Las Pruebas de Carlitos (3)
Las luces de la ma�ana se anunciaban a trav�s del ventanal
que da al balc�n de la habitaci�n. A pesar de tener las cortinas cerradas se
pod�a advertir que iba a ser un d�a soleado y caluroso. Estaba desperez�ndome a
la vez que recordaba mis sue�os, me sent�a muy descansada pero a la vez�
diferente a otras ma�anas� estaba excitada, muy excitada. Al ver al otro lado de
la cama vi a Hern�n durmiendo sin meterse, sobre las cobijas, echado con la ropa
puesta. Ni siquiera sent� cuando se acost� pero debi� haberlo hecho avanzada la
madrugada, estaba profundamente dormido y roncaba un poco con la boca
entreabierta, seguro ni cuenta se dio que yo estaba con un babydoll de infarto
que, ir�nicamente esa noche, solo Carlitos aprovech� Carlitos� creo que ahora
ve�a todo fr�amente �qu� hab�a pasado? �qu� lleg� a hacerme? mejor dicho: en
realidad �qu� dej� que me haga? �fue solo un sue�o mas? �quiz�s solo lo imagin�
todo?.
El olor a licor que emanaba mi marido termin� por regresarme
a la realidad; me sent� y me mir� en el espejo del tocador, me ve�a diferente,
especial y particularmente radiante esta ma�ana� sent�a algo diferente en m� y
no sab�a como describirlo. Lentamente me fui incorporando para salir de la cama
y poner los pies en el piso, cuando comenc� a pararme sent� como se levantaba la
s�bana de abajo conmigo y luego se desprend�a de mi trasero� entre extra�ada y
confundida pas� la mano por mis nalgas y por encima de la s�bana hasta que sent�
endurecida la zona sobre la que estuve echada, record�ndome lo que hab�a pasado
anoche� no hab�a sido un sue�o� si hab�a sucedido� record� todo lo que hab�a
pasado con Carlitos� sus manitas� su pijita tanteando en mi culo as� como su
abundante corrida con la que me qued� mojada y dormida, ahora quedaba su
sequedad como prueba de lo que pas� Dios m�o �qu� hice? -porque definitivamente
fui yo quien lo provoc� todo- me sent�a culpable� pero no pod�a perder el
tiempo: tom� la s�bana y con esfuerzo logr� sacarla completamente de debajo de
mi marido para llevarla a lavar; ni se despert� a pesar que casi lo volteo. Me
puse una bata y sal� llevando conmigo la s�bana hacia la rec�mara de mi hijo�
pas� por la canasta de ropa sucia y la dej� adentro, ya la lavar�a mas tarde.
La cuna estaba vac�a, mir� el reloj� eran las 8 y 30 de la
ma�ana, si mi nene se despert� y llam� �c�mo no pude escucharlo? En ese instante
record� que era domingo y que, como todos los domingos, mi madre debi� haber
llegado a las 7, como tiene llave entr�, seguro no quiso despertarme y baj� al
nene con ella. Me dirig� a la escalera pasando por el cuarto que ocupaba
Carlitos� estaba cerrado, seguir�a durmiendo (�so�ando?) pens� sin poder evitar
una sonrisa.
La sala y el comedor eran un revoltijo de vasos y tazas
sucias, colillas de cigarrillos y botellas de licor. Pod�a sentir la tetera con
agua en la cocina� era mam�.
Mi madre vive a dos cuadras y los domingos viene a ayudarme
con las cosas de la casa y el nene durante la ma�ana.
Estaba sentada en la mesa de diario en la cocina con el ni�o
en el regazo� engri�ndolo como siempre.
Silvia, �qu� laberinto es �ste?
Ayer vinieron los parientes de Hern�n.
Otra reuni�n a tus costillas� y ya veo que "hubo fiesta"
�dijo ir�nicamente al mirarme el babydoll por entre la bata.
Mam� �otra vez?
Claro, como los parientes de tu marido no limpian�
Yo voy a limpiar� pero primero voy a preparar la leche
del ni�o. Dame a este gordito�
Alc� a Francisquito y le di un besote en la mejilla� �C�mo
est� mi beb�? � el muy coqueto se re�a de su despeinada mam�.
