Todo comenz� con la disculpa del pr�stamo de unos CD�s. Es
este hombre (un verdadero macho) medico, alto, cabello negro ondulado con bucles
bien cuidados, manos incre�blemente varoniles y una boca al igual que su verga
exquisita.

Bien; mi historia comienza en un consultorio medico, lo
visite por problemas en mi o�do aprovechando este malestar como disculpa para
tener m�s de cerca al hombre que cuando por primera vez vi desee sin sospechar
todo lo que me har�a disfrutarlo bocado por bocado; tras una revisi�n,
diagnostico y recomendaci�n medica hubo tiempo adem�s para concertar algo a lo
que se le podr�a llamar una cita inofensiva.

Nunca fui ese d�a a su casa (hasta ahora me arrepiento, pues
se que hubi�ramos hecho el amor cualquier cantidad de veces) pero
afortunadamente un d�a cualquiera si acced� ir, Cesar me lo reclamo (pues no le
hab�a prestado los CD�s) todo el d�a me la pase pensando en �l, c�mo ser�a un
beso suyo, como ser�a todo lo que me imaginaba con �l, en fin todo un carnaval
de imaginaci�n y expectativas sexuales.

Quedamos de vernos ese mismo d�a a las 4:00 p.m en el
hospital y luego ir�amos a su casa (esa era la parte que m�s me excitaba) desde
luego me puse un vestido muy corto y delgado, y unas tangas tipo brasileras,
contando con el clima caluroso que s�lo ofrece un pueblo costero en vacaciones
de verano (esto queda en el departamento del Choc� en Colombia).

Al fin se lleg� la hora de la cita fui por Cesar al hospital
y luego nos fuimos para su casa, estando all� me coloco a bailar sola (no se
como lo hice, pues me da mucha pena bailarle a alguien, pero por este hombre
har�a eso y mucho mas) adem�s quer�a que me observara y apreciara con su vista
lo que ten�a en frente y lo que se podr�a comer sin mayores peticiones, un rato
despu�s fuimos al balc�n jugamos parqu�s, hablamos de nuestras vidas un poco,
creo que nos dimos cuenta al caer la noche que no est�bamos ah� precisamente
para hablar y mucho menos para jugar.

El se acost� en una hamaca y me invito a hacer lo mismo y de
un brinco me incorpore junto a �l, nos miramos y Cesar me regalo el beso m�s
apasionado, rico, estremecedor y excitante que jam�s me hayan dado, sentir su
lengua dentro de mi boca fue lo mas rico que pude sentir, nos comenzamos a tocar
y Cesar sin mas espera se dirigi� directamente a mi vagina, me introdujo el dedo
y sentirlo all� me hac�a retorcer de emoci�n.

Toque su pene por encima de su pantal�n y no aguante, le baje
su cremallera y al tocarlo sent� como estaba s�per duro, grande y deliciosamente
h�medo y presentado para m� yo estaba a�n mas h�meda, es que sentir su mano
cogerme por entre mi vagina no ameritaba otra cosa, luego el bajo y me regalo
una peque�a mamada, cortita pero deliciosa, yo hice lo mismo (DIOS EXISTE!
PENSE) fue la cosa mas bella que me haya pasado, tener su pene en mi boca
toc�rselo con la lengua, met�rmelo y sac�rmelo de la boca a mi antojo lo puso a
cien y sentir sus gemidos entrecortados me excitaba a�n mas creo que Cesar no se
dio cuenta pero tuve un orgasmo peque�ito pero delicioso (mientras se la mamaba
me masturbaba).

No pod�a quedarme mas tiempo en su casa ten�a que regresar a
la m�a, pero sab�a que ten�a que terminar lo que ya hab�a comenzado y no
precisamente con la s�per masturbada que me regale en mi cama a la salud suya.

Al otro d�a lo llam� y que damos de ir a la playa, fui por �l
a su casa y caminamos hasta llegar a una playa relativamente solitaria pero a�n
as� pasaba mucha gente, para no alargarles m�s la historia al llegar ah�
comenzamos a besarnos con mucha pasi�n , nos acariciamos y con mis gemidos un
poco entrecortados le hice saber que quer�a ser cogida por �l, nos despojamos de
la ropa por completo y pude ver su pene en todo su esplendor y me incline a
mim�rselo entre mi boca se lo mame con muchas ganas y se que el lo disfruto pues
sus gemidos no me dec�an lo contrario, proced� a mont�rmele encima y de s�lo
meterme su verga tuve un estremez�n bien fuerte y rico adem�s, comenc� a
cabalgarlo y sent�a su pene en todo su furor eso me excitaba, Cesar me cojia las
nalgas con muchas ganas con sus apretujones las bautizaba en su nombre y sab�a
que solo eran suyas, al �l hacer esto me calentaba cada vez m�s y mas fuerte era
mi arrechera y a consecuencia de esto me vine. Luego cambiamos de posici�n,
tenerlo encima m�o me pareci� delicioso me abrazo fuertemente y me lo meti� con
gran delicia, me lo met�a y me lo sacaba riqu�simo comenc� a gemir y a pedirle
mas, estaba tan cachonda que Cesar as� lo sinti� y se vino en un gran orgasmo,
no hacia otra cosa mas que decirme deliciosa y as� me sent�a claro que �l es
tambi�n un delicioso.

POSDATA: desee a Cesar en el mismo momento en que lo vi
porque hacia mucho tiempo que no tenia relaciones y el logro excitarme desde ese
mismo momento, afortunadamente deje atr�s cualquier tipo de pudor que me hubiera
impedido disfrutarlo tanto como lo hice.

CESAR ERES INCREIBLEMENTE DELICIOSO Y UNICO ADEM�S!.