Las vacaciones fueron estupendas y mis padres, aprovechando
los precios de la isla, me regalaron una camara digital estupenda de la que no
me podia separan en ningun momento. Durante el viaje de vuelta mis padres
tomaron un poco de cava y pronto se quedaron dormidos. Tras unos momentos me di
la vuelta para ver una imagen que tardaria en poder olvidar, la camisa de mi
madre se habia abierto mientras dormian, dude unos momentos, pero pronto me di
cuenta que tenia ante mi una oportunidad que no podia dejar escapar. Empece a
hacer fotos al pecho de mi madre, mientras ella se movia en su sue�o, saque unas
cuantas, guarde la camara y la tape un poco consu chaqueta que tenia en su
regazo.

Cuando llegamos a casa descargue todas las fotos en el
ordenador y me acoste a dormir, ya que me encontraba agotado.

Pronto reemprendi mis clases en la universidad y todos los
dias me los pasava pensando en las tetas de mi madre, sus pezones...me ponia a
cien. Son unos pechos grandes y nada flacidos para una mujer de 43 a�os. Todo
iba bien, yo estudiaba mientras mi padre se iba a trabajar y mi madre asistia a
un sinfin de reuniones con sus amigas y tenia todas las tardes para pajearme con
las fotos de las mamas de mam� y los relatos incestuosos a los que me habia
aficionado desde el viaje en avi�n.

Pero lo inevitable tenia que pasar, dias despues debiamos
acudir a una reuni�n familiar y mi madre decidi� entrar en mi ordenador para
sacar las fotos de las vacaciones y poder mostrarselas a nuestros familiares,
durante unos dias se mostro extra�a, no me dijo nada, pero present� que habia
encontrado las fotos y algo me decia que tambien los relatos. Tenia miedo por
las posibles repercusiones, quien sabe lo que podria pasar si se lo dijese a mi
padre. Pasaron los dias y continuaba sin nombrar el tema y nuestras
conversaciones se hacian mas superficiales, pero lo que m�s me impresion� fue
ver como empezaba a vestir con ropa menos conservadora. De vez en cuando
aparecia con alguna blusa trasparente que mostraba sus tetas cubiertas por su
brasiere. Todo parecia que queria excitarme y �Dios! lo conseguia a cada minuto.

Cada dia que pasaba su cuerpo iba incrustandose en mi mente,
hasta que no podia pensar en nada m�s, por las noches despues de cenar, mientras
mis padres miraban la televisi�n, yo no hacia otra cosa que mirar a mi madre,
aunque ahora encontraba la mirada de mi madre que huidiza volvia a la tele.

Dia a dia los coqueteos entre ambos se hacian m�s evidentes.
�En verdad mi madre sentia algo por mi? � Tendria ocasi�n de gozar de su cuerpo?

Todas las ma�anas al bajar a desayunar tenia que hacer
grandes esfuerzos para que no se notasen las erecciones que soportaba cada
ma�ana y los vestidos de mi madre no ayudaban nada, en lugar de las batas de
franela, ahora llevaba camis�n. Podia notar como ella me observaba mientras yo
intentaba contener mi polla dentro de los pantalones de mi pijama. Y as�
estuvimos hasta que llegaron las vacaciones de navidad. Yo terminaba las clases
y tendria mucho m�s tiempo en casa para poder satisfacer mis placeres onanistas
con la visi�n de las fotos de mama.

El segundo dia de vacaciones navide�as, tras desallunar mi
madre me pidi� que hiciese algunas compras para la cena de nochebuena, cuando
volv� del supermercado la encontre en mi cuarto con un paquete envuelto en papel
de regalo en sus manos. El ordenador estaba encendido y en su pantalla estaba un
primerisimo plano de su pecho derecho.

- Ehh mam�! se que no me creeras, pero no es lo que parece.

- �Ah no? dime �y que es lo que parece Marcos?

En ese momento no supe que contestar, me quede inmovil
mientras mi madre me miraba de arriba a abajo.

- Tranquilo, luego me lo explicaras mejor. Ahora quiero darte
tu regalo de navidad, se que todavia quedan unas horas, pero no podia aguantar
m�s y preferia dartelo ya.

Abr� el paquete que me dio mi madre, y bajo el papel azul
encontre una hoja que ocultaba un precioso sujetador rojo con encajes negros. En
la nota decia " Que este sea nuestro peque�o secreto"

Mire a mama at�nito, ella me gu�� un ojo y poco a poco fue
desabrochandose la blusa. Yo no sal�a de mi asombro, me quede all� pasmado
viendo como mi madre se desnudaba lentamente, de la forma m�s sensual que pude
imaginar, mi pene se empalmaba bajo mi pantalon vaquero, mostrandole a mi madre
un bulto inequivoco de excitaci�n.

Al mirarla, ella me mir� intensamente mientras me dec�a que
me tumbara sobre la cama y me quitase los pantalones.

Cuando me los baje, mi falo sali� como un resorte a lo que
ella sonri� picaramente. termino de desnudarse, y me dij�:

- Se lo que sientes, y aunque al principi� me choc� debo
reconocer que me excita un monton y quiero que me eches el mejor polvo de tu
vida.

Se subi� a horcajadas sobre mi y tomando mi pene se lo
introdujo lentamente en la vagina, humeda y preta.

-AAAhhhh. Gemimos los dos mientras nuestros ojos se clavaban
en las pupilas del otro.

- Oh mam� que gusto.

- Callate hijo y follame. Empez� a moverse poco a poco y en
un instante estaba cavalgando sobre mi como una fiera, la sensaci�n era
indescriptible.

En pocos minutos note que estaba a punto de correrme y as� se
lo dije a mi madre, quien me respondi�

- Oh si, correte hijo, hazlo dentro de mi co�o. ooohh que
gusto, aguanta un poco m�s que yo tambi�n estoy por correrme.

-Aaahhh. Grite cuando lanc� uno treas otro los chorros de
semen que golpeaban contra las paredes de la vagina que me vi� nacer.

Los dos caimos agotados entre arrumacos y besos. Le confese
todo el amor que sent�a y ella me dijo que me amaba.

Durante mucho tiempo continuamos con nuestros escarceos,
ensee�andome mi madre todo lo que se sobre el sexo

Byeloverbye