Ya en Cadiz un camion nos traslado hasta Madrid, donde me
esperaba mi hermano Samir, de 17 a�os. Yo llegaba escapando de la miseria. Mi
madre habia muerto hacia a�os, y mis dos hermanas ya estaban casadas. Yo me
quede con mi padre, pero en cuanto fallecio me decidi a reunirme con mi hermano.
Atr�s quedaban la miseria y los malos tratos que mi padre, un musulman
integrista, nos habia dado desde siempre. Yo tan apenas habia salido de mi
pueblo, y me fui a hacer un viaje que me costo una semana.

Mi hermano me alojo en su casa, un piso enano en Lavapies,
donde vivia con otros seis chicos j�venes, todos arabes. Yo compartia su cuarto,
donde dormiamos en la unica cama que habia. Estuve un par de dias descansando y
observando como funcionaba la casa. Los chicos salian sobre todo por la noche.
Yo no preguntaba por sus trabajos, pero tenian buenas ropas (la casa muy mal
arreglada), y mandaban bastante dinero a casa. La primera noche que dormi alli
me desperte por la noche por los ruidos que se escuchaban. En la habitaci�n al
lado de la mia estaban, sin duda, follando, por el estruendo que montaban. Oia
la cama chirriando y gemidos de un hombre. Pense que algun compa�ero del piso
habia tenido suerte y habia ligado. Yo era virgen, solamente me habia
mansturbado alguna vez, presa de un gran cargo de conciencia, ya que el Coran
prohibe las relaciones sexuales. Una vez mi padre me sorprendio en el ba�o
totalmente empalmado, y me dio dos bofetadas por tener pensamientos impuros. Me
saco a golpes a la cocina de la casa, donde estaban mi madre y mis hermanas,
totalmente desnudo, para que pasara la mayor verg�enza de mi vida con solamente
once a�os, y aquello me marco mucho.

Al despertarme con los ruidos me levante para beber agua e ir
al ba�o. Estaba meando con la puerta abierta cuando aparecio en el aseo un
hombre de unos cincuenta a�os, espa�ol, solamente con los calzoncillos puestos.
Cuando me vio meando se quedo mir�ndome en la puerta, por lo que yo me tape como
pude, mientras le preguntaba en arabe que quien era. Uno de los compa�eros de
piso de mi hermano aparecio en la puerta tambien. Estaba en bolas, y le dijo al
hombre en castellano que era un compa�ero nuevo. El hombre le contesto que era
muy jovencito, que cuanto costaba. El chico le dijo que era el hermano de Samir,
y que acababa de llegar. El hombre se acerco y me toco el culo por encima de mi
calzoncillo, momento en el que yo sali corriendo a mi cuarto. El hombre vino
detr�s, mientras el chico le decia que me dejara, que no se pasara conmigo.
Desde la puerta de mi cuarto el hombre me pregunto si queria compa��a, que me
pagaria bien. Yo estaba alucinando por semejante ofrecimiento, y empece a
indignarme. El chico me dijo en arabe que estuviera tranquilo y se llevo al
hombre. Al cabo de un rato volvi a oir como volv�an a follar en el cuarto de al
lado, y tenia claro que eran el hombre y el chaval.

Estuve despierto hasta que llego mi hermano, de madrugada. Me
dijo que habia sido una noche dura, que hablar�amos por la ma�ana. Se desnudo y
se metio en la cama en calzoncillos, al lado mio, y dormimos los dos hasta las
doce del medio dia.

Ya por la ma�ana mi hermano me dijo que su compa�ero de piso
le habia contado lo ocurrido la noche anterior. Me confeso que todos eran
chaperos, y que se llevaban a hombres a casa. Se podia ganar mucho dinero. El
habia ganado mas de ciento veinte euros la noche anterior. Me confeso que todos
habian abandonado el Coran, y que vivian bien. Su idea era ganar unos centenares
de miles de euros y volverse a Marruecos, donde se casaria y olvidaria su etapa
aqu�. El pensaba que podria volver a casa con poco mas de veinte a�os. Yo le
pregunte que que era lo que hacian exactamente. Me confeso que tenian pocas
clientas, que casi todo eran hombres. Normalmente no tenian que dejarse follar,
ya que la mayoria de los clientes les pedian que les follaran, pero que algunas
veces tambien habia que poner el culo, aunque por eso cobraban mas. Me dijo que
habia noches que podia follar con cinco tios diferentes, porque algunas veces no
se corrian, aunque lo simulaban. Me confeso que les decia a los tios que se iba
a correr cuando estaba follandoselos, a algunos sin condom, de tal manera que no
podian comprobar si la corrida era cierta o no. Tenia algunos trucos de ese
estilo. Yo le dije que me parecia asqueroso utilizar el cuerpo de aquella
manera. Me tranquilizo dici�ndome que me dedicara a descansar, pero que algunas
veces tendr�a que utilizar el cuarto con algunos clientes, y que era su forma de
ganarse la vida, asi que tendr�a que marcharme por unas horas de su habitaci�n.
Yo lo comprendi y acepte, al fin y al cabo, era su invitado.

