Me llamo Alex, y les voy a relatar mi primer encuentro gay.
Ten�a dulces 15 a�os

Acto tercero

Ramiro acerc� la mesita baja de vidrio y se sent�, colocando
sus rodillas entre mis piernas que colgaban del sill�n y su rostro apuntando
directamente a mis blancas nalgas. Solo escuchaba su respiraci�n fuerte y
profunda como si estuviera en trance. Yo ten�a un espejo grande frente a m� y me
ve�a con medio cuerpo apoyado en el respaldo del sill�n, con mis peque�as tetas
grasosas colgando y mi espalda blanca, con algunos vellos rubios recubri�ndola,
que finalizaba en mi cola gordita y ah� detr�s de esa imagen estaba �l, con sus
ojos verdes brillosos enfocados en mis nalgas y una sonrisa lujuriosa que
resum�a lo que estaba pensando y sintiendo.

__ En el auto el otro d�a no pude contemplar lo bien que
hubiese querido tu cuerpo pero ahora veo porque realmente me calientas, dijo con
vos pausada y grave.

Y continu�, __ con una foto tuya en esta posici�n podr�a
pajearme todos los d�as pero teni�ndote aqu� en vivo y en directo y con la
excitaci�n que me produces, se me ocurren mil cosas para hacer y no puedo elegir
ninguna para comenzar.

Su voz me parec�a totalmente sincera y eso me excit� a�n m�s,
derrumbando todo tipo de barreras y dudas que hubiese tenido, asi sent� su mano
acariciar mis nalgas y eso me produjo un estremecimiento que me hizo temblar
todo el cuerpo. Ante cada caricia mis peque�os y suaves vellos que rodeaban mis
nalgas se irguieron como si una corriente el�ctrica cruzara mi piel. Era un
temblor de fr�o y calentura al mismo tiempo, esto hizo que apretara mis nalgas
endureci�ndolas por la contracci�n de los m�sculos y una peque�a gota de l�quido
seminal sali� despacio de mi pene d�ndome y haci�ndome sentir algo parecido a un
orgasmo pero sin eyacular. Un suspiro largo y primitivo sali� de mi boca como
d�ndole las gracias por lo que dec�a y me hac�a sentir.

__ �Qu� es lo que vez? Le pregunt� sin pensarlo bien pero con
la clara intenci�n de inducirlo a que hablara ya que sus palabras me hac�an
calentar m�s.

__ �Qu� es lo que veo?. Veo el placer que me vas a dar. Veo
dos nalgas blancas y gordas pero no fofas, suaves con algo de vello rubio que
solo te pod�s dar cuenta cuando las acaricias. Veo al final de tu raya tus
test�culos peque�os recubiertos por unos pelitos rubios y sobre ellos tu ano
protegido por unos pelos m�s largos y por tus gorditas nalgas. Acto seguido
sent� como sus manos separaban mis cachetes mientras �l segu�a su descripci�n.

__ Veo tu peque�o ano, un poco enrojecido todav�a, producto
de tu primera vez, rodeado de algo de bello oscuro que continua hasta la base de
tus test�culos. Dijo con una voz fuerte que quer�a ocultar su profunda
excitaci�n.

Sent� como su lengua recorr�a todo el largo de mi nalga
derecha y terminaba esta excursi�n con un mordisco que hizo que sacudiera mi
cola como d�ndole a entender que me hab�a dolido pero creo que �l entendi� eso
al rev�s y prosigui� su trabajo de lamidas y mordisquitos.

Las caricias se suced�an una detr�s de otra y yo estaba
recibiendo cada andanada de placer en esos momentos hasta que sent� un chirlo
(nalgada) en un momento y despu�s m�s caricias y despu�s otro chirlo.

__ Mmmmm. �C�mo me gusta!. Dijo mientras apretaba y
pellizcaba mis carnosas nalgas y volv�a a darme chirlos suavecitos y otros m�s
fuertes.

Sus dos grandes manos tomaron fuertemente cada una de mis
nalgas y las abrieron, esa acci�n hizo que parara a�n m�s mi cola y mientras
suspiraba por las caricias que me estaba gozando sent� su lengua afilada y
h�meda rodear los pliegues de mi ano, mmm... �qu� locura! y una gota de semen se
desliz� despacio por mi pija y un jadeo bien fuerte se me escap� de la boca.
Esto hizo que Ramiro comenzara a penetrarme con su lengua y yo me relajara
deseando que su lengua entrara y comenzara a jugar dentro de mi recto pero mi
ano no pod�a dilatarse m�s y la espera solo hac�a que me calentara como nunca.

