Relato: la sauna

Escrito por brelu.




Era viernes, llegamos al hotel de Bilbao a la hora de comer, despues de un viaje de 4 horas en coche.

El motivo del viaje era una feria relacionada con mi negocio, y dedicariamos todo el sabado y parte del domingo a visitarla.

Mientras tomaban nuestros datos en recepci�n, me llamo la atenci�n
que el hotel, aparte de ser acogedor, y con unas buenas instalaciones, contaba con spa. Lo que enseguida provoco ciertas ideas en mi cabeza.

Al subir hacia la habitaci�n, le comente a mi mujer, que podiamos ir al spa, para relajarnos un poco. Ella me contesto de seria una lata
ya que perderiamos un monton de tiempo y preferia conocer un poco la ciudad, aparte de no traer ba�adores, ni nada apropiado para acceder a las instalaciones. Yo no cese en mi empe�o y le propuse estonces hacer una sesi�n de sauna, ya que eso nos dejaria tiempo para lo demas. Ella insistio en que no traiamos nada apropiado. Yo le conteste que no se preocupara, que mientras ella se retocaba para bajar a comer yo me enteraria en recepci�n, de como podiamos hacer.

Mi mujer tiene 44 a�os conserva buen tipo y aunque viste normal siempre lleva un insinuante escote, que realza su atractivo, tiene el pecho natural con unos pezones bien marcados y un culo que siempre
atrae a mas de una mirada.

Subi a la habitaci�n y le conte que podiamos utilizar los albornoz de la habitaci�n para acceder a la sauna y que alli, tambien dispondriamos de toallas, y lo que necesitasemos(esto �ltimo lo a�adi yo).

Durante la comida y con ese ambiente relajado, que aportaba la decoraci�n del comedor. Me encarge de que mi esposa a la que se la veia realmente agusto, no tuviese en ning�n momento vacia su copa de vino. Ella siempre es muy recatada, pero el vino le da cierto grado de calentura.

Subimos a la habitaci�n. Me volvio a insistir, con que no tenia que ponerse para la sauna. Le recorde que en recepci�n me habian dicho que lo normal era bajar con el albornoz. Ella me replico que como iba a bajar sin nada por debajo. Le conteste que no tenia importacia que ni siquiera habia que pasar por el holl del hotel. Al mismo tiempo zanjo la conversaci�n. En cierto modo estaba convencido, por su tono, que le excitaba la idea. Yo por lo menos lo estaba, y mucho. Era lo que pretendia!.

LLegamos a la zona de spa, nos facilitaron dos toallas, y salimos hacia un pasillo, en el que al fondo se veia la cabina de la sauna.
Justo antes de esta habia dos dependencias, una a cada lado, las cuales contaban con duchas, unas perchas y estantes, tapadas por unas simples mamparas para que desde el comienzo del pasillo no se viesen las duchas. No habia nadie. Menos mal!Ya me abultaba lo suyo, incluso para no tensar la cosa antes de tiempo, trate de que no me la viese. Nos colocamos las toallas, que por cierto a ella le tapaba cuarta por arriva y cuarta por abajo, y entramos.

Subimos para la zona intermedia, desde ahi podiamos ver por la peque�a ventana todo el largo pasillo.

