Relato: Deseo y lujuria en el ballet.

Soy primera bailarina en una compa��a de danza, viajamos por todo el pa�s, la vida en los hoteles es de costumbre. Hace un mes Cecilia mi compa�era de cuarto, hacia ejercicios de estiramiento y relajaci�n sobre una alfombra, lo que es muy normal entre nosotras, fui a tomar un ba�o caliente, al salir la mire completamente desnuda, seg�n ella por comodidad, seque mi cuerpo, mi cabello y me puse un cachetero y prendi la tv, mientras cambiaba de canal empece a desviar la vista a Ceci, que bien que hacia las poses, saltos, aberturas, entonces mis ojos se fijaron como sus pesones estaban enormes, duros, bellos, en cada salto eran libres, y al levantar la pierna casi a la altura de su hombro se abrio ante mi esa preciosa vagina de labios gigantescos, rodeada de bellos enmara�ados que me sacudio por completa, intente no mirar me asusto mis pensamientos mi respiraci�n se acelero, �qu� diablos me pasaba? Es mi mejor amiga, debe ser el cansancio, cuando de pronto hizo un giro en el aire, Dios parec�a un �ngel hasta el sudor de su cuerpo parec�a gotas de roc�o sobre la m�s bella rosa, entonces se detubo, me miro, Alina te ocurre algo? Estas p�lida, no supe que decir, �nada, nada�, Como nada! Y salto a la cama, empece a temblar me voltie y ella me sujeto �mirame Alina, mirame�, voltie, no sabia que decirle, nuestras miradas se cruzaron sus ojos bellos, su boca carnosa, sus manos sujetandome fuertemente, desnuda por completo, no poid�a m�s, empece a llorar, entonces me apreto el rostro a sus senos, mientras me acaricio, el tener sus pesones duros y grandes justo a un cent�metro de mi boca me desato, mi lengua como aut�mata recorrio uno de ellos, senti como Ceci se estremeci� toda, su respiraci�n se detubo por un instante, su piel se puso de gallina, esos pesones duplicaron su tama�o, continue lamiendo sus senos incrementando la velocidad y la presi�n mientras mis manos suetaron su firme trasero, subi por su cuello y le di el m�s profundo beso con lengua de mi vida, ya nada me importaba, si terminaba nuestra amistad que as� sea!, pero no dejar�a pasar ese increible momento, entonces reacciono, correspondiendo mi beso, sus manos recorrian mi cuerpo delicadamente baje mi mano a su humeda y caliente intimidad,la acaricie, la incline y empece a lamer tiernamente su vagina, ella gemia de placer, introduje mi lengua al fondo quer�a su cl�toris, su olor de hembra era intenso, se acomodo para el 69 m�s grandioso de mi vida, ning�n chico me hizo sentir esto, todo era delicado hermoso, las dos nos succionamos todo, recorriamos con nuestras manos los traseros, las piernas, senti que me ven�a, acelere el movimiento de mi cadera, ella me sinti� y replic� el movimiento, cuando nos venimos en la boca de la otra, recibiendo el n�ctar desenfrenado de la feminidad absoluta, mi rostro mojado por completo descubriendo un placer que jam�s pense que existiera, nos abrazamos nos besamos y nos quedamos dormidas. Desde aquel d�a ella se ha convertido en mi raz�n de ser en mi due�a y yo su esclava nos amamos en cada viaje, y en los ricones del teatro de nuestra Compa��a, en cada lugar que permita a dos bellas mujeres romper el tiempo y llegar a la eternidad.

Besitos a todos,

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