Emma era una mujer de unos 30 a�os aproximadamente, de unos
1,75 m. de altura, morocha de piel muy blanca, pelo negro azabache, ojos grandes
y negros.- Ten�a un cuerpo realmente espectacular, sin decir que era una barbie,
era una mujer hermosa, delgada con buenas curvas, es decir era carnosa, mucha
cola, buenos pechos y cintura marcada y piernas largas y flacas.-

Era la �nica hija de un matrimonio que la tuvo de grande,
vale decir que sus padres la hab�an educado muy bien, con buenos modales, muy
delicada, respetuosa, buen gusto, inteligente, practicaba deportes, de un
car�cter mas bien callada tirando a t�mida, es decir una mujer deseable por
cualquier hombre yo dir�a por todos.-

Se hab�a casado muy joven a la edad de 19 a�os, con Esteban
un joven abogado que para aquel entonces ten�a 25 a�os, era un buen hombre,
trabajador e inteligente que se hab�a asociado con el abogado mas famoso de la
ciudad que se llamaba Ra�l ( YO. .).-.

Emma y Esteban estuvieron casados unos 8 a�os
aproximadamente, estaban muyenamorados, hab�an tenido dos hijos.- Viv�an muy
bien y estaban ahorrando para hacerse su casa cuando sucedi� lo peor de todo,
Esteban falleci� a la edad de 33 a�os, fue v�ctima de un accidente de tr�nsito
en un viaje de negocios.- Para Emma con unos 28 a�os, eso hab�a sido un golpe
muy duro, pues no solo que estaba muy enamorada de su marido sino que se vio
sola ante el mundo, con dos hijos que mantener, sus padres ya hab�an fallecido,
no ten�a hermanos y nunca hab�a trabajado, pues Esteban ganaba bien y no quer�a
que ella trabajara.- La angustia de la joven mujer se transform� en una
depresi�n aguda, que le dur� poco mas de un a�o hasta que tom� conciencia de que
ten�a que superar aquello.-

Hasta ese momento no ten�a problemas econ�micos pues gracias
a Dios conservaba parte de los ahorros que supieron juntar con su marido y
tambi�n hab�a cobrado una buena indemnizaci�n por la muerte, la cual conservaba
intacta pues ser�a el dinero para el estudio de sus hijos.-

Superado el problema de depresi�n, Emma tom� la firme
decisi�n de que deb�a comenzar a trabajar, para ello ocup� parte del dinero que
ten�a y puso un negocio dedicado a la venta de lencer�a y medias para mujeres,
pues entendi� que su buen gusto le servir�an para que aquello funcionara.- Al
principio no le fue tan mal, efectivamente la ropa que compraba era de calidad y
linda, ten�a una clientela muy selecta, pero si bien se manten�a aquello no el
permiti� progresar, hasta que la situaci�n econ�mica comenz� a empeorar y las
ventas disminuyeron demasiado llevando a Emma a la banca rota, ten�a muchas
deudas y tubo que afrontar la indemnizaci�n de su �nica empleada.-

As� es que se vio en la obligaci�n de cerrar el negocio y
buscar un trabajo como empleada, pues ten�a que pagar el alquiler de su casa,
mantener a sus dos hijos que para ese entonces ten�an unos 7 y 9 a�os
aproximadamente en fin ten�a que afrontar todo sola, pues cuando enviud� se jur�
no formar pareja nuevamente hasta que sus hijos crecieran.-

En ese estado es hallaba Emma cuando se encontr� con migo
(Ra�l), me cont� por lo que estaba pasando, realmente la vi muy desesperada y de
inmediato, casi por instinto, vi la posibilidad de sacar provecho de aquella
situaci�n.- As� que sin pensarlo le dije

.- "No te preocupes . . . creo que tengo algo para vos,
ven� a verme ma�ana y hablamos. .", ella contest� ". . enserio . . .",
yo afirm� ". . seguro, vos ven� que siempre hay algo para la mujer de un
amigo . . ." dije en un tono casi paternal.-