Prepar� el biber�n mientras mi madre atend�a al ni�o y me
contaba sus quejas de pap�. La verdad no prestaba atenci�n ya que en la mente
ten�a lo sucedido con Carlitos la noche anterior. �Qu� har�a? �Qu� le dir�a a
los muchachos? �Qu� pruebas seguir�an! � y �por qu� me importaba de esa manera?
Algo que empez� como juego de ni�os estaba empezando a tomar quiz�s otros
ribetes.
Francisquito tom� su leche y lo llevamos a cambiar. Mi madre
tambi�n desayun� y se ofreci� a terminar de cambiarlo.
Tu c�mbiate y arr�glate, yo me encargo� termino y lo bajo
�me dijo
Ok, gracias ma.
Pens� tomar un ba�o, pero primero decid� calentar el cuerpo�
en las ma�anas hago aer�bicos para recuperar la silueta que ten�a antes del
embarazo, as� que decid� arreglarme para eso.
Regres� al dormitorio y mi marido dorm�a aun como un lir�n.
Me cambi� de ropa y ni se dio cuenta: me puse una malla de lycra de color fucsia
chill�n y algo escotada, muy ce�ida (siempre la uso en casa para hacer mis
ejercicios) con solo una truza debajo. Amarr� mi cabello, me puse unas
tobilleras y decid� no ponerme zapatillas, para relajarme me gusta caminar
descalza en casa mientras se pueda, as� que solo tom� mi radio-casetera, la
colchoneta y sal� hacia el hall.
Acomod� la colchoneta y puse mi cinta de m�sica no muy alto
para no despertar a los dormilones.
Mientras hac�a mis rutinas pensaba en lo que pasaba en mi
vida, en los recuerdos de esos sue�os� de hechos que nunca fueron as�; me sent�a
llena de dudas �eran deseos reprimidos?�era como me hubiera gustado que fuera la
realidad? Todos eran recuerdos de momentos excitantes� por el morbo a lo
prohibido� en todas mi trasero era la causa, el protagonista principal� y
relacion� los sue�os con lo sucedido con Carlitos y los comentarios de los
muchachitos� �su travesura fue acaso el catalizador de mis deseos reprimidos? En
toda mi vida sexual no recordaba haberme excitado tanto con tan poco contacto
f�sico�
Mientras segu�a perdida en mis pensamientos se abri� la
puerta del cuarto de hu�spedes y sali� Carlitos� por c�mo se me qued� mirando
�yo estaba en plena rutina echada en el piso- me sent� totalmente escaneada y
una sensaci�n como que si estuviera desnuda me inund� por un instante. Estir� el
brazo y apagu� la casetera.
Buenos d�as, t�a.
Hola Carlitos, �no te despert� con la m�sica, verdad?
No� �que haces?
Ejercicios� para no estar tan gorda y bajar los rollitos.
Tu no estas gorda, t�a� no necesitas hacerlos.
Me qued� sorprendida y me sonroj� por el tono y la mirada que
me mand� cuando dijo esto �ltimo.
- Los hago desde que naci� tu primito�
�Te ayudo? �pregunt�.
No s� que pas� por mi mente pero le dije� si (aunque
no sab�a� �a qu�? �y c�mo?).
Se me ocurri� algo de pronto: me ech� derecha boca arriba y
le dije: - p�rate aqu�, se�alando por el lado de mi cabeza.
Para bajar la barriguita tengo que levantar las piernas
juntas y derechitas a 90 grados �sabia que era bueno en matem�ticas.
Mejor si puedo mantenerlas unos segundos as� �levant� lentamente las
piernas juntas� cuando las levante hasta arriba� as� como ahora� me tomas
los tobillos por un rato ok?
�Y eso no es trampa?
No� es una ayudita nada mas�
Oky
Se par� como le dije y me mir� yo lo ve�a de cabeza y me dio
gracia verlo as�, sonre� y �l tambi�n.
Me miraba con ese disimulo mal oculto suyo que me intrigaba�
levant� las piernas y tom� mis tobillos con ambas manos.
Cuenta hasta diez y los sueltas� le dije.
1�2�
Mientras contaba lo miraba para ver que hac�a� miraba mis
pies con mucho detenimiento� me hab�a arreglado las u�as a la francesa, cuidaba
mucho mi cuerpo y en particular mis pies� est�n permanentemente pedicurados.
T�a, tus pies son lindos...diferentes a los de mi mam�.
