Relato: La primera del freaky





Relato: La primera del freaky

Soy un freaky


Decididamente soy un freaky.


Es muy f�cil llegar a este conclusi�n si juntamos y hacemos
recuento de las cosas que me rodean:


Tengo 23 a�os, no tengo novia, soy virgen, no soy
metrosexual, solo me he morreado con una prima del pueblo, adem�s muy fea y a
los 19 a�os, me hago muchas pajas, me gusta leer, me bajo cosas de Internet,
entro en chats de sexo y tengo cybersexo con (supuestamente) chicas y para
corroborarlo tengo mas amigos y amigas en el messenger que en la vida real.


Decididamente soy un freaky.


Parece que el ADN y el equilibrio en las familias no es tan
igualitario como se supone. Mis padres son progres y muy liberales, no entienden
que les haya salido un hijo as�.


Sin embargo mi hermana, mi hermanita Sandra, un a�o mayor que
yo es guapa, sale, estudia, tiene novio (o novios), se cuida y va siempre a la
moda. Creo que se ha quedado todas las moderneces que me tenian que tocar a mi.


Pero hoy, s�bado, a las 19.30 de la tarde, me ha dicho algo
que me no me gusto nada:


- Javi, hoy vendremos aqu� mis amigas y yo


Sandra y sus amigas.


Las conozco como si estuviera en su grupo. Llevan estudiando
juntas desde el colegio, se apuntaron en el mismo instituto y no salieron de la
ciudad para estudiar sus ya casi terminadas carreras universitarias.


Paso a describirlas, por que es necesario:


Sandra: mi hermana, 1.75, morena, pelo liso y un cuerpo
bastante bonito, creo que usa una 95 de sujetador y solo usa tangas, hizo mucho
voleiball, y como todo freaky sabe, las de ese santo deporte acaban con un culo
casi perfecto. No, no me he pajeado nunca pensando en ella.


Pamela: La rubia, 1.63, pelo liso y mas bien delgada, pero
con mucha teta, es la tranquila y empollona. Si, si me he pajeado pensando en
ella.


Patricia: La regordita, 1.65, morena, unas tetas incre�bles y
un buen culo, buena chica y es la seria pero la que mas t�os se come. Si, si me
he pajeado pensando en ella.


Tania: Dios santo, 1.72, morena, pelo por la nuca, cara de
vicio, muy buen culo y unas tetas que prometen ser perfectas para chupar. Es la
mas lanzada y siempre tiene mirada de morbosa. Si, si me he pajeado mucho
pensando en ella.



Y despu�s de describirlas, os preguntareis por que no me
gusta el plan. Es muy sencillo, hoy nuestros padres salen y yo tenia pensado
quedarme en casa, jugando al PC, viendo pel�culas y pajeandome a gusto.


Pero no, ese plan se acabo cuando mi hermana en su habitual
ch�ndal de andar por casa, se levanto del sof� y fue a abrir la puerta de casa a
eso de las diez de la noche.


- EEEYYYYYYY, que pasa tiaaaaaaa!!!!. Escuche la voz de esta.


Grititos, risas y palabras de bienvenida se mezclaron en la
entrada.


Cuando entraron al sal�n vi que todas llevaban ropa c�moda y
para pasar la noche en casa. Incluso advert� que Pamela llevaba dos o tres DVD
en su mano. Patri llevaba una bolsa con chucherias y Tania con bebidas, me
parecieron cerveza y coca colas.


- Hola Javi, hoy no sales?. Me pregunto Patricia, con cierta
sorna en su entonaci�n.


- No, hoy hace un esfuerzo y se queda en casa . Respondi� mi
hermana con mas iron�a.


Yo solo sonre� y proced� a levantarme para irme a mi
habitaci�n, con mis cyberamigas, no sin antes repasar el culo y las tetas a cada
una.


Decididamente soy un freaky.



En mi habitaci�n, intente jugar a alg�n juego de PC, pero los
ritos y risas de las chicas, me turbaban. Intente conectarme, pero se nota que
mis estaban todos fuera, como deb�a de ser, pas�ndolo bien.


Un pu�o toco mi puerta. Se abri� lentamente y mi hermana
asomo su cabeza.


- Javi, las pizzas van a llegar enseguida, anda ven aqu�.


Con un leve movimiento de cabeza y viendo que mi cybernoche
no iba por buen camino, me levante de mi silla y me dirig� hacia el sal�n.



All� me recibieron con risitas y miradas escrutadoras.


Mire a la mesa y pens� que me hab�a equivocado, Tania no
hab�a tra�do algunas cervezas y coca colas; Tania hab�a tra�do muchas cervezas y
pocas coca colas.


- Javi, hermanito, si�ntate aqu� a mi lado, que hay sitio. Me
dijo Patricia


All� que fui, sin levantar mucho la cabeza.








Despu�s de escuchar sus anodinas conversaciones sobre t�os,
pel�culas, ropa y algo sobre sus estudios, son� el timbre de la puerta.


