padres no me rega�aran por llegar tan tarde. Como es obvio, todas las parejitas de novios aprovechamos los pocos momentos de privacidad para dar espacio a nuestros sentimientos y sensaciones; ese d�a est�bamos mi novio y yo celebrando tambi�n nuestro 5� mes de noviazgo.
Esa noche est�bamos bastante rom�nticos as� que camino a casa yo me recost� en su hombro mientras �l conducia. �l comenz� a acariciarme la pierna con su mano derecha y poco a poco fue subiendo por mis muslos; yo me dej� y disimuladamente abr� un poco las piernas para permitirle llegar hasta mi concha y que la acariciara sobre la tanga. �l pasaba sus dedos y yo me fui excitando mas y mas, mientras me acomod� para facilitarle su tarea. Me pidi� entonces que me quitara la tanga y yo sencillamente levant� mis caderas, met� las manos debajo de mi falda y deslic� mi tanga hasta quit�rmelo todo, me acomod� un poco de medio lado, de frente a �l con una pierna sobre la silla del auto y subiendo mi falda hasta la cintura separ� las piernas mostr�ndole mi concha abultadita y con unos vellos p�bicos tupiditos pero cortitos y bien arreglados. �l h�bilmente me agarr� la concha y la acarici� un rato, mientras met�a y sacaba su dedo. Todo esto suced�a mientas �l manejaba camino a casa y yo estaba tan caliente que llegu� a sentir la necesidad imperiosa de sentir su pene. Le ped� que se lo sacara y �l con mucha rapidez abri� el zipper de su pantal�n y a trav�s de �l se sac� ese pene que me parec�a divino y que ya estaba considerablemente r�gido.
Me abalanc� como una loba y agarr�ndolo con mis dos manos comenc� a masturbarlo mientras pasaba la lengua por la oreja de mi amado. Sent� el pene crecer aun mas en mis manos y ponerse dur�simo como yo quer�a, y en ese momento sent� que necesitaba m�s.
- Mi amor, quiero chup�rtelo � Le dije.
- Es peligroso mientras conduzco, nena. Espera y buscamos un buen lugar.
Comenz� a mirar para todos lados buscando un lugar donde estacionar, mientras yo segu�a masturb�ndolo suavemente y con mi boca hecha aguas. Finalmente vimos un lugar adecuado; al lado de un edificio que estaba en construcci�n pero que por lo visto hab�an dejado las obras medio abandonadas. Era una calle solitaria y bastante oscura, que calculamos que ser�a propicio para desahogarnos antes de ir a dormir. Est�bamos seguros que no necesitar�amos mas de 5 minutos pues los dos est�bamos muy calientes y en esa situaci�n una buena sesi�n de sexo oral no nos tomar�a mucho tiempo.
Estacion� el auto, apag� las luces para no llamar la atenci�n y se acomod� estirando las piernas hacia adelante y recost�ndose c�modamente en el asiento. Yo casi inmediatamente me inclin� sobre sus piernas y sin ninguna contemplaci�n me met� el pene de golpe hasta el fondo mismo de mi boca; sin soltarlo con la mano, comenc� a bajar y subir mi cabeza a toda velocidad dejando el pene entrar y salir de mi boca, abraz�ndolo con mis labios y lubric�ndolo con mi saliva, mientras al mismo tiempo y ritmo lo segu�a masturbando con la mano. Yo estaba muy excitada y s� que le estaba haciendo una chupada fant�stica; lo sent�a gemir y el pene hab�a alcanzado un tama�o y una rigidez espectaculares, mientras mi novio hab�a colocado una mano detr�s de mi cabeza y con fuerza me la mov�a arriba y abajo indic�ndome el ritmo al que quer�a que se la chupara.
