Bab� se hizo amigo m�o en el club. Era uno de los mejores
encestadores de su nivel... y que bien le quedaba el uniforme del equipo!!!
Cuando �bamos a competir fuera de la ciudad, siempre viaj�bamos juntos y casi
siempre nos dejaban en la misma habitaci�n. Bab� ten�a entonces 15 a�itos y yo
ten�a ya casi 18. El tambi�n me admiraba, yo creo que era porque siempre me
sent� como el hermano mayor de los jugadores m�s nuevos y adem�s que siempre los
animaba y estaba bien dispuesto a comprender sus errores.

Todo normal hasta que Bab� se rompi� el brazo derecho a causa
de una ca�da que le fractur� muy feo los dos huesos y tuvo que llevar escayola
por varias semanas.

Fue en uno de esos d�as en que empez� para nosotros una nueva
etapa en nuestra amistad... porque descubrimos sin quererlo, pensarlo ni
imaginarlo siquiera, el placer compartido. Y fue as� la cosa:

Lo pas� a buscar para ir a ver un partido y su madre me
invit� para que al regreso me quedara a cenar con ellos, dada nuestra amistad y
la compa��a que yo le hab�a brindado durante esos d�as del accidente.

Luego de cenar nos metimos a su cuarto y me ense�� unas
revistas porno que ten�a all� escondidas... hablando bajo y ri�ndonos
nerviosamente, las miramos juntos, sentados en su cama, muy pr�ximos uno del
otro. Yo aspiraba el olor de su cuerpo y el leve perfume del desodorante que se
pon�a y eso me puso un tanto inquieto. Adem�s que nos pusimos a hablar sobre la
masturbaci�n y �l me confes� que lo hac�a muy frecuentemente. Pero nada pas�
entonces, aunque s� fue el comienzo de lo que vendr�a despu�s.

Unos d�as despu�s me acompa�� a un partido, llegamos
cansad�simos y yo sin ducharme porque los camarines del cole en que jugamos no
eran nada limpios y prefer� hacerlo en casa.

Al llegar, me tend� en mi cama y al parecer me qued� dormido,
pero despert� de pronto y con un escalofr�o, me levant� para dirigirme al cuarto
de ba�o y Bab� no estaba all�... de modo que cog� la toalla grande y al entrar,
de pronto, lo vi , y la imagen no se me borrar� nunca, con sus shorts y
calzoncillos en las rodillas e intentando pajearse como buenamente pod�a con su
mano izquierda, a causa de la escayola en la derecha...

Me mir�, pero sin extra�eza, m�s bien con naturalidad, dir�a
yo, en cambio a mi el asunto me llen� de inquietud... y no se de que forma lo
mir� que �l se puso a reir... dici�ndome que entrara y cerrara la puerta por si
acaso...

Casi aut�mata, entr�, cerr� y me qued� alelado mir�ndolo...
�l continuaba su maniobra, pero con dificultad y sin m�s me espet�: -ay�dame,
con la otra mano es dif�cil...

Y m�s autom�ticamente aun, si se quiere, cog� su polla y
empec� a hacerle una paja, pero con la cabeza absolutamente vac�a sin poder
fijar ning�n pensamiento... estaba como en el aire...

Mientras yo, alelado, procuraba hacer bien la tarea, �l no
paraba de hablarme... que ten�a dificultad con la otra mano, que si yo lo hac�a
con las dos, que si yo quer�a hacerlo...

Entonces, con una reacci�n m�s instintiva que racional, me
baj� mi propio short y �l empez� con su in�til mano izquierda a hacer lo que
pod�a...

En realidad sus movimientos eran torpes, y cuando acab�
gracias a mi mano, se sent� en el w�ter sudoroso y relajado, mientras yo cog�a
mi propia polla y le daba el trato que necesitaba, delante de �l que me miraba
admirado y anhelante...

Al correrme, me met� en la ducha y tard� en reaccionar. En
realidad vine a hacerlo cuando ya �l se hab�a ido y yo me encontraba en mi cama
sin poder conciliar el sue�o, con pensamientos encontrados sobre las im�genes
que se me repet�an una y otra vez de lo ocurrido.

