- Y como te dec�a, va mi padre y me dice que como le vuelva a
contestar me manda a un internado. �Te parece normal? �Y todo por llegar dos o
tres horas tarde a casa!
- Hmmmm...
- Pues �sabes que? Que me da la mismo. Que ya paso de que mi
viejo este todo el d�a controlando lo que hago.
- Hmmm...
- �Por que es que encima todo le parece mal! �Joe estoy en
edad! �Se supone que tengo que salir con chicas! Seguro que si hubiera llegado a
la hora que �l me puso y no me hubiera quedado un rato m�s con aquella t�a le
hubiera parecido mal.
- Hmmmm...
- Y lo peor de todo es cuando bajaron todos esos
extraterrestres y me secuestraron y me llevaron a su planeta para estudiarme y
violarme.
-Hmmmmm....
- Y... y.... �y a ti tambi�n te van a violar!
- Aj�....
- �T�o Iv�n ya te vale! � Que est�s pasando de mi! - Manu
ten�a raz�n, estaba en lo m�o y no le hac�a demasiado caso.
- Perdoname, es que hoy he dormido poco y estoy un poco
volado.
- Que habr�s estado hacienod guarr�n...
- No es eso idiota. Es que a las cinco de la ma�ana se ha
presentado mi t�o en casa con intenci�n de quedarse unos d�as.
- Nunca me hab�as hablado de tu t�o.
- Es que no lo conoc�a. Ni siquiera sab�a que existiese. Por
lo visto debi� de tener alguna movida con mi padre cuando eran j�venes y no
parece que se lleven muy bien. A mi padre no le hace gracia su presencia.
- �Bah! cosas de hermanos. Yo al m�o un d�a de estos le voy a
meter termitas en los gayumbos. �Con eso de que es el peque�o siempre sale
favorecido en mi casa! Pero bueno... en el fondo es majo.
- Ya claro. Bueno t�o, no te rayes por eso. Es cosa de tu
padre.
Supongo que ten�a raz�n y no deb�a preocuparme por eso,
seguro que lo solucionar�an. No quer�a que mi padre se llevase mal con su
hermano. Y no pod�a dejar de pensar en los ojos de mi t�o. Esos ojos azules,
apacibles y paralizantes. Supongo que era un t�o atractivo. En ese momento me
plantee algo que hasta entonces no me hab�a planteado en serio. �Yo era gay? �Me
gustaban los hombres o simplemente me atra�a mi padre? �Me gustaban tambi�n las
mujeres? Nunca hab�a pensado en estar con nadie que no fuese mi padre... Supongo
que era algo que ante so despu�s tendr�a que aclarar conmigo mismo.
Las clases pasaron como un d�a cualquiera, s�lo que yo estaba
mucho m�s callado y embobado de lo normal. Cuando salimos Guille y Manu me
insistieron si estaba bien y si me hab�a pasado algo realmente malo, que
normalmente yo estaba de mejor humor. Lo pens� por unos instantes y realmente no
hab�a raz�n para esa falta de energ�a. Era simplemente que no ten�a ganas de
nada. Raro en mi, �verdad?
Cuando acab� las clases a la hora de comer me cog� el bus con
las mismas energ�as que me hab�an mantenido durante toda la ma�ana y as� llegu�
a casa. �Estar�a mi t�o a�n en casa? �Mi padre y �l lo habr�an arreglado? Quiz�s
hubieran tenido una discusi�n y mi t�o ya no estuviera ah�. Ser�a una pena,
porque me hubiera gustado despedirme de �l. Llegu� a mi casa tras subir 27
pisos, abr�a la puerta con la llave y pregunt� como de costumbre si hab�a
alguien en casa. Nadie contest�, as� que supuse que mi padre habr�a echado a mi
t�o de casa y �l estar�a trabajando en su oficina con muy mal humor. Pero al
pasar por el pasillo la puerta del ba�o se abri� y sali� mi t�o de dentro.
- �Hola! No te hab�a o�do entrar.- me salud� con una sonrisa.
- Hola, no pasa nada. �Est� mi padre en casa tambi�n?
- No me temo que se ha ido a trabajar. Creo que no quer�a
soportar que tenerme cerca.
- Ahhh ya. - No sab�a que decir, al fin y al cabo no sab�a
que hab�a ocurrido entre ellos.- Bueno, me voy a mi habitaci�n. Estoy leyendo un
libro, as� que tranquilo, no te molestar�.
- De acuerdo. �Te gusta leer?
- S�, digamos que un libro es un buen compa�ero que nunca te
abandona, al menos en eso tu padre y yo a�n coincidimos.
- Ya veo... a mi tambi�n me gusta leer.
- Eso es bueno, los chicos de tu edad ya no leen.
- Tal vez...
Me dirig� a mi habitaci�n y me sent� en mi silla
prepaparndome para estudiar. Que majo mi t�o, parec�a un buen hombre. �Ser�a muy
indiscreto ir a preguntarle que le ocurri� con papa? Estuve cerca de una hora
estudiando pero no me concentraba. Pensar que hab�a un extra�o tan interesante
en casa no me dejaba concentrarme en los estudios. Me gustar�a saber m�s cosas
de �l. Por ello me dirig� a su habitaci�n cuya puerta estaba cerrada. �Deb�a
entrar? Quiz�s mi t�o deseaba estar s�lo o lo pillaba en un momento de
intimidad...
- Iv�n, puedes pasar, tranquilo.- me qued� de piedra. Abr� la
puerta y me asom�.
