Continuando con la preparaci�n del enema le dije a mi sobrina
que se acostara en la cama en posici�n lateral. �Encontraste el b�lsamo de
beb�s? S� cari�o, enseguida salgo. Me lav� concienzudamente las manos y le dije
si ten�a guantes desechables. Lo considero m�s higi�nico, aunque la verdad
lubricarle ese culito a pelo ser�a una delicia. En el caj�n del armario tienes
t�o, pero por favor date prisa.

Cuando salgo del ba�o, estaba acostada como le dije, se hab�a
quitado el pantal�n del pijama, mostr�ndome su exquisito cuerpo de cintura para
abajo. Tomo el b�lsamo de beb�s y me pongo un poco en mi dedo deseoso de
insertar la puntita. Lo aplico sobre su lindo agujerito y le doy un masaje
circular. Voy a meter un poquito el dedo, rel�jate sobrinita. Nervioso y
excitado a la vez procedo a entrar en esa linda cuevecita posterior. �Te hago
da�o? No, tito querido; aunque me sepa mal decirlo me das un placer
indescriptible.

Ya est�s lubricadita tesoro. Cuelgo el irrigador sobre un
perchero y lo acerco a la cama. A su vez lubrico la c�nula para met�rsela
delicadamente en ese culito y abro el paso del agua con la llavecita del
irrigador. �Est�s c�moda en esa postura? Por supuesto, eres todo un experto en
tu profesi�n.

Gracias nena. Pacientemente iba entr�ndole el contenido del
enema. Quedando los �ltimos cent�metros c�bicos, me dice por favor no me puedo
aguantar. No te preocupes tesoro, enseguida cierro el paso del agua y te quito
la c�nula. As� lo hice y ayud�ndola a incorporarse de la cama entr� al ba�o a
evacuar el enema.

Yo necesitaba ir al ba�o por lo que viendo que tardaba un
poquito le digo: �nena te sientes bien? S� t�o, enseguida salgo. A los pocos
minutos sale toda sonriente. Llevaba puesta la blusa del pijama y se hab�a
cubierto la parte de abajo con unas lindas braguitas de color blanco.

Yo me encontraba sentado en la cama; se sienta junto a m� y
me dice: gracias t�o, d�ndome un cari�oso beso. Acu�state nena y descansa. Yo
debo marcharme. Vale cari�o, hasta ma�ana. �Por favor? ven sobre las diez de la
ma�ana, la cita con la doctora la tengo a las 12. No te olvides que tienes que
aplicarme el otro enema

Me marcho a mi domicilio y me meto en la cama so�ando con las
braguitas negras dentro de ese magn�fico culo de Raquel.

Sobre las 8.30 de la ma�ana me levanto y una vez aseado me
voy directamente al consultorio. Miro en el contestador telef�nico si hab�a
alg�n aviso urgente. Mira por donde tengo uno de Raquel, necesitaba urgentemente
que la visitara. Ten�a un problema, se me ech� a llorar por el tel�fono. Le dije
que iba directamente a casa de mi sobrina Maribel.

De acuerdo Antonio, mi marido ahora se encuentra durmiendo ya
que regres� del trabajo sobre las 7. Dile a Maribel cuando la veas que si me
puedo pasar por su casa y hablamos del tema. Por supuesto Raquel, tranquil�zate.
Llego a casa de Maribel, como ten�a llave del departamento paso directamente.

Nena soy yo, tu t�o. Pasa cielo me encuentro en el
dormitorio. Ya he llevado a las nenas con la abuela, <mi querida mam� y hermana
tuya>. En el dormitorio me la encuentro acostada. Como ves me he metido en la
cama un poquito. Nos dimos un beso. Le comento lo del problema de Raquel y que
la not� muy preocupada. Me dijo que si pod�a pasarse a verte que la llamaras al
m�vil. Por supuesto que la llamar� t�o. Est� falta de cari�o y me temo que su
marido no la trata como tiene que ser. Hizo uso del m�vil y a los cinco minutos
llamaba a la puerta. Salgo a abrir y le digo: Pasa Raquel. Maribel est� en el
dormitorio.

_Bueno expl�canos tu problema le dice mi sobrina. Ver�s me
encuentro muy depresiva. Ser� por los dolores de la maldita regla y he pasado
muy mala noche. Luego para acabar de arreglar la cosa mi marido ha llegado esta
ma�ana de trabajar con ganas de juerga, es decir que quer�a marcha. Le he
comentado mi problema y se ha puesto hecho unos zorros.