�C�mo as�?
Siempre usa zapatos cerrados para que no se le vean los
juanetes que tiene� pero los tuyos son bonitos y perfectos. No hab�a los
hab�a visto as� de� bonitos.
Gracias, le dije algo nerviosa. Pero �ya no
pasaste de contar 10?
Ah si, sorry... -y los solt�.
Los baj� y los volv� a levantar� repet�amos esa rutina una y
otra vez, notando como Carlitos llevaba mis pies cada vez mas hacia �l, haciendo
que sean mas de 90 los grados que formaban mis piernas con el piso�
Carlitos� ya es suficiente, gracias�
Ah si, t�a de na� - de pronto se qued� de una pieza
al mirarme en el piso.
�Qu� pasa�?
Al mirarme me di con la sorpresa que del sube y baja de las
piernas, mas los jalones adicionales de Carlitos, se me estaba saliendo un seno
por el escote cruzado de la malla� casi la mitad afuera con pez�n incluido�
R�pidamente me arregl� e incorpor�. Disimul�.
Gracias caballerito. Baje a tomar desayuno� -afirm�
se�alando las escaleras.
Si t�a, gracias �dijo algo avergonzado. �Puedo
llamar a Luis y los muchachos?
D�jalos que duerman o tomen el desayuno tranquilos con
sus padres�
Bueno� �pero puedo invitarlos despu�s a venir, no tiita?
Claro, Carlitos�
Mientras bajaba pensaba seriamente en lo que estaba pasando:
Carlitos estaba despertando a la vida, conmigo como referencia de lo que es una
mujer� eso me inquietaba� y me excitaba incre�blemente a la vez. No puedo negar
que me asust� por ello.
Entr� al ba�o, me quit� la ropa y me dispuse a entrar en la
ducha. El agua fr�a cayendo sobre mi cuerpo me relajaba� contempl� mi cuerpo y
me encontr� especialmente atractiva� como nunca: mis pies cuidados, muslos
firmes libres de celulitis, un trasero de infarto, caderas que no parec�an de
una madre, mi cintura marcada aunque no como antes de tener a mi nene, mis senos
redondos de oscuros pezones� firmes� comenc� a entender lo que pensar�an al
verme los hombres en la calle y a entender tambi�n el porqu� me dec�an las cosas
que me dec�an� de las mas lindas a las mas sucias. Realmente me sent� bella
por primera vez en mi vida� y de pronto quer�a que todos me vieran y admiraran,
fue una sensaci�n extra�a: imaginarme exhibi�ndome intencional pero sutilmente a
cuanto hombre se me antojara� �qu� me pasa?�acaso estaba loca?... as� no piensa
una mujer decente.
Con una toalla en la cabeza y envuelta en mi bata de ba�o
baj� para hablar con mam� cuando escuch� a Carlitos hablar por tel�fono en la
sala. Como estaba de espaldas a m�, logr� pasar r�pidamente al estudio sin que
me viera y levant� la bocina del anexo lentamente para escuchar, estaba hablando
con Luis:
Av�sale a los dem�s que mi t�a me dio permiso para que
vengan.
Ok� y?? � lo hiciste?
Si� anoche�
No te creo�
Tengo fotos�
Le aviso a los muchachos y �
Colgu� y segu� mi ruta a la cocina. Mam� hab�a comenzado a
lavar los platos de la fiesta y Francisquito estaba a la vista en su corralito
en el patio techado.
Mam�, deja todo� eso lo voy a hacer yo�
Olv�date. M�s bien creo que vas a tener que ir sola al
supermercado porque seguro que tu marido aun no se despierta �verdad?
Sigue durmiendo� pero es domingo. D�jalo.
Tiene que pensar m�s en ayudar� sobre todo con el ni�o�
No importa, qu�date t� con �l y yo voy sola. No voy a
comprar mucho.
Carlitos entr� a la cocina en ese momento� ya hab�a saludado
a mam� cuando tom� el desayuno�
�Por qu� no vas con Carlitos al s�per?
No es necesario� -dije.
Carlitos: �ayudar�as a tu t�a Silvia a hacer las compras?
�pregunt� mam�.
