Relato: Mi Maestra Catalina... Capitulo 1
Hola, mi nombre es Fabio, vivo en M�xico y en la actualidad tengo 41 a�os, el siguiente relato es mi primer experiencia con una mujer madura.
En ese tiempo yo contaba con 17 a�os pr�ximo a cumplir 18, estudiaba la preparatoria en un plantel de la cuidad, mi vida sexual hab�a comenzado a los 15 a�os cuando una vecina de mi edad me dio mi primera experiencia sexual.
Yo ten�a a mi novia Julia que era una a�o menor que yo, los dos estudi�bamos en la misma escuela y como toda pareja de esa edad hac�amos casi todas las tarea juntos, por su puesto en ocasiones no solo nos concentr�bamos en la tarea y llegamos a tener nuestros encuentros sexuales; los cuales debo decir eran satisfactorios pero no plenos a mi novia no le gustaban muchas cosas como el sexo oral o el anal, los encuentros de sexo con ella solo se limitaban a la cl�sica sesi�n de meter y sacar con un preludio de besos y manoseos�
As� llegamos a completar el 5to. Semestre de la escuela y llegando al 6to. Semestre, el primer d�a de clases revisamos nuestra tira de materias y vimos que no compart�amos clases por lo que nos dirigimos cada uno a su respectivo sal�n, llegue a el aula en donde ten�a la clase de f�sica, tome mi lugar, mis campaneros y compa�eras est�n charlando de sus vacaciones; de repente entro la coordinadora acad�mica e hizo la presentaci�n de la maestra que no impartir�a dicha clase.
Su nombre era Catalina, yo segu�a distra�do y no puse a tenci�n a todo ese pr�logo, seguido se escuch� una vos con un acento algo extra�o por lo que volv� la mirada hacia arriba y mire a una mujer de color tan obscura como el caf�.mi ojos se quedaron mirando por un largo rato a esa mujer mientras ella dec�a no s� qu� cosa� ella era no muy alta como de 1.55 metros, cuerpo delgado y bien torneado, senos peque�os pero firmes y en su lugar un par de piernas que enloquecer�an a cualquiera, ojos de color miel y cabello negro como la noche muy rizado y encima unos 30 y tantos a�os�
Segu� mir�ndola extasiado, ya que desde siempre me llamaron la atenci�n las mujeres de color, mis ojos la recorr�an de arriba abajo y por todos lados, fantaseando con ella e imaginando como ser�a tenerla en la cama desnuda. Cuando de repente sent� que alguien me empujaba de mi hombro derecho, al regresar a la realidad mi compa�ero me dec�a te habla la maestra wey, sin m�s proced� a atender a dicha mujer hermosa � si maestra perd�n, pero estaba en la luna- conteste sin pensar ella sonri� y me dijo - �Cu�l es tu nombre?- a lo respond� r�pidamente � Fabio Maestra- ella me miro y sonri� de nuevo tiernamente.
Ese d�a trascurri� con normalidad, Sal� de clase y fui al encuentro de Julia, pero no pod�a s�came de la cabeza a esa diosa de �bano, sus largas y formadas piernas, sus tetas que se miraban duras como la roca volc�nica, sus ojos color miel, esos rizos obscuros como la noche y un trasero que durante la clase note redondo y parado que me hac�an babear como un ni�o en dulcer�a�
Me sent�a hirviendo y excitado al m�ximo, dije a Julia que la necesitaba y nos escabullimos r�pido a su casa, e hicimos el amor, yo ten�a que bajarme la calentura a como diera lugar la sesi�n con July fue normal meter sacar y listo, pero con cada metida de verga que le propinaba me imaginaba que era la maestra Catalina a la que me estaba cogiendo, y cada vez me excitaba m�s miraba la cara de July y ve�a la de la maestra Cata, al terminar me sent� aliviado y m�s satisfecho que antes; Julia me dijo que me hab�a pasado de listo se levant� molesta y me dejo solo en la cama, no me importo demasiado segu�a imaginando a la maestra Catalina y su cuerpo desnudo.
As� pas� casi todo el semestre, entre cogidas a Julia imaginando a la maestra Catalina y fren�ticas sesiones de masturbaci�n a su salud�
Llegada la mitad del semestre me di cuenta que nunca hab�a puesto ni un poco de atenci�n a la clase de la maestra Cata, y vi con desencajo que si no aprobaba la materia no me graduar�a, en ese momento llego a m� la excusa perfecta para intentar algo con la maestra. Ese mismo d�a la encontr� en la cafeter�a de la escuela y me dispuse a abordarla me acerque con calma y a la ves nervioso cl�sico en un chico de esa edad, -Maestra Catalina_ dije, ella volteo y mis ojos se posaron sobre los de ella me quede sin palabras y por un momento mudo, ella sonri� cero que ya se daba cuenta de que me pon�a nervioso en extremo, -Fabio, despierta muchacho- dijo ella, yo con vos entre cortada solo atine a decir -maestra no me repruebe- ella solt� una carcajada producto de mis palabras; en ese momento me di cuenta que las hab�a dicho sin pensar pero en fin, ella me dijo que si ten�a problemas con su materia, a lo que yo conteste que s�. Lo que vino despu�s me sacudi� hasta el �ltimo pelo, mir�ndome fijamente me dijo � si quieres te doy regularizaciones particulares?- a lo que yo conteste sin pensar �Siiiiiii- nos pusimos de acuerdo y acordamos que las mismas comenzar�an al d�a siguiente en lugar por definir.
