Comenc� a hablar con �l a trav�s de una p�gina de contactos.
Tambi�n era bisexual aunque a �l le iba m�s ser activo, as� que enseguida
congeni�mos. Tras calentarnos v�a email acerca de lo que nos gustar�a hacer,
decid�mos por f�n quedar un d�a para conocernos. Qued� en venir a mi casa una
tarde. Ninguno de los dos ten�amos experiencia, as� que en un principio s�lo
�bamos a hablar y, si surg�a algo, puede que intent�ramos practicar alg�n juego
de los que hab�amos hablado por email.
Al f�n lleg� a casa, tras estrechar nuestras manos pasamos al
sal�n y empezamos a hablar. En un momento nuestra conversaci�n se desv�o hacia
el sexo. El sab�a bien por mis emails que lo que m�s me pon�a era que me tratara
como a una zorra, totalmente sumisa para �l, as� que el coraz�n se me aceler�
cuando me dijo "�Quieres hacerme una paja para empezar?". Yo sonre� y le dije
que por supuesto, que estaba deseando verle y tocarle la polla. Se abri� el
pantal�n y me ense�� su verga, medio erecta. Era normal, m�s cabezona que la
m�a. Alargu� mi mano para tocarle y se la agarr�. Era una sensaci�n extra�a pero
muy excitante, el tener una polla que no era la m�a en la mano, dura, caliente,
suave... Comenc� a subir y a bajar, masturb�ndolo suavemente. El empez� a
decirme "Te gusta mi polla, �eh, putita?". Yo dec�a que si, absorto,
contemplando su polla creciendo en mi mano.
Le masturb� durante unos minutos, hasta que no pude m�s y le
dije "Quiero chup�rtela, por favor, d�jame com�rtela". Estaba claro que no se
iba a negar a una invitaci�n as�, por lo que me dijo "Esp�rate, voy a quitarme
la ropa y a ponerme un cond�n". Yo hice lo mismo, aunque no me puse goma. Se
sent� de nuevo en el sof� y yo aprovech� para subirme encima. Era excitante
notar su cuerpo roz�ndo el m�o. Dos hombres juntos, bes�ndose, sus cuerpos
toc�ndose. Not� su verga junto a la m�a y me pus� muy, muy cachondo. Yo estaba
lanzado, as� que baje chupand�le por el pecho, el ombligo, hasta llegar a su
rabo. Con la lengua lo recorr�, jugu� en su punta aprentado bien la lengua para
que lo notara a trav�s del cond�n. Baj� hasta sus huevos y me met� uno en la
boca, lamiend�lo, jugando con su bola interior. El gem�a y se retorc�a de gusto
"Asiiiiii, c�mete mi polla, te gusta verdad".
Yo gem�a de gusto y m�s que gem� cuando decid� meterme su
polla hasta la garganta, apretando fuerte los labios y moviendo la lengua dentro
de la boca para darle el m�ximo placer posible. �l me agarr� del pelo para hacer
que mis movimientos fueran m�s brusocs, levantando el culo para clavarme m�s
rabo en la boca. Yo sub�a y bajaba la boca, chupando, subccionando todo lo que
pod�a, haci�ndole retorcerse de placer. En un momento dado sus gemidos
se hicieron m�s profundos y sus movimientos se aceleraron.
Comprend� que iba a terminar. Yo estaba loco de gusto por comerme al f�n una
polla as� que, loco por la pasi�n, le quit� el cond�n. Quer�a tragarme su semen,
que se corriera en mi garganta y me llenara la boca con su lefa. Al principio se
neg�, no quer�a hacelo sin cond�n, pero cuando me met� su pene de nuevo en la
boca y empec� a mamar, no pudo resistirse. Me agarr� de nuevo del pelo y apret�
mi cabeza contra s� hasta que polla entr� en mi garganta. Lanzando un grito de
gusto empez� a correrse en mi boca. Yo notaba los chorros de su semen llenarme,
calientes, salados y espeso... deliciosos. Tragaba todo lo que pod�a,
absorbiendo, succionando, intentando que me regalar� hasta la �ltima gota de su
semen. Su corrida fu� larga y salvaje, se notaba que �l ten�a tantas ganas como
yo. Cuando termin� segu� lamiendo su pene, recogiendo las �ltimas gotas que
sal�an, lamiendo mis mejillas para comerme lo que hab�a resbalado fuera de mi
boca. Me qued� de rodillas besando su pene, volvi�ndolo a chupar, ador�ndolo. En
mi polla, tiesa como un palo, asomaba una gota de l�quido preseminal. No hab�a
llegado al orgasmo f�sico, pero si al mental.
