Hola a todos otra vez, quiero agradecerles todos sus
comentarios y estoy muy contenta de que les est�n gustando mis relatos.
Este relato que les voy a narrar me lo he pensado mucho en
escribirlo, ya que para mi es muy intenso, ustedes j�zguenlo.
Como ya me han ido conociendo, soy una chica abierta y con
ganas de ir experimentando cada vez, cosas nuevas.
Esto sucedi� hace un poco m�s de dos a�os, mi hermano Jorge,
con el cual siempre he llevado una estupenda relaci�n se estaba ba�ando, en el
ba�o que esta en el pasillo que conecta a las recamaras, yo estaba subiendo las
escaleras rumbo hac�a mi habitaci�n, en eso, escucho que se abre la puerta y
sale el empapado, sin toalla, a gritar que alguien prendiera la cisterna, me
tope con el de frente, desnudo, y ten�a una erecci�n de miedo, en aquel entonces
mi hermano ten�a 17, jam�s lo hab�a visto totalmente desnudo, quede impactada �
Jessy, prende la cisterna � y se regreso al ba�o tambi�n desconcertado.
Despu�s de eso, me fui a mi recamara totalmente impactada,
hasta ese momento, yo no hab�a visto un pene tan parado, tan curvo, tan
apetecible, estaba ciscada y confundida, por que me hab�a excitado, pero era mi
hermano.
Ninguno hizo m�s comentario de lo sucedido, alrededor de tres
semanas despu�s, est�bamos solos en casa, viendo una pel�cula en la recamara de
mis papas y echados en la cama, no recuerdo que pel�cula era, pero en eso estaba
pasando una escena de un semidesnudo, de una pareja haci�ndolo � Jessy, tu no
veas eso � hay no inventes (conteste), si ya hasta vi el tuyo, con mi comentario
se quedo pasmado, despu�s de unos segundo dice:
- lo tengo bien, a poco no?
No sab�a ni que contestar, sab�a que si dec�a algo, las cosas
se pod�an salir de control o pod�a recibir una cachetada de su parte.
- aja, le conteste
- a poco no te gusto?
Queeeee????!!!!!???? (grite hacia mi interior), no sab�a ni
que decir, pero era la verdad, me hab�a gustado, hab�a perturbado mi vida
durante esas tres semanas pensando en la vergota de mi hermano, pensando en
poseerla y en mis remordimientos de mis sensaciones sexuales hacia el, pero era
ahora o nunca, no volver�a a tener una oportunidad as�.
- si, si me gusto
- comooo?
- tu preguntaste, la verdad, si no fuera tu hermana yo si te
tiraba Jorge
- no digas pendejadas Jessy
Se acerco a darme un beso en la mejilla (un beso de hermanos)
y mov� mi cara, como cuando me interesa algo, d�ndome un piquito en los labios �
Jessy !!!!!!! � solo pens�, chinge a su madre el diablo y que Dios me perdone.
Sin darle oportunidad a reaccionar le empec� a dar besitos en
toda la cara, pasando por sus orejas y llegando a su cuellito (la verdad me
perturbaba lo que hac�a, es Jorge, yo pensaba, que haces) pero pensaba en aquel
pitote parado que hab�a visto semanas atr�s.
- no no manches Jessy, p�rale, p�rale (a lo que yo hac�a caso
omiso)
Segu� d�ndole besitos, susurr�ndole al o�do, si, si me gusto
Jorgito, mientras recorr�a mi mano por su dorso, hasta tomarle su mano y
poni�ndola sobre mi cuerpo, corri�ndola poco a poco por mis piernas, mis nalgas,
mi espalda, llev�ndola hacia mi dorso para depositarla sobre mi seno.
- te gusta Jorgito
- estas muy rica Jessy, pero no es correcto
- te gusto (le preguntaba)
- si pero me estas excitando
Entonces fui llevando mi mano nuevamente por su pecho,
bajando a poner mi mano sobre su pene, que se sent�a ya erecto � que rico � le
dec�a, como se me antoja tu palo hermanito, mientras desabotonaba mi blusa para
ir metiendo sus manos para amasar mis senos.
