Historia de mi primer tr�o, yo con 17, mi amigo 16 y su
compa�ero de pensi�n con 27 a�os. Hechos reales.

Me presentare, me llamo Juan, en esta �poca ten�a 17 a�os,
trabajaba en un peque�o bar. ( mi primer trabajo ), justo en una calle cercana
trabajaba un chico que me gustaba mucho, en una cafeter�a, ( al final consegu�
que fu�ramos amigos ), se llama Andr�s, ten�a 16 a�os, tambi�n camarero,
compart�a habitaci�n en una pensi�n con un camarero compa�ero suyo en la misma
cafeter�a de 27 a�os, ( Jos� ).

Como todos supondr�is los nombres si que no son reales el
relato si es real.

Para conseguir hacerme amigo de Andr�s, todos los d�as, al
terminar mi trabajo pasaba por su cafeter�a y me quedaba en la barra, para poder
hablar con �l, poco a poco cogimos confianza, de tal forma que todas las noches
lo acompa�aba al salir del trabajo, hasta su habitaci�n en la pensi�n, donde
dorm�a.

Al final me invito a subir una noche, sin esperar a nada m�s
al llegar a la habitaci�n, se desnudo y qued�ndose en slip, se meti� en cama,
siempre actu� como si estuviera haciendo un striptis para m�, pero nunca me hizo
ninguna insinuaci�n.

Hasta que al final su compa�ero un d�a va y me dice:

Jos�.- oye no sigas siempre con la vista fija en Andr�s, sino
se dar�n cuenta los dem�s clientes y el jefe tambi�n puede enterarse de que te
gusta.

Yo.- lo siento, pero estas equivocado, yo no estoy viendo
para Andr�s, solo es un amigo.

Jos�.- JaJaJa, te crees que soy tonto o que?

Yo.- NO, por que dices eso?

Jos�.- Andr�s no te ha dicho aun quien soy yo verdad?

Yo.- no, es algo importante, solo eres su compa�ero de
trabajo y de cuarto.

Jos�.- tambi�n soy� un travest� que trabaja como lo que soy
en una discoteca de ambiente que hay justo debajo de donde vivimos.

Yo.- ( asombrado ), no, nunca me ha contado eso.

Jos�.- y tampoco te ha dicho que todos los d�as cuando te vas
del cuarto despu�s de acompa�ar, lo y que �l se meta en la cama, se queda tan
caliente que acaba por hacerse una paja, pensando en ti?.

Jos�.- vaya par de tontos, los dos quer�is lo mismo y ninguno
da el primer paso, seguro que t� tambi�n te pajeas al llegar a casa.

Yo.- ( todo colorado ), No, yo no quiero nada de eso, solo
somos amigos, eso es todo.

Jos�, bueno vale, pero que sepas que fue �l el que me pidi�
que te lo contara, esta esperando a que tu des el primer paso, puesto que �l no
se atreve, tiene miedo al rechazo, tu veras que hac�is.

Estuve como 15 d�as sin pasar por junto el chico del cual me
enamore como un loco, solo de la verg�enza que pase al saber que el esperaba
algo de mi, y que lo supiera su compa�ero de cuarto.

Al final, volv� una noche a pasar por su trabajo, y como
siempre lo espere a que terminara.

Andr�s.- hola, cre�a que estabas enfadado conmigo, o que
estabas enfermo.

Yo.- no lo que pasa es que tenia muchas cosas en las que
pensar.

Andr�s.- bueno, lo que importa es que estas aqu�.

Al llegar a su habitaci�n, me comenta que le duele la espalda
, y me pide un masaje, Yo sin dudarlo le dije que si, se tumba en slip en la
cama boca abajo, le empiezo a dar el masaje por los hombros y voy bajando poco a
poco.

Al llegar a la altura del slip, le digo que seria mejor que
se lo quitara, as� no se lo manchar�a de la crema, sin que se lo pidiera dos
veces, se lo quita al momento.

Le sigo dando el masaje por la cintura, pasando un poco las
manos por los costados, hacia el estomago, �l levantaba un poco su culito, para
que yo pudiera pasar las manos mas abajo, de cada vez me acercaba m�s a su
polla.

