Relato: Alumno Inteligente
Alejandro es todo un alumno modelo, le gusta la Ciencia y la poes�a, suele ser muy ordenado y respetuoso, es amigable y muy social. Siempre obtiene 10 de calificaci�n en cualquier asignatura, una mente brillante. Siempre lo llevan a la secundaria y van por el sus padres en la salida, aunque no le di clases en los dos a�os anteriores ya sabia de el. Ahora que me toca darle clases de Ciencias puedo reconocer sus habilidades. As� es, soy maestra de Ciencias, tengo 27 a�os, mido 1.59cm, cabello negro, largo, de piel morena clara y ojos verdes, delgada.
Era viernes y sonaba el timbre de salida, yo siempre me quedo a ordenar mi escritorio y dejo preparadas las actividades para el lunes siguiente, por lo que siempre me voy muy tarde, al salir me dirig� a mi auto y pensaba comer algo delicioso cuando en la esquina vi a Alejandro, me acerque a el y desde mi auto le pregunte por sus padres, un poco nervioso me comento que no sabia, le pregunte que si les hab�a llamado y con un poco de verg�enza me comento que no tenia celular y tampoco dinero, entonces le ofrec� mi tel�fono, el llamo a sus padres y luego de un rato me dio el telefono pues sus padres pedian hablar conmigo, habian tenido un choque, estaban bien de salud pero con quien tuvieron el accidente no, necesitaban tiempo, entonces me ofreci a llevarlo a su casa, pero estos me dijeron que las llaves las tenian ellos, entonces les mi direccion y les ofreci llevarlo a mi casa, ellos me lo agradecieron, Alejandro subio a mi coche y nos dirigimos a comer, despues de ahi lo lleve a mi casa, le ofreci ver television pero dijo que no le gustaba, entonces le dije que podria ayudarle con la tarea y le parecio buena idea, al termino no sabia que mas ofrecerle, entonces el bostezo y le ofreci dormir, el accedio asi que lo lleve a mi habitaci�n.
Yo vivo sola y aunque tengo dos habitaciones solo una tiene cama y muebles, la otra la ocupo de almacen, esa noche tenia una salida con mis amigas, entonces aproveche que Alejandro estaba dormido y decidi ba�arme, no acostumbro cambiarme en el ba�o pero al estar mi alumno ahi accedi, tome la toalla y mi ropa, tome el ba�o rapidamente pero cuando sali, solo vi la toalla, me extra�o pues estaba segura que habia metido mi ropa al ba�o, me envolvi en la toalla y sali de puntillas a la habitacion, mi ropa estaba en la cama, con sigilo me acerque a ella, entonces Alejandro se desperto y rapidamente se sento en la cama, me miro de arriba a abajo, con pena le dije que lo sentia pero el sonrio, me acerque a la ropa para tomarla pero entonces el fue mas rapido y la tenia entre sus manos, ese acto me extra�o, el sonrio.
- Maestra, no le habia dicho lo bien que se veia en la graduaci�n del a�o pasado, su vestido entallado la hacia ver muy guapa - yo me paralice, no sabia que decirle y simplemente le dije gracias, entonces el se levanto con mi ropa y se acerco a mi.
- �Puedo ayudarle? - dijo �l
- �A cambiarme? - rei - no gracias lo hago yo.
- Jam�s he visto a una mujer desnuda - dijo con un tono taciturno
Yo trague saliva, el chico era guapo y muy encantador, pude notar como me miraba, vi saborear sus labios y su mirada no se apartaba de mi cuerpo, no supe porque pero eso me sorprendio y me excito. Me acerque a el, tome la ropa de sus manos, entonces el la tiro al otro lado de la cama, era mas alto que yo y levante mi vista con un poco de enojo, estaba por reprenderlo cuando tomo mi mu�eca y me jalo hacia la cama, caimos juntos en ella, entonces el me giro y quedo encima de mi, mi respiraci�n era muy rapida, estaba asombrada por la forma de actuar del chico, sin embargo seguia exitandome cada vez mas. El se acerco a mi boca y me beso, yo no le correspondi al principio, pero hacia tiempo que no tenia pareja que me deje llevar, era exitante lo que podria pasar y eso me puso a mil. Despues torpemente me quito la toalla, me quede completamente desnuda, entonces el se levanto y me miro.
Como si fuera un juguete, algo nuevo, sus ojos se iluminaron y esa forma de mirarme termino por encender mi chispa del deseo, le sonrei. - �Te gusta lo que ves Alejandro? - el embobado solo asintio, pude ver como en su entrepierna algo despertaba, me excite demasiado, entonces me acerque a el y poco a poco empece a desnudarlo, el se dejo llevar por mi, cuando estuvo por completo desnudo pude ver su pene, era grande acerque mis manos a el y comence a acariciarlo, empece a masturbarlo y en muy poco tiempo se vino, en menos de un minuto, el se sonrojo y pude ver como tenia verguenza pues se puso rojo, no sabia como disculparse, yo le dije que no pasaba nada, entonces el me dijo que era virgen, que era la primera vez que veia una mujer desnuda y que yo era la primera mujer que lo tocaba, incluso que lo besaba, eso me sorprendio un poco y me hizo sentir mal, pero a la vez me exitaba saber que el ni�o no tenia experiencia alguna y quien mejor que su maestra para ense�arle un poco sobre el sexo.