Yo soy un Abogado grande, he trabajado muy duro y los a�os de
profesi�n me dieron prestigio y mucho dinero, me desempe�o como abogado de
varios bancos y compa��as de seguro, de modo tal que realmente tengo mucho
dinero he influencias.- Soy un hombre alto de 1,95 m., morocho, delgado, con una
panza propia de la edad, nunca me gustaron muchos los deportes, as� que mi
cuerpo no es atl�tico.- Debido a mi excesivo trabajo nunca tuve tiempo de
divertirme, no soy lindo as� es que tampoco tuve surte con las mujeres, pero si
supe acumular mucho dinero.- Estoy casado desde hace 30 a�os, con Cristina, que
tiene mi misma edad, as� que como podr�n imaginar mi vida sexual es muy
aburrida.-

Regresando a lo anterior, luego de hablar con Emma, tuve una
sensaci�n de cosquilleo en el est�mago, estaba viendo la posibilidad de poseer a
esa hermosa hembra que siempre hab�a deseado, desde que era muy joven.- Ella por
su puesto nunca se hab�a fijado en m�, no solo por que cuando su marido era mis
socio ella estaba muy enamorada de el, sino por que yo era para ella un viejo, y
que por otra parte (como ya lo dije) no era atractivo.- As� que nuestros
encuentros eran muy casuales, sol�amos vernos muy de ves en cuando en alguna
cena o circunstancialmente cuando pasaba por el Estudio Jur�dico a saludar a su
marido, de la muerte de este �ltimo perdimos contacto y solamente nos
salud�bamos en la calle cuando casualmente de encontr�bamos.- Siempre fue
hermosa, bien vestida, buenos perfumes etc.-

Comenc� entonces a tejer mi plan, llegue a mi oficina y de
inmediato desped� a mi secretario, hac�a poco que trabajaba para mi y era un
estudiante de derecho, lo indemnice sin muchas vueltas, total dinero no me
faltaba.-

Al otro d�a Emma se present� muy temprano en mi oficina,
estaba muy bien vestida y perfumada, se hab�a arreglado muy bien para
entrevista, labios pintados de color rojo, aros grandes, los ojos le brillaban
como de entusiasmo y esperanza.- Le explique que necesitaba una secretaria de
confianza y que sea competente bien hablada y sobre todo competente.- Le dije
que me hab�a quedado sin secretario por que el que ten�a no me serv�a as� que
estaba dispuesto a darle el empleo.- Le pregunte que sab�a hacer, y me contesto
que " . .escribir a m�quina y algo de computaci�n . . .", as� que me hice
el pensativo y luego le dije que la tomaba.-

Emma estallo de alegr�a, no sab�a que decir, pero mas aun se
asombr� cuando le dije lo que le iba a pagar.- Por supuesto que eso era parte de
mi plan, as� que el sueldo que le promet� era mas de dos veces lo que cobraba
una secretaria especializada.- Todo estaba calculado, le pagaba lo suficiente
como para que pudiera seguir manteniendo su nivel de vida, es decir el alquiler
de su casa, ropa, auto, el colegio de los chicos etc..-

Ese mismo d�a, le ped� que se quedara a trabajar.- De
inmediato y como un buen Abogado le hice firmar todas las solicitudes y
formularios para su inscripci�n como empleada, tambi�n le hice firmar su
renuncia en blanco y le expliqu� que eso era de rutina que si no la quer�a
firmar que no lo haga, pero ella me dijo " . . .no por favor no hay ning�n
problema . . .", ya que yo le inspiraba mucha confianza.-

Lentamente fui ense��ndole todas las cosas, le explique con
mucha seriedad como quer�a que se vistiera, le dije ". . . Mira Emma, quiero
que te vistas muy bien, este es un Estudio de mucha trayectoria, por ende vienen
muchos hombres importantes, de modo que vos como secretar�a tenes que estar
siempre atractiva, te rogar�a que no uses pantalones, y que tus polleras no sean
muy largas . . ." luego agregue " . . . vos sabes como son los hombres no
. . . siempre es bueno un toque femenino . . .".- Emma con toda inocencia me
dijo " . . entiendo perfectamente . . .".-

La verdad es que me asombr�, aprendi� todo con mucha
facilidad era muy competente y responsable con su trabajo, se vest�a siempre
como le hab�a indicado, con trajecitos de polleras cortas y al cuerpo en
diversos tonos.- La verdad era que me calentaba mucho cuando lo ve�a, sab�a que
ser�a m�a pero llevar�a su tiempo, iba a ser mi perrita.-

