Tenia en ese entonces 17 a�os, y el sexo era un tema que
ocupaba gran parte de mi vida. Recuerdo como ese d�a me levante con una gran
excitaci�n, y en la cama tumbado y sin ninguna prisa me masturbe, mojaba mis
dedos en saliva, y me los pasaba por el glande, me pellizcaba los pezones
incluso me atrev�a a meterme un dedo en el culo, me excitaba gemir, y lo hacia
cada vez que pod�a, me repet�a a mi mismo frases que me calentaban de
sobremanera, y cuando cre�a que llegaba el momento de eyacular pare, y me fui a
duchar.

En la ducha me observaba la polla morcillona, solo la miraba
y la contemplaba, me frotaba mi imberbe cuerpo en el que solo tenia pelos en las
axilas y el pubis y disfrutaba apuntando la ducha a mi ojote, ese placer
produc�a en mi una inmediata erecci�n sin necesidad de usar las manos, pero el
juego era el mismo, cuando notaba que me iba a correr volv�a a parar.

Sal� de la ducha me puse un calzoncillo muy ajustadito de
color blanco y me conecte a Internet, y ah� comenzaba lo divertido, tanta
calentura acumulada en la cama y la ducha me lleva a desinhibirme por completo y
as� poder buscar sin miedo un chico con el que poder pasar la tarde, pero yo
estaba demasiado caliente y ni siquiera llegue a entrar al Chat, cog� mi m�vil y
llame a David.

- Hola.

- Hola David, soy Marcos, �como estas?

- Pues en casa, me preparaba para irme con mis padres a dar
una vuelta.

- Vaya, hab�a pensado que podr�amos quedar, estoy en casa
solo, y estar�a bien pasar el d�a juntos.

- Si, desde luego tu plan es mas divertido, adem�s tengo
ganas de verte, bueno si te parece voy para all�.

- Pues fen�meno me das una alegr�a muy grande, nos vemos en
un rato.

- Ciao

La verdad nuestras conversaciones no eran muy largas, ambos
�bamos siempre al grano, y en realidad la conversaci�n para nosotros estaba muy
clara, y se pod�a entender mas o menos as�.

- Hola.

- Hola David, soy Marcos, �C�mo estas?

- Pues en casa, con la polla dura y supongo que me llamas pa
que follemos as� que me voy ha hacer de rogar un poco.

- Vaya, con lo caliente que estoy y encima que estoy solo en
casa y podemos hacer todas las guarradas que nos de la gana.

- Bueno, pues entonces ya no me hago mas el duro y acepto,
voy para alla.

- Pues fen�meno, yo ir� calent�ndome que te vas a enterar.

- Ciao.

Muchas veces creo que ambos hubi�semos querido ser as� de
directos pero no pod�amos.

Colgu� el tel�fono y me puse un ch�ndal, coloque en la mesa
de mi dormitorio un dado de ocho cifras, y pens� en un juego er�tico, y con lo
caliente que estaba no tardo en ocurr�rseme.

Cog� un boli y un papel y comenc� por escribir los ocho
n�meros, y a continuaci�n pens� que acto corresponder�a a cada uno.

Para el uno, un beso.

Para el dos, un beso con lengua.

Para el tres, un revolc�n vestidos.

Para el cuatro, tocar la polla por encima del calzon.

Para el cinco, tocar la polla al desnudo.

Para el seis, chupar con el calzon puesto.

Para el siete, una mamada.

Para el ocho, hacer lo que el otro quisiese durante un tiempo
limitado.

Mi erecci�n ya era incontrolable, me imaginaba en aquel
juego, totalmente sumiso a las ordenes de David, pensaba en �l toc�ndome, �l y
yo abrazados, deje de pensar por temor a eyacular.

David y yo no �ramos muy amigos, pero si nos conoc�amos de
peque�os, comenzamos a explorar juntos el sexo, y aunque yo no temo definirme
como gay, el si siente atracci�n hacia ambos sexo, nuestros encuentros eran
escasos y basados por completo en el sexo, por que de car�cter �ramos muy
distintos.

David era un a�o mas peque�o que yo, pero bastante mas alto,
su cabello dorado, y su rostro dulce escond�an placer, 1�79 de estatura y algo
rellenito, con poco bello aunque algo tenia, y un gran pene, bastante ancho y
muy blanquito como toda su piel.

