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Las Fantas�as de Araceli 1

El relato que les voy a contar es ver�dico. Sucedi� hace
cinco a�os, y es la experiencia m�s excitante que hasta ahora hemos tenido mi
esposa y yo. Ambos somos de Mty N.L. y j�venes.

Yo me llamo Juan Carlos y mi esposa Araceli de la Rosa, nos
casamos hace ya 7 a�os y desde que �ramos novios hemos sido muy abiertos a
nuevas experiencias, aunque al principio nos daba miedo y no quer�amos que
nuestro matrimonio se viera afectado. As� que primero era solo platicar de
fantas�as sexuales que nos gustar�a tener y eso nos excitaba mucho, aunque aun
no las comenz�bamos a experimentar si no como ya les dije apenas hace 5 a�os.

Todo comenz� una noche en que platic�bamos mi esposa y yo
sobre nuestras fantas�as. Ella dec�a que le excitaba la idea de que se la
cogiera un hombre mayor. Yo le preguntaba porqu�, y ella me dijo que porque
pensaba que tendr�an mas experiencia que los j�venes. En ese entonces ten�a 20
a�os ella y 25 a�os yo, as� que pr�cticamente �ramos unos ni�os haciendo sexo;

-�qu� tan mayor te gustar�a que fuera tu amante mi amor- le
pregunt�?

-Como de 50 a 60 a�os.-

Yo me solt� a re�r y le dije;

-no seas abusiva con el cuerpazo y la juventud que tienes le
dar�a un infarto al pobre se�or.-

Ella dijo;

-tal vez, pero es una fantas�a que tengo desde los 11 a�os,-

-�desde los 11 a�os, pues qu� hacias en ese entonces
corazon?-

-Lo que pasa es que a esa edad tuve mi primera experiencia
sexual con un viejito de mi barrio.-

-Pero eras muy ni�a, �c�mo fue que paso?

-una amiga y yo est�bamos haciendo un trabajo de la escuela y
busc�bamos peri�dicos viejos para hacer recortes, as� que fuimos con don Fidel,
un se�or que viv�a solo y que sab�amos que todos los d�as compraba el periodico.
Llegamos a su casa y nos invito a pasar, est�bamos vestidas de colegialas mi
amiga y yo y nos pregunto que tipo de recorte nos interesaban, as� que le
dijimos que nos hab�an encargado llevar anuncios de publicidad;

-Ok-

Dijo don Fidel y nos llevo a un cuarto donde tenia bastantes
peri�dicos. Y dijo;

-son muchos, pero �Uds. Saben si se los llevan o aqu� mismo
los recortan?

Asi que le dijimos que los recortar�amos all� y �l nos fue a
buscar unas tijeras y unos refrescos. Nos dejo solas y se fue a ver televisi�n.

En una hora aproximadamente terminamos y fuimos a avisar a
don Fidel que nos �bamos. Cuando llegamos a la habitaci�n donde ve�a la
televisi�n, nos asombramos pues estaba viendo una pel�cula pornogr�fica, donde
una chica rubia le mamaba la verga a un hombre negro que la tenia enorme, o al
menos as� pens� yo, no s� mi amiga roc�o.

Don Fidel no se dio cuenta que lo observ�bamos y se saco su
verga del pantal�n para jal�rsela, tambi�n la tenia bastante grande; mi amiga
Roc�o se asust� y de repente dijo;

-ya nos vamos don Fidel-

�l apago la televisi�n de inmediato y se coloc� un coj�n del
sill�n encima. Entramos y le dimos las gracias por todo, �l nos dijo que no
hab�a problema, que cuando necesit�ramos algo pod�amos contar con �l, pero que
no dij�ramos lo que hab�amos visto en la televisi�n.

-Yo no vi nada-

Dijo Roc�o. Se fue a casa y me dejo sola con mi vecino.

-T� s� viste lo que estaba en la televisi�n chelys.