Luego de aproximadamente 6 meses, Emma estaba completamente
ambientada a su trabajo.- Yo la trataba muy bien, con mucho respeto y hac�a que
realmente sea un trabajo agradable, ella depend�a de su sueldo pero necesitaba
que dependa aun mas, as� que hab�a llegado el momento de avanzar.-

Le coment� que ten�a un buen negocio para ella, consist�a en
que se comprara su propia casa, le explique que por medio de uno de los bancos,
del cual yo era abogado, pod�a hacer que obtuviera un cr�dito.- Ella dijo " .
. . no Ra�l, te agradezco, pero eso es imposible . . . mi econom�a no da para
tanto . .", le insist� dici�ndole que hab�a visto una casa muy bonita que
estaba a su alcance, as� que la convenc� para que la fu�ramos a ver, ella acept�
pero solo por compromiso.- La casa era hermosa en pleno centro, era lo que ella
so�aba, al verla se enamor� de ella y realmente se entusiasm� mucho, pero cuando
se enter� del precio se desanim� mucho y dijo " . . . no Ra�l es imposible,
jam�s podr�a comprarla es muy cara .".-

Yo sab�a que ella estaba en lo cierto, esa casa jam�s pod�a
ser adquirida por una simple secretaria, pero le dije " . . . confi� en mi .
. deja todo en mis manos, yo te voy a manejar el negocio . . .".- Al otro
d�a ella no pod�a aguantar las ganas de saber como obtendr�a la casa, la llame y
le dije ". . . mira Emma, cuanto dinero ten�s ahorrado . . .", la cifra
que me dio solo alcanzaba para el 30 %, pero me dijo " . . . ese dinero no lo
voy a tocar por que es para el estudio de los chicos . . .".- Yo le dije
". . . mira si entregas ese dinero, yo te voy a pagar las cuotas que resten, sin
obligaci�n de devolverlo, y con lo que te ahorras en el alquiler vas a poder
guardar para cuando los chicos vayan a la facultad . . .".-

Ella me mir�, y dijo ". . . no Ra�l, te agradezco, sos muy
amable, pero no puedo aceptarlo . . .", le insist� haci�ndole creer que lo
hac�a por la amistad que ten�a con su marido le dije ". . . mira que no vas a
tener otra oportunidad como esta . . .", hasta que no pudo m�s y acepto.-
Entreg� todo sus ahorros e hipotec� la casa por el resto, las cuotas de la
hipoteca importaban dos de sus sueldos los que yo pagar�a durante los pr�ximos
dos a�os, supuestamente en forma desinteresada.-

Ahora si, la econom�a de Emma depend�a exclusivamente de m�.-
De modo que era el momento de seguir avanzando.- A los dos meses de aquello,
sabiendo de su completa dependencia, comenc� a inventar errores en sus trabajos,
es decir primero le daba una orden y luego la negaba, me quejaba de sus
trabajos, le dec�a que se arreglara mejor etc., todo estaba mal nada me
conformaba.- Eran mentiras para desorientarla, la hac�a sentir mal, realmente se
sent�a como una incompetente, pero todo era fr�amente calculado por mi.- Emma
por su excesiva responsabilidad nos sab�a que hacer para conformarme, mientras
yo me volv�a mas y mas exigente.-

Un d�a escond� unos papeles, y luego se los ped�a, ella por
supuesto no los pod�a encontrar as� que me hice el enojado, realmente deb� haber
puesto una cara de muerte por que la muy pobrecita temblaba como una hoja, as�
que le dije mira esto no puede seguir as�, ma�ana hablamos.-

Al otro d�a muy temprano, Emma estaba en la oficina con una
ansiedad que no se aguantaba, llegu� y ni la salud�, ped� que me preparara el
caf� y que me lo llevara a mi despacho y que luego hablar�amos.- Emma entro a mi
oficina muy callada, le ped� que se sentara y le dije ". . . mira Emma, no se
que te est� pasando, pero esto no puede seguir as� . . ., realmente has cambiado
mucho, no estas rindiendo lo suficiente . . .", ella solo miraba hacia
abajo, sin decir una palabra, conclu� ". . . voy a que tener que despedirte .
. .".-

