Para quienes no hayan ido a Baltispoon, les hubiera
parecido curioso el trasiego de camiones, obreros, obras, infraestructuras,
decoraci�n, entre otras muchas labores, que se han realizado en una mansi�n
abandonada, situada a 3 kil�metros del pueblo. Para el pueblo, fue algo
incre�ble y maravilloso, y toda una sorpresa, por as� decirlo: no todos los d�as
alguien que va a instalarse en el pueblo, adquiere un deteriorado caser�n, y lo
rehabilita para vivir en �l. El ayuntamiento lo iba a demoler, pero dos d�as
despu�s de aquella decisi�n, una llamada a la concejal�a de urbanismo, y luego a
la alcald�a, hicieron cambiar la situaci�n de la casa.

Baltispoon vive unos a�os muy tranquilos desde que hace unos
10 a�os, sufriera el peor de los hechos que nadie en su sano juicio quiere
volver a recordar: la humillaci�n y posterior violaci�n en grupo que sufriera
una joven, Ellen Browning, de 16 a�os, durante una fiesta en la que se celebraba
el aprobado general de los dos hijos del que ahora es el alcalde. Durante la
fiesta, se emiti� un video en el que se pod�a verla a ella, haciendo el amor con
su novio. Aquello provoc� las risas y carcajadas de todos los asistentes, y
caus� un shock a la joven, que qued� impresionada ante aquel video grabado con
c�mara oculta. Algunos, excitad�simos tras ver im�genes de dicho video, se
lanzaron en masa hacia a la joven, a la que desgarraron el vestido, y violaron
de manera atroz y en varias ocasiones, siendo tambi�n grabada en esos momentos,
ante las risas y la pasividad de muchos. En el juicio se supo que una llamada
an�nima hizo ir a la polic�a al lugar, y que la joven sufri� una infecci�n
ov�rica que la provoco c�ncer de ovarios en los dos ovarios. En otras palabras:
se qued� est�ril para el resto de su vida. Finalmente, los acusados tuvieron una
condena de 90 horas de servicios comunitarios, en lugar de 30 a�os de prisi�n,
como ped�an los abogados de la familia de la joven. Se hablo de tongo, apa�os�
La joven y su familia se fueron del pueblo, y no se supo m�s de ellos. Ni
prensa, ni radio, ni televisi�n� nadie ha podido encontrarles.

El viernes 7 de septiembre, fue el d�a, el d�a en que llegaba
la misteriosa persona que reacondicion� el caser�n podrido, anta�o mansi�n
Bratt. Todos dispuestos, expectantes e impacientes a la llegada, en una fastuosa
limousine de color satinado de la persona que eligi� la mansi�n para vivir, esa
limousine que solo una persona ir�a dentro de ella, nada menos que�

"�La reina de la autoayuda en 3 estados, Ellie Bernstein! Me
quede impresionado cuando me comentaron que estaba interesada en el lugar, pero
no la hacia en un lugar como este". El alcalde Bloom estaba expectante tras
averiguar el nombre de su nueva conciudadana, Ellie Bernstein.

De Ellie Bernstein circulan todo tipo de historias, ya que a
su juventud, hay que sumarla una impresionante inteligencia, y todo un �xito
tremendo con sus libros y CDS de autoayuda, que en un tiempo record, y con una
eficacia del 92%, algo inusual en este tipo de elementos de ese genero. Su
secreto, seg�n ella, es"Escuchar a aquel que necesita ayuda, y d�rsela".Tras
bajar de la limousine, se ve�a a una mujer escultural, de curvas proporcionadas
en pecho y espalda, que oculta tras sus gafas negras sus penetrantes ojos
negros. Rubia casi natural, sus cabellos brillaban como si fueran el mismo sol
de la ma�ana. Su caminar era elegante pese a los tacones rojizos de sus zapatos,
a juego con el mejor modelo que cualquier modisto pudiera dise�ar. Hab�a
periodistas de los tres estados en los que ella hab�a triunfado, como si la
siguieran de toda la vida. Ellen se dirige a un atril preparado para dar un
discurso de bienvenida. Cerca del atril, dos operarios transportan un par de
cajas, y se ponen a lados opuestos del atril.