Se levanto Tania, que sin mirar hacia atr�s y de la que se
alejaba hacia la puerta dijo:


- Si esta bueno, le invito a que se quede. Dijo levantando
los brazos triunfalmente.


Todas rieron, incluso a mi se me escapo una sonrisa. Pero no
la ve�a capaz de hacerlo.


Despu�s de un tiempo mayor del normal, volvi� con las dos
pizzas y con una sonrisa mas caliente que las cajas que llevaba en sus brazos.


- Estaba bastante curioso, el pobre estaba calado hasta los
huesos y le di una buena propina. Se me quiso insinuar pero le corte cuando le
dije que est�bamos ya con un chico aqu�.


Todas rieron y yo creo que me puse bastante colorado.


- Que pasa Javi, no eres lo suficiente para todas nosotras?.
Me pregunto Patri mir�ndome directamente a los ojos.


De mi boca solo salio una t�mida sonrisa, con los ojos bajos
y mas colorado que la lava de un volc�n.


Las cuatro se miraron unas a las otras y explotaron en una
sonora carcajada.


Lo que dijo mi hermana a continuaci�n me dejo helado y rompi�
mi verg�enza.


- Pero si el jodio aun es virgen!!!!!!.


Las risas cesaron en un segundo y todos los bonitos ojos se
posaron en mi.


- De verdad aun no has follado? . Me pregunto Pamela,
clavando sus preciosos ojos azules en los m�os.


Mi incomodez se hizo tan patente que mi Tania salio en mi
defensa.


- Bueno, tampoco es tan grave, ya tendr� tiempo. Dijo mirando
hacia mi y gui��ndome un ojo.


Yo la sonre� con tan poca gana que mi desidia hizo que su
gesto cambiara y soltara a continuaci�n:


- De todas formas hay que intentar arreglar eso.


Apure mi trozo de pizza y con un leve "Me voy a mi
habitaci�n" me levante.






Me derrumbe en mi cama maldiciendo mi vagancia, mis
verg�enzas y a las zorras amigas de mi hermana que me hab�an hecho pasar un rato
tan agradable como cuando te corren a collejas una clase entera uno por uno.



Tenia que olvidar ese tema y me puse delante de mi PC,
encend� la pantalla, abr� la carpeta de los video guarros y pulse el primero que
encontr� el cursor.


En la pantalla apareci� una morena, que supuestamente era una
miss Holanda o algo as� y que en su �poca "no famosa" hab�a hecho un casting
porno, se la estaban cepillando dos t�os, y la t�a o actuaba muy bien o lo
estaba pasando en grande.


Saque mi pene por encima de la goma del ch�ndal y me puse a
sobarme para hacerme una paja, relajarme e intentar dormir.


Viendo la escena de c�mo la t�a era empalada por el co�o y
por la boca a la vez, mientras pajeaba al t�o que llevaba la c�mara, hizo que mi
trozo de carne comenzara a llenarse de sangre y a llegar a sus 18 Cm.
habituales.



Solo hab�a una regla nunca dicha en nuestra casa: ni yo pod�a
entrar en la habitaci�n de mi hermana sin llamar, ni mi hermana en la m�a sin
hacer lo mismo.


Esa noche una de las dos reglas se rompi�.


La posici�n de el mueble de mi PC hace que yo quede de perfil
seg�n se entra en la habitaci�n.


All� estaba yo, con el ch�ndal en el culo, con la mano
izquierda masaje�ndome los huevos y la derecha masturbando mi ya gran polla.


All� estaba mi hermana, en el marco de la puerta con los ojos
abiertos y con la cara roja viendo mi maniobra onanistica y con su "Anda Javi,
ven aqu� con��.." colgando de su abierta boca.


Su "Perd�n" y su huida cerrando la puerta, fue tan r�pido,
como la fuga de sangre que sufri� mi pene.


Solo pude poner mis manos en mi cara y pensar: "Joder, joder,
joder, me cago en la puta".



Esperaba que quedara ah� la cosa. Nunca nos hab�amos pillado
masturb�ndonos ni yo a ella con alg�n chico que se tra�a a casa, pero a esta
edad y con amigas en casa, hizo que mi mente pensara en cosas que me pon�an
nervioso.





Una de ellas se cumpli� a los pocos minutos.


Un grito atraves� la madera de la puerta:


- Que lo pillaste haci�ndose una paja?????? . Escuche gritar
a Pamela.


Lo hab�a dicho, pens� que se pod�a callar, pero no, lo tuvo
que decir a sus amiguitas. No hay nada para quedar mejor que vacilar de una
pillada a alguien.


Los gritos, aplausos, risas y dem�s exclamaciones duraron
varios minutos. Al poco de apagarse la histeria colectiva, un sospechoso
silencio se apodero del sal�n. Estaba tan avergonzado en mi soledad, que me
levante y arrime mi o�do a la puerta.


Nada�.. solo cuchicheos y risas.


No me gustaba el ambiente en absoluto y tem�a que en un
ataque de valent�a femenina, se pasaran toda la noche avergonz�ndome y
tortur�ndome por mi osad�a.