Al d�a siguiente no ve�a la hora de salir de clases, ese d�a no tuve clase con ella as� que estaba ansioso por verla, llego por fin la hora de salida, Julia me intercepto en el pasillo y me dijo que si la acompa�aba a su casa (andaba caliente) pero yo dije peque me tengo que ir tengo una emergencia la bese en la frente y Sal� corriendo encontr� a la maestra Cata en el estacionamiento de la escuela y la salude, ella me devolvi� el saludo y me pido que subiera a su auto.
R�pidamente me puse a un lado de ella y abr� su puerta del coche, la cerr� y me dirig� a meterme en su coche, ya dentro yo estaba m�s que nervioso, no cruzamos palabra mientras sal�amos del estacionamiento, tomo la avenida y comenzamos a charlar, de cosas triviales. Durante la charla me comento que me hab�a visto con Julia y pregunto que si era mi novia a lo que conteste que �Si- ella me comento que era casada hacia un a�o y por tal motivo llego a M�xico ya que su marido era mexicano e ingeniero en una paraestatal del pa�s, yo solo la escuchaba cuando la pl�tica tocaba temas de inter�s para m�, mientras mis ojos no dejaban de mirarla y comerme ese hermoso cuerpo moreno y brillante ese d�a llevaba un traje de dos piezas saco negro una blusa blanda con un sost�n color blanco de media copa que dejaba entre ver sus peque�os pero bien formados se�os, un pantal�n del color del saco ajustado el cual remarcaba sus hermosas piernas y su vientre plano y delicioso culo duro como la roca, en un momento le pregunte que si pod�a cambiar la estaci�n que sonaba en la radio, a lo cual ella contesto � si hazlo -. Los dos dirigimos la mano al bot�n de cambio de sinton�a y nuestra manos se encontraron toc�ndose por un momento, ninguno de los dos retiro la mano de ese lugar y nos miramos sonre�mos y deje que cambiara ella.
Despu�s de un rato de estar en la v�a, llegamos a un fraccionamiento casi nuevo de la cuidad, bastante bonito las casa se ve�an nuevas y bastante grandes, yo pregunte - �Va a pasar por alguien maestra? A lo que respondi� no muchacho aqu� es donde vivo con mi marido, me comenc� a sentir nervioso ya que el solo hecho de que el marido estuviera en casa me pon�a muy miedoso, not�ndolo ella me comento que su marido no se encontraba en casa, por cuestiones de trabajo hab�a salido del pa�s, y que por eso ella pasaba mucho tiempo sola, en ese momento la calma regreso a m� , estaciono su auto en la entrada de una casa grande y bonita me pido que bajara y tomara mis cosas. Entramos a su casa y me dijo acom�date en el comedor para iniciar con la clase muchacho, voy a cambiarme de ropa y bajo en un momento�. Me fui a el comedor y me sent� en una silla mirando a las escaleras despu�s de un momento se escuch� un portazo y tacones en la escalera, al levantar la mirada no pod�a creer lo que ve�an mis ojos, la maestra Catalina enfundada en unos jeans azules ajustados con una camiseta de tirantes blanca y zapatos del mismo color sus piernas y culo estaban listos para ser mordidos por cualquier hombre, bajo las escaleras y al acercarse note que no llevaba sost�n sus hermosas tetas se miraban duras y muy firmes, la camiseta dejaba apreciar unos enormes y negros pezones, yo me encontraba sentado en la silla con la piernas abiertas y al ver eso no pude evitar ponerme m�s duro que un tronco.
Ella se dio cuenta, y abriendo un poco los ojos miro el bulto que se hab�a formado en mi pantal�n, sonri� y me miro de forma lago picara, comenzamos la clase y durante la misma la conversaci�n se torn� cada vez m�s extra�a, comenz� a preguntarme cosas sobre Julia cada vez m�s subidas de tono a lo que yo respond�a con pena y un poco t�mido, note que se hab�a puesto cachonda, yo pregunte sobre su esposo y ella evito el teme pero no pudo esconder en su rostro la molestia y frustraci�n de la pregunta�. Me quede callado y no dije m�s de momento se levant� y fue a la cocina cuando regreso mire que hab�a llorado, no sab�a que hacer as� que me puse de pie y la tome por el hombro y dije que si hab�a dicho algo malo o algo que la molestara y que si quer�a me iba para dejarle sola, ella me miro y me dijo � no, no est� bien es solo que tengo problemas con mi marido hace un tiempo � yo sin m�s pregunte que si quer�a hablar de ellos para desahogarse� ella comenz� a contarme su problemas como si fuera la paciente de cualquier psic�logo. Despu�s de un rato de hablar toco el tema del sexo e hizo una pausa�. Yo me quede mudo por un instante, ella me miro y dijo esto ya es demasiado perdona.