Me pregunt� don Fidel, y le dije;

-s�, pero no s� que estaba haciendo la muchacha.

-solo se divert�a jugando con esa cosa.

Dijo �l.

-ven aqu�, d�jame verte, est�s muy bonita, hace mucho que no
te ve�a bien. �Cuantos a�os tienes?

-11.

Le contest�.

�l me agarraba por la cintura con una mano mientras que con
la otra me acariciaba la pierna. Luego baj� su mano hasta tocarme ambas piernas
y comenz� a sobarlas.

-�te gusta?

Me pregunt�, y le dije que se sent�a rico. Y fue subiendo
poco a poco una de sus manos hasta tocar mi panochita por arriba del calz�n. Y
comenz� a acariciarla. Yo me retorc� un poco pero se sent�a bien. Subi� su otra
mano y me baj� los calzones hasta las rodillas y comenz� a acariciarla
directamente. Con la otra mano me desaboton� la blusa y me acariciaba mis
peque�os pechos. Me junt� mas hacia �l. Se me hab�a Olvidado que s�lo se hab�a
tapado su verga con el coj�n, hasta que sent� que me daba piquetes en la barriga
con ella. Mir� hacia abajo para observarla y �l lo not�.

-�quieres acariciarla chelys?

Me pregunt�. Me tom� una mano y la puso en su verga. Estaba
muy hinchada y caliente, ten�a una cabezota morada y le escurr�a un liquido
cristalino. Me hizo que la moviera de arriba abajo mientras �l segu�a acariciado
mi panochita virgen. Me solt� la mano y yo sola segu� subiendo y baj�ndola
autom�ticamente en su verga, hasta que lo escuch� gru�ir y me ba�o de leche toda
la barriga.

-�Hay! me mojaste.

Le dije, me sec� con un pa�uelo y not� que su verga ya no
estaba tan grande. Me subi� los calzones y me dijo que lo visitara cuando yo
quisiera.

Nunca volv� a su casa pero s� quer�a hacerlo. Cuando ten�a
entre 14 y 15 a�os y ya conoc�a algo mas de sexo, quer�a que �l me metiera la
verga y estaba dispuesta a dec�rselo, pero nos mudamos de all� y solo me qued�
con las ganas.

-Pens� que yo hab�a sido el �nico hombre en tu vida mi amor.

Le dije a mi esposa.

-Y lo eres, ese solo fue un roce que tuve con �l. Pero me
cachondeo bastante cada vez que me acuerdo. Hicimos el amor esa noche y le
promet� que yo la ayudar�a a cumplir su fantas�a a como diera lugar si ella
estaba dispuesta. Me dijo que s� y yo comenc� a buscar al tipo adecuado para el
trabajo aquel.

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Hab�an pasado 2 semanas y yo no encontraba al candidato para
la fantas�a de mi chelys. Y un d�a que entr� a la tienda de la esquina, vi que
el tendero estaba en un rinc�n con una ni�a y le acariciaba las nalguitas por
arriba del calz�n. Me vio y dej� de hacerlo y se dirigi� a atenderme.

-�que necesita unos cigarros?

Le contest�, le se�al� la marca le pagu�, y al salir le dije;

-provecho.

Mirando a la chiquilla que tendr�a entre 12 o 13 a�os. Al d�a
siguiente que fui a la tienda le dije.

-�como le fue con la chica?

Se sonri� y me dijo.

-bien, no crea que soy un pervertido, solo que a veces ando
muy caliente y eso me relaja.

-si Ud lo dice, en serio, no s� que tienen las ni�as de esa
edad que lo calientan a uno bastante.

Me qued� pensando un poco y le dije.

-le voy a confesar algo pero quiero que sea discreto con lo
que le voy a decir.

-puede confiar en mi joven, que �acaso a UD tambi�n le atraen
las ni�as?

-s� (le dije) solo que un poco mas creciditas. Lo que le
quer�a contar es que; a m� esposa �UD la conoce verdad?