Se sento, mirando hacia mi con los pies en el banco, dejando su espalda cerca de la pared, le hable, que la ducha en la habitaci�n. No se iba a duchar alli, en pelotas, las duchas eran mixtas. Cerro los ojos y no me contesto. Comence a masajearle los pies, continuando sutilmente hacia sus rodillas y muslos, muy poco a poco hasta cerca de sus ingles, pero con cierta distancia de "seguridad", logicamente la toalla se fue deslizando por los lados de las piernas, dejandome ver su pubis y parte del sexo, por tenerlas ligeramente separadas, la situaci�n para mi era super excitante, y para ella no lo seria menos. Como por ese lado, no habia ya mas que descubrir, me levante para colocarme a su espalda y comenzar con sus hombros y cuello. Me hizo un poco de sitio, sin abrir sus ojos recoloco la toalla sobre sus piernas, volviendo a deslizarse a los pocos segundos dejandolas totalmente descubiertas otra vez. Comence con el masaje, su toalla estaba anudada a un costado, y ya dejaba ver, una porci�n importante de sus pechos, estaria a unos 5 � 6 cm de sus marcados pezones. Estaba totalmente concentrado en que su toalla se fuese deslizando hacia ellos,cuando observo, que por el pasillo se acercan dos chicos, tendrian treinta y pocos a�os. Le susurre al oido que se tapase las piernas , que iba a entrar gente. Se las tapo tal y como estaba sin tiempo a mas. Entraron los dos uno se sento en la parte alta mirando hacia el frente y el otro medio de costado hacia nosotros, para poder conversar con su compa�ero. Mi mujer coloco la toalla entre sus piernas sujetando los estremos al juntarlas, y volvio a cerrar los ojos.
La estampa no podia ser mas erotica, la toalla por la parte alta estaba solo a unos 2 � 3 cm de los pezones y las piernas solo estaban tapadas por los muslos, ya que solo la parte de su sexo permanecia encima de esta, el tio de abajo no tenia mas que mirar para ver todo su co�o depilado.
Seguia con mi tarea procurando no tocarle sus hombros por delante para que la toalla no se deslizara mas.
Los tios empezaron a ponerse inquietos hablando animadamente, pero en voz baja, el de la parte alta se ladeo hacia nosotros, apoyando la espalda en la pared, eso si despues de intentarlo dos o tres veces, por la tampertura de esta. Al subir solo una de las piernas, se le veia perfectamente el rabo, ya lo tenia morcillon,y sin duda, se estaban recreando los dos con la mujer medio desnuda que tenian a un metro de distancia. Me empezo a excitar al maximo la situaci�n, mas aun cuando vi que mi mujer entrabria los ojos para mirar ya no solo una,si no dos, porque al otro tambien se le veia entre sus piernas tocando el banco un pedazo de pollon. Estando seguro de lo excitada que estaba, me atrevi a susurrarle al oido que vaya panorama tenia, alli, con tres pollas, de nuevo no me dijo nada. Al hacer un poco de mas presion en sus hombros, vi como su mirada era un poco mas directa
y algo descarada hacia esos aparatos, lo que provoco en los dos hombres, una notable erecci�n, mas al ver como ella los miraba. Uno de ellos se empezo a tocar con la toalla. Estaba gozando viendo como mi mujer no podia resistirse, a cada vez mirar mas descaradamente. Cogi los brazos de mi mujer y los apoye sobre sus palmas en el banco, para empezar a acariciar, desde sus hombros a los codos, y haciendo cada vez mas fuerza con los pulgares en su espalda provocando que cada vez la arqueara mas, dejando ya una aureola a la vista y la otra a punto, movia despacio la cabeza en circulos, y las pierna se le abrian al compas de ese movimiento, deslizandose la toalla de sus piernas hasta bajarsele totalmente, se la veia una diosa sintiendose tan deseada, viendo como dos tios se la machacaban mirandola, poco les dejaba ver todavia, con mis dedos tire de la piel de su pecho, deslizando mas la toalla asomandole ya los dos pezones, los hombres aumentaron el ritmo, toque solo con los indices sus pezones con lo que ella dio un respingo y abrio totalmente las piernas ense�ando un co�o sonrosado y humedo, agarre sus pechos enteros y con los pulgares comence a dibujar circulos, toque su co�o y sus labios y clitoris se notaban duros, al sacar mi mano ,el chico de emfrente, sin dejar de masturbarse metio su cabeza entre sus piernas,tube que tirar de ella hacia mi para poder clavarle mi polla, el se incorporo y de inmediato se lanzo otra vez a su clitoris, mientras le hundia mi polla tan adentro como podia, el otro tambien se levanto para mientras se masturbaba darle con el capullo en la cara cerca de su boca, no aguanto mas mi mujer, se la agarro y metio entera en la boca, chupando freneticamente, note que se empezaba a correr, (yo estaba ya a punto)ella, quedandose con la polla en la boca, y agarrando con fuerza la cabeza del que tenia entre las piernaas llego a un orgasmo que parecia no acabar hasta que noto como se corrian en su boca, salpicado toda su cara y cuello al tiempo que le sobaba la teta que yo le dejaba, mientras me corria dentro de ella. El otro hombre se corrio sobre sus piernas, nos levantamos inmediatamente casi sin taparnos salimos por nuestros albonoz, nos abrazamos en el ascensor y a ducharnos........

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