No ten�amos muchos momentos en los que pod�amos estar juntos.
Adem�s mi abuela empezaba a sospechar algo, le hab�a preguntado varias veces a
que iba a mi habitaci�n durante la siesta. Ella le dijo que el armario de su
habitaci�n era peque�o y que no pod�a meter todo, por lo que los nikys los ten�a
en mi habitaci�n.
Empec� a preocuparme, no ten�a muchas ganas de dar ninguna
explicaci�n a nadie, y menos a mi abuela. Un d�a le coment�:
- Laura, la abuela cada vez nos vigila m�s, en la playa no
nos quita ojo de lo que hacemos. Durante la siesta no deja que cierre la puerta,
es mejor que no sigamos con nuestros juegos.
- El otro d�a en la playa me lo pas� muy bien, me gustar�a
repetir, pero ya no vamos solos a ninguna parte y tienes raz�n en que la abuela
nos est� vigilando muy de cerca. Esperaremos unos d�as, Vale!
Todo volvi� a la normalidad, Laura segu�a entrando a por las
camisetas en la hora de la siesta, pero la cog�a enseguida y se iba. Un d�a vino
con una minifalda muy corta y estando yo en la cama abri� la puerta de la
armario para coger una camiseta, pero esta vez se agach� sin doblar las rodillas
y pude ver su hermoso culo y co�o pues no se hab�a puesto las bragas. Estuvo un
rato con las pierna un poco abiertas para que pudiera ver con tranquilidad. Al
salir me mir� y me sonri�.
Otro d�a mientras se cambiaba el ba�ador en la playa se le
abri� la toalla "accidentalmente" y pude ver sus hermosas tetas y el tri�ngulo
negro de la entrepierna. Antes hacer estas exhibiciones se aseguraba que la
abuela estaba en otro lugar y nadie se diese cuenta. Eran unos segundos muy
emocionantes.
En otra siesta el que le prepar� la sorpresa fui yo. Estando
yo en la cama me masturbe para tener mi polla bien parada y cuando entr� a por
el niky me quit� las s�banas y se la ense��. Ella se puso muy contenta y d�ndome
las gracias se acerc� me la bes�, cogi� la camiseta y se march�.
Una ma�ana me llam� mi abuela:
- Jose, ya sabes que en el pueblo no hay academias. El otro
d�a me coment� la madre de Esther que su hija hab�a suspendido matem�ticas y que
necesitar�a ayuda. He pensado que tu puedes ir todas las tardes una hora a
ayudarle.
- No abuela, yo estoy de vacaciones, ya he estudiado durante
todo el a�o ahora no me apetece seguir trabajando.
- Ya lo s�, pero t� ere un buen estudiante y seguro que le
puedes ayudar. Adem�s la madre de Esther me dijo que te pagar�a algo.
- Pero va a ser un rollo, �a qu� hora quiere que vaya?
- A las tardes, puedes elegir t� si despu�s o durante la
siesta. Adem�s estoy pensando que al ser Laura y Esther de la misma edad tampoco
le vendr�a mal que repasase las matem�ticas.
La idea empezaba a gustarme, por fin podr�amos estar solos,
pero no pod�a ceder tan pronto.
- Eso si que es un rollo, �qu� hago yocon estas dos? Y
mientras mis amigos jugando a f�tbol.
- Tu ver�s que es lo que quieres hacer, pero ya sabes que no
sueles tener mucho dinero para gastar durante los fines de semana, y yo no te
voy a dar m�s.
- Vale, �cu�ndo empezamos?
- Le llamar� esta tarde y pod�is empezar ma�ana.
Al estar tanta gente en casa de mi abuela quedamos que
ir�amos a casa de Esther. A la tarde siguiente fuimos Laura y yo con los libros
de matem�tica. la casa estaba en las afueras del pueblo. Era una villa de dos
plantas que ten�a piscina. A lo mejor cuando tuvi�ramos m�s confianza podr�amos
quedarnos a ba�arnos. En el primer piso estaba el sal�n, la cocina , el comedor
y el dormitorio de los padres. En el piso superior la habitaci�n de Esther, la
habitaci�n de invitados y un estudio, que es donde nos junt�bamos a estudiar.
Nos abri� la puerta la madre de Esther, una se�ora de unos
cuarenta a�os muy sonriente y que agradeci� de coraz�n la ayuda que le estaba
dando. Nos llev� al sal�n y ah� estaba Esther con su padre.
Esther es m�s alta que Laura y est� m�s desarrollada, no
parec�a que tuviese doce a�os. Estaba vestida con un vestido minifalda negro con
lunares blancos, que hac�a resaltar m�s su hermosa figura.
Nos presentamos y sin m�s pre�mbulos nos fuimos al estudio.
Estuvimos una hora sin descanso. La verdad es que le costaba mucho entender los
diferentes problemas. Mi prima Laura comprend�a con m�s facilidad y avanzaba con
mayor rapidez
As� estuvimos durante una semana, al terminar la hora el
padre de Esther nos llevaba al centro del pueblo en coche. En los momentos que
Esther hac�a los deberes me fijaba en ella, era muy guapa y su sonrisa era
preciosa. Las tetas se intu�an muy bonitas debajo de los vestidos o nikys que se
pon�a.
Ella era muy aplicada y se esforzaba mucho a la hora de
trabajar. Yo estaba contento con el trabajo, porque ahora ya pod�a gastar algo
m�s durante los fines de semana. Pero con mi prima no pod�a estar a solas, ya
que el padre de Esther nos acercaba hasta el pueblo y nos junt�bamos con los
amigos.
Pero a la semana y media el plan cambi�. Los padres de Esther
empezaban a trabajar y ya no nos acercaban al pueblo, tendr�amos que ir andando.
Su padre al ver que �bamos a perder bastante tiempo nos dijo que si quisi�ramos
nos pod�amos ba�ar en la piscina, pero siempre despu�s de acabar la tarea.
Quedamos en llevar los trajes de ba�os al d�a siguiente.
La clase de matem�ticas terminaron como era costumbre, y
bajamos a la piscina. Yo me hab�a cambiado el primero y ya estaba en el agua
para cuando llegaron las dos chicas. Laura trajo el bikini de su hermana que
tanto me gustaba. Esther ten�a un traje de ba�o blanco y dentro de �l un cuerpo
que quitaba el hipo.
Estuvimos durante dos horas en el agua, en las guerras que
hicimos Esther se mostr� muy t�mida, pero mi prima y yo aprovechamos para tocar
aquellas partes del cuerpo que m�s nos gustaban.
Al d�a siguiente, al terminar las clases de matem�ticas
Esther dijo que ten�a que seguir estudiando biolog�a, yo le dije que me iba a
dar un ba�o y Laura se qued� con ella. Al cambiarme me acerqu� a la puerta para
oir que es lo que dec�a. Estaban estudiando el aparato reproductor humano.
- Laura esta es la lecci�n que m�s me gusta. Se muy bien
todas las partes de los hombres y de las mujeres.
- Yo tambi�n la teor�a me la se muy bien.
- Si pero la practica es otra cosa - contest� Esther- ya me
gustar�a que en vez de esos dibujos en el libro apareciesen algunas fotos.
- Siempre pasa lo mismo, lo que nos m�s nos interesa lo ponen
con dibujos.
- Has visto a un chico desnudo alguna vez? - Pregunt� Esther
a Laura-
En este momento mi coraz�n dio un vuelco.
- No, contest� Laura manteniendo en secreto nuestros
encuentros, pero ya me gustar�a.
- Me he fijado en Jose, esta buen�simo. Adem�s tienen un
cuerpo de deportista, con muchos m�sculos.
- Ya, pero es mi primo. - le contest� con mucha decisi�n para
que no tuviese ninguna duda.