Yo estaba esperando su orgasmo, cuando de repente lo sent� a �l brincar y enderezarse en el asiento, mientras con sus manos trataba de separarme de su pene. Yo cre� que �l no quer�a correrse en mi boca as� que me resist� y quise seguir chupando para hacerlo acabar, pero de nuevo sent� sus manos intentando levantar mi cabeza e inmediatamente percib� un rayo de luz que apuntaba directamente a mi cara. De un sobresalto me incorpor� asustada mientras �l torpemente intentaba guardarse el pene dentro del pantal�n a trav�s del zipper, lo cual le costaba trabajo debido a la erecci�n.
- A ver, a ver...�qu� est�n haciendo ustedes aqu�? � Son� fuerte la voz de uno de los 2 hombres que estaban afuera, uno asomado por cada una de las ventanas del auto. El que estaba del lado de mi novio era el que hab�a apuntado la linterna a mi cara.
- Tranquilo oficial, no estamos haciendo nada malo � Respondi� mi novio a los hombres que en ese momento not� con uniformes de polic�a.
- �Nada malo?
- No se�or, nada malo � Respondi� mi novio mientras finalmente se acomodaba el pene dentro del pantal�n.
Mientras tanto yo tambi�n intentaba acomodarme la falda que ten�a enrollada en la cintura, ante la mirada directa de los 2 polic�as, clavadas una por mi frente y otra por detr�s de m�. Obviamente yo estaba s�per aturdida y no consegu�a arreglarme, con lo cual los hombres tuvieron suficiente tiempo para apreciar mis nalgas y principalmente mi concha aun hinchadita y abiertita por el trabajo que mi novio hab�a hecho con sus dedos, mientras mi tanga segu�a en el piso del auto. Incluso el polic�a del lado de mi novio, descaradamente me apuntaba con la luz de la linterna entre mis piernas.
- Entonces no est�n haciendo nada malo �eh?. Solo una chupadita...
Ante ese comentario y la sonrisa mal�vola de ambos polic�as me sent� como una vagabunda, pero obviamente no est�bamos en posici�n de exigir un trato m�s moral.
- Tranquilo oficial...usted sabe como son las cosas...mi novia y yo paramos un momento antes de ir a casa, pero ya nos �bamos. Tranquilo.
- �Y te parece que este es lugar para que te saques la verga y la pongas a chupar?. �Para eso hay otro sitios!. �Linda novia que te gastas!
Nuevamente me sent� humillada, pero obligada a permanecer callada, con el rostro hacia abajo y mis largos cabellos cayendo a ambos lados de mi cara para que no pudieran verme.
- Por favor se�or oficial, no nos agitemos. Le pido mil disculpas; ya nos vamos.
- Nada de eso muchacho. Por si no lo sabes, esto que est�n haciendo es una infracci�n a la moral p�blica.
- De nuevo disculpas se�or, le prometo que no suceder� de nuevo. Ya nos vamos.
- No tan r�pido mi amigo. Por favor salgan del carro que debemos proceder con una requisa.
- �Una requisa?...pero...�porqu�?
- Tenemos que verificar si no est�n cometiendo otro acto ilegal. Hay que estar muy "trabado" para ponerse a chupar verga en una calle p�blica. Tengo que verificar si no tiene drogas en este auto.
- �Drogas?, por supuesto que no oficial...
- Pues ser� yo quien verifique eso muchacho. Salgan los 2 del auto si no quieren que les levante cargo por resistirse a la autoridad.
