Esto que voy a contar pas� hace s�lo dos a�os. Yo soy un
empresario y manejo una empresa de productos agroqu�micos desde hace 8 a�os.
Desde aquel entonces presentamos nuestros productos en toda muestra que sea de
nuestro rubro. Para ello siempre he organizado todo yo porque es algo que me
gusta y hago relativamente bien. Est� claro que siempre espero ansioso el
momento de contratar las promotoras para nuestro stand. En general contrato
siempre en la misma agencia y son alrededor de 6 o 7 por evento. Soy muy
obsesivo con la calidad de mis productos y tambi�n lo soy en la elecci�n de las
chicas. Mis promotoras siempre han sido las m�s llamativas en todas los eventos
donde nos presentamos. Con el tiempo hemos ido perfeccionando la ropa que
utilizan y en la �ltima muestra, que fue en el 2004, ten�an una remerita blanca
bien ajustada con el logo de la empresa y una camperita negra bien cortita.
Debajo llevaban unos shorts negros de lycra bien cortos, que ten�an en la cola
el logo de la empresa y el logo de nuestro producto estrella, uno a cada lado.
Debido al color de la ropa y los colores institucionales siempre busco que sean
chicas rubias y muy llamativas pero relativamente flacas.
Despu�s de tanto tiempo en contacto con las promotoras debo
confesar que ten�a la fantas�a (incumplida) de levantarme una de las promotoras
para pasar una noche de sexo. Pero por una cosa u otra nunca hab�a tenido la
oportunidad hasta esta �ltima exposici�n.
Antes de la muestra me mandaron 15 chicas, de las cuales
eleg� las 7 chicas m�s adecuadas para lo que buscaba. Para ello las promotoras
desfilaron con la ropa de la empresa en mi oficina, donde estaba yo y un
asistente m�o. Eran hermosas todas, unos cuerpo perfectos y super profesionales.
Fue dif�cil elegir a las 7 necesarias pero lo hicimos despu�s de hacerlas
desfilar un buen rato y mirarlas tanto como pudimos.
Las chicas elegidas ten�an un promedio de edad de 19 a�os,
eran muy jovencitas pero eso es algo que buscamos a prop�sito porque llaman m�s
la atenci�n. Generan m�s fantas�as en los hombres, eso es as�. Yo tengo 35 a�os
y la verdad que me pasa lo mismo.
Terminada la muestra, ped� que mandaran a mi oficina a las
chicas vestidas con la ropa de la empresa porque iba a felicitarlas
personalmente. Las esper� con unos vasos de cerveza y unos s�ndwiches. Cuando
llegaron las hice pasar y empec� a mirar cu�l de ellas era la que m�s me
gustaba. Estaba decidido esta vez a avanzar a una de ellas.
Mientras las felicitaba, le ped�a a una que se acercara a
donde yo estaba sentado. Era extremadamente linda, con ojos verdes oscuros y un
pelo rubio lacio y bastante largo. Con su camperita a medio cerrada se notaba
que tenia unos pechos muy llamativos. Lo que m�s me llam� la atenci�n de Clara,
as� se llamaba, era su perfecta cintura y sus piernas muy bien formadas. Sin
temor, le ped� que diera una vueltita para verla bien. Como yo imaginaba ten�a
una cola muy sexy, tal es as� que la detuve de espaldas dici�ndole que quer�a
ver como se le�an los logos. Ella se pus derechita y paro la cola sabiendo que
yo s�lo quer�a verle los gl�teos.
Despu�s le dije que quer�a hablar mas tarde especialmente con
ella, por lo tanto que me esperara hasta los 8:30 de la noche cuando ya no hab�a
nadie en la empresa. Le remarque que no se cambiara que la necesitaba as�
vestida para unas fotos.
Cuando lleg� la hora, ya no quedaba nadie, tocaron la puerta
de mi oficina y me puse muy nervioso sabiendo que hab�a llegado el momento que
tanto esper�.
La hice pasar y la not� bastante nerviosa. La sent� como para
entrevistarla, quer�a hablarle un poco para que tomara confianza. Me dijo que
ten�a 18 a�os y que estaba muy a gusto trabajando con nuestra empresa. Yo
aprovech� para decirle que ella era nuestra promotora favorita y que quer�a que
contin�e participando de nuestras promociones. Aprovechando que todav�a ten�a
cerveza en mi oficina, le di para que tomara un poco m�s.
En un momento me par�, di la vuelta al escritorio y le ped�
que se levantara. "Quiero verte un poco mejor" le dije. Yo tom� asiento en donde
ella estaba sentada y le ped� que se parara delante m�o. Ella estaba tranquila y
sonre�a, creo que sospechaba que yo buscaba algo m�s.