-s� claro, una hermosa mujer, tendr� unos 20 a�os aprox.

-As� es, bueno el hecho es que a ella cuando era ni�a le paso
algo as�, le dieron una manoseada un vecino suyo mucho mayor, como de su edad,
pero no se la cogi� y ahora esta obsesionada que quiere que le vuelva a pasar.
Yo pens� que UD podr�a ayudarnos con eso �qu� le parece?

Le brillaron los ojos de inmediato al viejo cabr�n aquel y me
dijo.

-�est� ud. seguro joven?

Le dije;

-s�, ya lo vi en acci�n y creo que tiene experiencia para
lograr que mi esposa recuerde ese momento y que lo termine como ella lo quiere.

-por supuesto que lo har�, venga cualquier d�a despu�s de
mediod�a, cierro 2 horas para comer, pero es tiempo suficiente para hacer algo,
si su esposa quiere claro.

-ella est� dispuesta yo estar� aqu� para verlo. Si ella dice
que ya no quiere, as� se har� �de acuerdo?

-de acuerdo.

Dijo el viejo.

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Nos quedamos de ver al otro d�a y le di indicaciones de c�mo
abordarla para que no se asustara. Le dije a chelys que hab�a encontrado al
candidato ideal.

-quien es no quiero decirte, quiero que sea una sorpresa.

Y dijo.

-�es bastante mayor?

-s�, que como de 48 a�os al parecer.

-bueno est� bien, pero si no me gusta lo que me hace me sacas
de ah� por favor.

-claro amor, no dejar� que te pase nada malo.

Se puso un vestido cortito de tirantes color blanco liso que
marcaba sus curvas completamente. Se ve�a hermosa, su cabello rizado color miel
y sus labios carnosos seductores listos a la batalla. Salimos en el coche y
paramos en la tienda.

-�que vas comprar?

Me pregunt�.

-cigarros.

Le dije, ella baj� conmigo y vimos un letrero en la tienda
que dec�a |cerrado| pero yo jal� la perilla y abri�.

-no hagas eso.

Me dijo chelys.

-No pasa nada amor, el se�or de la tienda debe estar
comiendo, en otras ocasiones he entrado y de todos modos me atiende.

Entramos y le dije que fuera a la puerta de la derecha a
buscar. Y yo buscar al se�or y mientras yo buscar�a los cigarros, ella camino
hacia la puerta y se detuvo al llegar. Yo me hice el distra�do como que buscaba
los cigarros y la mire de reojo, que estaba parada mirando algo fijamente.
Camin� despacio hasta llegar por atr�s de ella y pude ver que era lo que la
manten�a hipnotizada. El se�or de la tienda ve�a una pel�cula porno y se hab�a
sacado la verga y se la estaba jalando. No era muy grande pero bastaba para
cumplir la fantas�a de chelys. Mir� hacia atr�s y yo le sonre�, ella entr�
decidida al cuarto y se par� frente al viejo de la tienda. �l la tom� de la mano
y la acerc� m�s hacia �l y le meti� una mano bajo el vestido y le comenz� a
acariciar. Chelys respiraba agitada, yo la conoc�a y sab�a que estaba bastante
caliente. Luego el viejo le baj� los calzones y le comenz� a agarrar la panocha.

Ella se retorc�a y apretaba los labios. Luego el viejo le
tom� una mano y la llev� hasta su verga que ya estaba bien parada. Ella la tom�
y comenz� jal�rsela despacio. Luego el viejo le solt� los tirantes del vestido y
le sac� los pechos blancos y comenz� a chuparlos. Solo se o�an resoplidos y
jadeos en ese cuarto. Fui a la puerta y la cerr� con llave para que no nos
molestaran. Cuando regres� chelys ten�a una pierna arriba del sill�n en que
estaba sentado el viejo, y �l le mamaba la panocha mientras ella le acariciaba
el cabello canoso. �l se puso de pie, su verga estaba bien parada y la coloc� en
el sill�n sentada con las piernas bien abiertas. Se las coloc� en los hombros y
de una sola estocada la clavo.