Est�bamos temblando. Mi novio me indic� suavemente que obedeci�ramos para ver si por las buenas logr�bamos salir lo m�s r�pido posible de esa situaci�n tan inc�moda. Yo me mor�a de la verg�enza, y r�pidamente me inclin�, recog� mi tanga del suelo y la guard� en mi bolso. Los dos nos bajamos del auto y los 2 polic�as iniciaron una requisa indic�ndonos que nos qued�ramos uno a cada lado del auto. Uno de ellos puso a mi novio contra el auto y lo requis� de arriba a abajo, mientras el otro comenz� a revisar dentro del auto; en la guantera, debajo de los asientos, en los parasoles, etc. El que requis� a mi novio rode� entonces el carro y fue a donde mi; me indic� que igual levantara mis manos y las pusiera sobre el techo del auto. Se coloc� a mis espaldas y lo sent� recostarse ligeramente contra mi cuerpo; comenz� a requisarme pasando las manos alrededor de mi cintura y luego pas�ndolas de arriba a abajo. Las pas� por mi vientre y subi� hasta rozar mis senos por debajo, pero sin toc�rmelos directamente. Luego baj� a mis piernas hasta mis rodillas, lo que me pareci� absurdo porque mi falda llegaba mucho mas arriba, pero luego comenz� a subir por fuera de mis muslos y descaradamente meti� ambas manos por debajo de mi falda pasando por mis caderas desnudas; las desliz� por detr�s sobre mis nalgas y luego r�pidamente hacia delante, llegando por ambos lados al pliegue de mis piernas con mi concha y rozando fugazmente mis vellos p�bicos. En este movimiento se me recost� tambi�n muy fugazmente y pude sentir el tremendo bulto en el centro de mis nalgas, pero inmediatamente me solt� y se retir�, as� que prefer� no reclamar.
- Est�n limpios los dos � Le coment� a su compa�ero.
- En el auto tampoco hay nada � Contest� el otro.
- �Entonces? � Interfiri� mi novio - �Podemos irnos?
- Nada de eso mi amigo, tenemos que revisar tus antecedentes. Por favor me muestras tu documento de identificaci�n y los documentos del veh�culo. La "se�orita" tambi�n � Dijo mir�ndome y subrayando maliciosamente la palabra.
Mi novio comenz� a esculcar en su cartera los papeles y yo saqu� mi documento de identidad. Los entregamos a cada polic�a y comenzaron a revisarlos, pero inmediatamente el que ten�a los m�os dio la voz de alerta.
- Un momento; �esta chica es menor de edad!
- Yo tengo 24 � Exclamo mi novio
- Peor para ti mi amigo; cada vez peor. �Sabes que podemos procesarte por estar en actitudes sexuales p�blicas, y peor aun con una menor de edad?
- Pero sus padres me conocen...saben que ella est� conmigo; ella es mi novia
- �Oh si?, �que rom�ntico! � Dijo el polic�a burl�n � �Y tambi�n saben que la pones a chupar verga en tu auto despu�s de las fiestas?
Ambos nos quedamos callados. Sab�amos que el hecho de yo ser menor de edad estaba complicando todo, porque en mi ciudad los menores de 18 no pueden estar en la calle despu�s de las 2:00 de la ma�ana y eran las 2:15.
- Yo no tengo intenci�n de complicarte la vida ni de perjudicarte hijo � Dijo el polic�a � Pero tampoco puedo dejar de cumplir con mis obligaciones. Vamos a tener que llevar a tu novia hasta su casa en nuestro auto y explicar la situaci�n para sus padres. Es lo mejor que podemos hacer por ti, caso contrario ser�a llevarte a la estaci�n de polic�a.
- Pero se�or, si lo que quiere es ayudarme no puede hacerme eso...tiene que haber otra forma de hacer las cosas.
Los polic�as se miraron y se hicieron un gesto. Entonces el que estaba al lado m�o (que era el mas grosero) le dijo al otro:
- Hagamos lo siguiente; ll�vatelo a nuestro auto y que se quede all� mientras tu verificas sus antecedentes con la central. Yo me quedo ac� con la chica. Si no tiene antecedentes, les haremos el favor y los dejaremos ir tranquilos, pero tendr�n que esperar a que verifiquemos...ser�n unos 10 minutos.
- No hay problema � Dijo mi novio nervioso � Esperaremos.
El otro sonri� malicioso y tomando a mi novio por un brazo se dirigi� a la patrulla que estaba estacionada unos metros enfrente de nuestro auto, con los documentos. Abri� la puerta trasera e hizo entrar a mi novio, luego se subi� �l en el asiento de adelante y comenz� a hablar por el radio; imagino que pasando los datos de mi novio a la central. Mientras tanto, el otro que se hab�a quedado conmigo me indic� que esper�ramos ah�. Yo estaba nerviosa, y el tipo comenz� a hablar conmigo:
- Est�s metida en un l�o cari�o.