Los dos est�bamos muy calientes, se notaba que de esa noche
no pasaba sin que tuvi�ramos el tan esperado sexo.

Yo.- date la vuelta, para seguir con el masaje por delante.

Andr�s.- no, ser� mejor que lo dejemos as�.

Yo.- por que? Tan mal lo estoy haciendo?

Andr�s.- No, lo estas haciendo tan bien, que me he empalmado,
por eso no quiero darme la vuelta.

Yo.- y eso te preocupa?, anda somos amigos, date la vuelta y
cierra los ojos, as� no tendr�s tanta verg�enza, no me mires y ya esta.

Andr�s.- bueno, pero no te r�as de m�.

Se dio la vuelta, y la verdad es que ten�a su polla a punto
de explotar, al ver que yo no me re�a de �l, cerr� los ojos, y se relajo un
poco.

El masaje, esta vez empec� por las piernas, subiendo poco a
poco, desde los pies hasta las rodillas, desde ah� hasta la misma ingle, sitio
del cual pase de largo, por lo que �l abri� un poco los ojos al darse cuenta de
ello, yo segu� d�ndole el masaje por el pecho, y subiendo poco a poco, por lo
que tenia que ponerme mas cerca de �l, casi encima suya, ya que yo estaba
sentado justo a los pies de �l.

Cuando mis manos llegaron a los hombros, yo tenia justo su
polla muy cerca de mis labios, le sople un poco en ella, y �l se puso un poco
tenso, pero no dijo nada ni abri� los ojos, lo cual me estaba dando permiso,
para seguir con algo mas, o parec�a que lo estaba deseando.

Con mucho miedo al rechazo, fui acercando los labios a la
cabeza tan linda que estaba esperando ser engullida, y mirando por si tenia los
ojos abiertos, de pronto, le di un beso en la cabeza, �l solo dio un suspiro, al
ver que no tenia rechazo, me la met� entera en la boca, lo �nico que hizo fue,
posar sus manos en mi cabeza, como para no dejarme que la quitara de ese pl�tano
tan apetitoso.

Al cabo de unos minutos, cuando estaba a punto de correrse,
me pidi� que parara y que me quitara la ropa, sin dejar que le respondiera �l
mismo empez� a quit�rmela �l mismo.

Al estar los dos en pelotas, me pidi� si pod�a hacerme el lo
mismo, por supuesto que le dije que si, empez� a lamerme la polla desde la
cabeza hasta los huevos, as� casi asta que yo casi me corro, lo pare y le dije:

Yo.- quiero que te corras al mismo tiempo que yo, por lo que
quiero hacer un 69.

Se coloco en la posici�n ,y empezamos a mamarnos los dos, as�
durante unos minutos hasta que nos corrimos, los dos.

Sin darle tiempo, a nada m�s, le cojo la cabeza y sin
pensarlo le doy un beso en los labios, mezclando nuestro semen.

Nos besamos hasta que no dejamos nada de leche en la boca del
otro, descansamos un poco, y hablando nos contamos las ganas que ten�amos desde
hacia mucho tiempo, al cabo de unos minutos ya est�bamos acarici�ndonos otra vez
con las pollas tiesas, pidiendo mas guerra.

Justo est�bamos decidiendo quien penetrar�a al otro primero,
llaman a la puerta de la habitaci�n.

Era el propietario de la pensi�n que quer�a cambiar una de
las bombillas que estaba rota, como no pod�a tener visitas en la habitaci�n, y
mucho menos pod�amos permitir que nos viera en ese momento, no me quedo otro
remedio que meterme desnudo debajo de la cama, junto con mi ropa��.

Bueno, hasta aqu�, la primera parte de este relato, en cuanto
me sea posible escribir� el final. Por favor valoren el relato y dejen sus
comentarios.

( Andr�s ) tu sabes tu verdadero nombre, si lees esto que
sepas que te hecho de menos y que en septiembre vuelvo a casa para 15 d�as,
ponte en contacto conmigo, me gustar�a verte y saber de ti. Un beso.