Si� claro �respondi�. Aunque los muchachos van a
venir en unos minutos�
�Vez mam�? Adem�s Carlitos no se ha quedado para hacer el
mercado con su t�a�
El es un buen muchacho que va a ayudar a su t�a y le dir�
a sus amigos que vuelvan mas tarde� �no Carlitos?
Carlitos se vio acorralado por la insistencia de mam� as� que
no le qued� otra que responder que si.
No hay problema� voy afuera a esperar a los muchachos y
decirles que vuelvan luego.
Mientras Carlitos sal�a me fui a preparar para salir. Entr� a
la habitaci�n, abr� el closet y volvi� a mi esa extra�a calentura que no hab�a
sentido sino hasta esta ma�ana� llegaron a mi mente esas ganas de mostrar por
primera vez, intencionalmente, algo m�s� se me hizo sumamente excitante el
imaginarme insinuante ante los hombres que estar�an haciendo compras en el
s�per� quiz�s con sus esposas� y adem�s estar�a con Carlitos: como el muchachito
hab�a sido casi forzado a acompa�arme el verme exuberante ser�a hasta una manera
de recompensarlo, pens�.
Me dio la locura� hasta ahora no s� que fue lo que pas� por
mi mente para decidirme� me puse una tanga blanca tipo hilo dental
extra-diminuta que usaba solo cuando Hern�n me lo ped�a casi de rodillas. Al
pon�rmela se enterr� inmediatamente entre mis nalgas y casi se meti� en mi
rajita.
Escog� un vestido sencillo de una pieza, delgado, de color
rosado claro que me quedaba algo apretado, no lo usaba desde antes de quedar en
estado. Era corto, m�s o menos a medio muslo, pero ten�a una abertura lateral
pronunciada. Me mir� al espejo y decid� no ponerme sost�n� estaba re-loca,
pens� pero mas pudo el morbo de pasearme as� en la calle, rodeada de gente. El
vestido ten�a unos botones delante que decid� no abrochar para que se pudiera
ver algo del surco de inicio de mis tetas� los pezones casi se me trasluc�an y
marcaban completamente por lo excitada que estaba. Para completar el modelo
escog� unos zapatos blancos de plataforma alta que jam�s hab�a usado para
salir (los compr� Hern�n por cat�logo solo para verme con ellos en la intimidad�
creo que es algo fetichista en el fondo) y me puse una cadenita en el tobillo
izquierdo.
Me miraba al espejo mientras me peinaba� con mi cabello aun
mojado parec�a una mujerzuela visti�ndose, reci�n ba�adita luego de brindar "sus
servicios". Me mir� y sonre� realmente estaba hecha una zorra.
Me par� frente a Hern�n que aun dorm�a� "mira como va a salir
tu mujercita" pens�. Ni se movi�.
Como no quer�a que mi madre me viera as� vestida, baj�, tom�
las llaves del auto y me dirig� al garage. Pens� que Carlitos estar�a en el auto
esperando pero no estaba� quiz�s es mejor, no pensaba volver a entrar a buscarlo
ni menos tocar el claxon as� que decid� irme sola y tener una salida r�pida. Al
abrir el port�n casi me d� un infarto: afuera Carlitos, Pablo y Luis estaban
conversando a dos o tres pasos del port�n y para remate de males don Amador, el
abuelo de Luis, conversaba sentado en la puerta de su casa, exactamente al
frente, con dos se�ores de edad que no recordaba haber visto antes. Don Amador
hac�a meses que no sal�a de su casa por problemas de salud y hoy, justo hoy se
decidi� a tomar el aire fresco de la ma�ana dominguera� y de paso recrearse la
vista con un espect�culo como el que deb�a estar dando yo sin previo aviso.
Quiz�s fueron solo segundos pero jam�s podr� olvidar el
rostro de esos seis hombres de todas las edades que me ve�an en ese momento a
cual m�s sorprendido. Estuve a punto de bajar la puerta y correr a esconderme,
�qu� verg�enza! y lo que es peor �qu� pasar�a por sus cabezas? No pod�a
culparlos de nada ya que desde su perspectiva hab�an visto el port�n elev�ndose
lentamente dejando al descubierto, lentamente tambi�n, a una mujer en ropa
ligera, sexy� pero completamente fuera de contexto por la hora y el lugar.
Quer�a llamar la atenci�n pero no comenzando por los vecinos en el barrio.
Me arm� de valor y me dirig� a Carlitos, que al igual que
Luis y Pablo, no pod�a disimular su asombro por lo que ve�a.
