En el colegio �ramos un grupo peque�o de amigas. Para esa
fecha tendr�a yo como 13 a�os y solo hab�a tenido algunos coqueteos con mis
amigas m�s �ntimas. Ya saben peque�os y cortos besos, roces en los senos y uno
que otro toque en el pubis. Nada de importancia.

Yo en esa �poca ya era una muchacha linda y de formas
redondas que se empezaban a destacar con unos peque�os senos paraditos y los
pezones rosados de las ni�as l�sbicas. Mi cuquita sobresal�a un poco pues los
labios eran grandes para el tama�o de mi rajita. Ten�a un culito que llamaba la
atenci�n por ser paradito aunque no muy grande, siendo la forma lo que creo era
mas atractivo a ellas y ellos.

Mis amigas eran parecidas a m�. Destacaba Dreide que parec�a
mayor, pero de ella les contare luego de como nos hicimos amigas.

Cuando pasamos de grado en el colegio entro una muchacha
nueva que aunque no era muy linda ten�a un atractivo especial. De larga
cabellera, ojos profundos y lo m�s lindo eran sus labios. Los tenia tan grandes
y bien formados que parec�an sacados de una pintura. Provocaba besarlos y
abrirlos poco a poco e introducir la lengua en esa boca que luc�a ardiente. Esos
fueron mis primeros pensamientos que me turbaron pues no ten�a experiencia con
alguna chica mas de lo que les cont�.

Ella se me empez� a insinuar cuando nos inscribimos en
atletismo y empezamos a compartir las pr�cticas las cuales hac�amos en el
stadium del colegio. Ya en las regaderas cuando nos �bamos a duchar, despu�s de
la jornada, pudimos vernos desnudas y as� comprob� la atracci�n que ambas
sent�amos. La muy picara en una ocasi�n se me acerc� y me susurro.

Les confieso que eso me mantuvo turbada por mucho tiempo.

Pasados unos d�as y por ser tan lindas el entrenador del
conjunto de animadoras nos entusiasm� para que entr�ramos las dos al grupo de
cheerleaders y as� lo hicimos. El uniforme era de lo m�s er�tico. Una minifalda
de pliegues en rosado y azul y una cotica que apenas cubr�a nuestros nacientes
senos. Con ese uniforme pod�amos competir en el Miss Venezuela.

En una ocasi�n en la cual hablaba con ella me sugiri� que me
pusiera la faldita pero sin pantys abajo. Ella me dijo que siempre lo hacia.
Solo de pensar que los dem�s pod�an ver su rajita por un momento fugaz la
excitaba tanto y mi imaginaci�n vol� al instante pensando en eso. As� que la
pr�xima vez que salimos a practicar no me puse la panty y me sent�a como si todo
el mundo me miraba. Era una sensaci�n extra�a.

El caso es que un d�a cuando terminamos las practicas me fui
a las gradas a descansar con una amiga y nos sentamos en el tercer escal�n, sub�
la minifalda y puse mis muslos y nalgas en el fri� hierro lo cual me dio una
sensaci�n de frescura por el calor que hacia. Las gradas eran de metal y donde
uno se sienta parecen unas rejas dejando una abertura entre cada uno los tubos
de metal con que est�n hechas.

Ya el stadium estaba casi vacio y qued�bamos apenas nosotras
dos y unos muchachos que corr�an a lo lejos. Ella nos vio a lo lejos y se fue
por detr�s de las gradas donde est�bamos sentadas mi amiga y yo.

No me di cuenta que estaba por debajo de las gradas hasta que
sent� que algo me tocaba por entre las rejas, pegu� un peque�o saltito y mire
hacia abajo y la vi. Inmediatamente se puso el dedo en la boca y me pidi� que
guardara silencio. Yo disimul� como pude.

Ella por debajo empez� a tocar mi rajita con su dedo. Yo
empec� a sentirlo e inconscientemente comenc� a abrir las piernas. Su dedo
apenas me rozaba y sent�a un escalofri� mientras trataba de concentrarme en lo
que hablaba con mi amiga. Esa situaci�n era tan excitante que mentalmente me
estaba bloqueando y me gustaba. A trav�s de los tubos del asiento de las gradas
estaba metiendo sus manos peque�as y con sus dedos comenz� a abrir mi rajita y
tocaba mis labios que iban creciendo poco a poco. Uno de sus dedos exploraba mi
cuquita y el otro trataba de ampliar la entrada para que pudieran entrar.

Mi cuquita empez� a humedecerse y no encontraba como
disimular. Abr� mas las piernas y le dije a mi amiga que sent�a calor. Mientras
ella ya me tocaba el cl�toris y lo frotaba de arriba abajo y lo pellizcaba,
sent�a mi cuquita h�meda, abierta y que me crec�a. Por debajo sus dedos entraban
y sal�an con suavidad y de repente empec� a sentir como alrededor de mi ano algo
filoso que no lograba saber que era, y tocaba y rozaba suavemente en forma
circular alrededor de �l. Era su u�a con la cual me excitaba para que el
esf�nter se abriera. Me acomode mejor para que mi culito quedara bien entre dos
de los tubos y ella empez� a meter uno de sus dedos en mi ano.

A medida que me entraba me mov�a un poco para que me
penetrara m�s. Sent�a sus dedos en mi vagina y en mi culo y estaba totalmente
inm�vil. Trataba de conversar con mi amiga y no pod�a coordinar lo que dec�a.
Logre moverme un poco y al mirar hacia abajo pude verle los ojos a ella como con
lujuria me penetraba con sus dedos. Yo estaba apunto de acabar y fue cuando mi
amiga me dijo que ir�a al ba�o y que la esperara. Apenas se hab�a ido puede
acomodarme mejor y poniendo mis manos a los lados de la grada me levant� un poco
y comenc� un movimiento de rotaci�n para sentir esos dedos que me entraban y
sal�an. No pude mas y logre un orgasmo tras otro y grite suavemente. Cerr� los
ojos y de repente sent� que saco los dedos y se fue. En eso llega mi amiga y al
verme me dijo que parec�a que hab�a visto un �ngel pues estaba sonrojada y tenia
los ojos brillantes. Si supiera como ten�a mi cuquita y mi ano todos h�medos y
satisfechos se hubiera muerto de envidia.