Tranquil�zate Raquel le dijo Maribel. Si necesitas que
Antonio te ponga otra inyecci�n no tienes m�s que dec�rselo.

Sois muy buenos conmigo, y no quiero causaros molestia
alguna. Yo intervengo y le digo: d�jate de tonter�as Raquel. Ahora te pondr� la
inyecci�n.

_Maribel, qu�date descansando un ratito, si te parece bien
Raquel puede pasar al dormitorio de las nenas y all� la inyecto. Claro t�o, que
pregunta. Vamos Raquel, arriba ese �nimo, ve con Antonio al otro dormitorio. Fui
al sal�n a por mi malet�n, y en el dormitorio contiguo me dispongo a preparar el
inyectable. Te voy a poner una ampolla de buscapina, es mucho mejor.

_Raquel iba vestida con una bata de estar por casa, y debajo
llevaba el pijama. Desc�brete por favor. Se quita la bata y se coloca en la cama
de costado, se baja el pantal�n junto con la braguita. Cuando quieras Antonio.
Procedo a darle con el spray del alcohol sobre su nalga derecha y le doy con el
algod�n. Not�ndola relajada le introdujo la aguja. Poco a poco le administro el
contenido muy lentamente, Listo Raquel. Le paso el algod�n en el punto de la
inyecci�n. Puedes cubrirte. Ahora descansa que lo necesitas. Echa hacia arriba
la braguita junto con el pantal�n del pijama.

_Gracias Antonio, eres un solete. La dejo acostada y la cubro
con una colcha.

_Paso al dormitorio de Maribel. Nena se ha quedado dormida.
Falta le hace y desde luego t�o, t� te portas demasiado bien. Gracias nenita, mi
sobrina preferida. Ahora ponme el enema que tengo que visitar a la doctora. Las
inyecciones me las pones a la noche. Adem�s hoy las nenas se quedan con la
abuela y quiero recompensarte con una buena cena, ya que hace un poquito de
tiempo que no nos hemos visto. Como gustes cari�o.

Paso al ba�o a lavarme las manos y traigo el enema preparado
junto con un gel lubricante que saco de mi malet�n. Cuando sal� del ba�o ya se
hab�a descubierto de cintura para abajo deleit�ndome en contemplar ese
maravilloso cuerpo.

En posici�n lateral izquierda, le dije que la pierna derecha
la flexionara un poquito hacia delante. Me puse los guantes de un solo uso y
procedo a lubricarle bien el culito. �Te lo hago bien? Por supuesto querid�simo
t�o. Lubrico la c�nula del irrigador y la inserto delicadamente. Suj�tate t�
misma la c�nula y yo pongo el irrigador en alto. As� ser� mejor.

Poco a poco le iba entrando el contenido del enema. Eres muy
buena paciente Maribel.

�Falta mucho? Enseguida acabamos. Le cierro la llave de paso
del agua y procedo a sacarle la c�nula lentamente.

Se incorpora de la cama y pasa r�pidamente al ba�o. A los
pocos minutos me dice: puedes pasar si lo deseas ya termin�. Entro a lavar el
irrigador y se hab�a cubierto su lindo trasero con unas mini braguitas. Voy a
darme una ducha r�pida. Ve a echarle una miradita a Raquel, me sabe mal si est�
dormida pero creo conveniente que se marche a su casa no sea que su marido
despierte y monte el esc�ndalo.

Llevas toda la raz�n Maribel, enseguida la llamo. Entro al
dormitorio de las nenas y me sinti� entrar. �C�mo te encuentras Raquel? Bastante
mejor, gracias. El calmante me ha hecho efecto. Maribel se est� arreglando, pues
tiene cita con la doctora. Yo la acercar� en un momento. Por supuesto Antonio.
De nuevo gracias por atenderme. Me voy a levantar y marcharme para casa. Si
necesitas algo no tienes nada m�s que llamarme al m�vil o al tel�fono del
consultorio. Dime lo que tengo que abonarte, no te preocupes por ello Raquel. Se
incorpor� de la cama y fue al cuarto de ba�o a refrescarse la cara. Desp�deme de
Maribel. As� lo har� no te preocupes.

_Hasta luego Antonio., y gracias de nuevo. La acompa�� hasta
la puerta. Al rato sali� Maribel toda arreglada y muy elegante como siempre
acostumbra. Ya le digo lo de Raquel que se hab�a marchado a su casa. Mejor as�
t�o, salimos del piso y me prest� a acompa�arla. Luego me marchar�a a abrir el
consultorio.