Le acaricie la mejilla, segui masturbando su miembro, entonces me puse de rodillas y meti su pene en mi boca, el solto un suspiro y luego un gemido de placer, no tardo mucho en ponerse erecto de nuevo, yo segui metiendo su pene en mi boca y el disfrutaba, le hice que se viniera en mi boca, el gemia y yo me bebia hasta la ultima gota, con una sonrisa perversa le mire, le gui�e el ojo, entonces me levante y le hice que me tocara todo el cuerpo con sus manos, sus movimientos eran torpes, entonces le hice incarse y yo me sente en la cama - Es tu turno Alejandro, veamos que puedes ofrecerme con tu lengua - el con nerviosismo se acerco a mi, primero besaba mi vagina con ternura, luego poco a poco fue introduciendo su lengua en mi, cuando tocaba mi clitoris me hacia estremecerme pues sus movimientos eran lentos, luego de un rato le pedi que parara, me levante entonces y le hice acostarse en la cama, yo me subi arriba de el.
El toco mis pechos, sus manos torpes me apretaban demasiado los pezones, pero extra�amente me gustaba, yo acariciaba su pene entonces sabia que habia llegado el momento de llevarme su virgnidad, prepare su pene erecto ya para dejarme caer en el. Lentamente lo introduci y pude ver en su cara que disfrutaba de ello, poco a poco empece a cabalgarlo, con movimientos suaves disfrutabamos juntos, entonces el se levanto y quedamos abrazados, pero seguia subiendo y bajando por su pene, era delicioso lo que sentia, el me besaba el cuello, me acariciba la espalda, los pechos, luego senti sus labios mas feroces besandome el cuello, la oreja, las mejillas y mis labios, no paso mucho tiempo cuando se vino de nuevo muy pronto, se separo de mi de forma rapida y torpe. Estaba asustado porque se habia venido dentro de mi, yo al contrario, me habia quedado con ganas de mas, le tranquilice y le dije que no habia problema que podia tomarme una pastilla de emergencia. El se sintio mas relajado.
- �Te gusto Alejandro? - le pregunte cuando intente levantarme a buscar mi ropa, pero luego el me tomo de las mu�ecas.
- Me gusta usted maestra, mucho - luego bajo la mirada.
- �Que te pasa? - entonces el mordio su labio.
- Quiero mas - dijo el, yo no pude evitar soltar una carcajada, le bese con ternura la mejilla y le revolvi el cabello, me acoste en la cama y tome su mano.
- Ven aqui Alejandro, es tu turno de estar arriba de mi - el como el ni�o lindo que sigue las reglas y ordenes obedecio, acaricie su pene para ponerlo erecto y al poco me penetro de nuevo, yo en esta ocasion rodee con mis piernas su cintura, entonces el pudo penetrarme mas, entraba y salia de mi, me tenia bien abrazada, tanto que me dolia, tenian mucha intensidad sus embestidas, era claro que ya disfrutaba mejor, yo tambien lo hacia, ya comenzaba a sentir delicioso en mi vientre, entonces acaricie su cabello corto, bese su cuello, le bese y todo se volvia mas intenso, el mordia mi cuello, entonces busque sus labios y con un beso intenso terminamos juntos de nuevo. Nuestras respiraciones eran agitadas.
- Alejandro - le dije al tiempo en que el se recostaba a mi lado - sabes que esto, no puede salir de aqui �verdad? - El aun agitado me miro
- No, jamas la pejudicaria, ademas quiero seguir viendola y me gusta como da sus clases - luego comenzo a acariciar con su dedo indice mi cuello, pechos, estomago y vientre.
- Deberiamos vestirnos, tus padres podrian llegar pronto - entonces se levanto, busco su ropa y se cambio, yo no queria volver a ba�arme, me habia gustado su inocencia a la hora de hacerlo, queria guardar esa bonita experiencia conmigo para siempre, cuando el termino de vestirse, yo estaba poniendome el vestido, era un vestido ajustado que se cerraba por adelante, mi querido alumno se acerco a mi, me ayudo a cerrarlo, me beso la frente y yo sonrei. Su ternura me gustaba.
Nos vestimos y fuimos a la sala, el revisaba mi biblioteca y me pregunto si podia tomar un libro para leer, le dije que se sintiera libre de escoger uno y leerlo, luego poco mas de media hora llegaron sus padres, me agradecieron el cuidar de su hijo, les dije que no habia problema y que cuando quisieran ayuda contaran conmigo, ellos asintieron. La experiencia fue maravillosa, al poco tiempo Alejandro convencio a sus padres de tomar clases extras de ciencia conmigo, de vez en cuando pasamos tardes inolvidables.