-ahhhaahhhaaaaaaaaaaaaaa.

Grit� Araceli, al sentir la tranca de aquel viejo. Luego
comenz� a bombearla r�pido. Parec�a que quer�a aprovechar lo m�s pronto posible
ese manjar que le hab�an obsequiado. No duraron mucho cogiendo, �l se vino
dentro de ella gru�endo y la dejo ah� sentada en el sill�n. Ella se puso de pie
y lo bes� en la boca y le dio las gracias. Luego se acerc� a m�, me beso y me
dijo;

-vamos amor.

Y as� lo hicimos. No dijo nada al llegar casa, se meti� a la
ducha y se fue a dormir. Me acost� a un lado de ella y le pregunt�; que si no le
hab�a gustado. Ella dijo que -s�- pero que no qued� satisfecha porque el viejo
se vino muy r�pido.

-eso no es problema, otro d�a lo traemos para que te coja
mejor.

Y ella dijo;

-no, con �l ya no, si quieres b�scame otro pero que tenga la
verga mas grande.

-y como voy saber � si la tiene grande coraz�n. Si pregunto
por ah� pensaran que soy gay.

-si pudiste encontrarlo una vez, lo volver�s a hacer de
nuevo.

-esta bien preciosa, pero solo este y ya, porque despu�s
falta mi fantas�a ok.

Pasaron varias semanas y no pude encontrarlo. Me rend� pero
para que mi chelys no se sintiera mal, la llev� a una fiesta que ofrec�a mi jefe
para los empleados de la oficina. Era en una casa grande con un jard�n lleno de
�rboles, desde que llegamos, todos los hombres voltearon a ver a mi mujer.
Estaba radiante de sexualidad. Mi jefe estaba bailando con una chica de la
oficina y fui a present�rsela. La mir� y se qued� pasmado, la miraba de arriba
abajo.

-es UD hermosa Araceli.

-gracias.

Contesta ella.

-porque no hab�as � tra�do esta ni�a para conocerla Carlos?

Me dijo mi jefe.

-don Joaqu�n lo siento, pero ahora ya la conoce.

-�Gusta bailar conmigo Araceli?

-s�.

Dijo ella y se puso a bailar con �l. Est�bamos afuera de la
casa, es una pista rodeada por una arboleda. Poco a poco fue pasando el tiempo,
beb�amos, charl�bamos y bail�bamos juntos mi chelys y yo, o si no, me la
quitaban otros hombres. Pero no la dejaba, solo hab�a bailado conmigo y con mi
jefe. Ya estaba bastante tomada cuando hab�a unos cuantos invitados. Solo unas 2
0 3 parejas bailaban y mi jefe llega a decirme que le prestara de nuevo a la
mujer mas bella de la noche. Mi chelys se emocion� y se par� a bailar con �l. Yo
me par� y me fui a un rinc�n, los dem�s hombres se fueron al sal�n de juegos y
solo quedaron Araceli y mi jefe bailando.

Estaba fumando y not� que mi jefe le acariciaba
descaradamente las nalgas. Pero no me enoj� si no que esper�. Ella lo abrazaba
del cuello y lo miraba fijamente. Escuch� unas carcajadas, mir� hacia el sal�n
de juegos a ver a los hombres que ah� estaban y cuando regrese la vista mi mujer
y don Joaqu�n no estaban en la pista. As� que comenc� a buscarlos y los alcanc�
a ver que se dirig�an hacia la arboleda grande. Esa parte no estaba alumbrada
as� que nadie se percat� de que se hab�an salido. Los segu� cuidadosamente y mi
jefe llevaba a mi esposa de la mano. De repente se deten�an y �l le besaba el
cuello y la abrazaba. Ella estaba bastante ebria y solo se re�a. La llev� a un
lugar m�s apartado donde par�, que ten�a un peque�o farol antiguo y la recarg�
en el tronco de un �rbol. Y comenz� a besarla, le besaba en el labio, en el
cuello, los hombros. Luego le baj� los tirantes del vestido y comenz� besarle
los pechos. Pechos blancos que se ve�an estupendos.