Cuando la dej� en la puerta de la consulta nos despedimos no
sin antes decirle que cuando acabara me llamara y con sumo gusto ir�a a
recogerla. Gracias t�o, ella los trabajos de dise�o los realiza en su casa. Pues
tiene una profesi�n muy bonita y le encanta.

Me fui al consultorio, estuve trabajando un poco en ordenar
las fichas de los pacientes y atend� a varias visitas, como tomas de tensi�n,
inyectables, etc. Ya se aproximaba la hora de comer y me llam� Maribel. Pas� a
recogerla y con sumo gusto la dej� en casa de mi hermana. No sin antes
recordarme que me esperaba en la noche para cenar con ella. De paso, me
ense�ar�a sus nuevos dise�os. Le coment� en alguna ocasi�n que me dar�a mucho
gusto ver sus trabajos realizados.

De camino a casa, me llaman al m�vil, resultando ser Raquel,
su vecina e inseparable amiga. Al parecer tuvo que ir a visitarla de urgencia el
doctor. Debido a un enfriamiento por los cambios bruscos de temperatura. Estando
pr�ximo a su domicilio le dije que en cinco minutos estar�a all�. Esta
muchachota estaba resultando algo pesadita, pero al mismo tiempo deseaba
fervientemente verla de nuevo.

En el domicilio de Raquel me abre la puerta su querida mam� a
la que tuve el gusto de conocerla. Una se�ora muy agradable, sobre unos 50 a�os,
bien llevados. De tez morena y un cuerpo de pan y moja.

Al estar su hijita en cama, fue a atenderla y de paso en
atender las faenas de hogar, comida, ropa, etc.

Su madre nos dej� a solas a petici�n de ella, Quer�a
comentarme un problemita. �Dime que te ocurre Raquel? La regla por fin me vino
esta ma�ana, luego despu�s de dejarte. Asimismo, hube de llamar al m�dico de
urgencia pues me encontraba con malestar general y escalofr�os. Me han recetado
6 ampollas bals�micas de 5 ml., tambi�n fui al ba�o a hacer de vientre y no hubo
manera. Lo coment� con el doctor, de mi posible estre�imiento por lo que me
aconseja de aplicarme dos enemas. Uno ahora y otro a la noche antes de dormir.

De nuevo te estoy dando la lata con mis males. No debes
preocuparte Raquel. Con mucho gusto te atiendo enseguida. Si te parece te
administro primero el enema.

Sobre la mesilla de noche estaban los medicamentos
prescritos.

Tomo el enema preparado y la digo se recueste en la cama en
posici�n dec�bito lateral. Se desvisti� de cintura para abajo quedando s�lo con
la blusa del pijama. Yo paso al ba�o a lavarme las manos. Seguidamente abro mi
malet�n y me coloco unos guantes de un solo uso. Al mismo tiempo tomo un
frasquito de vaselina y le digo que flexione la pierna derecha hacia delante
contemplando una buena panor�mica. Al mismo tiempo observo que ten�a insertado
el tampax; as� lo delata el hilito que sobresal�a apenas de su conchita.

Ahora voy a lubricarte el recto; rel�jate. Por supuesto
Antonio. Haz lo que creas necesario. Separo sus lindas nalgas y procedo a
aplicarle la vaselina en el c�lido agujerito. Tomo el enema preparado y rompo el
tap�n del envase. Lubrico la c�nula adosada al mismo y cuidadosamente la
introduzco en el culete. �Notas alguna molestia? Todo lo contrario, me lo haces
divinamente. Presiono con mis dedos el envase y le voy aplicando el enema con
toda suavidad. Era de 125 c.c. por lo que r�pidamente le entr� todo en su recto.
Con la mano apoyada en el vientre pas� al ba�o.

Al ratito sale del mismo cubierta con un diminuto slip en
color blanco. Se mete entre las s�banas y me dice gracias Antonio. Ahora ve
preparando el inyectable por favor.

Preparando la inyecci�n entr� su madre a la alcoba. Le toc�
la frente y le dijo, creo que tienes fiebre nena. Ser� mejor ponerte el
term�metro. Caso necesario deber� ponerte Antonio una ampolla de 2 ml., perdona
mam� me encuentro algo aturdida y se me pas� decirle a Antonio. Le puso el
term�metro sobre la axila y le dijo mantenlo durante unos minutos. Efectivamente
ten�a fiebre. Ya tenia yo preparada la inyecci�n bals�mica por lo que le rogu�
se colocara boca abajo en la cama. Luego le pinchar�a en la otra nalga la
ampolla de 2 ml.