"Damas, caballeros, chicos, chicas, se�or alcalde...muchos os
preguntareis porque he elegido un lugar como Baltispoon para tener una
residencia, teniendo en cuenta que nac� a 5 estados mas al norte". Muchos rieron
al o�r estas �ltimas palabras, debido al contraste que hay en los estados del
norte, con los estados del sur. Tras las risas, Ellie continu� con su discurso:

"En el fondo, me siento sure�a por parte de madre, y siempre
he tenido deseos de conocer uno de los m�s bellos parajes que me han contado
clientes y colaboradores que tengo. Tras consultar pisos, y viviendas en venta,
me entere por Internet que una mansi�n, esta mansi�n que veis ahora, iba a ser
demolida por la falta de cuidados, y que nadie quer�a ocuparse de ella, por su
alto coste. Tras h�biles conversaciones, consegu� contactar con el se�or alcalde
aqu� presente, el Sr. Bloom, y hacerle una oferta que no pudo rechazar:
rehabilitar la mansi�n hasta conseguir hacerla habitable, con coste 0 para la
alcald�a, ganando a una habitante m�s. Ni que decir tiene que el trato fue
satisfactorio. La mansi�n ha quedado 100 veces mejor de lo que estaba�y les
invito a que vean como ha quedado".

Las puertas de la mansi�n se abren, permitiendo a todo aquel
que entra, maravillarse por como ha quedado por dentro la casa: muebles ultimo
modelo, pantalla de televisi�n plana, escaleras remozadas�"Lo �nico a lo que no
se puede tener acceso es a la cocina�y a los dormitorios. �Al menos se podr�n
usar los aseos! No se olviden al salir, de recoger el CD de autoayuda que
quieran, o el CD de los grupos del momento para los j�venes. Hay de todo y para
todos".

Acto seguido, todo el mundo sal�a de la casa para recoger los
CD gratuitos, escribiendo sus nombres en unos listados que hab�a en unas
peque�as mesas. Todo Baltispoon parec�a preso de una fiebre loca por conseguir
esos regalos. Acompa�ada por las tres periodistas y de sus respectivos c�maras,
Ellie se asoma al umbral de la puerta de la mansi�n."Antes de desearos un feliz
d�a, quer�a dar una primicia. Yo, Ellie Bernstein, ser� la asesora psicolog�a de
un especial que las cadenas de tres estados, y posiblemente la de aqu�, si fuera
posible, que se har�a en una semana, sobre la violaci�n en masa de har� unos 10
a�os. Se espera que haya colaboraci�n por parte de todos, ayuntamiento incluido,
de desarrollar dicho programa. �Ahora, a bailar!". La m�sica empieza a sonar de
unos altavoces que hay por los aleda�os de la mansi�n, provocando que el ritmo
se contagie entre la juventud. Ellie se introduce en la mansi�n con las
reporteras y sus c�maras, cerr�ndose las puertas tras ellos. Como si fueran
zombis, reporteras y c�maras siguen a Ellie al dormitorio, cerrando uno de ellos
la puerta al entrar.

"Apagad c�maras y micros. Grabadoras tambi�n. Desnudaos y
desnudarme. Hoy es un d�a grande, es el principio de todo". Sin mediar palabra,
los encargados de las c�maras desnudan a sus reporteras, y �stas a sus c�maras.
Una vez dichas parejas desnudas, rodean a Ellie y la desnudan poco a poco."Ahora
haced el amor en todas las combinaciones posibles, hacedlo por mi". Lo que
sucede ahora es todo un espect�culo: mamadas entre hombres, tres hombres y una
reportera, tres reporteras y un hombre� Ellie no paraba de meterse dedos en su
depilada entrepierna, maravill�ndose de lo que ve�a. A�os de pruebas, tes�n y
esfuerzos recompensados finalmente en lo que ve�a: las reporteras lam�an sus
pechos con pasi�n devoradora, dejando paso en su momento a los chicos que
arrimaban sus vergas a sus labios, mamando pollas como si fuera una profesional,
y compartiendo el esperma que alguno soltaba en su garganta. Sexo sin freno y
sin pudor alguno, sin limites fijados salvo los del cansancio de follar a ritmo
tremendo."Esto ser� maravilloso, si se�or. Prep�rate Baltispoon, que llego yo".

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