Esa misma noche me llamo al movil a las dos de la ma�ana.
Venia con un cliente a casa, y me dijo que me fuera a la cocina. Lo hice asi,
pero la curiosidad me podia, asi que cuando llegaron deje pasar unos minutos y
me fui a la puerta de su dormitorio. Oi como mi hermano le decia que tenia un
buen culo, que lo iba a pasar bien. Mire por la cerradura, que era de las
antiguas, de las de llave grande, asi que podia ver bastante bien la cama. En la
cama estaba a cuatro patas un hombre que parecia mayor. Yo lo veia por detr�s,
ofreciendo el culo y con los huevos colgando. Mi hermano estaba de pie
pajeandose. A sus 17 a�os tenia buen cuerpo y un rabo como una salchicha grande,
muy oscura, con los huevos muy pegados y negros. El tio le decia que le metiera
el rabo, y me hermano se situo detr�s de el en la cama, sin condom. Vi como le
llevaba la polla al culo y como se la clavaba rapido. El tio gemia y culeaba. Mi
hermano empezo un metesaca rapido, que yo veia desde detr�s con toda claridad.
Me habia empezado a empalmar, pero mi polla no era ni la mitad de grande que la
suya, sobre todo mucho mas delgada. El hombre le dijo que queria la corrida en
la boca, y que el estaba ya listo para irse. Mi hermano se la saco y se la pajeo
en su cara. Le dijo que ya le estaba subiendo, y empezo a gemir y a tener
espasmos. Vi como empezaba a escupir chorros de esperma en la cara y boca del
tio, que tambien se corria en ese momento. Me marche, impresionado por la
escena, ya que yo solo me habia pajeado en contadas ocasiones, y me acordaba del
gusto que daba.

Despu�s de marcharse el tio mi hermano vino a la cocina y me
dijo que ya podia ir a dormir. Estaba en bolas, y todav�a tenia la polla sucia
de semen y mierda del hombre, lo que le daba un color todav�a mas oscuro que el
habitual. La cama estaba sucia de semen de los dos, pero se metio dentro sin
importarle en absoluto, totalmente desnudo. Me dijo que se ducharia y lavaria
las cosas por la ma�ana, que ahora no le apetecia. Me ense�o los treinta euros
ganados. El tio era un buen cliente, que se corria enseguida, pero que le pedia
ver la lechada, asi que ya no podia trabajar mucho esa noche. A eso de las
cuatro volvieron a llamarle al movil. Era el hombre que el otro dia habia
intentado sobarme. El otro chico le habia dicho que yo era su hermano, y le
llamaba para ver si estaba disponible. Mi hermano le dijo que yo no, pero que el
si que lo estaba, que si queria venir a casa. Se habia recuperado de la follada
y podia ganarse algun dinero mas sin esfuerzo. Este cliente era activo, le
gustaban los culos de los chicos j�venes, sobre todo de aquellos que sabia que
eran normalmente activos y que no se dejaban meter por detr�s muy a menudo.

Cuando llego el tio yo ya estaba en la cocina. Venia con otro
amigo, tambien cliente de la casa, y le dijeron a mi hermano que venian
calientes. Mi hermano los llevo a su cuarto, y oi como discutian de dinero. Al
momento mi hermano me vino a decir lo que le habian ofrecido. Yo le habia
gustado mucho al hombre, y queria verme otra vez. Me pagarian solamente por
verme. Mi hermano me animo diciendo que pagaban bien y que no me tocarian, que
el haria todo, que solamente querian verme. Ante la posibilidad de ganar treinta
euros solamente por eso, accedi a ir a su cuarto.

Los dos hombres estaban sentados en la cama y se felicitaban
de mi llegada. El nuevo le decia que si, que era muy guaperas, pero que seguro
que me habian follado docenas de tios ya. Mi hermano les dijo que no, que era
virgen del todo. El tio del otro dia me dijo que querian verme bien, como el
otro dia en el ba�o, y que me bajara los pantalones. Yo dije que no, pero me
dijo que me darian 40 euros en lugar de 30, asi que me empeze a desabrochar la
cremallera.

Cuando me baje los calzoncillos mi polla sin pelo y mis
huevos quedaron a la vista. La tenia flaccida, colgando y delgada como un dedo.
Mi hermano me la miro y sonrio, como los hombres. Me pidieron que me diera la
vuelta, para ver si mi culito era virgen de verdad. Yo lo hice, y tambien me
abri las nalgas y me incline cuando me lo pidieron, dejando totalmente a la
vista mi ojete virgen.