Al volver a encontrarnos, lo que yo cre�a momento embarazoso,
no fue tal, sino que se podr�a decir que ambos pasamos totalmente por alto lo
ocurrido.

Total que le quitaron la escayola, alguna vez jugamos en el
mismo equipo y otras tantas nos duchamos uno al lado del otro, pero sin que
ocurriera nada fuera de lo com�n, hasta que...

Ten�amos que ir al extranjero a competir con equipos de
colegios de habla inglesa de diversa procedencia que se reunir�an all�, de modo
que partimos euf�ricos. Nos toc� el mismo dormitorio. Jugamos, salimos
vicecampeones, lo celebramos como correspond�a, recibimos muchas felicitaciones,
nos pasearon por la ciudad, nos hicieron regalos, uno de los chicos anfitriones
nos invit� a conocer su familia y nos aprestamos a madrugar y salir a casa al
d�a siguiente.

Y lo mejor de la competencia no estaba planificado... Bab� se
sent� en la orilla de la cama y baj�ndose los pantalones se cogi� la polla y
poniendo los dedos juntos como un canastillo, se la meti� dentro y empez� a
subir y bajar la mano, cubriendo y descubriendo el glande de su prepucio.. yo,
desde donde estaba lo miraba admirado de su concentraci�n y de su capacidad de
abstracci�n de todo lo que lo rodeaba mientras gozaba y disfrutaba del placer
solitario...

No obstante �l estaba plenamente consciente de mi presencia
porque me dijo, como llam�ndome: -ven, ac�rcate... hag�moslo juntos como la otra
vez...

Otra vez volv� a obedecerlo autom�ticamente, sin
cuestionamientos ni reticencias...

Me sent� junto a �l y empec� a hacer exactamente lo mismo...
en realidad su t�cnica era bastante placentera... de pronto se puso de pie y
cogi�ndose el largo, grueso y duro falo en que se le hab�a convertido la polla,
con toda la mano empez� a manipularlo, sob�ndolo atr�s y hacia delante, con
fuerza, y velocidad creciente, haciendo muecas de gozo... le mir� la espalda y
le ve�a el culo como lo apretaba y soltaba d�ndose con ello m�s sensibilidad en
la polla y sin poder evitarlo me puse detr�s de �l y empec� a refregarle mi
polla entre las nalgas cada vez con m�s contacto hasta terminar abraz�ndolo por
la cintura y apret�ndolo contra m� hasta sentir como �l con un gemido, casi un
aullido, se corr�a lanzando en varios escupitajos su eyaculaci�n sobre la cama
de enfrente, que fueron a caer, precisamente sobre mis ropas...

Volvi�ndose hacia m�, me dijo, con seriedad -�quieres
encularme?

No atin� a responder sino con movimientos afirmativos de
cabeza, en ese momento lo ve�a como algo muy apetecible.

Se tir� simplemente en la cama, se abri� de piernas, con
ambas manos se abri� las nalgas y heme all�, mojando lo mejor que pude mi glande
con el mismo l�quido que me sal�a del pene, penetr�ndolo lentamente y poco a
poco.

Era la primera vez que follaba, era la primera vez que lo
hac�a con alguien por el culo, era la primera vez que el placer ser�a para m�
m�s completo que una simple masturbaci�n, sin contar la que hab�amos compartido
con Bub� aquella vez en el ba�o

Recuerdo que la penetraci�n me caus� un goce may�sculo, as�
como el contacto de su cuerpo en mi pecho y el sentir sus nalgas en mi pubis,
duras, prietas y movi�ndose como una gelatina espesa, su piel caliente y suave y
nuestras respiraciones entremezcladas porque �l hab�a depositado la cabeza con
la mejilla sobre la cama y yo la m�a sobre su hombro, con nuestra bocas casi
bes�ndose.

La corrida fue de campeonado... la ayaculaci�n abundante... y
el placer, profundo...

El s�lo gem�a entre, adolorido y gozoso...

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