" �A quien se le ocurre ponerse a pajearse con cuatro t�as en
la habitaci�n contigua! " Pens� arrepinti�ndome de mi solitario acto.


Un golpe seco me acaricio dolorosamente la cabeza, cuando la
puerta se abri�.


- AAAHHH, joder. Que pasa ahora?. Pregunte mirando a la
puerta.


- Javi, que vengas, que queda pizza y bebida y vamos a poner
la peli . Me dijo Tania con una cara seria y sin asomo de guasa.


- Joder t�a, iros a la mierda���. Voy ahora. Repuse sin
pensar mucho


Que quer�is que os diga, tres t�as buenas invit�ndote a un
sal�n y ver una peli con ellas, pues ya te pueden pillar haciendo vudu, que por
muy freaky que tu seas, vas, vaya que si vas.


All� aparec�, no niego que me percate de los grandes
esfuerzos que hac�an todas por no re�rse y a punto estuve de dar media vuelta,
pero yo de tonto solo tengo la cara.


Me acerque a mi antiguo lugar del sof�, entre Patricia y
Tania, y all� me sent�.


- Venga pon la peli Sandra. Dijo Pamela.


All� se levanto mi hermana y solo apret� el bot�n del "Play".






"Penthouse productions presents"


"����Penthouse productions presents????" Pens� en un r�pido
ejercicio mental.


La calidad de la imagen de la pel�cula y el chico escoltado
por dos morenas tremendas y en ropa interior, me abri� los ojos y me di cuenta
de que las chicas hab�an puesto una peli porno.


Puse un gesto de "venga, ya vali� la bromita", pero las
chicas miraban la pantalla y mi hermana me miraba una cara mezcla de vicio,
perversi�n y piedad. Eso me extra�o mucho mas y al mismo tiempo me asusto.


Mis ojos se intentaban entretener en las paredes, los
cuadros, la mesa y la lata de cerveza que tenia en mis manos, pero los gemidos
de las dos chicas mientras empezaban a lamer al chico, hacia imposible que no
mirara de reojo a la pantalla.


Intent�ndolo hacer muy r�pido mire a todas mis acompa�antes.
Mi hermana miraba la pel�cula con atenci�n, pero como distante, pensando algo.
Pamela observaba sin perder detalle como las dos t�as chupaban a la vez la gran
tranca del t�o. Patricia, con las piernas extremadamente cruzadas, miraba la
pantalla con una sonrisa en sus labios y cuando llegue a Tania, esta me miraba a
mi, no a los ojos, me estaba mirando la entrepierna. Entrepierna que l�gicamente
y sin yo darme cuenta, estaba apuntando hacia el techo.


- Javi, estas empalmado ya?. Me pregunto Tania con cara
inocente y mir�ndome a los ojos


Tarde exactamente dos segundos en reaccionar y cruzar las
piernas. En ese movimiento le di una leve patada a Patricia y me fije que todas
las mujeres de la habitaci�n me estaban mirando.


- Vamos, joder, ens��anosla, que tu hermana nos ha dicho que
la tienes muy grande. Me dijo Patricia.


- Iros a la mierda . Salio de mi boca.


Me levante dispuesto a entrar en mi habitaci�n y dar por
terminada mi sesi�n de porno con las chicas. Pero en unos segundos mi cuerpo
quedo atrapado por cuatro manos.


Tania y Patricia me agarraban, Patricia por mis piernas y
Tania por mis hombros. Soy bastante fuerte, as� que tuvieron que echarse encima
m�a.


Me entro la risa, la imagen era c�mica y no quer�a pelearme
en serio con dos chicas.


Las dos se rieron, pero entre que yo me dejaba hacer y ellas
que no eran precisamente d�biles, lograron inmovilizarme.


La imagen era de un t�o sentado entre dos t�as, una dejando
caer su cuerpo sobre sus hombros y cuello y la otra con sus pechos encima de sus
piernas.


Ri�ndome le suplique que me dejaran ir, por que el simple
roce de sus manos sobre mi, hacia que el empalme que tenia mi miembro no bajara
lo mas m�nimo.


Patricia fue la que empez� el sobeteo. Con su codo apoyado en
mis piernas, lo movi� con rapidez y se poso en la cabeza dura de mi pene.


- Hostia, si que la tiene grande y dura, t�as. Dijo mirando a
las dem�s y con la voz ligeramente hist�rica.


- B�jale el pantal�n, b�jaselo!!!. Dijo Tania encima de mi.


Antes de poder protestar, antes de poder liberar mis manos y
taparme mi paquete, note el aire libre en mi pene. Patricia se me hab�a
adelantado y mi polla ya bailaba liberada y a un 80% de dureza.


- Va, joder, pasar de mi, venga ya vali� la broma!!!.
Proteste


- Venga d�jalo, que si no quiere no le vas a obligar. Escuche
decir a Pamela que pronunciaba estas palabras sin quitar ojo a mi miembro.



Yo deb�a estar como un tomate de colorado, por que el calor
que sent�a en mi cara era proporcionado al que sent�a en mi polla. Pens�:
"Joder, pero que es��. ". De repente el aire desapareci�, ahora notaba que mi
polla estaba tapada, por fin la hab�an dejado donde deb�a de estar.


No.


Craso error.


Mire hacia abajo, por que me parec�a extra�o que mi ropa se
moviera de esa manera alrededor de mi miembro.


No era mi ropa.


Patricia estaba chup�ndomela.


Jam�s, creedme, jam�s hab�a notado algo as�. Ojal� que todos
los chicos que le�is esto y que aun no os la han chupado sint�is ese placer
cuando os lo hagan por primera vez.


- Disfr�talo Javi, que Patri la chupa muuuy bien . Escuche a
Tania como si estuviera a muchos kil�metros de distancia.


De mi boca solo sal�a aire.


Mire de nuevo hacia abajo y vi como Patri me la com�a, me la
besaba, me la lam�a con lentitud y buen ritmo.


Puse mi cabeza contra el sof� y mire al techo. All� me
encontr� con la cara de Tania que me miraba con mucho vicio en sus ojos.


Bajo su cabeza hasta que sus labios comenzaron a comer de los
m�os. Su lengua busco sitio en mi boca y me la abri�, comenzando a recorrer
todos los rincones de mi paladar. La lucha de lengua comenz� fren�ticamente,
mientras Patricia segu�a con la mamada.


Mi primera mamada, acompa�ada de un morreo salvaje. No me lo
cre�a


La respiraci�n de Tania empez� a agitarse y su lengua se
volvi� loca en mi boca.


Mi polla se libero. Casi instintivamente me separe de los
labios de Tania y mire hacia abajo.


Patri se hab�a separado y ahora mis ojos ve�an acercarse a
Pamela, gateando por el suelo y sin dejar de mirar mi polla.


Tomo mi pantal�n por los tobillos y me lo quito r�pidamente
con un movimiento.


Tania empez� a desaparecer de mis hombros reptando por el
sof� hacia abajo, hacia mis piernas. Se apoyo en la pierna izquierda mientras
ve�a como Pamela sopesaba con su peque�a mano mis huevos y su boca se acercaba
peligrosamente a mi polla.


All� que comenz� a tragar, no me daba el mismo placer que
Patricia, pero el ver a la mas t�mida y mas bonita de cara haci�ndome la segunda
mamada de mi vida, pues hizo que me tumbase otra vez hacia atr�s.


Patricia volvi� y se sent� a mi lado. Comenz� a subirme y a
quitarme la camiseta. No me resist� y levante los brazos. Con Pamela mam�ndomela
y Patricia lami�ndome los pezones, solo Tania permanec�a parada viendo la
escena.


No por mucho tiempo.


Se sent� otra vez a mi derecha y bajando su cabeza comenz� a
lamerme y besarme el pez�n que hab�a dejado libre Patri.


No pude mas, era mi primera org�a, mamada, morreos y lamidas.


Grite, bufe, respire, mente a Dios y tire del rubio pelo de
Pamela en un gesto de desesperaci�n.


Me estaba corriendo.


Me estaba corriendo dentro de la boca de Pamela y lo mejor de
todo es que ella estaba tragando como una loca sedienta.


Mis caderas sub�an siguiendo el ritmo de los chorros de
liquido seminal caliente que sal�an de mi pene.


En un alarde de valor y templanza hice el esfuerzo de
levantar la cabeza y mirar a la �nica chica que no estaba haciendo algo a mi
cuerpo.


Sandra estaba sentada delante nuestra. Estaba con las
rodillas elevadas y los pies en el asiento del sill�n. Con una mano en su cara y
la otra perdida en la parte p�bica de su pijama, movi�ndose r�tmicamente.


Las cuatro manos de Patri y de Tania acariciaban mi cuerpo,
mi vientre, mi cara, labios y cuello. Tania me besaba en la mejilla sonriendo y
Patri aun me besaba y lam�a los pezones.


- �Te gusto capullin? . Me pregunto Tania con una p�cara
sonrisa en su boca


Asent� sonriendo con la cara mas imb�cil que seguro hab�a
puesto nunca


Pamela se separo de mi polla, despu�s de limpiarla bien y
delicadamente.


Tania se levanto de el sof� y con un gesto le hizo ver a
Pamela que ocupara su lugar.


Pamela se sent� a mi lado con cara de avergonzada pero
satisfecha. Sin quererlo se hab�a convertido en la primera t�a que se hab�a
tragado mi leche.


Antes de poder enamorarme de ella note como mi pene, aun con
ganas de juerga debido a los cero d�as de juerga que hab�a tenido, volv�a a ser
introducido en alg�n sitio cerrado.


Tania, mi amada, salvaje y fantaseada Tania.


Su boca se llenaba con mi m�sculo. Sus manos rodeaban y
masajeaban cuidadosamente mis huevos. Su lengua lam�a y rozaba la sensible
cabeza. Su saliva recorr�a todo el rollo de carne impregn�ndola de humedad y
preparando al miembro para su siguiente paso.


"Ahora vas a follarnos a las tres" Escuche de boca de alguna
de mis amantes.