Se puso como le indiqu�. Se baj� algo ruborizada el slip, por
notar la presencia de su madre. Me dispongo a aplicarle el spray con el alcohol
sobre su nalga izquierda. Paso el algod�n y le digo no te muevas por favor.
Ponte relajada. Este antibi�tico hay que aplicarlo muy despacio. Clavo la aguja
y poco a poco administro el contenido de la jeringa. �Duele? Ya lo creo. Termino
de inyectarla y le pongo el algod�n sobre el punto de la inyecci�n. Seguidamente
me pongo a preparar la otra ampolla. Su madre pas� al ba�o. Esta te la pongo en
la nalga derecha. Por supuesto Antonio. Aplico el spray y con el algod�n me
entretengo en masajearle el culito. Administro el inyectable y le digo puedes
volverte. Se sube el slip y me dice. Ya me dir�s lo que te tengo que abonar. No
te preocupes, cuando termines el tratamiento me abonas. Tengo todo anotado en tu
ficha m�dica.

Me dijo que era muy delicado poniendo inyecciones, lo cual se
lo agradec�. Record�ndome que deber�a pasar a la noche, le tocaba la segunda
inyecci�n. Aqu� estar� no debes preocuparte. Ahora descansa y a guardar cama dos
o tres d�as. Su madre hab�a salido del ba�o y se dispuso a recoger las jeringas
desechables y acompa�arme a la puerta.

Saliendo de casa de Raquel, suena mi m�vil. Era mi hermana
que pasara urgentemente por su domicilio. Como es natural, a los cinco minutos
estaba en su casa. Estaba Maribel con las nenas. Mi hermana asimismo hab�a ido
al doctor a por unas recetas por sus dolores �seos. Algo m�s joven que yo, tiene
52 a�os. Ten�a prescrito unas inyecciones. En concreto 5 ampollas de 1 ml.

Su nuera la hab�a llamado porque se encontraba enferma en
cama aquejada de una fuerte afecci�n gripal. Le hab�an recetado una tanda de
inyectables. De peque�a le pusieron como apodo Lele. Es una chica esbelta, m�s o
menos de la estatura de mi sobrina. De unos 25 a�os, pelirroja y de un cuerpo de
ensue�o.

Llego con Maribel, mi querida sobrina a casa de Lele. Al
sentir Lele el ruido de la puerta dijo: Maribel, �eres t�? S� cielo ya estamos
aqu�. Pasamos al dormitorio y tuve el gusto de saludar a mi sobrina pol�tica. Le
hab�an recetado una tanda de inyectables.

Me dijo que ten�a bastante fiebre, por lo que deber�a
inyectarle:

Primeramente me dispongo a preparar la jeringa de 2 ml. �
Desc�brete por favor. Por supuesto Antonio, Maribel echa el cobertor de la cama
y ella t�midamente se baja la braguita. Le doy con el spray del alcohol en la
nalga izquierda, paso delicadamente el algod�n e introduzco la aguja. No te
muevas por favor. Delicadamente inyecto el contenido y le doy con el algod�n en
el punto de la inyecci�n. �Te ha dolido? No Antonio, un poquito al entrar el
l�quido. La cubro un momentito con el cobertor de la cama y preparo la inyecci�n
del antibi�tico. Esta te va a doler un poquito, pues son algo fuertes. No te
preocupes Antonio. Una vez lista la inyecci�n se descubre de nuevo y me dispongo
a pinchar la nalga derecha. Despu�s de darle con el algod�n, inyecto suavemente
y poco a poco administro el vial.

Se suite la braguita y me dice: gracias Antonio no cabe duda
que eres un buen profesional en tu labor. Hay cada uno o una por ah� que parece
que aplican banderillas en vez de inyecciones. Se da la vuelta en la cama y me
dice, no te olvides que debes pincharme a la noche. Maribel se queda con ella y
me da las llaves de su coche. D�ndoles un cari�oso beso a las dos regreso al
domicilio de mi hermana. Sobre las 8.30 aproximadamente ir�a de nuevo a
inyectarla.

Llego a casa de mi querida hermana sobre las 3 de la tarde.
Me aseo un poco y le digo a mi hermana que Maribel se queda con ella pues su
hijo estaba en el trabajo. Si�ntate a la mesa que enseguida te traigo la comida.
Gracias hermanita. Ella ya hab�a comido m�s temprano con Maribel y las nenas. La
peque�ita estaba durmiendo la siesta y la mayor la recoger�a de la guarder�a
sobre las 5 de la tarde. Despu�s de comer me ech� un ratito a descansar. Mi
hermana se encargar�a de llamarme y de paso tendr�a que ponerle a ella su
inyecci�n.