Contenido
Esta es una historia SM que contiene los siguientes
elementos: infantilismo, humillaci�n femenina, machismo, autosometimiento,
mujeres en pa�ales, regresi�n mental, degradaci�n personal de la mujer y
dominaci�n sadomaso.
Pr�logo
Esta es la historia de una mujer que embebida en sus
libidinosos deseos masoquistas firma por voluntad propia un contrato para ser
infantilizada, humillada y sometida como esclava sexual, renunciando a sus
derechos como mujer, como adulta y como esposa para ser propiedad y objeto de su
marido. He aqui una copia del contrato legal que Marcela firm� para convertirse
en lo que es actualmente.
Contrato de infantilismo
La dama se notaba algo tensa mientras beb�a su agua mineral
en la cantina del buffet de abogados. Era la quinta botella de litro que beb�a
en las �ltimas dos horas. Pag� su cuenta y se dirigi� de inmediato al toilet.
Ingreso en uno de los cub�culos y procedi� a quitarse la bombacha. Sinti�
enormes deseos de orinar pero se contuvo. Sab�a que deb�a esperar por poco
tiempo m�s. Abri� su cartera y tom� de ella un paquete envuento en pl�stico. Era
una caja de supositorios. Tom� tres de ellos y procedi� a insertarselos en el
ano. No le caus� demasiado dolor pues ya estaba bastante dilatada, ya que horas
antes hab�a su �ltima sesi�n de sexo anal con su marido Raul, el cual si le
hab�a hecho sentir fuertes espasmos de dolor y placer masoquista. Conclu�da la
operaci�n Marcela se subi� la bombacha y se baj� la falda. Procedi� a acomodarse
frente al espejo y retoc� su maquillaje. Quer�a estar con buena presencia para
aquel evento.
Finalmente Marcela entr� en el estudio. Vest�a un elegante
conjunto de raso, juego de falda y blaiser en blanco y una fina blusa de seda
negra. En la sala se encontraban sentados su marido Raul de Marco, la abogada
Alicia Sfender, ex-compa�era suya de trabajo, su hermana Laura Del Rosario y su
ex-jefe Javier Marquez. As� mismo se encontraba all� el juez en la causa y los
testigos secundarios asignados por la corte como era menester en la firma de
todo contrato civil.
Hechas las presentaciones formales, Marcela tom� una copia
del contrato, coloc� su firma debajo de la de los dem�s presentes para sellarlo
y se dispuso a leerlo personalmente como cierre de la operaci�n. Marcela estaba
algo nerviosa pues comprend�a que ser�a el mayor cambio de su vida, pero estaba
intimamente decidida a seguir adelante. Sus deseos sucios y masoquistas
finalmente pudieron por sobre su timidez y su verguenza. De este modo Marcela
comenz� a leer la copia del contrato
"Por la presente las partes que subscriben a saber: yo,
Marcela del rosario de Marco, en adelante la esposa incompetente o tambi�n
Marcela la retrasada y Raul de Marco, conyuge de la primera y en adelante mi
se�or Raul o tambi�n mi marido Raul incurrimos ante la ley en las obligaciones
contractuales a ser detalladas a continuaci�n del denominado contrato de
infantilismo conyugal:
Art�culo 1: La esposa incompetente acuerda con su marido
adulto competente el cambio de ralaci�n marital igualitaria por una relaci�n de
sumisi�n femenina en la cual renuncia a sus derechos como esposa del primero
adquiriendo la calidad de hija menor de edad a cargo de su actual esposo quien
pasa a adquirir los derechos legales de tutor�a y potestad sobre la misma.
Confiere todos sus bienes a su esposo, as� como la potestad d sus hijos.
Art�culo 2: Yo, Marcela la esposa incompetente asumo el
compromiso de renunciar a mi actual empleo laboral, as� como abstenerme de
cualquier oportunidad de empleo futuro, quedando bajo el cuidado econ�mico de mi
marido. As� mismo me comprometo a abandonar cualquier tipo de estudios en curso
y actividades sociales en general.
Art�culo 3: Yo, Marcela la retrasada incurro en la obligaci�n
de cambiar mis habitos de conducta en adelante yendo de mi actual condici�n de
mujer adulta y competente a una nueva instancia en la cual actuar� con la
personalidad de una mujer retrasada mental con una edad psicol�gica no mayor a
los 2 a�os.