Cuando dije eso Emma empalideci�, y dijo ". . . no Ra�l,
te prometo que voy a cambiar, no se que me pasa, dame una oportunidad mas . .
.".- Yo muy serio y sin pesta�ear le dije ". . . creo que ya te di muchas
oportunidades, y he sido muy bueno con vos . . .", ella dijo " . . . si
es cierto, pero no podes echarme ahora, sabes que si pierdo este empleo voy a
perder todo . . .".- Se estaba dirigiendo justo a donde yo quer�a, y eso me
empezaba a gustar, yo segu�a serio y le contest� ". . . bueno Emma, yo hice
todo lo que puede por ayudarte, pero vos no cooperas, ac� se manejan cosas muy
importantes y as� no me sos �til . . .".-

Emma comenz� a llorar y a suplicar " . . no por favor no
me hagas esto, que quer�s que haga, te juro que voy a esforzarme mas .. .",
le ped� que se retirara para pensarlo mejor.- Ella se fue llorando, yo no le
dirig� la palabra durante toda la ma�ana, solamente le daba �rdenes concretas y
muy serias.- Por la tarde, antes de cerrar cuando ya hab�a oscurecido, la volv�
a llamar a mi despacho y le dije ". . . estuve pensando mejor y puede que no
te despida. . .", la luz es sus ojos se encendi�, y le dije ". . . pero
vas a tener que ser un poco mas atenta con migo . . .".- La muy inocente no
entend�a nada de lo que yo le estaba diciendo, y me contest� ". . . si lo que
quieras Ra�l, si fui desatenta perdoname, quiz� no me he dado cuenta, dec�me en
que quer�s que cambie. . .".-

Yo la mir� fijamente, por que sab�a que ella no ten�a idea a
lo que yo apuntaba, as� que le dije ". . . mira Emma, vos sabes que yo soy un
hombre que hace mucho tiempo que esta casado . . .", ella escuchaba
atentamente y me dijo ". . . si y que pasa con eso . . .", segu� " . .
. bueno que mi mujer est� un poco avejentada y yo realmente estoy cansado de ver
siempre a la misma mujer desnuda . . .".- Emma segu�a sin entender nada,
mir�ndome como desconcertada sin saber a donde yo iba con aquello, y me dec�a
" . . si . . te escuhco . . .".-

Yo sin dar mas rodeos le dije ". . .lo que pasa es que vos
sos una mujer joven, con un cuerpo que realmente me atrae . . .", reci�n ah�
Emma comprendi� lo que yo le estaba insinuando.-

Se puso muy nerviosa y me dijo ". . . a que quer�s llegar
Ra�l. . .", yo dije ". . . bueno si hicieras algunas cosas que te pido,
puede que no te eche . . .", ella con cara de indignaci�n pregunt� " . .
. que cosas . . ." y yo contest� ". . . algunas cosas simples, no te voy
a pedir mucho . . .".- Se not� el rubor en su cara y dijo ". . .me estas
haciendo alguna propuesta indecente . . .", yo contest� " . . . no tan
indecentes, solo que le des algunos gustos a este viejo . . .", ella dijo
". . . Ra�l nunca lo pense de vos, cre� que eras un hombre ejemplar . . .".-
Yo le dije ". . . lo soy, pero me gustan las mujeres como a todos . . ."
y re� burlonamente, mientras saqu� su renuncia en blanco de un caj�n se la
mostr�.-

Emma comenz� a lagrimear, no pod�a creer lo que le estaba
diciendo, miraba hacia abajo como pensando, sab�a que no ten�a salida, levant�
la mirada y con un tono de resignaci�n me dijo " . . . que qur�s que haga . .
.", en ese momento supe que hab�a ganado la batalla y le contest� ". . . no
mucho . . ." y sonre� con un tono de lujuria �

Sab�a que deb�a comenzar someti�ndola lentamente, casi sin
que se diera cuenta, de otro modo corr�a el riesgo de asustarla y que en un
ataque de histeria femenina renunciara sin medir las consecuencias, as� que le
dije ". . . ya es tarde, es hora de cerrar, echa llave a la puerta y regres�
. . .".- Emma se sec� algunas lagrimas que aun le corr�an por las mejillas y
con la cabeza gacha obedeci�.- Escuch� que hab�a cerrado la puerta, mientras yo
esperaba ansioso su regreso, entr� a mi despacho, permanec�a sentado tras mi
escritorio mientras ella se qued� parada frente a mi del otro lado, con la
cabeza hacia abajo en un absoluto silencio sin mirarme, esperando alguna orden.-