"Ahora vas a follarnos a las tres"


"Ahora vas a follarnos a las tres"


"Ahora vas a follarnos a las tres"


Estas palabras resonaron en mi cabeza y o�dos. El miedo se
apodero de mi.


"Yo, follar, hoy, con las tres, con publico, no podr�, no voy
a poder y quedare mal, quedare como un impotente ni se me levantara��. Joder".
Fue lo que me dio tiempo a pensar antes de darme cuenta de que Tania me hab�a
puesto la polla mas grande y dura de lo que yo hab�a visto jam�s.


Creedme, no es lo mismo pajearte y excitarte mucho tu solo,
la polla se te dispara, pero jam�s a tanta altura como cuando una mujer te esta
haciendo algo all� abajo.





Se separo de mi pene y miro a las dos amigas orgullos de su
obra. La polla estaba reluciente, absolutamente descapillada y dura como un
t�mpano.


Las dos se apearon del sof� y dejaron de lamer y besar mi
cuerpo desnudo.


- Patricia, tu primero . Son� la voz de mi hermana desde el
fondo del sal�n.


Yo segu�a sin creerme lo que estaba pasando.


Patricia se adelanto en la fila que hab�an hecho
inconscientemente, delante de mis piernas.


Abri� sus piernas y se coloco encima de mi polla, aun dura y
lubricada.


Bajo un poco y con su mano derecha tomo el falo, lo restreg�
por sus labios exteriores y se dejo caer poco a poco.


Las sensaciones se mezclaban sin parar: el calor que
desprend�an sus piernas sobre las m�as, la presi�n de las paredes de su co�o
contra mi pene, lo r�pido y bien que entraba mi polla en su ser, los peque�os
botes que dio para clav�rsela hasta el fondo y los suspiros que emit�amos casi a
coro, hicieron que un espasmo de placer recorriera mi espina dorsal, mis pelos
se erizaron y mi piel se puso de gallina.


Patricia no era virgen y confi� en sus movimientos. Yo no
hice nada, no sabia que hacer, esas sensaciones recorriendo mi ser hac�an que
estuviera conmocionado y sin reaccionar.


Fue ella la que me llevo una mano a su culo y la otra a sus
grandes pechos.


Fue ella la que comenz� a moverse adelante atr�s, despacio y
sin prisa.


Fue ella la que me despert� de mi letargo con sus suaves
gemidos.


Fui yo el que sin pensarlo me lance a lamer y chupar esos
pechos con los que hab�a so�ado y fantaseado tantas veces.


- Mira como chupa el jodio, tenia hambre . Dijo Pamela con
tono jocoso, pero sin despegar sus ojos de los dos cuerpos que ya empezaban a
sudar y a moverse a buen ritmo.


Comenz� a moverse mas r�pido, mi polla estaba absolutamente
trampada y mas dura que una roca. La cabeza de mi duro miembro incluso llegaba a
un tope dentro de la cueva del placer de mi ocasional amante.


Patricia comenz� a moverse de una manera que a mi solo me
recordaba a los p�lvicos movimientos de Ryan en la pel�cula de "El exorcista".
Su cabeza comenz� a moverse aun mas salvajemente y sus oscuros cabellos iban y
ven�an en el aire. Por unos momentos no pude ver su rostro.


Mi creencia como buen virgen inculto era que los orgasmos de
las mujeres eran una leyenda urbana, que ellas gozaban durante la penetraci�n y
nada m�s, pero no. Entre mi miedo a estar haci�ndola da�o y sus convulsiones
empec� a sospechar que realmente estaba corri�ndose.


Su grito final, ahogado y clav�ndome las u�as en mis hombros
me confirmo mi sospecha. Acababa de tener un gran orgasmo.


Al separarse de mi, vi mi polla que estaba tan dura o mas que
cuando entro en su sexo. A su vez llena de flujos y calores de la cueva de donde
acababa de estar.


- Chicas, ten�is que probar esa columna de carne, este chico
virgen es un tesoro.


La verdad que no se si lo dec�a como un cumplido o si lo
sent�a de verdad. El caso fue que Tania y Pamela se me acercaron.


- Tania, tu ponte a la cola que ahora me toca a mi.


Las palabras de Pamela ya sonaban lejos, mi �xtasis y
calentura, viendo como la delgada y tetuda a la par que hermosa Pamela se
acercaba mojando sus dedos con su lengua para acto seguido restregarlos por los
labios de su sexo.


- Venga Javi haz que me corra, que hace tiempo que no tengo
buen sexo.


Yo no articulaba palabra. Estaba a merced de aquellas tres
chicas, las cuales se estaban aprovechando la ventaja de que mi fuerza sexual
estaba intacta.


Pamela se abri� de piernas, pero no vino hacia mi de cara. Se
giro, subi� su perfecto culo hacia mi cara y me dijo:


- Javi, c�meme el culito que me gusta mucho.


"�Qu� le coma el que?", pens� yo aturdido y cortado.


Pamela tomo sus nalgas y abri� su culito ante mi cara,
perfecto y delicioso.