Art�culo 4: Yo Marcela la retrasada, para hacer pr�ctico lo
establecido en el art�culo tres me someter� a un proceso de degradaci�n y
humillaci�n bajo las ordenes de mi marido Raul, que es un adulto competente,
qui�n tendr� absoluto control de mi cuerpo y mi voluntad de aqu� en mas seg�n se
detalla en los anexos siguientes:
Anexo A: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato no volver� a acudir jam�s a un sanitario p�blico ni
privado para hacer mis necesidades fisiol�gicas a saber mis orines, en adelante
pis o pichi ni mi materia fecal, en adelante caca, caquita o mierda., relegando
dicha actividad a lo establecido en el siguiente anexo.
Anexo B: Yo Marcela la esposa incompetente, a partir del
momento de la firma del presente contrato nunca me quitar� la ropa para hacer
pis ni caca. Comenzar� ha hacerme pis y caca encima, mojando y ensuciandome la
ropa interior que lleve puesta, cualquiera fuese.
Anexo C: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato no volver� a hacer ning�n intento de contener el pis
o la caca voluntariamente, en cambi� dejar� que mi vulva y mi recto fluyan sus
cochinos excrementos sin control haciendome todo encima como una bebita
retrasada.
Anexo D: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato me someter� a todos los tratamientos f�sicos y
psicol�gicos que mi marido Raul considere conveniente seg�n su criterio personal
para volver atr�s el control de mis esf�nteres y alcanzar un estado de absoluta
incontinencia, similar al de los bebes. Tales tratamientos pueden incluir el uso
de cintas hipn�ticas, enemas, administraci�n exesiva de diur�ticos, etc.
Anexo F: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato comenzar� a escuchar cintas hipn�ticas a discreci�n
de mi Marido Raul para reducir paulatinamente mis facultades mentales y
experimentar una regresi�n infantil. Dichos procesos me llevar�n a ir cambiando
paulatinamente mi conducta, desde una mujer adulta de 37 a�os, a una jovencita
de 22, una colegiala de 15 a�os con problemas de incontinencia, una ni�a de 10
a�os, etc. hasta alcanzar la inmadurez mental de una bebe de 2 a�os. Ir�
olvidando mis aptitudes profesionales, mi capacidad de expresarme como adulta,
etc.
Del mismo modo me someter� a tratamientos de hipn�sis para
reducir ciertas facultades f�sicas propias de una mujer adulta, como por ejemplo
perder la capacidad de ponerme de pie y tener que volver a caminar a gatas.
Anexo G: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato renuncio al derecho a usar bombachas, asi mismo
tangas, bikinis o ningun otro tipo de ropa interior femenina para mujeres
adultas. En adelante usar� siempre pa�ales como una retrasada que se hace pis
encima. No usar� otra bombacha mas que la bombacha de goma por encima de mis
pa�ales. As� mismo y por razones de discreci�n Raul se reserva el derecho de
hacerme usar prendas opcionales como bombachitas de entrenamiento o pads de
incontinencia debajo de una bombacha de mujer adulta.
Anexo H: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato nunca podr� quitarme ni cambiarme los pa�ales por mi
misma ya sea estando limpia y seca o cuando me haya hecho pis o caca encima.
Dicha tarea es derecho exclusivo de mi marido Raul, quien ser� el �nico
autorizado a cambiarme loss pa�ales, a limpiarme la vagina y el ano (en adelante
la concha y el culo) y a ponerme talcos y aceites para que no me paspe.
Anexo I: Mi marido Raul se reserva el derecho a demorar mis
cambios de pa�ales cuando lo crea conveniente, a modo de castigo o para
exhibirme publicamente y humillarme. As� mismo se reserva el derecho de
cambiarme los pa�ales en p�blico cuando lo crea conveniente para humillarme
delante de terceros.
Anexo J: Mi marido Raul se reserva el derecho de permitirme
usar bombachas de algod�n o lycra ocasionalmente, con el prop�sito de hacerme
notar mi progresiva incontinencia al momento de mojarme o cagarme encima as�
como para dejarme expuesta con la bombacha cagada y meada delante de terceros
con el prop�sito de humillarme como adulta y como mujer, denotando mi
incapacidad para seguir usando estas prendas.