Estaba aturdida y muy caliente, eso era lo malo, muy
caliente, por que no dejaba de pensar en que era mi hermano, y sent�a como me
tocaba, con lujuria pero titubeando, de que el pensaba lo mismo � estas
riqu�sima, pero eres mi hermanita � aunque no dejaba de amasarme los senos.
Mientras tanto me empezaba a despojar de la blusa, ya ten�a
el sost�n arriba, al descubierto mis senos y aunque con mido y gusto empez� a
besar, a chuparme aventando la blusa y el sost�n, eso me anim� a ir
desabrochando su pantal�n para empezar a acariciarle el pene.
Ya sent�a como estaba lubricando, pero para estar parejos, le
fui quitando la camisa en lo que le iba dando besitos en su velludo pecho,
mientras me mamaba los senos, fue acariciando el resto de mi cuerpo, hasta
empezar a apretarme las nalgas, sin avisar, recogi� mi falda para meter sus
manos en mis nalgas debajo de mi tanga, sigui� acarici�ndome poco a poco hasta
empezar a acariciar con sus dedos mi pubis y mi rajita.
- ya no eres virgen verdad hermanita
Qued�ndome pasmada solo moviendo la cabeza en sentido
negativo, acto seguido empez� a introducirme su dedo en mi vagina, eso provoco
que empezara a contonearme de placer, placer que me estaba dando mi hermano,
retumbaba en mi cabeza, tu hermano.
Ya estaba demasiado excitada para dar marcha a tras, y el
tambi�n, as� que, fui bajando nuevamente en lo que el iba desabrochando mi
falda, quede solo en tanga, as� que yo tambi�n le quite sus pantalones dej�ndolo
solo en calzones y calcetines, esa trusa estilo tanga ya parec�a tienda de
campa�a, tratando de liberarse esa jugosa, enorme y curva verga, as� que bajando
un poco su tanga, hice lo que se hacer mejor, empec� a mamarsela, al principio
como que no le pareci� mucho, yo estaba como si me fueran a penetrar por atr�s
en cuatro, arrodillada sobre la cama, chap�ndosela, y tratando de que toda su
verga me entrara en la boca, estaba jadeando de placer sujet�ndome la cabeza,
haci�ndomela hac�a arriba y hacia abajo, d�ndole leng�etazos, chap�ndola,
recorri�ndola con mis labios.
Despu�s me pido que me pasara del otro lado y lo hiciera en
la misma posici�n, pero d�ndole con mi culo en su cara, me quito la tanga y
segu� mamandole su enorme y curva verga cuando empec� a sentir su lengua en mi
cl�toris, "est�bamos haciendo un 69" me mamaba y a intervalos me met�a el dedo,
eso me hac�a gritar de placer y se lo mamaba con mas fuerza, m�s apasionadamente
y con m�s ganas.
Estaba s�per caliente, quiero m�s, dame m�s le dec�a mientras
segu�amos mamando, quiero ser tuya, quiero que me la metas, quiero que me partas
en dos, gritaba en los breves instantes que ten�a su verga fuera de mi boca, ya
no sab�a ni lo que dec�a, me estaba guiando solo el placer que estaba
recibiendo.
Ya me hab�a venido varias veces, sent�a un orgasmo tras otro
mientras el saboreaba mis jugos, dici�ndome, si, as� vas bien sigue, sigue que
ya llego, acababa de terminar de decirlo cuando sent� un torrente de semen
dentro de mi boca, que empec� a tragar y a pegarlo en mis labios, si, hermanito
dame tu leche, carrete, corrote todo, jadeaba sin parar, gritaba como si no lu
hubiera hecho en meses y yo disfrutaba sus gritos.
Quedamos acostados y me dice:
- que hicimos Jessy
- a�n no hemos hecho nada Jorge
Continuara