"�Tengo que meter mi lengua ah�?", volv� a pensar


Tania se acerco a nosotros, desnuda. Solo pude fijarme en sus
pechos botando a cada paso.




Javi, campe�n, saca la lengua y poco a poco vas lamiendo
su agujerito�. Tu hazlo que esta riqu�simo.




Amigos y amigas, no os niego que la primera vez que escuchas
eso, aunque est�s mas caliente que el infierno, te da algo de reparo. Pero
sacando fuerzas de mi calentura y sintiendo como Tania empujaba levemente mi
cabeza hacia ese tesoro, acabe por tocar con la punta de la lengua acariciando
las paredes de su ano.



- Asiiiii, joder, as�, Dios. - Dijo Pamela mirando a Tania y
a mi � Tania que me lo comas m�s, m�s!!!!.


Note como Tania apretaba un poco mas su mano contra mi
cabeza.


Mezcl�ndose con la racionalidad de lo que estaba haciendo,
comenc� a sentir que el sabor que recorr�a mi lengua y labios me gustaba, si me
gustaba. Sub� mis inertes manos y las coloque cada una en una nalga. Tania vio
mi maniobra y dejo de empujar mi cara contra el culo de Pamela.


Comenc� a mover mi lengua desaforadamente y sin control sobre
su ya chorreante agujero.


- Javiiiiiiiiii, as�, as�, asiiiiiii, Joooodeeeeerrrrrrrrr.


Esas palabras no hicieron mas que mi lengua intentara
follarse el agujero que tenia delante. La verdad que no sabia si estaba
haci�ndolo bien o no pero sus gemidos y gritos y la nueva visi�n de ver como se
estaba masturbando con una mano, me dio a entender que si, que deb�a de estar
haci�ndolo bien.


Separ�ndose de mi boca, r�pidamente se coloco sobre mi dura
polla y se dejo caer.


La suerte fue que su co�o estaba como un lago de h�medo y que
apunto muy bien, por que la fuerza con la que bajo hubiera sido suficiente para
partirme el duro m�sculo .


No tardo en moverse mientras mis manos quedaban en el aire
sin saber donde posarse. No duraron mucho all�. Pamela le las tomo y se las puso
en sus grandes pechos, apret�ndolas con las suyas.


Al ser mas delgada que Patricia, se mov�a mas r�pidamente y
con mas euforia. No tardo ni dos minutos en correrse.


Su llegada al orgasmo fue diferente a la de Patri. Separo mis
manos de sus tetas. Se llevo las suyas a la nuca justo debajo de su melena rubia
y arqueando la espalda comenz� a emitir un gru�ido con los dientes apretados.
Empez� a levantar sus brazos y como en una ofrenda a no se que Dios, solt� un
grito digno de la mejor pel�cula de terror estirando sus brazos por encima de su
cabeza.


Tania aun a mi lado, me beso en la mejilla y me dijo:


- Javi, lev�ntala que creo que la chiquilla no puede ni
moverse.


As� lo hice y con su leve ayuda consegu� sentarla a mi
derecha en el sof�.


Como en un acto reflejo, volv� a mirar mi polla, no me cre�a
que aun estuviera as� de dura, jugos blanquecinos y opacos se hac�an notar. Las
chicas estaban descargando todas sus humedades en mi duro trozo de carne.


Tania se levanto de mi izquierda y se puso enfrente de mi. Yo
pensando que iba a comenzar a cabalgarme, me recost� hacia atr�s, como un dandy
ganador.


- Cambio de planes, chato. Escuche decir a la chica.



Estiro sus brazos hacia mi y con un gesto cog� sus manos y me
levanto con fuerza.


Sin soltarme de la mano y los dos desnudos como nuestras
madres nos trajo al mundo, Tania me llevo a la habitaci�n de mi hermana.


Cuando pase a su lado Sandra estaba es un estado de shock,
con los pantalones y sus braguitas debajo del culo y aun sentada en el sof�
individual, mirando al vac�o y con restos de sudor en su frente. No pude pararme
a verla o a decirle algo, por que Tania me llevaba con bastante prisa hacia la
grande y abierta cama de mi hermana.


- Ahora t�mbate ah� boca arriba.


Sus deseos se hicieron realidad.


Supuse que Tania quer�a follarme de manera diferente, yo
estaba dispuesto a todo y tenis ya una imperiosa necesidad de correrme otra vez.


Dispuesto a todo menos a lo que vi aparecer por la puerta del
dormitorio.


Tania a mi lado sentada en la cama, acarici�ndome la pierna
dec�a a Pamela y a Patricia que entraban desnudas en la habitaci�n:


- Chicas, ahora vamos a follarlo y a hacer que jam�s tenga un
orgasmo como el que le espera.


Tania se arrodillo frente a mi y me abri� las piernas con tal
brusquedad que casi sale de mi boca una queja.


Yo estaba asustado y si os digo la verdad no sabia que hacer.


No hizo falta hacer nada.


Tania comenz� a lamer mis huevos.


Patricia se arrodillo delante de mi cara y con una mano me
empez� a dar una de sus grandes tetas, para que mi boca la comiera sin piedad.


