Relato: Mi primera vez no fue como imagine

Por fin, ten�a que ocurrir.
De hecho lo hab�a deseado desde hace alg�n tiempo; hab�a imaginado como deber�a ser, como me gustar�a que sea, y aveces hasta con quien me gustar�a que sea.
Lo hab�a so�ado tantas veces y en mis sue�os ve�a imagenes dulces, tiernas y tambi�n ardientes, freneticas tornando en sensuales y sublimes hasta el punto de una realizaci�n verdadera. Si, me ve�a realizada como persona, como amante y como �mujer�, dando y recibiendo placer, mostrando la verdadera persona encerrada dentro de mi, dejandola libre para expresarse, actuar y sentir seg�n sus deseos. Y finalmente, me ve�a liberada y triunfante y con deseos de empezar a vivir y no terminar nunca.

Estos eran mis sue�os, la realidad fu� otra y no me arrepiento.
A los 10 a�os me di cuenta que me gustaba vestir como ni�a, mam� trabajaba todo el dia y esto me permit�a probar sus ropas y mirarme al espejo, contemplaba la ni�a que pod�a ser y volaba en fantasias. A pap� no lo conoc�, mam� dec�a que era mejor as�. A los 14 a�os me vest�a y me maquillaba regularmente y algunos compa�eros del colegio me molestaban por mis modales delicados. A los 15, mam� me descubri�. Fu� un drama, lloramos y promet� no volver a vestirme ni maquillarme, pero al poco tiempo no resist� la tentaci�n y volv� a hacerlo regularmente. Recientemente y despues de no pocas peleas y discusiones, mam� ha aceptado a la ni�a que hay en mi. Me cambi� de colegio a uno que esta cerca a donde vivimos y que aceptan a ni�as como yo, me deja usar ropas femeninas en casa y me trata como una hija dandome consejos y recomendaciones que se dan a una ni�a.

Conoc� a �Luis� hace poco. Me impact� desde ese momento. No es un chico bello pero si agradable, con ojos vivaces y una sonrisa p�cara que hizo estragos en mi inmediatamente.
Lo transfirieron a mi nueva escuela por problemas de conducta. Andaba siempre detras de las chicas y estas le coqueteaban descaradamente. Pens� que era inalcanzable para mi.
Su carpeta era vecina a la mia y conversabamos esporadicamente. En los recreos las ni�as lo rodeaban y el re�a con todas. Me miraba y me gui�aba un ojo, yo simplemente sonreia.

Ayer, nos tocaba Educaci�n F�sica y despues de clases todos se duchan en el colegio, yo prefiero hacerlo en casa pues no esta lejos del colegio y as� aprovecho para maquillarme y vestirme. Luis me pregunt� por que no me ba�aba y le dije lo mismo, que mi casa no estaba lejos y que era mucho mas comodo y entonces me pregunt� si pod�a �l tambi�n venir a casa a ba�arse.

Inmediatamente le dije que si, que no hab�a problema y que cuando quisiese lo pod�a hacer. Yo estaba emocionada, ibamos a estar solos en casa y quizas hasta desnudos a la vez, juntos en la ducha. Ser�a esta la oportunidad para mi primera vez?, no lo sab�a.
Durante el camino a casa , le cont� que ibamos a estar solos por que mam� trabajaba, me mir� y me di� una sonrisa picara de esas que me derriten.

Mido 1.68 y peso 52Kg, soy delgada, de tez blanca, cabellos largos negros y un poco ondulados, desde hace un tiempo me depilo regularmente todo el cuerpo, incluso el pubis y mi potito. Esta es otra de las razones por que las que no me ducho en el colegio. No dir� que tengo cuerpo de diosa o nalgas prominentes, pero si creo que es femenino y con nalgas redonditas y un poco paraditas, no tengo pechos pero si las tetillas infladas por algunas hormonas que he tomado.



Llegamos a casa y le mostr� donde estaba la ducha para que se ba�ara.

No sab�a como hacer para insinuarme pues no quer�a sufrir un rechazo, pero no fu� necesario hacer nada; Luis me tomo de la mano y me pregunt� a boca de jarro: Te gusto, verdad?