- Por favor se�or, no nos haga esto. �Si mis padres se enteran me matan!
- Entonces...arreglemos todo por las buenas... � Dijo sonriendo
- Es lo que yo quiero; d�game que quiere que hagamos y lo haremos
El tipo se me acerc� lentamente, y comenz� a acariciar mi cabello. Yo me apart� un poco y �l me dijo:
- �Qu� pasa cari�o? Pens� que quer�as arreglar por las buenas.
- �Qu� quiere decir con eso? �Yo no soy una cualquiera!
Entonces la actitud del tipo cambi�. Me di cuenta que hab�a perdido la paciencia y se hab�a enojado. Cambi� el tono de voz y me habl� en�rgicamente;
- Esc�chame bien puta; no estoy de humor, y si me da la gana encierro a tu noviecito en una celda y a ti te llevo donde tus padres y les cuento lo zorra que eres!!. Mas te vale que no te creas que tienes mucho a tu favor y colabores.
- �Que quiere decir con eso? � Pregunt� casi llorando
- Chupas la verga como toda una maestra. �Crees que no te vimos un minuto antes de interrumpirte?. �Se ve que eres toda una chupadora!. Estoy seguro que no es la primera verga que chupas y que mucho menos ser� la �ltima
- �C�mo se atreve a hablarme as�? �Atrevido!
- �C�llate la boca!. Deja de hacerte la estrecha con nosotros. �Es tan f�cil como que me des una buena chupada y nos olvidamos de todo este asunto! �Qu� mas da para ti chupar otro par de vergas?, �se ve que te encantan!
�Malditos polic�as!. Lo que sigui� despu�s de esto no quiero contarlo para no extenderme en detalles innecesarios. Por supuesto que inicialmente me negu�, pero el polic�a se puso cada vez mas irritado y amenazante. Me hizo entender que me ten�a en sus manos y que podr�a amargarme completamente la vida si me negaba a complacer sus deseos y tambi�n complacer a su compa�ero para que los dos pudieran irse tranquilos. Evalu� la situaci�n y le dije que lo har�a, con la condici�n de que nos dejara ir a los 2 y que mi novio no se diera cuenta.
- Toma el tiempo para averiguaci�n completa � Le dijo a su compa�ero por el radio � Voy a hacer una fiscalizaci�n aqu�, despu�s nos relevamos.
Como dije, no quiero dar mas detalles. Se recost� a un lado del carro, en una posici�n en que mi novio no nos ver�a en caso de que mirara para atr�s. Se abri� el zipper del pantal�n y se sac� un tremendo pene mas grande y grueso que el de mi novio. Yo me arrodill� frente a �l y comenc� con mi castigo. Tom� el pene con una mano y me lo met� a la boca mientras sent�a al polic�a suspirar. Comenc� a mover la cabeza adelante y atr�s mientras con la mano lo masturbaba, pensando que mientras mejor y mas r�pido se la chupara, m�s r�pido acabar�a toda esta pesadilla. Sent� el pene crecer y endurecerse en mi boca y el tipo me agarr� por los cabellos y comenz� a moverme la cabeza con fuerza. Yo estaba casi con arcadas, ya que el pene me llegaba hasta el fondo de la garganta y aun as� el hombre quer�a que me lo tragara mas, pero aguant� y segu� chupando sin parar. Sab�a que estaba haciendo un buen trabajo porque lo sent�a gemir, mientras me llamaba de "zorra", "as� putita", "sigue comi�ndotela perra" y otras linduras por el estilo.