�Vamos Carlitos? Ah, hola Luis� Pablo�
Buenos d�as� se�ora Silvia �dijo Lu�s.
�Listo para ir al s�per, Carlitos? � pregunt�. Por el
rabillo del ojo pod�a ver que alguien se acercaba a nosotros. Era don
Amador.
Si t�a. Despu�s hablamos, muchachos.
Disculpen chicos que les robe a Carlitos un rato�
Podemos ir tambi�n a ayudar� si gusta �dijo Lu�s.
Si� entre los tres podemos cargar mas peso �afirm�
Pablo.
Buenos d�as Silvita� - era don Amador.
Don Amador, �como le va? � respond� algo inc�moda por
la mirada del viejo.
Mejorando, Silvita. Me da gusto verla� despu�s de tiempo
tan bien. �C�mo est� Hern�n?
Bien, gracias. Est� en casa descansando.
Qu� afortunado es� - dec�a mientras me miraba sin
disimular las tetas y pasaba la lengua entre sus labios.
Me disculpa, don Amador, pero voy apuradita al s�per�
�Podemos ir, se�o? � volvi� a preguntar Lu�s con
insistencia. Esto se sal�a de lo que hab�a planeado.
Somos tres fortachones a su servicio� bueno dos, Carlos
no cuenta jejejeje � dec�a Pablo luego de darle un golpe en el brazo a
Carlitos que, desapercibido recibi� completamente sin poder quitarse.
Pero claro� Luis, hazte �til: acompa�a a la se�ora y
ay�dale con las cosas del mercado.
Claro que si, abuelo� -dec�a el muchacho mir�ndome
con ojos suplicantes.
No creo que sea necesario, Don Amador. Los muchachos
tendr�n cosas que hacer� -dije para convencerlo y que no insistiera.
De ninguna manera, Silvita. Este mocoso nos est�
resultando un poco vago, es hora de que empiece a hacer cosas productivas.
En vista de la insistencia de don Amador, y para no estar
haciendo mucho tiempo parada y vestida as� en la puerta de casa, no me qued� m�s
remedio que aceptar:
De acuerdo, vamos muchachos� suban al auto.
Cool �exclam� Pablo.
Si!! Vamoooooos� - dijo emocionado Lu�s a la vez que,
con Carlitos y Pablo, corr�an juntos al coche.
Hasta luego, don Amador.
Adi�s, Silvita� se me cuida mucho �eh? �dijo a la vez
que me pareci� percibir un gui�o de despedida picaresco del viejo.
Subiendo al auto me encontr� frente a frente con Lu�s. Se
hab�a sentado adelante en el asiento de copiloto y me miraba con una sonrisa
sarc�stica. Carlitos y Pablo estaban en el asiento de atr�s. Al voltear a ver si
todo estaba bien, reci�n me pude percatar que Carlitos estaba con su c�mara
digital en la mano�
Empec� a ponerme nerviosa porque, aunque no s� mucho de esas
cosas, sab�a que las fotos tomadas anteriormente pueden verse por una ventanita
de la bendita c�mara.
Carlitos, cuida bien eso. No te lo vayan a arranchar�
Lu�s, ponte el cintur�n de seguridad.
Lu�s trataba de jalar el cintur�n de su lado derecho
in�tilmente.
Est� muy duro� parece� que � se � trab� �dec�a
mientras jalaba.
Suave. Tienes que jalarlo suavemente. Se supone que as�
con violencia como lo est�s haciendo es tambi�n un choque y en ese caso no
debe ceder.
No puedo, se�o. As� nom�s�
Ni hablar, a ver te ayudo�
Me acerqu� apoyando la mano derecha en su asiento y con la
izquierda estirada para jalar el cintur�n. No pude evitar inclinarme, rozar con
uno de mis senos su pecho y darle una panor�mica de mis tetas que supo
aprovechar bien (se pod�a apreciar en lo casi desorbitado de sus ojos).
�Ves? � Dije jalando sin dificultad el bendito
cintur�n y enganch�ndolo en la hebilla. Me hice la ingenua pero sab�a
perfectamente cual hab�a sido la intenci�n del mocoso este.