Yo no cre� lo que estaba escuchando e incluso pens� que me estaba equivocando, le respond� :�No te entiendo�

- Te pregunte si te gusto, si no sue�as conmigo?
- La verdad , si. Pero me haces sentir avergonzada.
- Tu tambi�n me gustas y quiero hacerte el amor.
- Si que eres directo Luis, me sigues haciendo avergonzar.
- No quieres que te haga el amor?
- Si que lo quiero Luis, solo que es mi primera vez y lo hab�a imaginado diferente.

Me abraz� y me bes�, era mi primer beso. Me apret� contra su cuerpo y sent� su virilidad. Ya no me pod�a detener. Le dije:

- Ba�ate aqui abajo, yo lo hago arriba y me preparo para ti. Te llamo cuando
este lista.

Subi al cuarto de mam�, me met� en su ducha y me ba�� lo mas r�pido que pude, prepar� mi potito para la faena, utilic� la ducha de mano como enema para limpiarme bien por dentro, cuando pens� que era suficiente, empec� a maquillarme. Utilic� una base y colores suaves, sombras y rimel, me pinte los labios y me puse aretes a presi�n de mam�. Me acomod� el cabello muy monona, me perfum� todita y me puse una tanga y brasier blancos, luego me vest� con una mini de jean y una blusa blanca semitrasparante y semi abotonada, medias nylon tambien blancas y finalmente los accesorios: argollas de colores tipo brazaletes en mis dos brazos y un collar de fantasia.

Llam� a Luis, subio desnudo, me mir� y me volvio a besar. Me dijo que estaba muy bella y que hab�a valido la pena esperar. Le dije que me llamara Karina. Me bes� el cuello y me agarr� de las nalgas.
No era dulce ni tierno, solo salvaje y vulgar.
Pero me gustaba.
Sentia su pene en mi barriga, no era grande, pero tampoco peque�o y me excitaba sentirlo y tocarlo.
Luis se separ� y mir� su miembro y me mir�, yo sab�a lo que queria y me arrodill� delante a �l y comenc� a saborear aquel trozo de carne, era mi primera vez pero hab�a visto tantas peliculas y lo hab�a imaginado tantas veces, lo saboree primero tiernamente, lo ensalive todito, lo tuve en mis manos y lo acarici�, �l procazmente buscaba mi boca y le d� gusto, me lo com� como un dulce, un chocolate para mi boca que dejaba de ser virgen, �l empez� a fornicarme la boca y yo poco a poco me acostumbr� a tenerlo entre mis labios, luego intent� introducirlo m�s y m�s, me daba arcadas y se me hac�a dif�cil respirar hasta que finalmente lo tuve todo dentro de mi boca, �l estaba a 100, me embababa todita y yo disfrutaba dandole placer, hasta que no se contuvo y eyacul� en mi boca, me salpico toda el rostro y me tragu� sus liquidos y su lechita sabrosa, no era mi sue�o pero lo disfrut� tanto.

Me dijo: - No te preocupes, tengo mas leche para darte.


Yo asent�. Su miembro se manten�a rigido como una estaca. Me limpi� el rostro, me bes� interminablemente mientras yo continuaba a masturbarlo suavemente con mis manos. Me manoseba toda con lujur�a y desenfreno. Me hac�a sentir vulgar, como una cualquiera, fuera de tosos mis sue�os pero lo estaba gozando tanto.

Me di� la vuelta y alz� mi faldita, me baj� el calzoncito dejando al aire mi tesoro hasta ahora sin descubrir. Me beso mi agujerito haciendome suspirar sin descanso, luego se dispuso a penetrarme. Le repet� que era mi primera vez, le rogu� que tuviera cuidado, pero no escuchaba,

No es que fuera completamente virgen, hab�a experimentado antes con algunos objetos, me hab�a introducido desde mangos de cepillos hasta zanahorias y platanos, pero esta si era la primera vez que iba a tener un verdadro hombre dentro de mi.