En un instante me empuj� la cabeza hacia atr�s oblig�ndome a soltar el pene; se lo agarr� �l mismo mientras a mi me mantuvo agarrada por los cabellos; yo pens� que iba a correrse en mi cara, pero lo que hizo entonces fue soltar una descarga de saliva desde su boca que cay� directamente en la cabeza de su pene, y de nuevo empuj�ndome la cabeza hacia adelante me lo clav� en la boca y me oblig� a seguir chupando. Sent� un poco de asco pues nunca ning�n hombre me hab�a hecho eso, pero de nuevo pens� que lo �nico importante era complacerlo bien y hacerlo correr r�pido. Segu� chupando a ritmo parejo, sab�a que le estaba causando un tremendo placer cuando lo sent� que se inclin� y con su mano apret� uno de mis senos mientras con la otra me segu�a empujando la cabeza. Yo lo dej� hacer, concentrada solo en terminar r�pido con el infeliz, hasta que solt�ndome el pecho lo sent� erguirse de nuevo, con ambas manos me agarr� la cabeza movi�ndomela adelante y atr�s un par de veces, y despu�s empuj�ndomela con fuerza hasta meterme el pene hasta la garganta misma, donde me oblig� a que me quedara quieta. Sendas descargas de un semen caliente y salado comenzaron a llenar mi boca, y yo sin poder tragarlos por tener el pene clavado en la garganta, sent� como me inundaban y comenzaban a escurrir por las comisuras de mis labios. Me mantuvo as�, retir�ndose luego un poco pero aun sin sac�rmelo de la boca mientras soltaba las �ltimas descargas, lo que aprovech� para tragarme un poco de semen y evitar atorarme.
Termin� de descargar y me solt� la cabeza; yo inmediatamente gir� a un lado y escup� en el suelo todo el resto de semen que ten�a en la boca. El hombre me dej� escupir, pero luego me volvi� a agarrar la cabeza y me hizo chup�rselo suavemente y pasarle la lengua de arriba a abajo, hasta que se lo limpi� completamente mientras sent�a que se iba ablandando.
- Buen trabajo puta. Ha sido una chupada espectacular. Ya tienes ganado el 50% de tu pasaje a casa; ahora le toca a mi amigo.
Yo me levant� y me recost� en el carro, con la mente nublada mientras el tipo despu�s de guardarse el pene y arreglarse un poco el pantal�n, se dirigi� al carro de enfrente donde el otro segu�a simulando una comunicaci�n complicada con la central. Lo llam� fuera del carro, donde lejos de mi novio conversaron un rato. Vi a mi pobre novio mirando hacia fuera donde los hombres conversaban, y luego hacia a tras intentando buscarme, pero el lugar donde yo estaba era tan oscuro que estoy segura que no me logr� ver. Luego, el hombre al que yo se la hab�a chupado se meti� al carro y continu� con la farsa de comunicaci�n con la central, mientras que al otro lo vi caminar hacia donde yo estaba esperando. Lleg� hasta mi:
- Me dice mi compa�ero que has pasado con honores la primera parte de tu prueba, cari�o. Vamos a ver si te ganas tu libertad...ya podr�s decir despu�s que a tus 17 a�itos ya le has sacado beneficio a ser una buena chupadora de verga.
Yo me qued� en silencio y el hombre fue y se recost� en la puerta trasera del carro, exactamente en la misma posici�n que se hab�a puesto el otro. Tambi�n se baj� solamente el zipper del pantal�n y a trav�s de �l se sac� el pene.
- Ven, ac�rcate preciosa que no te va a morder...eres tu la que te lo vas a comer a �l � Me dijo malicioso.
Yo me acerqu� al hombre hasta quedar frente a �l, y ya me iba a agachar para comenzar con mi tarea, cuando �l me agarr� por los hombros y me detuvo. Yo me qued� quieta, y entonces �l baj� lentamente las dos manos y comenz� a agarrarme los senos. Me estremec� un poco, pero �l me asegur� firme mientras me dijo:
- Tranquila cari�o, no te asustes que no te voy a hacer nada que no te guste. Solo voy a acariciarte ese bello cuerpo que tienes; y mientras te toco esas tetas, quiero que uses tu manita y me vayas pajeando.