Mi polla habia empezado a reaccionar y se agrandaba. Mi
hermano miraba la escena en calzoncillos, que ya empezaban a levantarse tambien.
Los tios dijeron que no veian bien, que me acercara y lo abriera mas. Me puse al
lado de la cama inclinado y abriendome las nalgas todo lo que podia. Mi hermano
les dijo que era suficiente, que no haria nada mas por el dinero que me habian
ofrecido.

Los tios le dijeron que ya estaban bien calientes, que le
tocaba a el ganarse lo suyo. Los dos se bajaron los pantalones, dejando a la
vista dos pollas blancas peque�as, aunque una era bastante gorda. La polla de mi
hermano era mayor que la de ellos. El tio nuevo le dijo que se pusiera a cuatro
patas, que queria meterla ya. El otro me dijoq ue cuanto le cobraba por dejarme
tocar. Mi hermano le dijo que otros 60 euros, y el tio los saco de la cartera.
Se puso a sobarme por todos sitios, sopes�ndome los huevos y el rabo, y
pas�ndome la mano por la raja del culo. Yo me dejaba hacer, ya que me gustaba la
sensaci�n y el gusto que me estaba dando, aunque mi ense�anza religiosa me
estaba martirizando.

Me dijo que me pusiera otra vez de espaldas, ofreciendo el
culo. Empezo a pasarme el dedo por el ojete, acompa�ado con saliva. Me lo paso
varias veces, y me daba un gusto tremendo. En una de estas deslizo una falange
de su dedo dentro, con lo que yo di un respingo de dolor. El tio dijo que era
verdad que estaba sin abrir, y que le gustaria ser el primero que me metiera el
rabo. Yo dije que no, que me gustaban las mujeres. Ellos se rieron y me dijeron
que estaban casados, que a ellos tambien, pero que un culito tan rico no lo iban
a dejar pasar. Mi hermano le dijo que por ciento veinte euros se lo ofreceria.
Yo reitere mi negativa, pero el trato ya estaba hecho y el tio sacaba el dinero
de su cartera. Intente escaparme, pero el otro tio me agarro, y ayudado por mi
hermano me tiro en la cama con la espalda hacia arriba. El otro se pajeo deprisa
para empalmarse del todo, a la vez que me pasaba el dedo y me lo metia por el
ojete con algo de saliva. Mi hermano me dijo que me relajara y que seria mejor,
que 120 euros era mucho mas de lo que a el le habian dado la primera vez. El tio
se me puso encima y llevo su polla a mi agujero. Note como el capullo entraba un
cent�metro, y como el tio empujaba. De una enculada la polla desaparecio dentro.
No la tenia muy grande, unos 13 cms, pero si lo suficiente como para hacerme
da�o. Empezo a bombear, produci�ndome un da�o terrible. Mi hermano me
tranquilizaba, dici�ndome que si me relajaba no me haria da�o. Yo gritaba, lo
que hizo que un par de tios del piso vinieran a la habitaci�n. Cuando vieron lo
que pasaba se quedaron en la puerta, asistiendo al espect�culo, mientras yo les
pedia ayuda. El tio me dijo que me la iba a echar dentro, y empezo a apretar mas
adentro, hasta que por sus gemidos parecio que ya se habia corrido. Me la saco
deprisa, haciendome tambien mucho da�o. Mi hermano me acaricio la cabeza y me
dijo que ya habia pasado.....

El otro tio dijo que el tambien queria. Tenia la polla
peque�a pero bastante gorda. Mi hermano le dijo que no, que era suficiente para
mi culo y que mejor se la clavaba a el. El tio se quejo y dijo que queria su
parte. Le dijo que solamente me la meteria para terminar de abrirme, pero que le
terminaria el polvo dentro de el. Mi hermano accedio y el tio se dispuso a
buscarme el agujero situ�ndose tambien encima. Yo ya no intente zafarme. Me puse
en la mejor posici�n posible y deje que me la metiera.

Entro mejor que la otra, no me hizo casi da�o, aunque notaba
que era mas gorda. Cuando el tio se encajo empezo a bombearme dentro, y mi polla
empezo a empalmarse. Mi hermano sonrio, y los chavales tambien, al ver que era
uno de los suyos. El tio que me follaba me dijo que preferia terminarme dentro,
que lo tenia mas estrecho que los demas y que le gustaba mucho. Yo asenti y me
dispuse a aguntar las ultimas clavadas. El tio se corrio como un toro dentro de
mi. Cuando la saco mi ojete quedo manchado de semen y sangre, que el tio miro
como si fuera un triunfo.

Hace de aquella noche unos dos a�os. He follado con tantos
tios que casi no me acuerdo. Algunos clientes que nos conocen nos piden follar
con mi hermano y conmigo, porque les da morbo, nosotros somos profesionales.
Todo tiene un precio.

Eso os lo contare otro dia......