Anexo K: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato contraigo la obligaci�n de desarrollar ansiedad
oral, sintiendo la necesidad de volver a usar chupete y a tomar cualquier bebida
con biber�n. Una vez hecho esto no podr� quitarme el chupete de la boca, excepto
para tomar el biber�n, comer mi palilla o chuparle la pija y tragarme la leche
de mi marido.
Anexo L: Yo Marcela la retrasada, a partir del momento de la
firma del presente contrato comenzar� a ser alimentada con comida para bebes y
biberones, quedandome prohibido comer cualquier otro tipo de alimentos, a no ser
por determinaci�n expl�cita de mi marido Raul.
Art�culo 5: Yo Marcela la retrasada, reservo a mi esposo Raul
el derecho de humillarme y denigrarme de todas las maneras que el considere
conveniente, para demostrarme su superioridad y mi denigrante condici�n de
esclava sumisa y retrasada tanto en p�blico como en privado, como se detalla en
los anexos a continuaci�n:
Anexo A: En lo referente al seno familiar, yo Marcela la
retrasada renuncio a la potestad de nuestros dos hijos, Mart�n y Ezequiel
quienes quedan bajo la tutela exclusiva de mi marido Raul. Me comprometo a
asumir en nuestra casa el rol de hija de mi esposo. Raul se reserva el derecho
de informar a mis hijos del presente cambio, haciendoles saber que su mama es
una retrasada mental que se hace pis y caca encima, as� grandota y mayor como
es, permitiendo que mis propios hijos se burlen de mi e incluso haciendo la
situaci�n aun mas humillante al hacer que mis propios hijos me cambien los
pa�ales a mi, su madre cuando �l lo considere oportuno, exhibiendome delante de
ellos sucia, desnuda con la concha y el culo al aire, cagada y meada como una
bebe y mentalmente incompetente. Raul tomar� como nueva esposa a cualquier mujer
que desee, quien se divertir� haciendome sentir arrebatada y desplazada. Deber�
llamarla Mama y adem�s ella ocupar� el lugar que me crresponde en mi vida sexual
como esposa, quedando yo relegada a usar pa�ales y no tener mas sexo, excepto
cuando el lo disponga y con el prop�sito de humillarme de manera p�blica y
privada.
Anexo B: en lo referente a mi cuerpo, yo Marcela la retrasada
renuncio a todos mis derechos y mi libertad sexual como mujer y como adulta,
quedando restringida a la voluntad de mi marido. Mi marido se reserva el derecho
de usar y abusar de mi cuerpo de mujer de la manera que crea conveniente,
disponiendo de mis tres agujeros femeninos a saber, la concha, el culo y la boca
a su antojo. Del mismo modo se reserva el derecho de humillarme durante y fuera
de sus pr�cticas sexuales. Se reserva tambi�n el derecho de cagarme y mearme
encima, como as� tambi�n de ordenar a su futura esposa que lo haga.
Anexo C: en lo referente a mi condici�n de mujer, mi marido
Raul se reserva el derecho de denigrame y humillarme como tal, tanto verbalmente
a traves de comentarios machistas y denigrantes como f�sicamante abusando de mi
cuerpo. Por ejemplo cogiendome por el culo mientras me cambia los pa�ales cuando
estoy toda sucia y meada, diciendome que mi concha huele mal, que no soy
suficientemente mujer para el porque me hago pis encima, que soy una asquerosa
que siempre huele a mierda encima, que las mujeres somos unas putas sin remedio
con tres agujeros dise�ados para dar placer al var�n, etc. Recordandome as�
mismo que las mujeres adultas no necesitan pa�ales como yo, que soy una
profesional incompetente que nunca hice bien mi trabajo, que nunca fui capaz de
sostenerme en pie, que as� como estoy no valgo como esposa y como madre, etc.
As� mismo se reserva el derecho de conseguirse otras mujeres para reemplazarme
como esposa.