Yo era una completa robot. Estir� la mano y agarr� el pene; comenc� a mover su piel arriba y abajo mientras el representante de la ley morreaba mis pechos de lo lindo. Luego me hizo girar hasta quedar de espaldas a �l, me peg� a su cuerpo y sigui� agarr�ndome y masaje�ndome los pechos desde atr�s. Comenz� a pasar sus manos por todo mi cuerpo, baj�ndolas a mi entrepierna y meti�ndolas por debajo de mi falda mientras yo sent�a su tremendo bulto desnudo recostado en la divisi�n de mis nalgas. Lleg� incluso a pasar un dedo por toda la rajita de mi vagina para arriba y abajo, pero sin meterlo.
De repente me volvi� a girar bruscamente hasta dejarme de frente a �l, y presionando con sus dos manos sobre mi cabeza me hizo agacharme, qued�ndome el pene frente a mi cara. Se lo agarr� con una mano y con la otra me empuj� la cabeza y me lo clav� de golpe en la boca, e inmediatamente agarr�ndome la cabeza con las dos manos comenz� a mov�rmela adelante y atr�s a un ritmo que me costaba trabajo mantener sin su ayuda. Fue el tercer pene de mi noche, y fue una chupada salvaje; sent�a el pene entrando y saliendo y el mismo polic�a ayudaba a la chupada moviendo sus caderas adelante y atr�s en sentido contrario al de mi cabeza. Lo chup� mas de 3 minutos sin detenerme ni un solo instante, llegando a sentir incluso mareo, pero no paraba pues cre�a estar segura que su fin estaba cerca.
De repente, cuando yo menos lo esperaba, me separ� de su pene. Meti� una mano debajo de cada uno de mis brazos y de un jal�n me puso de pi�, Me agarr� por la cabeza, se acerc� a mi boca y me dio un tremendo beso, metiendo su lengua y explorando mi boca por dentro. Yo correspond�, creyendo que �l solo quer�a darse una pausa para demorar el orgasmo; entendiendo que hacia parte de la penitencia y prepar�ndome para seguir chupando cuando �l lo decidiera. Pero entonces me sorprendi�. Separ�ndose del carro se gir� y abri� la puerta trasera; me agarr� por un brazo y me llev� hasta la puerta abierta, me gir� quedando yo de frente al carro y de espaldas a �l, y poni�ndome una mano en la cabeza y otra en la espalda, comenz� e empujarme con cuidado pero fuertemente. Yo desconcertada perd� el equilibrio y me fui hacia delante, quedando con medio cuerpo dentro del carro apoyada en mis codos sobre la silla trasera, y medio cuerpo fuera. El resto lo entend� al instante, cuando lo sent� agarrarme las caderas y subirme la falda de un manotazo r�pido, mientras con la punta de sus botas me dio un ligero golpecito en el interior de cada uno de mis pies apoyados en el piso, y me hizo separar las piernas. Ca� en cuenta que yo estaba en posici�n de "en cuatro" perfecta, con el polic�a de pie detr�s mio y con su pene en la mano, listo para penetrarme.
Confieso que no supe reaccionar, pensando en lo que pasar�a conmigo y con mi novio si despu�s de haber llegado tan lejos, ahora me resist�a. Fue todo tan r�pido que no hice nada diferente a quedarme quieta y sentir la punta del pene intentando abrirse paso en la hendidura de mi vagina. Se separ� unos cent�metros y lo sent� echarse saliva en su mano, luego se la reg� en la cabeza del pene para facilitar la lubricaci�n y comenz� a darme unos brochazos en mi rajita con la cabeza de su pene pas�ndomela de arriba a abajo. Cuando sinti� que la situaci�n estaba adecuada, embisti� fuerte y de un solo golpe me lo ensart� hasta el pegue mismo. Yo sent� el pene entrar completo y el dolor me invadi� por dentro; fue tan fuerte la clavada que sent� que en el momento del empuj�n, mis pies se levantaron unos cent�metros del suelo y �l tuvo que agarrarme para no perder el equilibrio. Tambi�n se que grit� fuerte, y tal vez eso fue lo que lo hizo detenerse inmediatamente, dejando tal vez que yo me acostumbrara al miembro que me llenaba toda. Luego comenz� a moverse lentamente adelante y atr�s, en un mete y saca suave con el cual consigui� que mi cuerpo se adaptara al intruso dentro de mi e incluso lubricara un poco mas, facilitando la penetraci�n. Sigui� agarrado a mis caderas d�ndome con su pene, y yo me inclin� mas hacia delante hasta que apoy� totalmente mi cara sobre la silla del auto, hundi�ndola en �l para intentar ahogar los gritos ahogados que me sacaba el polic�a cada vez que me clavaba fuerte. Incluso separ� un poco mas las piernas, para facilitar el trabajo.
