Hac�an varios a�os que ambos quer�an hacerse el amor con todo ese gran deseo que ten�an reprimidos, y que no hab�an podido ejecutar por que ambos estaban casados por separados. Yo le entregue a mi esposa.
El placer se sentierse deseada y admirada no tiene precio, creo que es uan experiecia muy apetecible para una mujer ver que los t�os la miran y desean.
La adolescente mirona se masturaba ante m�, y yo..
Con pocos disimulos va y separa sus muslos, encar�ndome. Yo, me dejo hacer que mis manos se desprendan de in�tiles verg�enzas e inicien un baile de caricias y tocamientos para ella, para viciar m�s su personalidad. Me mira, est� casi con miedo de hacer un ruido que pueda despertarme o romper el encanto de este m�gico momento. Con mis actos, premedito y me hago cosas, de tal modo y forma que s� que la pondr� a mil; y por eso voy a regocijarme y exagerar un poco m�s lascivamente cada nuevo acto, encadenando una secuencia que ha sido generadora de sus fantas�as y tocamientos a solas. Ahora, Berta est� feliz..., pues sabe que nos estamos tocando juntos...
Una joven y exuberante chica se presta a hacer de modelo para una clase de anatom�a en un instituto, se va calentando hasta que pierde todos los papeles acabando por convertirse en el juguete sexual de un profesor y de un grupo de maquiav�licos adolescentes...