Se recuper� poco a poco de la buena corrida que le hab�a
procurado. "Vamos, quiero verte hacer algunas de las cosas que me has contado
por email", me dijo.
Yo obedec� sumiso, encantado de qu� por f�n se cumplieran mis
sue�os mas cerdos.
Fu� a la nevera y eleg� una zanahoria bastante gruesa. No era
como una polla, pero si bastante hermosa. La lav� bien lavada y fu� a mi
habitaci�n, d�nde �l
me estaba esperando fumando un cigarro en la cama. "Venga,
ense��me lo puta viciosa que eres", me dijo. Cog� un bote de crema corporal de
la mesilla y me sub� a la cama y me puse de espaldas a �l, con el culo en pompa,
mostr�ndoselo, y la cara apoyada en la cama. Me puse crema en los dedos y me
met� uno en el culo. �l apag� el cigarro y observaba la escena con deleite.
Dirigi� la mano a su poya y comenz� a mene�rsela. Yo me met�a el dedo en el ano,
mientras con la otra mano me separaba las nalgas para que me viera mejor. Pronto
fueron dos los dedos que me met� en el culo, retorci�ndome de gusto. Cog� la
zanahoria y le puse algo de crema en la punta. Comenc� a pas�rmela por el
agujero, mientras dec�a "as�, as� quiero que me metas tu polla". Dirig� la punta
hacia mi ano y comenc� a met�rmela. El ya ten�a su polla bien dura y se la
meneaba con gusto y cara de cerdo, disfrutando del esp�ctaculo. Yo cada vez
met�a un poco m�s de la zanahoria en mi culo, tal y como hab�a hecho cien veces
a solas. La met�a y la sacaba d�ndome gusto, moviendo el culo hacia atr�s, m�s
que nada para excitarlo. Estuve un buen rato as�, metiend�mela, hasta que mi
rabo estaba apunto de estallar. En ese momento el cogi� la crema y se unt� un
poco en la punta del rabo. Se pus� de pie y me dijo "Ahora vas a saber lo que se
siente con una polla dentro". Saqu� la zanahoria y me separ� el culo, abri�ndolo
bien. Yo deseaba aquella polla en m�, quer�a ser follado, que me penetrara y me
llenar� de pene.
Dirigi� la cabeza de su cipote a mi culo e hizo fuerza.
Gracias a mi masturbaci�n el ano estaba dilatado, pero a�n as� el dolor fu� muy
intenso. La polla se me baj� al instante. Pero �l no par�, sigui� embistiendo,
meti�dome un poco m�s cada vez. Sacaba y met�a, provoc�ndome un ardor en el culo
que jam�s hab�a sentido.
Pero no s�lo era dolor, tambi�n hab�a placer. El placer de
ser pose�do. Pronto not� sus huevos chocando con mi culo, la ten�a clavada hasta
el fondo. Ahora s�, fu� la se�al de que lo peor hab�a pasado. El dolor fu�
mitig�ndose, transform�ndose en gusto. Sus embestidas se aceleraban, cada vez
que su pene entraba dentro de m� yo apretaba el culo para notarlo mejor. El
gusto crec�a, me agarr� el pene y comenc� a masturbarme. Me estaba follando como
a una perra, agarr�ndome de las caderas y embistiendo con todas sus fuerzas,
para abrirme, para reventarme el culo. Yo era suyo, me pose�a, era capaz de hace
cualquier cosa que me pidiera con tal de que me siguiera follando.
Aceler� sus embestidas, gimiendo como un animal. Yo mov�a el
culo, en busca de su polla, aprent�ndolo fuerte para darle m�s gusto. Aull� de
gusto y de repente se qued� quieto. Sus chorros me llenaban el culo, los notaba
en mi interior. Eso fu� demasiado para m�. "Dios, me corro, me corroooo, Dios
que gustooo". Me corr� como jam�s lo hab�a hecho. El orgasmo fu� gigantesco,
nunca me hab�a corrido as�.
Ca� rendido en la cama, con el culo dolorido, con �l gimiendo
a mi lado. Me puso la mano en la espalda y me acarici�.
"Me parece que voy a venir a menudo a t� casa", me dijo. Y yo
no dudaba que iba a ser as�.
Comentarios :
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO