Hola Amigos (a) de TODO RELATOS
He decidido que despu�s de haberme pasado muchas horas de
bellaquer�a y haberme hecho infinidad de pu�etas en honor a las historias que he
le�do y rele�do deber�a contarles parte de mi vida como un jugador de sexo con
hombres (aunque he tenido mis sesiones de juegos con mujeres pero con los
hombres es que mejor se me da...�Ser� pato yo?). Bueno no saben cuanta leche me
he tenido que comer chupandome los dedos y restregar por mi cuerpo ese caliente
manjar que sale de mi cuerpo a falta de compartir con alguien estas horas de
lectura y que me hacen estar bellaco por varias horas. Tambi�n tengo que
ocuparme de mi culito que pide a gritos que le metan algo por lo cual tengo que
dividir la atenci�n de mis manos entre mi bicho y mi culo.
Debo empezar por decirles que nac� y vivo en Puerto Rico,
isla bella y hermosa del Caribe, que contiene una mezcla de razas que produce
unos hombres de diversas formas y colores pero siempre bellacos con unos bichos
listos por que alguien se les haga una buena pu�eta, mamada o le entregue el
culo caliente que le ha de hacer gozar. Tambi�n acoge a muchos machos de otras
naciones que han venido a vivir en esta isla y enseguida se les pega la
bellaquer�a de querer estar chingando todo el tiempo libre que tienen. Se
preguntaran ustedes que le pasa a este macho que parece que solo piensa en sexo
pues es les dire que es asi y creo que parte de mi raz�n de ser es que para mi
el sexo es lo mas bello y gozoso que puede haber en la vida del cual disfruto
desde los cinco a�os.
Creo que debo empezar por contarles como desde esa tierna
edad llena de ternura y curiosidad los bichos me parecieron las cosas mas
hermosas aunque confieso que al principio me asustaban ya que ver un bicho tieso
y duro e impaciente por querer meterse en alg�n roto es algo temible. Mis
primeras aventuras en el sexo fue con una familia que viv�a en la casa de
enfrente y con ellos pude disfrutar de varias iniciaciones. La relaci�n con esta
familia se desarroll� bien rapido porque recien nos hab�amos mudado al lugar
cuando ya compart�amos mucho. Tambi�n debo aclararles que no era yo el unico de
mi familia que disfrut� de la gozadera sexual con ellos, mi padre tambi�n se lo
estaba metiendo a la vecina como descubr� tiempo despu�s. Como las familias se
llevaban bien y yo ten�a dos hermanas nos pasabamos jugando siempre en una casa
o la otra.
Mi primer bicho fue el de Gabriel que ten�a la misma edad que
yo (5 a�os) y era el menor de cinco hermanos (3 mujeres y 2 varones). Por ser
Gabriel y yo los mas peque�os ten�anos nuestros juegos y mas tiempo porque aun
no hab�amos empezado la escuela. Gabriel era mas peque�o que yo en estatura y
tenia un pelo rubio precioso por mi parte yo soy trigue�o de pelo rizo y yo creo
que esto dio inicio a averiguar que otras diferencias habia entre nosotros.
Gabriel como supe despues ya tenia experiencia en los juegos sexuales. Jugaba
con su hermana menor (6 a�os) y con una prima tambien de la misma edad que
compartia con su hermano que era dos a�os mayor que el (7 a�os). Yo nunca jugue
con ellos solamente con Gabriel ya que ellos jugaban al sexo en la casa de una
tia, hermana de su padre, cuando los dejaban cuidando y esto era en otra parte
del pueblo.
Con Gabriel empec� a ense�arnos los bichos uno al otro para
ver como eran. Primera diferencia que nos har�a gozar mucho a ambos era que el
era circuncidado y a mi me la hicieron solo de forma parcial asi que contaba con
casi todo mi pellejo original.....Gracias al m�dico que me la hizo. Asi
empezamos a que cada ocasi�n que se nos ocurr�a algo diferente con nuestros
bichos, si se nos paraba ten�anos que ense�arnoslo uno al otro. Tambi�n nos
acostumbramos a ir al ba�o juntos a orinar solo por el palcer como lo hac�a uno
o el otro y de ayudarnos mutuamente. No hab�a ocasi�n que perdieramos para ver
el bicho de uno o del otro y de poder tocarlo. Especialmente a Gabriel le
encantaba ver como vi cabeza salia de mi prepucio e iniciamos el juego de
juntarnos y yo cubrir la cabeza de su bicho con mi prepucio. Que rico era
aquello los dos juntos teniendo un solo bicho que entre los dos le dabamos
caricias hasta cansarnos.
