Llego la noche de su boda y la verdad es que yo estaba un
poco deprimido porque pens� que estaba perdiendo una amante.

La fiesta se desarrollo normalmente hasta que se acerco mi
prima, la novia, para preguntarme que me pasaba porque me notaba algo triste, le
cont� lo que me pasaba y me dijo que eso tenia f�cil soluci�n.

Se me acerco y me pidi� que disimuladamente la siguiera.

Ella sali� del sal�n de fiestas y yo atr�s de ella, dio la
vuelta y se meti� en una habitaci�n que los mozos usan para cambiarse, entre
detr�s de ella y comenzamos a besarnos con mucho morbo de saber que cualquiera
podr�a encontrarnos en esa situaci�n.

Estuvimos un largo rato saboreando nuestras lenguas hasta que
poco a poco quedamos desnudos sobre un sill�n que hab�a en ese lugar.

Ella se sent� sobre mi pene y comenz� a cabalgarme con mucha
energ�a yo sent�a que tocaba el cielo con las manos mientras disfrutaba de sus
endurecidos pezones. Ella me dec�a que por mas que estuviera cazada jam�s iba a
dejar de gozar conmigo que se hab�a vuelto adicta a mi pija y cosas como esas.
Estuvo un largo rato cabalgando hasta que exploto en un orgasmo que casi la dejo
si fuerzas.

Como yo todav�a no hab�a acabado se puso en cuatro patas
sobre el sill�n y me ofreci� su espectacular culito al cual yo ya hab�a estado
estimulando con un dedo primero y con dos y tres despu�s. Comenc� con un lento
bombeo hasta que no aguante mas y me vaci� en su interior al mismo tiempo que
ella tenia el segundo orgasmo de la noche.

Luego ella me limpio el pene se acomodo la ropa y volvi� a la
fiesta

Yo agotado como hab�a quedado me fume un cigarrillo antes de
volver al sal�n, grande fue mi sorpresa cuando entre a la fiesta y se me acerca
una t�a mia de 38 a�os que me dice al o�do hubieran cerrado la puerta. Pero
mayor fue mi sorpresa cuando me agarro el pene por encima del pantal�n y me dijo
si te portas bien conmigo nadie se va a enterar.

Ac� les mando dos fotos de mi prima y lo que paso con mi t�a
se los cuento en otra oportunidad.