La comida de culo que me hizo dur� varios minutos y cuando no
aguant� m�s baj� mi mano a mi pija y comenc� a pajearme cosa que �l impidi�
sac�ndome la mano y dici�ndome que esperara, que aguantara un poco m�s.

Ramiro detuvo su faena ling��stica y me hizo acostarme boca
arriba en el sill�n. Me mir� de p�es a cabeza, se desabroch� el pantal�n y se lo
quit�. Su pija estaba que estallaba dentro de su slip y una aureola h�meda
marcaba el lugar donde seguro se encontraba su cabeza, qued� hipnotizado viendo
esa pija que hac�a unos d�as me hab�a perforado y desvirgado. Se quit� la ropa y
despacio se bajo el slip dej�ndome ver y gozar con cada movimiento el surgir de
su gran pija. Se quit� el slip y me lo coloc� en la cara dej�ndome oler su dulce
aroma a semen, entonces se arrodill� coloc�ndose a ambos lados de mi cabeza
mir�ndome la pija, tom� su pene lo paje� un poco y se empez� a tumbar apuntando
su garrote hacia mi boca que ya estaba abri�ndose. Sent� como su cabeza entraba
en mi garganta d�ndome arcadas pero inmediatamente subi� un poco la pelvis
dej�ndome espacio para moverme. Me com� su pija ya bien mojada degustando su
salado semen y lamiendo con fruici�n su cabeza mientras sus huevos chocaban
contra mi nariz. Alc� los ojos y vi su ano peludo, rodeado de un vello negro
azabache as� que saqu� su pija de mi boca y dirig� mi lengua a su culo. Le abr�
los cachetes con ambas manos y di una lamida como si fuera un pintor con una
brocha, desde la base de sus test�culos hasta arriba de su oscuro agujero; era
un gusto �cido y dulz�n a vez, pero muy rico. Esta vez baje mi lengua y me
dediqu� en atender y saborear este nuevo sabor que descubr�a, comi�ndome con
devoci�n su hermoso agujero. Mientras estaba atendiendo su ano, sus huevos y su
pija, �l no perd�a tiempo y me empez� a dar una mamada de campeonato haci�ndome
ver el cielo de los calentones. Como sabr�n las atenciones con que me hab�a
agasajado Ramiro anteriormente hicieron su mella y con solo unas cuantas
chupadas y sacudidas sent� que me ven�a. Mi cuerpo se puso tenso, inmediatamente
abrac� a Ramiro de la cintura sub� mi cabeza metiendo mi nariz en su ano y di un
grito por cada chorro de leche que me sali�, en mi �ltimo trallazo de semen me
relaj� por completo y saqu� mi nariz de las puertas de su culo dando un gemido
largo y agradecido.

Ramiro no hab�a tragado mi leche. Y lo que sigui� fue algo
que hizo que me empalmara de nuevo. Tom� mis dos piernas y las tir� hacia atr�s
casi hasta colocarlas a la altura de mi cabeza, esto hizo que quedara en una
posici�n medio rara m�s bien digna de un gimnasta ol�mpico, con mis rodillas
pegadas a mi pecho y mi cola mirando el techo, bien abierta. Ramiro coloc� bien
sus nalgas en mi cara y casi ahog�ndome refreg� su culo en mi boca y nariz. La
verdad es que no sab�a que estaba sucediendo hasta que sent� que algo l�quido
corr�a por mi zanja en busca de mi ano, el hijo de puta estaba escupiendo mi
semen sobre mi agujero y con ayuda de su dedo lo met�a dentro de m�, � mi propio
semen!.

__ �Qu� linda vista Ale! �Te gusta?, ten�s un culo hermoso,
�sab�s? Si vos quer�s seguro que te voy a ense�ar muchas cosas. Exclam� en voz
alta.

Yo no pod�a contestarle nada porque se me hab�a sentado en mi
cara y como pod�a trataba de lamerle el culo. Sent�a como un dedo se met�a y
giraba dentro de mis entra�as, como me penetraba y mi esf�nter comenzaba a
dilatarse con la ayuda de mi propio lubricante, tratando de abrirse a�n m�s
cuando otro dedo acompa�� esa imitaci�n de una cogida.