Nuestros primeras juntadera de bichos con mi prepucio fueron
de pie pero cuando empezamos a jugar en el balc�n de la casa cuando hab�a
alguien adentro empezamos hacerlo acostados uno al lado del otro hasta que un
dia yo me trep� encima de �l y teniendo nuestros bichos juntos empec� a menearme
como queriendo meter nuestro bicho en su cuerpo. Estos fueron horas de placer
que llevaron a que lo hicieramos muy seguido. Como a esta edad el cosquilleo de
la bellaqueria lo que da es por orinar, un d�a teniendo nuestros bichos
abrazados me dieron muchas ganas de orinar por el constante cosquilleo y me
empec� a mear estando juntos. Esto dio inicio a que en algunas ocasiones nos
mojaramos con nuestras orina cuando estabamos chingando. El calor de la orina en
nuestros cuerpos y el alivio del juego sexual era muy placentero y tambien llev�
a cabo esta experiencia a que cuando nos ba�aramos juntos nos mearamos uno al
otro pero esto �ltimo no era muy frecuente. Asi continuamos por unos dos a�os
Gabriel y yo sacandonos candela con nuestros bichos unidos.
Gabriel fue el responsable de mi primera experiencia con
mujeres de forma indirecta. Resulta ser que me cont� que su hermano que tendr�a
como nueve a�os para ese tiempo se lo hab�a metido a mi vecinita de al lado que
tendria como 6 a�os. Yo a ese momento no me habia intersado en tener algo con
alguen mas pero como los juegos con Gabriel habian disminuido en estos dos a�os
pues decid� probar pues ten�a que conseguir a alguien con quien jugar cuando
Gabriel no quer�a o pod�a. Un d�a llam� a mi vecinita a traves de una verja que
separaba las dos casas. La verja era de alambre por lo cual facilitaba el poder
vernos. Le dije a mi vecinita que quer�a jugar con ella y si quer�a er mi bicho.
Ella me dijo que si y yo aprovech� para decirle que ten�a que ense�arme su
chochito a lo cual tambi�n acept�. Empezamos pues a traves de la verja a
mostranos nuestros objetos sexuales. Al principio solo le ense�aba mi bicho y
ella su chochito pero yo empec� a querer tocarselo lo cual rehus� al principio
pero despu�s accedi� como tambi�n a que tocara mi bicho y jugara con el.
Un dia en que estabamos tocandonos le dije que se lo quer�a
meter y ella me dijo que no porque nos pod�an cojer haciendolo. Yo le dije que
era lo mismo que no tenianos que sacarnos la ropa solamente juntarnos a traves
de la verja. Como ella era mas peque�a no se acoplaba bien pero le dije que se
subiera al muro que empezaba la verja que era bien bajo y entonces le pude meter
mi bicho dentro de su chochito. Como tenianos que estar agarrados de la verja
para manternos juntos solamente lo haciamos por corto tiempo ya que podria venir
alguien y cogernos en esa posici�n. Estos juegos duraron como un a�o ya que era
dificil siempre esperar que su abuelita estuviera ocupada y que en mi casa no
hubiese nadie o tambi�n estiviesen ocupados y no fueran al patio o que de otra
casa que tenia elpatio a la misma altura que el de nostros no hubiese nadie.
Mienstas tanto segu�a jugando con Gabriel y un d�a que fui a buscarlos para
jugar tuve la oportunidad de jugar con el segundo hombre de su familia...su
propio padre.
Esto pas� sin ser buscado por ninguno de los dos. Como he
dicho hab�a mucha confianza entre las dos casas y uno u otro entraba a la casa
del otro sin necesidad de llamar. Un d�a sal� temprano de la escuela, estaba
terminando el segundo grado y reci�n hab�a cumplido los 8 a�os, llegu� a mi casa
me puse un pantal�n corto y camiseta y fui a buscar a Gabriel ya que sab�a no
hab�a ido a la escuela por una cita con el doctor. Esperaba encontrar a Gabriel
pero al que encontr� fue a su padre que estaba solo. El padre de Gabriel se
estaba en su cuarto, en la cama acostado, desnudo y haciendose una pu�eta. Mi
entrada a ese cuarto se justificaba porque a traves de �l uno llegaba al patio
posterior de la casa donde pens� pod�a estar Gabriel al no encontralo ni en la
sala o su cuarto como esperaba. La visi�n de aquel hombre maduro ....tendr�a
unos 38 a�os, desnudo con su bicho en la mano me dej� pasmado. El pap� de
Gabriel, Don Luis (siempre me ense�aron a decirle a las personas casada aunque
fueran jovenes Don o Do�a) era un hombre bien parecido, de tez canela, pelo
lacio y bien cari�oso y amable. Pero para m� verlo asi gozandose las caricias
que le hacia su bicho que eran unas pausadas y que hac�a con tanta devoci�n me
paralizaron. Por unos instantes que no s� cuanto tiempo fue me qued� observando
aquel bicho que me cautiv�, era grande, brillaba y gordo.