Yo por mi parte, mido 1�58 escaso, el medico lo achaca a una
falta de hormonas, tal vez por eso soy totalmente imberbe, y aun ni siquiera he
comenzado a afeitarme, soy bastante moreno de piel, y me pene aunque de 14 cm,
es muy atractivo. Mi rostro es infantil, y mi pelo esta rapado, odio el tiempo
que se pierde en peinarse.

La espera se me hizo muy larga, y lo pase tirado en el sill�n
viendo una peli porno e imaginando nuevas cosas que experimentar con David, me
acariciaba constantemente el paquete, y gem�a. Son� el timbre.

Me levante tranquilamente y fui a la puerta, hecho un ojo por
la mirilla y all� estaba David, abr�.

- Hola compa�ero.

- Muy buenas, pasa, pasa, estamos solos.

�l fue hacia el sal�n mientras yo cerraba la puerta.

- Interesante pel�cula, veo que ya no pierdes el tiempo.

- Bueno, supongo que ya tenemos confianza para estas cosas.

- Si, lo cierto es que si.

- Vayamos a mi cuarto, tengo algo preparado.

David tra�a unos vaqueros y una camisa bastante ajustados,
eso me gustaba. Nos tumbamos en la cama.

- Bueno lo primero es quedarnos en calzones.

- Vale, pero desnud�monos el uno al otro.

Nos pusimos de pie y engancho mi sudadera, suavemente me la
quit�, acariciando mi cuerpo dulcemente, la tiro sobre la cama y me rozo el
pecho, yo estire mis manos y fui uno a uno desabrochando los botones de su
camisa pellizcando por un segundo sus pezones, est�bamos bastante calientes,
David me agarro las nalgas y me apret� su paquete con el m�o, frotando con
pasi�n.

Se agacho y comenz� a bajarme el pantal�n, mi polla peleaba
por salir, el se dio cuenta y me beso el paquete por encima de la ropa, le
separe para que no siguiera, lance lejos mis pantalones, y me agache, esta vez
el que le beso fui yo, note su pene duro a mas no poder, y le quite los vaqueros
ensimismado en hermoso regalo.

Le tumbe en la cama y saque mis dados.

- David, veras, yo tiro el dado, y el numero que salga lo
miramos en la lista y lo que sea lo hacemos, y luego tiras tu y lo mismo.

- Vale jejeje, adelante esto mola.

Tir� el dado, y la incertidumbre me excito tanto que un poco
moje mi pantal�n, mientras daba vueltas mi mente so�aba con David penetr�ndome,
el dado se paro y sali� un tres.

David cogi� el papel, y lo leyo.

- Un revolc�n vestidos, no se si cuando empiece podr� parar.

- Pararas, el juego es muy largo.

Me sent� junto a �l, nos abrazamos y nos tumbamos, yo quede
debajo y David mov�a su cadera apretando dolorosamente mi pene, yo le ara�e la
espalda y solt� un ligero gemido, entonces le agarre las nalgas y se las apret�
hasta perder la cabeza.

- Venga, te toca, lanza el dado.

David lo agarro y lo lanzo r�pidamente, saco un dos.

- Un beso con lengua.

Me acerque y cerr� los ojos, nuestras lenguas se juntaron
inmediatamente y se dejaron llevar por la pasi�n para no hacer hueco en nuestras
bocas para tanta locura, pero lo divertido no se quedo all�, David con una mano
me manoseaba el ojete, que yo separando mis piernas de ofrec� con descaro, no
paso mucho tiempo cuando decid� parar.

- Bueno me toca � cog� el dado y lo lance � bueno no esta
mal, un seis, m�rame la lista a ver que pone..

- Debo chupartela con el calzoncillo puesto.

Me puse de pie, le agarre la cabeza y le se puse en los
labios, el tacto del algod�n y la presi�n de sus labios era muy agradable,
comenc� a suspirar, eso le calent� y abri� aun mas la boca cre� que mi ropa
interior no aguantar�a la presi�n, quer�a correrme pero me controle, pronto note
la humedad de su saliva y le separe.

- Mira Marcos este juego me encanta pero estoy muy caliente,
quiero hacerlo ya.

- Yo tambi�n, pero esto me excita de una manera que no llegue
a imaginar, sigamos por favor.

