Relato: Celina, la mujer de mi amigo (I) Celina me calienta desde que la conoc�. Con su carita de nena buena, tragalibros, sus tetas peque�as y sus nalgas redondas, desde el mismo momento en que empez� a salir con mi amigo me ha calentado. Para colmo, cuando a�n estaban de novios, mi amigo, en juntadas de mucho alcohol, se le soltaba la lengua y me coment� en m�s de una ocasi�n que segu�a con ella por como la chupaba.
Las visitas a su casa, una vez que se casaron, eran una tortura: tenerla cerca, con sus vestidos cortos o en jeans ajustados, era asegurarme una noche de pajas solitarias. En alguna ocasi�n romp� por ella mi credo, y pagu� por sexo. Fue una noche en la que nos juntamos los tres a tomar unos tragos y ella estaba especialmente atractiva. Para esa fecha ella tendr�a unos 24 a�os y estaban por casarse. Vest�a, recuerdo, unas sandalias estilo romano y una solera azul, bastante breve. Ser� por el alcohol, o la emoci�n de casarse, el hecho es que mi amigo la estubo besando y tocando toda la noche. Yo estaba absolutamente caliente, por lo que decid� irme temprano. Al salir me dirij� a la zona roja de mi ciudad y estuve dando vueltas hata hallar una chica parecida a ella. La encontr�, y la llev� a un telo de la zona. Ya en el camino hice que me la chupara, mientras me imaginaba que la boca que me la mamaba era la de Celina. ANte de llegar al telo ya le hab�a acabado en lo m�s profundo de su garganta. En el hotel le ped� a la piba que se ba�ara mientra yo ped�a una disfr�z al sevicio al cuarto. la hice vestir con el modelo de secretaria, que no era mas que una camisa blanca ce�ida que marcaba los pezones y un pantaloncito tipo sastre con abrojos en la entrepierna (una de mis fantas�as con Celina era romperle el culo vistiendo de esa manera). La pobre jovencita se visti� y me esper�, tal como le indiqu�, boca abajo con una almohada bajo sus caderas. Estaba buena la chica. Su culito parado en pompa me tra�a a la mente el culaso de mi amiga. Estaba tan caliente, a pesar de la mamada previs, que sin preambulos le abr� el pantal�n por atr�s, le unt� un poco de l�quido en la entrada del ojete y la bombee durante casi una hora. Al final, y tras 5 acabadas, la chica, a�n mordiendo la almohada, no pod�a moverse. de su culo sal�a tanta leche que jam�s pens� pudiera disponer yo, ni recibir en sus entra�as un jovencita. Le p�d� que se ba�ara nuevamente y Le pagu� un buen plus por quedarse a dormir conmigo hasta el fin del turno. Dorm� junto a ella pensando que lo hac�a junto a celina. Y so�� aue era ella la que al despertar estar�a chupandome la pija hasta dej�rmela seca.
Continuar�...
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Relato: Celina, la mujer de mi amigo (I)
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