Pamela se arrodillo al lado de Tania y esta viendo la cara de
sed que tenia la reci�n orgasmada, paro de chup�rmela y pr�cticamente se la
meti� en la boca a la rubia. Esta comenz� a chupar con avidez, mientras Tania se
la sujetaba y me masturbaba a la vez.


En ese preciso momento, con dos chicas dando buena cuenta de
mi polla y con el gran pecho de Patri llenando mi boca, mi cuerpo comenz� a
sentir un calor y un hormigueo el cual hizo que comenzara a apretar mis manos,
los dedos de mis pies y a convulsionar mi pelvis al ritmo de los gemidos y
gritos que sal�an como pod�an de mi boca.



- Chicas, vamos a follarlo. Escuche decir a Pamela.


Note (por que tenia los ojos cerrados por el placer que
estaba sintiendo), como Patricia, Tania y Pamela se incorporaban. Mi cuerpo dejo
de notar los suyos por un minuto.


Otra vez ese calor.


Cuando logre abrir los ojos, vi como mi hermana estaba en la
misma posici�n que en el sal�n, pero esta vez en la silla de su habitaci�n, esta
vez solo tenia puesta la camiseta y nada de cintura para abajo. Segu�a
masturb�ndose con rapidez y como si estuviera haci�ndolo en Marte por la lejan�a
de su mirada.


Mi visi�n sobre ella desapareci� en cuento Tania se puso
delante de mi de pie en la cama y abierta de piernas, moj�ndose el co�o con sus
h�medos dedos y sonri�ndome.


- Lev�ntate y f�llame.


�Cre�is que dude en hacer lo que me ordenaba? Est�is en lo
cierto.


En menos de un segundo me levante y espere a que ella se
pusiera en cuatro patas con su depilado y h�medo co�o en una l�nea recta
perfecta con mi brillante y dura polla.


Patricia se adelanto a mi maniobra y tom�ndome la polla con
su mano, me la gui� hacia el co�o de Tania.


De un solo estoque se la introduc�, no encontr� oposici�n,
sus paredes y labios estaban mojad�simos y mi polla resbal� en toda su longitud
hacia sus entra�as.


Comenc� a bombear. R�pido y sin control, tomando sus caderas
con mis manos y apretando mis labios.


- Javi, ve mas despacio�.. haz que me corra. Me susurro Tania
girando su cabeza hacia mi.


As� lo hice, no quer�a meter la pata�. Solo la polla.


Cuando llevaba cerca de dos minutos foll�ndomela, sent� algo
en mis nalgas.


Gire la cabeza asustado y no vi a nadie. Baje la mirada y vi
a Patricia.


Estaba a cuatro patas con su cabeza mirando a mi culo y con
sus manos acarici�ndome y abri�ndome las nalgas.


Un respingo me recorri� mi espalda, cuando note como uno de
sus delgados dedos comenz� a acariciar el agujero entre mis nalgas.


Volv� a girar la cabeza y vi como se chupaba y mojaba ese
mismo dedo y como volv�a a jugar e intentar introducirlo en mi ano.


Pamela vio que no perd�a vista de lo que hacia. Mientras yo
segu�a follando como pod�a a Tania, la rubita me dijo.


- �chate sobre su espalda mientras la follas, que esto te va
a gustar.


Con ciertas dudas obedec�.


Justo cuando me gire y apoye mi pecho contra la espalda de
Tania, me encontr� con Patricia, abierta de piernas y con su sexo mir�ndome a la
cara, justo encima de la cabeza de Tania.


Esta vez nadie me dijo lo que tenia que hacer.


Me lance a lamer ese sexo.


Es curioso como cuando no sabes hacer una cosa y decides
hacerla igual y a lo loco, sin control, la mayor�a de las veces te sale mejor
que plane�ndolo todo paso a paso.


As� lo hice. Mi lengua comenz� a lamer todas las esquinas de
aquel depilado sexo, labios exteriores, labios inferiores, cl�toris, interior,
intentaba comerlo como si fuera un rico postre, pero este estaba m�s bueno.


Mi saliva ca�a en la espalda y cerca de la nuca de Tania que
apretando los tobillos de Patri con sus manos ya gem�a por las embestidas de mi
polla y por imaginar lo que le estaba haci�ndole a Patri justo encima de su
cabeza.


Estaba en pleno �xtasis y sintiendo otra vez ese calor y ese
hormigueo por mi cuerpo, cuando algo hizo que un placer como jam�s hab�a sentido
recorri� desde la ultima u�a de mis pies, hasta la punta de mi lengua, ahora
dentro del co�o de Patricia.


Pamela estaba lami�ndome el culo, pero no las nalgas no,
estaba lamiendo mi agujero, el ano.


Siempre pens� que eso era de maricas o de gente rara. Pero me
di cuenta r�pidamente que yo marica no era, pero si raro y la lengua de la
preciosa Pamela, que estaba taladr�ndome el ano, me estaba proporcionando un
placer como jam�s hab�a sentido.