Yo estaba muy excitado por la circunstancia, era como tener
un cordero indefenso en mis manos, le orden� que me sirviera un vaso de wisky
(que siempre tengo en el estudio) me acomod� en mi sill�n como para ver una
pel�cula y le orden� que se parara en el medio de mi despacho, el cual es muy
grande, y le dije ". . . vamos a ver que traes debajo de esa falda . . .",
ella no hac�a nada, solo permanec�a quieta en una posici�n casi militar con su
brazos al costado en el medio de mi oficina, yo en un tono insistente le dije
". . . quiero que lentamente de vayas subiendo la falda, hasta donde yo te lo
ordene . . .", los ojos de Emma estaban llenos de l�grimas pero comenz� a
obedecer, tom� la pollera que le llegaba justo por encima de las rodillas y
lentamente la comenz� a elevar.-

Lo hac�a en forma excesivamente lenta, por verg�enza e
indignaci�n, como neg�ndose, pero no sab�a que aquello me excitaba mucho mas,
comenzaban a aparecer sus largas piernas blancas, sobre cuyos muslos se
percib�an peque�os y delicados vellos.- Cuando estaba a punto de aparecer su
ropa interior le orden� que se detuviera y que lentamente comenzara a girar
sobre si misma.- Con sus piernas casi todas descubiertas pod�a apreciar sus
muslos bien formados con un tono muscular muy femenino, cuando estuvo justo de
espaldas hacia mi le orden� ". . . ahora quiero que me muestres tu colita,
pero lentamente . . .".-

Emma obedec�a cada orden, le costaba elevar la falda tipo
tubo que tra�a, su precioso y redondo culo le imped�a deslizarce con facilidad,
asomaron t�midamente el principio de sus nalgas y luego apareci� entre medio de
ellas, metida en la zanja de su culo una preciosa bombacha de color rosa con
encaje, no era de tipo tanga pero estaba toda metida en entre esas preciosas
carnes ya que al tener un culo tan redondo y grande era imposible que su ropa
interior no se deslizara hacia adentro.- Termin� de elevar su vestido hasta que
lo ten�a todo abultado en la cintura.- Que maravilloso espect�culo, esa cola
carnosa, redunda, blanquita, con la bombachita toda metidita, debajo de la cola
entre sus piernas se formaba un perfecto tri�ngulo, la dej� parada en esa
posici�n mientras saboreaba mi trago, y le dije ". . . ahora quiero que
separes un poquito las piernas . . .", lo hizo muy suavemente, yo
experimentaba una erecci�n espectacular, ella permanec�a ah� como una especie de
estatua viviente solo para mi.- As� que le di una nueva orden " . . . quiero
que te inclines lentamente, y que apoyes las manos en las rodillas como formando
una letra A, as� puedo ver mejor tu culito . . .", Emma no estaba
acostumbrada a ese vocabulario, me mir� sobre sus hombros con una mirada de
indignaci�n mientras yo con un gesto confirmaba la orden.-

Ella obedeci� una ves m�s, se inclinaba lentamente mientras
yo pod�a apreciar como sus nalgas se separaban por la postura que le hab�a
ordenado, al mismo tiempo que comenzaba a vislumbrarse su abultada vagina.- De
su ropa interior se escapaban algunos vellos suaves y brillosos, se notaba que
ten�a una abundante mata de pelos.- Me pare acerc�ndome hacia ella, me coloqu�
justo detr�s, con una mano sosten�a mi vaso de wisky y con la otras acarici� uno
de los cachetes de esa preciosa cola.- Lo hice con mucho cuidado para disfrutar
su suavidad y verificar el grado de firmeza que ten�an, despu�s toqu� el otro
cachete lo amase con un poco mas de firmeza y le di un par de palmadas par
disfrutar como se sacud�an aquellas nalgas.- A pesar de que ten�a el pene muy
duro, le dije ". . . bueno es suficiente por hoy, seguiremos en otro momento
. . .",, la verdad es que ten�a todo el tiempo del mundo, as� que no iba a
comerme todo aquel caramelo de una sola vez . . . . .(continuar� . .
sugerencias a mi e-mail ,
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