Gracias, se�o�
Arranqu� y salimos con rumbo al supermercado. Mi intenci�n
exhibicionista se hab�a visto algo cohibida por la numerosa compa��a que ahora
ten�a� pero a lo hecho pecho, como se dice, as� que para hacerlo sin
inconvenientes decid� ir al mega-supermercado que formaba parte de un gran
complejo comercial: me permitir�a dos cosas, la primera ofrecer distracci�n a
los muchachos (se marear�an con tantos sitios de video-juegos, tiendas de
discos, electr�nica, etc) y la segunda seguir mi plan en un sitio donde las
probabilidades de encontrarme con gente que me conozca era algo remota (quedaba
a una hora en auto desde la casa).
Mir� el espejo retrovisor y me encontr� con la sonrisa de
oreja a oreja de Pablo. Se coloc� entre los dos asientos delanteros y
c�modamente ubicado (pod�a verme las tetas a su antojo) me pregunt� - �y a
qu� s�per vamos, se�o?
Vamos al S�per del Jockey Plaza�
�Tan lejos?
Si� y si�ntate bien porque de una frenada te puedes venir
adelante�
Ok� don�t worry
Not� que la falda se me hab�a subido mas de la cuenta al
sentarme cuando observ� a Lu�s, queriendo agacharse debajo del panel delantero
del auto de una manera p�simamente disimulada� todo por querer ver mis bragas�
mi tanga en este caso.
�Qu� te pasa?
Es que� se me cay� una� moneda. �Si! �Eso es.. una
moneda!
Ya con esa excusa segura se agazap� completamente a los pies
del asiento. No pod�a ver lo que hac�a por no perder de vista la pista, pero
not� que miraba mis piernas y hacia atr�s, a Pablo y Carlitos.
En el retrovisor ve�a a Pablo re�r p�caramente, Carlitos
estaba callado pero se le notaba intranquilo.
Creo que rod� hacia los pedales� - afirm� al momento
que sent� r�pidamente una mano posarse sobre mi tobillo y subir hasta mi
rodilla.
Una luz roja me salv�. Me detuve y retir� la mano
r�pidamente.
No creo que tu moneda haya llegado hasta all�. En todo
caso la buscas cuando lleguemos �ok? �dije a la vez que le lanc� una
mirada de enojo y Lu�s se pon�a rojo como un tomate. La risita burlona de
Pablo no se hizo esperar�
Ok� no hay problema.
Este ser�a un largo viaje, pens�, as� que trat� de hacer
conversaci�n.
�Y muchachos? �Qu� planes para hoy? �Qu� van a hacer mas
tarde?
Hummm� nos reuniremos en casa de Pablo para hacer la
tarea y jugar en la computadora �afirm� Carlitos.
Sorry pero mi m�quina est� out of order, chicos �dijo
Pablo.
Tu m�quina era la m�s r�pida y potente� ahora �d�nde
vamos a probar el juego de Arturo? �pregunt� frustrado Carlitos.
Si quieren al regreso pueden usar la del estudio, chicos.
Pero la cuidan Ok? � dije.
Bien! Gracias, t�a �dijo Carlitos.
Llegamos al centro comercial, estacion� el auto y al bajar
les dije:
Bueno chicos, en realidad no voy a comprar muchas cosas
as� que se pueden ir a dar una vuelta por ah� y nos encontramos aqu� en el
parqueo en una hora mas o menos.�Ok?
No way, se�o. Hemos venido a ayudarla y eso vamos a hacer
�afirm� Pablo.
Claro que s�. Adem�s es mejor estar juntos �no le parece?
Podemos perdernos� �reforz� Lu�s con una vulnerabilidad mal fingida.
Si t�a, vamos todos al s�per�
Pero �de veras no quieren aprovechar en ver todas estas
tiendas y diversiones juntas en un solo lugar? �insist� sonando igual al
comercial de TV.
No, de veras� �vamos? �respondi� Carlitos dando
algunos pasos hacia la salida a la zona comercial.
Resignada a tener detr�s de m� a mis "p�beres guardaespaldas"
no me qued� mas remedio que iniciar el recorrido sin negar que estaba asustada y
doblemente excitada por lo que podr�a suceder.
Espero que les haya gustado� esto continuar�. Como siempre y
si lo desean no duden en enviarme sus cr�ticas, comentarios y sugerencias a mi
correo POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO
. Un beso y gracias nuevamente.