Me fui a la piscina. Ese d�a no bajaron ellas a ba�arse y
como se hizo tarde nos fuimos mi prima y yo, mientras que camin�bamos hacia el
pueblo hablamos de lo que hab�a escuchado.
- Antes he escuchado la conversaci�n que ten�ais, gracias
Laura por haber dicho que no hab�as visto a ning�n chico desnudo.
- Hicimos un trato y me parece que iba a ser muy embarazoso
el tener que dar explicaciones.
- La verdad es que Esther tiene el mismo problema que ten�as
t�.
- Te atrever�as a quedarte desnudo delante de Esther?
- Me da corte, y adem�s c�mo voy a hacerlo?
- No te preocupes, que eso es cosa m�a.
Al d�a siguiente al terminar la clase de matem�ticas y cuando
ya sal�a para la piscina Laura me llam�.
-Jose, ayer estuvimos repasando Biolog�a y tenemos algunas
dudas.
Esther puso cara de sorpresa pero no dijo nada. Sacaron los
libros de biolog�a y estuvimos un buen rato hablando sobre los �rganos
reproductores.
- Laura viendo que Esther no dec�a nada tom� la iniciativa.
Se�alando un dibujo dijo. Jose en la punta del pene hay como una rajita, pero
aqu� no se ve.
- Si, si quitas la piel se ve la punta que es m�s roja y hay
como una rajita que es por donde meamos.
- �Estos libros son una mierda! �Con estos dibujos no voy a
aprender nada!.- dijo Esther con decisi�n-.
- A mi me pasaba lo mismo, pero �qu� se le va hacer?-
contest� yo-.
- A mi me parece que podemos hacer algo - dijo Laura con cara
de lujuria-
- �Qu�? pregunt� Esther inocentemente.
- Aqu� estamos dos chicas y un chico, para que necesitamos
dibujos si lo podemos ver al natural.
- No se, me da verg�enza, -dije yo disimulando-.
- Laura, yo estoy de acuerdo, pero no se lo tenemos que decir
a nadie Vale! dijo Esther con decisi�n.
- Bueno, Jose, te animas? No vas a tener muchas oportunidad
de ver a dos chicas t� solo!
- Vale! pero quien empieza?
- La duda era del cuerpo de los chicos, as� que empiezas t�.
Las dos se levantaron de la silla y se apoyaron en la mesa
para poder ver mejor.
Yo me puse en la mitad de la habitaci�n, ya estaba muy
excitado, y m�s viendo a las dos preciosidades que ten�a delante. Empec�
quit�ndome las zapatillas, luego el niky
Al llegar al pantal�n las miradas de las dos chicas se
fijaron para ver que es lo que iba a salir. Baje lentamente el pantal�n y sali�
mi pene en todo su esplendor. Me acerqu� a ellas y les ense�� la punta.
- Veis como es? A que se ve mejor que en el dibujo? Ahora os
toca a vosotras.
Ahora era yo el que estaba apoyado en la mesa con el m�stil
bien preparado.
Empezaron por quitarse las camisetas quedando las dos en
sujetador. Se lo soltaron la una a la otra y pude ver dos pares de tetas de lo
mas apetecible. Siguieron con los pantalones qued�ndose en bragas. Al baj�rselas
pude comprobar que Esther ten�a un tri�ngulo de pelos m�s peque�o y cuidado
- Tu tienes menos pelos Esther!
- Si, mi mama me los depila para que no se vean con el traje
de ba�o.
- Me gusta mucho como es, pero quiero ver mejor vuestro
aparato reproductor, - dije "con mucho inter�s cient�fico"-.
Las dos se sentaron en las sillas y se abrieron de piernas.
Cada uno miraba a su centro de inter�s, yo a los labios rosados de aquellos dos
chochos y ellas a mi pene que estaba como un m�stil. No pod�a creer lo que me
estaba pasado, ante mi ten�a a dos chicas muy buenas abiertas de piernas para
que pudiera observarlas bien. Yo estaba muy excitado y comenc� a masturbarme.