Los dedos estuvieron un largo tiempo acomodando mi ano hasta
que Ramiro los retir� y se levanto dici�ndome que lo acompa�ara a su cama. Me
dio la mano y me ayud� a incorporarme gui�ndome hacia su lecho, mientras �bamos
caminando a paso ligero sent�a como me dirig�a con una mano aferrada a mi cola,
cuando llegamos a la cabecera de su cama me empuj� y ca� boca abajo en la cama
con las rodillas a�n colgando, �l se sent� sobre mis muslos y coloc� un
almohad�n bastante grande bajo mi estomago dejando mi cola parada y hacia
arriba, sin mediar nada, aunque no hac�a falta ning�n previo, sent� como su pija
se iba enterrando en mis entra�as. A cada paso sent�a como se abr�a mi recto
acomod�ndose al grosor de tan agradable inquilino. La penetraci�n fue profunda y
lenta, haci�ndome gozar cada cent�metro de esa carne ardiente y h�meda. Era una
barra de hierro ardiente que se hac�a paso sin que mediara ninguna resistencia.
Mis gemidos eran cada vez m�s fuertes y sonoros y se hac�an m�s elevados a
medida que su cabeza perforaba m�s en mi ser. Cuando sent� la mata de vellos
p�bicos en mis nalgas, �l se tom� un momento de descanso dejando que las
contracciones de mi ano le masajearan su pija y los latidos de su pene abrieran
un poco m�s mi recto. Cuando hubo terminado su peque�o reposo sent� como su pija
sal�a hasta casi dejar afuera su cabeza de mi y en un segundo me vi ensartado
con una fuerza sobrehumana; entraba y sacaba su pene de mi culo perfor�ndolo,
cogi�ndolo, foll�ndolo, haci�ndome sentir todo el rigor de esa masa de carne.
Separ� mis piernas para darle lugar a colocar sus rodillas entre ellas y me tom�
de la cintura y con fuerza bombe� y gem�a con furia gritando que maravilla que
era mi culo y ante cada expresi�n me daba una palmada que seguramente estar�a
enrojeci�ndome la piel. Yo no me quedaba atr�s con los gemidos y ante cada grito
que �l emit�a yo le contestaba con uno cuando su pija llegaba hasta el fondo de
mi cola. El bombeo era prodigioso y excitante. Fue tan excitante que en un
momento sent� que acababa y cuando las primeras gotas de semen asomaron por mi
glande una serie de contracciones aprisionaron su pija haciendo mi ano a�n m�s
estrecho. Cuando se dio cuenta que estaba acabando �l apresur� sus movimientos y
derrumb�ndose sobre mi espalda y al grito de un animal en celo comenz� a echar
cantidades de leche dentro de m�. Creo que sent� 5 o 6 chorros que inundaban mis
entra�as con ese l�quido ardiente que me quemaba y hacia gemir de placer. Se
qued� un rato sobre m� como desmayado y yo totalmente en trance no pod�a mover
un solo m�sculo hasta que �l despacio comenz� a incorporarse y sent� como su
pija fl�cida empezaba a salirse de mi culo y como su leche luchaba por
derramarse en el interior de mis muslos. Ramiro se derrumb� a mi costado y
acarici� mi cola introduci�ndome su dedo mayor como queriendo que funcionara
como tap�n, cosa que no funcion� debido a la cantidad de leche m�a y de �l que
ten�a acumulada en m�.

__ Espero que te haya gustado tanto como a m�. La verdad es
que me da mucho placer cogerte y espero haberte brindado lo mismo. Me dijo
mientras se chupaba como goloso el dedo que hab�a introducido en mi cola.

__ Si, me gust� mucho m�s que la otra vez. Le dije cansado y
totalmente relajado.

__ Bueno si vos quer�s podemos hacer esto m�s seguido y
seguro que te voy a ense�ar m�s cosas para hacer. Me dijo con una sonrisa que le
ilumin� su rostro.

__ Hac�s esto muy seguido... digo, �coger con varones?.

__ �Con varones? No, ahora no. Antes si lo hac�a seguido
cuando encontraba a alguien para hacerlo o lo hac�a generalmente con un amigo
m�o un par de a�os menor que yo, con el cual seguimos cogiendo de vez en cuando.
Alg�n d�a te lo voy a presentar, se llama Luis. Y con mujeres si lo hago seguido
ya que estoy casado. Me dijo con una sinceridad que nunca hab�a cre�do que oir�a
de �l.

__ Ahhh. Exclam� asombrado y el ri� ante mi expresi�n de
asombro.

__ �Y vos ten�s alguna novia?. Pregunt� intrigado por saber
algo m�s de m�.

__ Yo... no nunca cog� con nadie salvo con vos y novia si
tuve una, aunque solo unos besos y nada m�s, dije yo avergonzado por mi escasa
experiencia.

__ �As� que sos virgen de adelante tambi�n? Me dijo con
tranquilidad y luego continu�: bueno una virginidad la solucion� y la otra por
ser vos te voy a ayudar.

Yo lo mir� intrigado y �l se par� y se fue al ba�o. Yo segu�a
tumbado en la cama mirando al techo y con las rodillas flexionadas, sintiendo
como el semen se derramaba de mi cuerpo.