- De acuerdo, como tu quieras dame el dado es mi turno.

David con un gesto r�pido lanz� el dado, y sac� un cuatro.

- Vaya mierda, me la tienes que cascar con el calz�n.

Acepte su gesto de desagrado, pero yo estaba muy feliz de
poder jugar con David a los dados, me arrime y con una mano le frotaba el pene,
el tacto de sus calzoncillos era extremadamente suave, con la que me quedaba
libre, le masajeaba sus test�culos, lo hice con pasi�n pero a �l, ese juego ya
no le divert�a.

- Vale David, entiendo que esto ya es tonter�a, hagamos
modificaciones, tira el dado si sacas mas de cuatro, te la mamo, si sacas menos
me la mamas.

Acept�, lanz� el dado y saco un tres, yo recibir�a su mamada,
David se agacho y me quito los calzoncillos me pajeo unos instantes y comenz�
una mamada que dejo clara su calentura.

- Si saco un siete o un ocho te corres en mi boca y te follo,
si saco menos soy tu esclavo.

La apuesta de mi ni�o fue muy arriesgada y yo teniendo todo a
mi favor acepte, �l agarro el dado, le dio un par de soplidos y lo lanz�, la
suerte me castigo por tenerlo tan caliente y David sac� un ocho. Busco mi mirada
con una amplia sonrisa, le ofrec� una mueca de aceptaci�n y me la comi� con
descaro, notaba la humedad de su boca, su lengua acariciando mi tronco
suavemente, sus dientes apret�ndome levemente mi glande para provocar un poco de
dolor excitante, con sus manos me acabo de tumbar en la cama, me separo las
piernas y dejo claras sus intenciones.

- �D�nde tienes los condones y la crema?

- En el tercer caj�n.

Fue r�pido en sus movimientos, abri� el caj�n, amarro un
preservativo y el bote de crema, me unto el pote con mucha pasi�n en el hoyito,
la crema fresquita me excitaba por el contraste de mi alta temperatura, me
besaba efusivamente.

- Ponme el cond�n con la boca porfa.

Me gusto la idea y lo hice muy feliz, abr� el preservativo,
con una mano lo coloque en su punta y con la boca lo desenrolle, fui algo que
apunte en mi memoria er�tica por que fue muy agradable. Cuando lo tuvo puesto,
me agarro de las caderas poni�ndome bocabajo, un almohad�n alzo mi culo y con
detenimiento mi amigo inicio la penetraci�n.

- Hazlo despacio pero no pares.

Note como entraban aquellos cent�metros como si fuera la
distancia de Madrid a Valencia, el tiempo se hacia eterno mientras notaba como
mis dos nalgas se alejaban como nunca antes hab�an hecho, me la empujaba suave,
pero sin ceder, y as� al cabo de unos minutos note sus huevos rozando mi piel,
cuando mi esf�nter se hizo a mi nueva compa��a el ritmo de David se acelero, se
tumbo sobre mi, y me besaba dulcemente, sus caderas ten�an ya un ritmo infernal,
ahueco un poco mi cuerpo, y meti� la mano para masturbarme, el ritmo era
insoportable, y pronto sus gemidos y la tensi�n de su cuerpo me desvelaron su
secreto, se estaba corriendo.

- Yo tambi�n me voy a correr.

R�pidamente me dio la vuelta, fugazmente vi su preservativo
lleno de esperma me excite tanto que ni le di tiempo a acercar su boca, mi
primer reguerito de semen se perdi� en la cama, pero los siguientes los acert�
en sus labios, y su boca, se lo trago todo como un buen ni�o que disfruta de un
refresco, se incorporo a mi lado, y nos abrazamos.

- Se que te sonara mal pero me encantan estos ratos, eres
como mi pareja pero sin aguantar la parte mala, gracias por respetar mi forma de
quererte.

Aquellas palabras me gustaron, era un t�o feliz. Y disfrute
del momento, nos aseamos, y nos acostamos desnudos, cuando nos despertamos ya
era por la tarde, comimos, y nos fuimos a ver un partido de f�tbol como hacen
los colegas.

POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO

QUIERO DEDICARLE ESTE RELATO A IVANKOP, CUYOS TEXTOS, ME
HACEN SENTIR GANAS DE ESCRIBIR.