Araceli siempre a tenido un cuerpazo de concurso. Estaba tan
entusiasmado viendo como la besaban a ella, que no notaba que ella le sobaba la
verga a mi jefe por encima del pantal�n. Me acerqu� un poco m�s a ellos, que
segu�an en lo suyo. Luego mi jefe la volte� de espaldas, le levant� el vestido y
le baj� de golpe los calzones. Se hinc� y comenz� besarle las nalgas, chelys se
abrazaba del tronco del �rbol y hac�a muecas de placer. Estaba goz�ndolo mucho.
Por fin, pens�, ya se cumplir� su fantas�a. Luego la volte� de frente, se baj�
los pantalones y le ense�� una verga bastante grande y gorda. Chelys sali� de su
embriaguez y de repente se subi� los calzones y sali� corriendo de ah�. Yo la
segu� y la alcanc� m�s adelante. Le dije;

-�donde estabas amor?

Ella estaba sudando y dijo;

-V�monos mi amor, me siento mal.

La llev� a la casa y ya todos se desped�an. Mi jefe lleg� un
poco despu�s, despidi� a los invitados y a los sirvientes y me sirvi� un trago.

-espero que te hayas divertido, espera un poco que quiero
platicar contigo.

-s� claro.

Chelys me mir� y me dijo;

-Quiero decirte algo que pas� esta noche, no quer�a hacerlo
pero estaba muy tomada y me dej� llevar por tu jefe al bosque y..

-�y qu�?

Le pregunt�.

-casi me coge ah�.

-eso es lo que tu quer�as �no?

-s�, pero t� no sab�as que no pod�a hacerlo si no te dec�a
primero.

-no te preocupes amor, �de verdad quieres terminar lo que
empezaste?

-pues s�, me gust� la enorme verga que me ense��, �me das
permiso?

Le dije que s�, pero que mi jefe piense que �l te sedujo, t�
s�gueme la corriente. Comenzamos a beber m�s, por la emoci�n ella se re�a
emocionada esperando por lo que vendr�a.

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Cuando lleg� mi jefe, dijo;

-vaya que est�n alegres.

-claro don Joaqu�n, lo que �nico que siento es que no puedo
manejar por lo tomado que estoy. Y pues a mi conductora designada no s� qu� le
pas� que tambi�n esta igual o peor que yo. �Nos podr�a llamar un taxi?

-no es necesario, se pueden quedar dormir aqu� en una de las
habitaciones. Vamos tomemos otro trago.

-est� bien.

Platicamos como una hora y yo me hice como que ya no pod�a
beber m�s. As� que mi jefe sugiri� a mi esposa me llevaran a una habitaci�n.
Solo est�bamos nosotros tres as� que entre ellos 2 me llevaron a la habitaci�n
mencionada. Estando ah� me sentaron en un sill�n y yo me hice el dormido. Chelys
estaba haciendo la cama para acostarme y mi jefe la tom� por detr�s bes�ndole la
espalda.

-�no!

Dijo mi esposa, �l le contest�;

-�porqu� no? tu marido esta completamente dormido, y a mi no
me gusta que me dejen a medias. La comenz� besar por todas partes y chelys se
hac�a la victima diciendo;

-�no por favor!

-como de que no putita, s� lo que quieres y te lo voy a dar.