Ellas al ver que yo me masturbaba tambi�n empezaron a frotarse el sexo. En un
principio con un dedo pero luego con toda la mano. Cuando estuve a punto de
eyacular, me di cuenta de que iba a ensuciar toda la habitaci�n por lo que me
fui al ba�o y eyacule en el lavabo.
Al volver estaban ellas acariciandose, cada uno a si misma.
Yo me acerqu� para poder ver mejor cuando escuch� el ruido del motor. Regresaron
los padres de Esther. Corriendo me puse el traje de ba�o y ellas se vistieron.
Me dirig�a a la piscina cuando entraron en la casa.
- Hola Jose, hoy hemos salido antes de la oficina.
- Pues nosotros hemos terminado las clases de matem�ticas y
ahora se han quedado repasando biolog�a. Yo mientras iba a darme un ba�o en la
piscina.
- �Crees que aprobar� en septiembre?
- Estudia con mucho inter�s, va por buen camino.
Con la conversaci�n que di a los padres las dos chicas
tuvieron tiempo de vestirse y una vez ordenada la habitaci�n bajar al piso de
abajo.
- Hola, papa, mama. Dijo Esther. Hab�is venido muy pronto.
- Si, adem�s tenemos muchas ganas de ba�arnos. Dejar de
estudiar y nos ba�amos todos juntos.
No se dieron cuenta de lo que hab�a pasado y al anochecer el
padre nos llev� a la casa de mi abuela.
Al d�a siguiente Laura se tuvo que quedar a ayudar a la
abuela, por lo que fui yo solo a casa de Esther.
- Buenas tardes, dije al entrar en la casa.
- Menuda escapada tuvimos ayer, casi nos cogen desnudos a los
tres. Hoy no viene Laura?
- No, ha tenido que quedarse a ayudar a la abuela.
- Bien subimos al estudio y comenzamos?
- Vale!
Al ir ella por delante me pude fijar del hermoso culo que
ten�a. En las escaleras se le ve�an las piernas pero por m�s que lo intent� no
le pude ver las bragas.
- Hoy en vez de matem�ticas podr�amos empezar con biolog�a.
Ayer me qued� con ganas de saber algo m�s.
Me quede con la boca abierta. No cre�a que iba a entrarme
as�. Me mostr� de acuerdo y le pregunt� que es lo que quer�a saber.
- V�monos a mi habitaci�n que estaremos m�s tranquilos.
Al entrar me pregunt�.
- Estar�as dispuesto a ense��rmela otra vez.
- Si pero esta vez ser�s tu la que me desnudes.
Me puse delante de ella, me orden� que levantara las manos y
me quit� el niky. Al soltar la bragueta del pantal�n aprovech� para tocar mi
polla encima del calzoncillo. Yo no dije nada. Ya s�lo quedaba el calzoncillo.
Lo baj� muy lentamente y qued� totalmente desnudo delante de ella.
- Ayer vi como te masturbabas, pero me parece que os gusta
m�s que os masturbe una chica. Diciendo esto cogi� la polla con la mano y empez�
a masturbarme.
Yo para entonces ya ten�a una de mis manos en sus tetas y la
otra debajo de la falda en la h�meda entrepierna.
- Si sigues as� voy a eyacular enseguida, para un poco y
desn�date que yo tambi�n quiero verte.
Se quit� el vestido y quedo s�lo con las braguitas. Se las
baj� y pude volver a ver aquel hermoso cuerpo.
- Yo tambi�n te ayudar� a masturbarte. Nos tumbamos en la
cama. Ella con las piernas bien abiertas y yo con la polla bien dura. As�
estuvimos un rato hasta que empec� a chuparle los pezones, que estaban ya muy
duros. Ella dej� de masturbarme y yo continu� bajando hasta la entrepierna para
poder besar esos labios rojos e hinchados que ten�a. Al tocar el cl�toris con la
lengua ella dio un salto de placer . Estuve un buen rato chupando hasta que un
gritito acompa�ado de un gran temblor en todo su cuerpo me dijo que hab�a tenido
un orgasmo.