Anexo D: en lo referente a mi vida social, mi marido Raul se
reserva el derecho de hacer p�blica mi situaci�n delante de todos mis amigos,
familiares, conocidos y ex-compa�eros de trabajo por todos los medios que el
crea conveniente, a saber, exhibiendome personalmente delante de ellos en
pa�ales y vestida como una bebita, cambiandome los pa�ales delante de todos para
que a mis 37 a�os de edad me vean desnuda con la concha empapada de orin y el
culo lleno de mierda y me pierdan completamente el respeto. A si mismo
divulgando mis fotos y/o videos en internet para que sea verguenza de todos en
cualquier parte del mundo.
Anexo E: en lo referente a la maternidad, ya no estar�
mentalmente apta para ser madre. Sin embargo Raul se reserva el derecho de
embarazarme las veces que el crea conveniente. No obstante la potestad de
nuestros futuros hijos le corresponder� exclusivamente a �l, dado que yo soy una
incompetente con la una madurez inferior a nuestro hijo recien nacido. Deber�
reconocer a cualquier futuro hijo m�o como mi propio hermano. Al momento de
parir ser� conducida a la sala de partos en pa�ales y estar� sucia y orinada
cuando me desvistan para dar a luz. Al nacer mi hijo deber� reconocerlo como mi
hermano recien nacido y durante los d�as que permanezca en la maternidad
internada hasta que tenga apta la concha deber� estar atendida en la guarder�a
con mi hijo y los demas beb�s, atada y amordazada en una cuna y por supesto que
en pa�ales.
Art�culo 6: yo, Marcela la retrasada ante todos los presentes
al momento de leerse este contrato reconozco p�blicamente mi aceptaci�n del
mismo para satisfacer mis deseos masquistas. Reconzco as� mismo mi
incompetencia, mi ineptitud, mi falta de seguridad y de respeto por mi misma, mi
incapacidad para actuar como una persona adulta y responsable y mi necesidad de
ser tratada como una bebita de 2 a�os que usa chupete y se hace todo encima. As�
mismo reconozco haber sido siempre una incompetente en mi vida profesional como
abogada; de haber sido una mala esposa y una puta libidinosa, de haber sido una
madre in�til e irresponsable incapaz de criar a sus hijos convenientemente. Doy
constancia de mi merecer el trato que recibir� de aqui en mas y de haber
decidido por mi misma esta forma de vida como metodo para mantener mi matrimonio
y para realizarme plenamente como la mujer puerca y masoquista que soy.
Art�culo 7: yo, Marcela la retrasada leer� este contrato
personalmente pasando la mayor verguenza de mi vida delante de la escribana y
los abogados de ambas partes, as� mismo siendo testigos mi hermana Laura y mi
amiga la dra. Alicia Sfender, quien ha sido hasta el momento mi socia en el
estudio jur�dico donde ejerc�a como abogada.
Art�culo 8: el presente contrato se har� efectivo al
completarse la firma del mismo por las partes interesadas y los abogados de
ambas partes, mas la clausula estipulada en el siguiente anexo:
Anexo 8A: para sellar definitvamente este contrato, al
momento de producirse la firma del mismo, yo Marcela la retrasada anuncio
publicamente haberme hecho pis y caca encima mientras le�a el mismo y doy paso a
levantarme la pollera para ense�ar delante de todos ustedes mi bombacha mojada y
sucia y permitirles sentir el olor asqueroso que tengo encima. As� mismo me bajo
delante de ustedes la bombacha para que me vean desnuda con la concha y el culo
al aire como una bebita, siendo yo actualmente una grandota boluda de 37 a�os.
Finalmente me pongo a gatas y comienzo a llorar como una nena para que mi marido
Raul me ponga los pa�ales mientras todos las mujeres presentes se indignan por
la manera en que denigro mi propio sexo y los hombres se burlan de mi."
Concluida su lectura Marcela comenz� a llorar como una nena
mientras su Marido proced�a a limpiarle el culo y la concha para despu�s ponerla
en pa�ales. Marcela estaba extasiada por la verguenza y la humillaci�n que
estaba comenzando a recibir y sab�a que era s�lo el principio. Finalizada esta
operaci�n se abonaron los honorarios jur�dicos y la pareja se retir� a su casa,
donde Marcela comenzar�a una nueva vida convertida en una infeliz esclava
infantilizada, tal cual hab�a sido su propio deseo.
Continuar�...
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