�l recarg� en la pared a un lado de la cama. Toda la escena
estaba frente a mi, y no pod�a perderme ning�n detalle. Chelys se dejaba besar
en la boca por aquel hombre regordete que parec�a un santa claus, que se quit�
la camisa de inmediato y la arroj� al piso. Luego le baj� los tirantes del
vestido a m� esposa y le comenz� masajear esos hermosos pechos blancos,
adornados por un pez�n Rosado que ten�a paraditos por el tratamiento que le
estaban dando. Desliz� m�s su vestido y cay� completamente al suelo, dejando a
m� amorcito desnuda frente a �,l solo con sus diminutos pantis. Mi jefe don
Joaqu�n no perd�a tiempo, de repente ya estaba hincado en el suelo luchando por
sacarle los calzones a mi chelys. Y ella hac�a como que se resist�a. Se los baj�
de un tir�n y comenz� a besarle la panochita. A ella se le doblaban las piernas
m�s de placer que por la borrachera, y se dej� caer al borde de la cama.

Don joaqu�n le levant� las piernas y se perdi� en ellas,
bes�ndola desesperado. Chelys volteaba averme y se notaba lo emocionada que
estaba. Don joaqu�n se puso de pie y se baj� los pantalones mostrando una verga
grande y gruesa de aprox. 12 pulgadas de largo y 1y � de ancho. Jal� a m� esposa
del brazo y ella rebota en su barriga peluda, quedando a escasos cent�metros de
aquella tranca.

-Ahora-

Dijo don Joaqu�n, -mamala chiquita- ella la tom� con sus
manos y le peg� el rostro, acarici�ndola con sus mejillas como si fuera un
tesoro. Luego se la meti� en la boca y comenz� a mamarla como ella sab�a.

Le escurr�a saliva por los lados de la boca demostrando como
la saboreaba. Don Joaqu�n hac�a muecas de placer, que pens� que se iba venir y
la detuvo. Y la recost� de nuevo en la cama y ella gustosa abri� las piernas.
Por fin iba a probar aquella fantas�a que tenia desde ni�a. Don Joaqu�n se la
puso en la entrada de su raja y la masajeaba con la cabezota. Ella le dijo;

-ya, ya la quiero.

-p�demelo Por favor.

Le dijo mi jefe.

-por favor, d�mela ya...Ah AHHHH AHHHHH.

Y le meti� la mitad de la verga a m� esposa. Luego le dio
otra estocada y se la meti� toda. Ella gritaba de placer y se retorc�a bajo �l
como convulsion�ndose. �l la abrazo y la bes� en la boca y comenz� a bombearla
lentamente, con paciencia.

--Ella lo abrazaba con brazos y piernas como no queriendo
dejarlo escapar. No s� cuantos orgasmos tuvo Araceli en esa media hora, con
aquella verga enterrada hasta el fondo. Luego don Joaqu�n se la sac� y ella
protest�.

-No, a�n no.

�l no la obedeci�, se la sac� y luego la volte�. Con las
nalgas paradas hacia �l, las bes� y se entretuvo besando su ano. Y chelys dijo;

-no, por ah� no, no lo he hecho por ah�.

Y era verdad, ella No le gustaba el sexo anal.

-c�llate y aguanta.

�l le empuj� la tranca que no quer�a entrar.

-afl�jate.

Le dijo, chelys ten�a el rostro en un rictus de dolor, pero
eso no le import� a m� jefe. De todos modos le desflora el ano y le clav� toda
la verga a mi chelys. Comenz� a cabalgarla y le daba tremendas nalgadas que la
hac�an chillar. Le sal�an l�grimas de placer, hasta que don Joaqu�n se vaci� en
sus entra�as. Se quedaron un momento pegados mientras �l le mord�a la espalda.

-MI AMOR.

LE DIJO MI ESPOSA.

Desde ese d�a la �nica fantas�a que tengo yo, es ver a m�
amorcito enculada por hombres mayores que ella; en mi oficina se la cogi� mi
jefe, un conserje y un se�or de seguridad. En el barrio sigue haci�ndolo con el
viejo de la tienda y un compadre de �l que est� horrible. Pero a chelys le
encanta como se la cojen entre los dos, y todav�a seguimos buscando
candidatos....

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