Comenc� a acariciarle las piernas y subir lentamente hasta
colocar ambas manos a los lados de su cintura. Le saqu� la camperita y la sent�
en mi falda. Cuando la tuve tan cerca, me di cuenta que era una nena hermosa y
comenc� a besarla. Ella no se resisti� y me besaba muy apasionadamente. Le
masaje� los pechos y la bes� un rato largo. Le dije al o�do que quer�a hacerla
m�a, que la deseaba desde el momento que la contrat�. Su piel era muy suave y su
carita me calentaba de una forma incre�ble.
Me par� y la di vueltas abraz�ndola fuerte para que sintiera
todo mi cuerpo apoyado en el suyo. Le bes� el cuello mientras mis manos la
recorr�an de arriba hacia abajo. Le saque la remerita y comenc� a agacharme
mientras le besaba toda su espalda. Cuando llegu� a su cintura, ella apoy� sus
manos en mi escritorio separ� un poco sus piernas. Estaba ante la cola de una
nena de 18 a�os y yo ten�a una calentura incontrolable. Con mis dos manos le
separaba los gl�teos y la besaba presionando bien su cola. Todav�a ten�a puestos
sus shortcitos y eso me calentaba a�n m�s.
Luego le baj� los pantaloncitos, junto con su tanga, y me
qued� tarado mirando su colita con pelitos rubios y su incre�ble conchita. Le
dije que nunca hab�a visto unas piernitas y una colita tan hermosa. Ella estaba
muy excitada y me sorprendi� cuando me dijo que quer�a que la cojiera toda la
noche. Me par� detr�s de ella, y sin darla vuelta la bes� apasionadamente en la
boca mientras disfrutaba el roce de su cola en mi pija muy erecta.
Me baj� los pantalones y manteni�ndola en la misma posici�n
la penetr� por su conchita mojada lentamente mientras ella gem�a como una
verdadera perra. Yo con 35 a�os estaba disfrutando much�simo sentir la carne
durita de una pendeja tan hermosa. Despu�s de un rato de penetrarla lenta pero
muy profundamente, decid� cambiar de posici�n. La acost� sobre el escritorio y
vi su hermosa carita carita exitada. Levant� sus piernitas y las apoy� en mi
pecho. Volv� a penetrarla y esta vez vi como se mord�a sus labios y sus ojos me
miraban con mucha inocencia. Le bes� las tetas y hasta le mord�a suavemente los
pezones.
En un momento le dije al oido que quer�a darme un gusto muy
grande, eso era practicarle sexo anal. "�te hicieron la colita alguna vez?" le
pregunt�. Me dijo que no pero que estaba dispuesta a probar. Cuando me dijo que
nunca la hab�a sodomizado me calent� mucho m�s a�n. En la mismo posici�n comenc�
a intentar penetrarle la cola. Quer�a verle la cara cuando la fuera cojiendo.
Lentamente pude dilatarle el ano y la penetr� tan profundo como pude. Vi como
sus ojos se llenaron de l�grimas mientras me mord�a la mano bien fuerte. Era tan
estrecho su ano que me estaba dando el mayor placer de mi vida. Despu�s de un
ratito, la par� y la di vueltas nuevamente haci�ndola colocar sus manos en el
escritorio y separar las piernas. Me arrodill� detr�s suyo y le bes� bien fuerte
sus gluteos. Separaba con mis manos los cachetes y le hund�a la lengua dentro de
su cola. Era tan rubia que hasta su culito estaba lleno de pelitos rubios.
Me par� decidido a culiarla por �ltima vez. Le tap� la boca
con una mano y con la otra me ayud� a penetrarla nuevamente por su culito. Esta
vez la coj� mas fuerte y m�s violento. Quer�a escucharla gritar como una nena.
Comenc� a bombearla muy r�pido y lo m�s profundo posible. A ella se le cortaba
la voz mientras intentaba gritar. La tom� del pelo y con la otra mano de la
cintura y la sodomiz� casi hasta que sent� que acababa. Me priv� de acabarle
adentro del culito porque quer�a que me la chupara.
Asi que la sent� en el piso mirando para arriba y yo me par�
sobre ella. Abri� la boca y yo con mi mano apunte mi pija en su boca. De esa
manera ella ten�a su boca bien estirada para met�rsela bien adentro. Primero
tuvo unas arcadas pero pronto se acostumbr�. Cuando estaba por acabar, hice algo
que era una fantas�a desde hac�a rato. Le tap� la nariz y le met� la pija bien
adentro de la boca, por lo que casi no pod�a respirar. "Cerr� bien la boquita y
tragate todo" le dije. Se la met� bien adentro, hasta sent�a que traspasaba su
garganta. Y acab� cuando ella ya estaba roja del ahogo. Se la saqu� de la boca y
esta casi ahogada, tos�a y lloraba como una perra.
Me sent� un rato y esper� a que se vistiera nuevamente.
Mientras la miraba vestirse me di cuenta que hab�a cojido a una nena
hermos�sima. Le miraba el culo y no pod�a creer que la hab�a sodomizado. La
pobre Clarita se despidi� y su fue caminado lento y algo lesionada.