Patricia en un estado de shock, como los dem�s, me tomo la
cabeza y comenz� a apret�rmela contra su sexo. Conoc�a esos s�ntomas y sabia que
se iba a correr.


Una marea de sabores y humedades inundo mi boca, cuando un
grito lleno la habitaci�n.


Patricia se corr�a otra vez. Y muy alto y profundo.


Se separo de mi, sent�ndose en la cama mir�ndonos con cara de
�xtasis.


Tania comenz� a gritar las mas soeces palabras imaginables,
golpeando la cama con una mano y con todas sus fuerzas.


La lengua de Pamela estaba haciendo estragos, ya que ahora la
ni�a se dedicaba a masajearme los huevos mientras me hacia el masaje rectal.


Tania se separo de mi como pudo y se sent� al lado de Patri,
apoyando su cabeza en su hombro.


- Diiiiooosssssssss. Grite mientras giraba la cabeza, para
ver como la cara de Pamela desaparec�a entre mis nalgas.


No pod�a mas y notaba como mi esperma quer�a abandonar mi
cuerpo.


- Pame, d�jalo y ven aqu� que nos va a dar el postre.


Alguien dijo eso, pero no acierto a decir cual de las chicas.


Dejo de lamer mi culo y se limpio con su bracito, poniendo
cara de vicio y mir�ndome a los ojos.


Tambi�n se sent� junto a las otras dos.


Patricia me llamo con su mano en un gesto de invitaci�n a ir
hacia ellas.


- Ahora t�mbate boca arriba y deja que lo hagamos nosotras.


Lo hice, ya necesitaba correrme, mi polla temblaba e incluso
dol�a de lo tiesa que estaba.


Las chicas, como tres sedientos vampiros, hicieron un corro
junto a mi pene y comenzaron a pajear, chupar, lamer y morder todo mi triangulo
sexual.


Huevos y polla desaparec�an entre seis manos, entre tres
bocas, se la turnaban, se peleaban por ellos, dos manos me pajeaban a la vez
mientras otras dos bocas me lam�an y chupaban los huevos. Yo quer�a meter mi
mano all�, pero ellas me lo imped�an. Era como una jaur�a de perros hambrientos
comiendo despu�s de d�as sin probar bocado.


Comenz� otra vez el temblor, el hormigueo, el placer, el
calor. Mis manos se aferraron a las sabanas con fuerza y mi pelvis se arqueo
hacia arriba con las tres cabezas encima, chupando, lamiendo y haciendo todo lo
posible por sacar el blanco tesoro.


Un torrente de placer surgi� de mi zona sexual y un grito
desgarrador naci� de mi garganta. Las chicas, notando como los temblores eran el
preludio de mi gran corrida, sacaron sus tres lenguas y pusieron mi polla casi
pegada a ellas.


Me corr�.


Mi grito me desgarro la garganta y haciendo un gran esfuerzo,
tuve que parar por el dolor que sent�a. Sent� como mi cuerpo me abandonaba y se
deten�a en el techo de la habitaci�n, viendo como tres cabezas rodeaban mi falo
y se mov�an como sanguijuelas devorando un trozo de carne. Mi cuerpo volvi� a
bajar y gracias a eso pude seguir gritando y golpeando el colch�n con mis manos
y pies en un temblor mas parecido a una posesi�n que a cualquier otra cosa
razonable.


Las chicas se peleaban por beber la espesa y abundante leche
que sal�a de mi polla. Movi�ndola y turn�ndose en la direcci�n que tomaba mi
trozo de carne, hac�an que en mi no quedara nada de leche blanca.


Cuando todas me la lamieron y me la limpiaron y secaron, se
separaron de mi, no sin antes darle un mimoso beso en su cabeza.


No pude levantarme, pero las chicas fueron de una en una
despidi�ndose de mi d�ndome sendos besitos en mis labios.


Salieron de la habitaci�n y supuse, por el rumbo que tomaron
que ir�an al ba�o a ducharse.


Estaba absorto, jam�s podr�a superar aquella, mi primera
noche de sexo.


Unas palabras interrumpieron mis pensamientos.


- Te gusto? . Me pregunto mi hermana


No pude responder, no sal�an palabras de mi boca. Solo me di
la vuelta, la mire en su silla, abierta de piernas con su sexo depilado y con
gesto de placer.


Repase su cuerpo, nunca la hab�a visto as� de desnuda siendo
los dos tan adultos, era preciosa y no niego que esa visi�n me excito, pero no
quer�a intentar nada, seria demasiado atrevido y pod�a joder una relaci�n muy
buena y que, visto lo de esta noche, me pod�a reportar muchas alegr�as.


- Eres la mejor hermana del mundo . Logre decir.


- Tu si que estas hecho un machote. Me dijo ri�ndose y
levant�ndose.


Se acerco hacia mi y con un suave beso en los labios y una
caricia en mi cara, se alejo por la puerta.



As� acabo la noche en que descubr�, que por muy freaky que
seas, siempre acabaras follando y que las mujeres son lo mas inesperado que hay
en todo el mundo.


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Relato: La primera del freaky
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