Ahora no sabr�a como describir ese acto, pues aunque yo estaba participando por obligaci�n, colabor� absolutamente en todo y de una forma casi voluntaria, as� que no creo que pueda llamarlo como "violaci�n". Yo sab�a lo que estaba haciendo, no fui forzada f�sicamente a hacerlo y adem�s tuve la alternativa de decir "NO", pero en lugar de eso particip� activamente en todo momento.
El oficial sigui� foll�ndome un buen rato. A diferencia de su compa�ero, este no dijo ni una sola palabra en ning�n momento, as� que se concentr� solo en hacerme suya en silencio, un silencio que solo era roto por mis ahogados gemidos. No par� ni un solo instante desde que comenz� a moverse, simplemente fue aumentando el ritmo gradualmente, de forma que despu�s de unos minutos, las arremetidas eran tan fuertes que sent�a mis nalgas brincar con cada nueva embestida. Nunca me hab�an dado as�, como lo hizo el polic�a. Tal vez bajo otras condiciones, podr�a decir que ha sido el mejor sexo que he recibido.
Finalmente, aument� la velocidad de sus penetraciones a un ritmo feroz. Sent� que si la situaci�n se prolongaba yo iba a experimentar un orgasmo, pero antes de que eso sucediera lo sent� a �l rugir como un toro, me lo meti� todo hasta el pegue y enseguida sent� el liquido caliente que me llenaba toda por dentro. Tuvo que derramarse abundantemente, pues sent� mi vagina inundada y muy caliente, mientras �l segu�a con peque�os espasmos hasta que poco a poco se fue relajando. Se sali� de mi y yo inmediatamente me di vuelta y me arrodill� frente a �l, y ante su asombro, me met� el pene a la boca y comenc� a limpi�rselo. Lo chup� suave y por todos lados hasta dej�rselo limpiecito. Finalmente me sent� en la silla del auto mientras �l con una sonrisa se guardaba el pene, se arreglaba el pantal�n y con un pa�uelo se quitaba algunas gotas de sudor de su frente. Luego me extendi� el pa�uelo y simplemente me dijo:
- �salo y despu�s puedes quedarte con �l. Te lo mereces.
- Por favor, d�gale a su compa�ero que ya nos dejen ir.
- Tranquila chiquita. Te has portado de maravilla; los dejaremos ir.
- Gracias. Denme unos minutos para arreglarme antes que llegue mi novio.
- Lo har� cari�o, y gracias a ti.
Se alej� hacia la patrulla mientras yo me limpi� un poco con su pa�uelo y me arregl� lo mejor que pude. Incluso me met� a la boca unos chiclets que ten�a en mi bolso, para tratar de disipar el caracter�stico olor y sabor a semen que ten�a, con la esperanza que mi novio no lo percibiera. Guard� el pa�uelo.
Mi novio lleg� y sin conversar mucho me llev� a mi casa. Lo poco que le dije fue que me hab�a asustado mucho y no quer�a hablar mas de eso. Incluso antes de llegar a casa �l quiso que se la terminara de chupar dizque "para no quedarse as�", pero le dije que por esa noche ya hab�amos tenido suficiente para escarmentar, que tal vez ma�ana podr�amos ir al cine.
espero les haya sido de su agrado, no busco encuentros ni relaciones, pueden dejar sus comentarios a

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