Se quedo medio dormida en la cama.
- No pensaba que podr�a pas�rmelo tan bien, ha sido un placer
muy bueno.
- Si pero a mi tambi�n me gustar�a que me la chupases un
poquito.
- No me atrevo, no lo he hecho nunca, no se como hacerlo.
- Piensa que es un chupete y ver�s como te gusta.
- Se puso a de rodillas en la cama, se meti� la polla en la
boca y empez� una mamada impresionante.
- Cuando estuve a punto de explotar, le avis�, saco su boca y
puso un pa�uelo para que no manchara nada. Yo me retorc�a de placer.
Esa tarde no dimos m�s clases.
Al d�a siguiente fuimos otra vez Laura y yo. Nos recibi� en
traje de ba�o.
- Hoy hacemos al rev�s, primero nos ba�amos y luego
estudiamos.
Nos pareci� buena idea. Laura y yo nos cambiamos en la misma
habitaci�n mientras que Esther me miraba con mucho inter�s.
- Hoy la tienes m�s peque�a. A mi me gusta m�s cuando est�
dura y grande.
- Esther -dijo Laura- . Me gusta mucho c�mo tienes arreglado
el pelo de ah� abajo. �Me ayudar�as a depil�rmelo?
- Yo tengo todo el material pero siempre me ha depilado mama.
- Yo me afeito todos los d�as, si te atreves puedo hacerlo
yo.
- Vale! pero con cuidado.
Dicho esto Esther fue al cuarto de ba�o y trajo la espuma y
la cuchilla. Puso una toalla encima de la cama y le invit� a que se tumbara.
All� estaba con las piernas abiertas de par en par y yo unt�ndole espuma.
Aprovech� para pasarle el dedo por la raja y as� lograr un suspiro de placer.
Para ser el primer co�o que depilaba no hab�a quedado tan
mal. Le dej� un tri�ngulo m�s peque�o y mucho m�s sexi que el que ten�a antes.
Al terminar le limpi� con la toalla.
Laura estaba mir�ndose al espejo y qued� muy satisfecha con
el trabajo realizado. Esther de mientras le explicaba la clase pr�ctica del d�a
anterior, y como casi manchamos toda la habitaci�n.
- No es necesario manchar la habitaci�n. Si te tragas todo lo
leche ya no salpica nada.- Le dijo Laura-
- Yo me lo pas� muy bien pero me daba asco.
- Es muy bueno, prueba y ya ver�s!
Dicho esto se baj� las dos tiras del traje de ba�o dejando al
descubierto las tetas, y sigui� hasta quedar totalmente desnuda. Yo para
entonces ya estaba totalmente empalmado.
- Esther, me dejas que te chupe yo? Nunca lo he hecho.
- Vale pero yo mientras tanto se la chupo a Jose.
Laura se tumb� en el suelo boca arriba con la cara entre las
piernas de Esther, que estaba de rodillas junto a mi con la polla en la boca. Yo
de pie mirando todo el espect�culo. Cada uno empez� con su trabajo y para
entonces Laura ten�a una mano en su entrepierna. Yo cerr� los ojos y esta vez no
le avis� que me corr�a. Esther se lo trag� todo y no desperdici� nada.
Al llegar los tres al orgasmo nos tumbamos y quedamos
dormidos.
Esa tarde tampoco estudiamos nada, pero aprendimos much�simo
. Las siguientes tardes continuamos con nuestras clase pr�cticas de biolog�a y
te�ricas de matem�ticas. En Septiembre Esther aprob� con nota las dos
asignaturas que le quedaban.
Mi abuela se fue a vivir a la ciudad con mis t�os y no
volvimos m�s a veranear al pueblo, pero nunca podr� olvidar esos veranos tan
intensos
Juancarretero
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