Enfil� su herramienta y busc� clavarme sin compasi�n. No lo consigui� a la primera y el dolor que sent� fu� insoportable. Se tranquiliz� un poco, coloc� la cabeza en mi peque�o orificio y la introdujo. Esta vez ingres� un poco y se detuvo ahi; el dolor aumentaba as� que esta vez fu� yo quien se movi� hacia atras y consegu� que ingresara la cabeza, sent� un poco de alivio pero el salvaje de mi jinete no se detuvo m�s y me introdujo el resto sujetandome de la cintura para impedir que me soltara.

Ya estaba clavada finalmente y no estaba disfrutando como so��, el seguia moviendose y yo deseaba solamente que terminara para que dejara libre mi esfinter. En el frenes� de sus movimientos, �l se sali� de mi y yo me tir� en la cama a descansar y a reponerme de mis dolores.

Este macho insaciable queria solamente seguir penetrandome y yo inexplicablemente quer�a seguir siendo penetrada. Lo bes� en la boca, le bese su miembro mientras me repon�a y le suger� cambiar de posici�n. Lo recoste en la cama, me deshice de mi faldita y me sente encima para esta vez cabalgarlo yo.

Sorprendentemente esta vez el dolor habia desaparecido, y sent�a solo placer, lo cabalgaba como hab�a visto en peliculas, como una puta experta; me recost� en su pecho y el me apretaba mis pezoncitos y se movia ritmicamente al son de mis caderas, me lam�a el cuello y yo estaba perdida sin poder pensar en nada mas que en disfrutar el momento y en el gran trozo de musculo que me hab�a tocado gozar.

Luego de un rato as�, Luis empez� a moverse freneticamente a lo cual intu� que el momento del climax le hab�a llegado, sintiendo dentro de mi las contracciones de su miembro llenando mi ser con abundante esperma de macho, mi macho.

Intent� retener dentro la verga de mi amante, pero esta perdi� rigidez y se deslizo fuera dandome una ulterior sensaci�n de placer. Estaba extenuada y sudorosa lo mismo que Luis, mi marido circunstancial, pero este no hab�a terminado, quer�a proseguir y yo no lo cre�a.





Me dijo : Chupa!

Y yo obedec�, y chup� y mam� y me la com� otra vez, no fu� tan dificil ahora que no estaba erecta, me jal� de los pelos y me tir� hacia �l para besarme, introduciendo su lengua y jugueteando con la mia, besaba mis pechos y los jaloneaba y me palmoteaba las nalgas y me dec�a frases obscenas y rudas:
- �Que buena putita eres�. �Cachas realmente rico�. �Como te gusta la verga�. �Te quiero reventar el culo, perra.......�

Estas palabras lejos de ofenderme, me excitaban m�s y yo me sent�a a merced de este bruto semental. Coloqu� su pene fl�cido entre mis nalgas y me mov� como queriendo comermelo y �l continuaba a insultarme y a manosarme, hasta que empez� a sentir tornar la dureza al objeto de mis placeres. Se la chup� y esta vez ya r�gida, volv� a tragarmela hasta dejarla lista para empezar una nueva sesi�n.

El culo me dol�a un poco pero yo no estaba dispuesta a dejarme vencer tan facilmente, me acomod� como perrita para mi macho y este me penetr� sin misericordia, de un solo golpe, sent� la dicha otra vez, me sent�a una hembra completa, dispuesta a hacer gozar a mi macho, a mi var�n, a mi marido. Resist� sus arremetidas estoicamente; sent�a sus bolas golpear mis nalgas y el sonido ritmico que estas emitian me hac�a sentir mas puta, mas complaciente, mas realizada.

Luego de interminables arremetidas y de otros tantos suspiros y quejidos de placer, mi macho volvi� a eyacular dentro de mi, echandose encima mio suspirando tambien �l y aplastandome y estrujandome las nalgas y los pechos, haciendome sentir toda su humanidad encima mio y dentro de mi, hasta el l�mite de mis fuerzas.

Luego de sentirse satisfecho, se visti� y se fu� premuroso sin decir palabras.
Ni siquiera se despidi�.

Definitivamente no fu� como lo hab�a so�ado.
Pero fu� y lo disfrut� tanto.

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