- �Como sab�as que...?
- O� que tus pasos se paraban delante de mi puerta y que de
ah� no te mov�as.
- Ahhhh... - me pus� mas rojo que un campo de amapolas.
- Dime, que quieres, me dijo mirandome con esos ojos
almendrados y electrizantes.
- Es que me aburr�a y ven�a a hablar un rato, espero no
molestarte.
- Claro que no, como ya te dije tan s�lo estoy leyendo un
libro.- Era cierto ten�a un libro en la mano y �l estaba sentado en la cama con
la espalda apoyada en un almohad�n contra la pared.
- �Qu� libro es?
- Se llama 6 �ngeles.
- Suena bien, ya me lo dejar�s cuando lo acabes.
- Claro, aunque no se si ser� de tu estilo.
- �Qu�?
- Es un libro de tem�tica homosexual. Es�s�lo para prevenirte
y que no te pille por sorpresa si lo lees.
- �De tem�tica homosexual?
- S�, eso dije. �Sabes lo que significa homosexual no?
- Bueno... s�... alguna idea tengo... �a ti te gustan esas
cosas?
- S�, me gustan los hombres.- me dec�a sonriendo y tan feliz.
- �Te parece mal?
- Ehhh... noooo.... yo.... bueno....
- Tranquilo, no pasa nada si est�s cortado. De todos
modos te dir� que es un buen libro. Trata del amor entre dos angeles en el
para�so, que se enamoran y se empiezan a amar en secreto, entonces un
arc�ngel de rango mayor asesina a uno de los �ngeles por considerar su amor
un atentado contra dios y prohibe as� su amor. Pero entonces el alma del
�ngel asesinado se reencarna en un humano y comienza as� una batalla entre
el mundo humano y el mundo de los cielos.
- �Y al final como acaba?
- No lo s�, como ves no he terminado. Ya lo leer�s.
- Claro, me gustar�a mucho.
Se oy� la puerta de la casa al abrirse. Mi padre hab�a
llegado. Lleg� al pasillo y abri� la puerta. Nos pill� a los dos en la cama
hablando y por un momento nos mir� sin decir nada. Entonces yo le salud� y
le pregunt� que tal y eso. El me dijo que bien y que fuese a cenar. Nada
m�s. Desde luego no le sentaba bien que el t�o estuviera en la casa y
tampoco parec�a gustarle que hablara yo con �l. Pues me daba igual. A mi mi
t�o me ca�a bien y nadie, ni siquiera el enfado de pap� pod�a cambiar eso.
La cena transcurri� tranquila y en silencio. Ninguno de
los tres utiliz� la boca para otra cosa que no fuera masticar. Cuando
acabamos yo me sent�a cansado de modo que recog� y me retir� a mi cuarto
para dormir. O� que mi t�o se marchaba a su habitaci�n rato despu�s de
hacerlo yo. Mi padre se acost� algo m�s tarde. Creo que se hab�a quedado en
el estudio trabajando hasta tarde. A eso de las dos de la madrugada me
despert�. Di un par de vueltas inc�modo porque hab�a so�ado algo extra�o que
no pod�a recordar pero que me hab�a dejado una sensaci�n muy desagradable.
En ese momento desee tener a mi padre durmiendo conmigo... O� sonidos en la
habitaci�n de al lado (la de mi padre). Hab�a ido al ba�o. Intente dormirme
pero sent� como mi padre sal�a silencioso de su habitaci�n y abr�a mi
puerta. Entr� en mi habitaci�n y cerr� la puerta tras de s�. No me mov�, no
dije nada. Tan s�lo lo miraba. �l se sent� a mi lado, vi� que estaba
despierto y me acaricio la cara.
- Deseaba que vinieras... creo que tuve una pesadilla.
- No pasa nada. Estate tranquilo, estoy aqu�. Estando
juntos nada te podr� hacer sentir inc�modo.- y tras decir esto me bes� en
los labios.
Mi padre se quit� los pantalones dej�ndose la camiseta de
tirantes. Yo retir� las sabanas que subr�an mi cuerpo y me quit� tambi�n la
ropa interior. �l se subi� sobre mi y despu�s se cubri� con la s�bana. me
sigui� besando y as�, en silencio, me hizo el amor una vez m�s. Cuando me
despert� por la ma�ana mi padre ya no estaba conmigo. Era l�gico porque
ahora mi t�o estaba en nuestra casa, pero esa noche no volv� a tener
pesadillas.
Sal� de mi habitaci�n a medio vestir, fui al ba�o, sal� y
me dirig� al estudio para ver si mi padre estaba ah�. Y as� era. Me mir� y
me dio la que podr�a ser la primera sonrisa del d�a.
- �Has dormido bien hijo?
- S� Pap�, ning�n problema.
- Bueno d�as.- se oy� una voz tras nosotros. Mi t�o
tambi�n se hab�a levantado.
- Espero que hoy empieces a buscar un trabajo o un piso.-
le dijo mi padre a modo de saludo.
- Tranquilo hermano, esta misma ma�ana saldr� a buscar
uno.
- Bueno yo me voy a desayunar.- les dije.
Esa ma�ana me sent�a muy bien. El haber podido pasar la
noche con mi padre me hab�a dado nuevas energ�as. A veces tan s�lo se
necesita que alguien te demuestre su afecto y que puedes contar con �l para
que todo a tu alrededor brille. Ese d�a iba a volver a ser Iv�n, el t�o que
se iba a comer el mundo.