Yo le comente que no hab�a problema que si ella quer�a siguiera con el tema que total yo ya no era un ni�o, ella me miro y dijo � Fabio, lo que voy a decir es muy personal as� que esto queda entre nosotros ok. �
Comenz� diciendo que sus relaciones con su marido eran muy poco frecuentes ya que el casi no estaba en casa y adem�s de eso cada que el encuentro sexual se consumaba ella sufr�a mucho, porque el tama�o del pito del marido era muy grande� por un momento pregunte si mi diminuta verga la complacer�a y la llenar�a (debo aclarar que nos soy actor porno ni s�per dotado tengo una verga normal de unos 15 cm y algo regordeta) despu�s tratando de imaginar el tremendo pito de su marido me imagine el de un burro jeje, y mi sospecha se confirm� el marido ten�a la verga bastante poderosa seg�n ella media casi 21 cm y era tan gorda como un salami, por lo que ella con cada penetraci�n de su marido sent�a que la desgarraba por dentro� yo no supe que decir al escuchar eso as� que me quede callado sigui� hablando por casi una hora hasta que me miro y dijo ya basta de charla es tarde y tienes que volver a casa� nos vemos ma�ana. � Ok maestra - dije y me levante de la silla al hacerlo ella miro mi entre pierna y sonri�, me desped� extendi�ndole la mano y ella la tomo me jalo hacia ella y me dio un tierno beso en la mejilla y dijo � Fabio, Gracias por escuchar. � la verdad es que solo quer�a cachondearme un poco con lo que me contara.
Al d�a siguiente el d�a transcurri� con normalidad, Sal� de la escuela temprano me fui con Julia, y cogimos en su casa, ya que la hab�a dejado con ganas un d�a antes, nada fuera de lo com�n, llego la hora de ir a casa de la maestra Cata, me dispuse a tomar el bus y en el camino imaginaba sus duros pechos siendo chupados hasta el cansancio por mi boca, mis manos tocando sus ricas y formadas nalgas y mis dedos penetrando una y otra vez sus orificios, cuando me di cuenta esta duro como un tronco de nuevo. Llegue a casa de la maestra y toce el timbre, despu�s de un momento abri� la puerta y lo que mire me dejo sin palabras, enfundada en unos pantalones de lycra azules y un top amarillo que dejaba ver su sudado y hermoso abdomen y ombligo, sus muslos torneados a mano y su culo parado y exquisito, ya q ella tambi�n hab�a salido temprano de la escuela se dedic� hacer ejercicio en casa me quede sin aliento por un momento y dije -hoooolaaaaa maaaaaesssstraaaaaa � ella sonri� y me dijo � Hola Fabio, cierra la boca muchacho que se te va a meter una mosca - de inmediato me despabil� y me disculpe.
Me invito a pasar y se puso delante m�o cerr� la puerta detr�s m�o y mire con cadencia y ritmo como su caminar hacia bambolear sus nalgas perfectas y duras mi verga de inmediato comenz� a saltar en mis pantalones�. No pod�a creer lo que mis ojos ve�an�. Esta vez no me dijo que me acomodara en el comedor , lo que me dejo extra�ado y m�s excitado, me pidi� que la acompa�ara escaleras arriba y subiendo hab�a una sala de estar con una mesa de centro, frete a ella su recamara y las dem�s habitaciones, con voz cadenciosa y armoniosa y con ese acento cubano me dijo acom�date en esa salita que ya vengo voy a darme un ba�o para quitarme el sudor el ejercicio� a lo que dije tartamudeando por la excitaci�n de mirar su cuerpo sudando � Siiiiiiiii Missssss. � ella volvi� a sonre�r p�caramente y camino hacia su habitaci�n, escuche el ruido de la regadera y no lo pude evitar as� que sin hacer ruido alguno y en puntillas me adentre en la habitaci�n de ella y llegue al ba�o note que la puerta estaba entre abierta y su cuerpo desnudo por completo�.. No lo pod�a creer aquella era la cosa m�s impresionante que hab�a visto, mi novia Julia tenia lo suyo pero nada comparado con la maestra Catalina, comenc� a frotar mi verga que estaba a punto de estallar dentro de mis pantalones� cada vez m�s r�pido y sin hacer el menor ruido� corri� el cancel de ba�o y entro a la regadera.
En ese momento supuse que cerrar�a el cancel pero para mi sorpresa, lo dejo abierto por la mitad, ahora entiendo que ella ya sab�a que la estaba espiando, mire el espect�culo extasiado y restregando cada vez m�s fuerte mi verga, hasta que sent� el impulso de terminar dentro de los pantalones�. En ese momento ella cerro la regadera y se dispuso a salir del ba�o� tuve que salir r�pido y sin ruido para que no se diera cuenta de que la observaba.
No pude terminar por el sobre salto de aquella s�bita salida as� que la verga comenz� a dolerme de tan dura que estaba. La maestra Cata levanto la vos para decir que sal�a en un momento�
Lo que paso despu�s cambio mi vida para siempre�..
Continuara�..