Don Luis no se hab� a dado cuenta de mi presencia por que
ten�a los ojos cerrados. Dentro de mi asombro quer�a ver mas de cerca ese bicho
que ya quer�a tocar y me acerqu� a la cama y estuve unos momentos mirando y me
empec� a tocar mi bicho tambi�n. De pronto Don Luis abre los ojos y me ve, se
queda tranquilo y me sonrie continuandose sobando el bicho suavemente de arriba
a bajo. Me saluda amable como siempre y cuando pude hablar le digo que buscaba a
Gabriel y el me dice que lo habian dejado cuidando en casa de la t�a despues de
la cita con el doctor y que lo pasar�an a recoger cuando salieron los otros
hermanos de la escuela. Todo el tiempo yo seguia mirando ese bicho que me atra�a
de una forma muy fuerte. Don Luis me dijo que estaba jugando con su bicho y si
quer�a el pod�a jugar con el m�o. Le dije que no y entonces me dijo que si
dejaba a �l jugar con el m�o y tambi�n le dije que no ya que estaba asustado de
lo pudiera hacer.
Entonces �l me dijo que si quer�a tocar su bicho, yo me qued�
callado pero era lo que mas quer�a desde que se lo v�. Mi cuerpo movido por el
deseo y curiosidad se fue acercando a la cama hasta estar al lado de Don Luis
que no paraba de sobarse el bicho suavemente. Me dijo nuevamente si lo quer�a
tocar y le dije que si y mov� temerosamente mi mano hasta su bicho muy despacio.
No se que pensaba que me podr�a pasar si tocaba aquel bicho grande y gordo que
todav�a no estaba completamente rigido como pude comprobar despu�s. Por fin mi
mano lleg� hasta el bicho de Don Luis y lo empec� a tocar, el apart� su mano
dejando que yo hiciera lo que el estaba haciendo antes. Disfrut� unos momentos a
que yo le agarrara el bicho y me dijo que lo apretara mas fuerte y lo moviera de
arriba a abajo en forma mas rapida. Por no tener experiencia segu� meniandosela
como yo creia que era y no paraba de verla.
Don Luis en un momento puso su mano sobre la mia y empez� a
realiazar unos movimientos mas rapidos y con fuerza, yo sent� como aquel bicho
se pon�a duro como lo hab�a observado en algun momento antes de ser sorprendido
mirandolo. Don Luis me pregunt� que si lo dejaba ahora tocarme mi bicho pero yo
le dije que no y segui con mi manos tocando su bicho el cual �l dejo que yo
siguiera moviendo de arriba a bajo haciendole la pu�eta que el habia iniciado.
Estuve un rato jugando con su bicho y a Don Luis le gustaba ya que se reia y
movia sus caderas a la vez que yo movia mis manos. De momento Don Luis me dijo
que habia que darse prisa porque falataba poco para que llegaran sus hijos de la
escuela. Me dej� seguir haciendole la pu�eta como 5 minutos mas y me dijo que
ten�a que levantarse y luego seguir�amos de pie. Al levantarse dijo que iba a la
cocina a buscar un vaso y yo le segu� porque no quer�a perder de vista ese bicho
duro qu eme parec�a hermoso. Mienstra caminaba hacia la cocina se segu�a
meneando el bicho y una vez cogi� un vaso aument� los movimientos de la mano Yo
quise cogerselo pero solo me dejo que moviera mi mano junto a la de �l y aument�
sus movimientos y fue acercando a su bicho. Hasta ese momento yo no sab�a para
que era pero pens� que era para orinar.
De pronto Don Luis movi� mas rapido sus manos y meti� la
cabeza dentro del vaso y empez� como a temblar y cerr� los ojos. Yo me qued� al
lado de �l viendo como el se gozaba ese momento y empezaba entonces como
escurrir su bicho dentro del vaso. Se fue calamdo poco a poco y seguia
escurriendo su bicho a la vez que lo sacaba del vaso y pude ver por primera vez
lo que la leche de un hombre. La cabeza de su bicho estaba llena de leche y
ten�a todav�a leche que le salia. Entonces me ense�o toda la leche que hab�a
puesto en el vaso que ha mi me pareci� que era una gran cantidad y que ten�a un
olor tan peculiar que me pareci� fuerte pero agradable. Don Luis vi� el reloj y
me dijo que ten�a que botar aquello, ten�a ya mucha prisa porque en un momento
atro llegaban sus hijo y se dirigi� al ba�o y yo detras de �l y mi como bot� por
le inodoro toda aquella leche que se habia sacado de su bicho momentos antes.
No se como pero al caminar hasta el ba�o donde Don Luis iba
botar la leche me vino a la mente que me gustar�a haberme bebido esa leche ya
que siempre me habia encantado beber mucha leche y esa era una diferente. Pero
Don Luis no me la ofreci� y yo tampoco le ped� que me la dejara probar y tragar.
Otro pensamiento que me vino era que quer�a que el bicho de Don Luis se metiera
en mi culo y sorprendemente era la primera vez que se venia este pensamiento.
Hubiera querido decirle esto a Don Luis pero ten�a prisa de que todo volviera a
la normalidad. Ahora pienso que de haberse dado esto ademas de haberme rajado el
culo se podria por lo menos ir cobrando que mi padre se lo estuviera metiendo a
su nujer... cosa que creo que nunca se enter�. Cuanto estabamos saliendo del
ba�o oimos que estaba llegando su esposa y los hijos.
Nunca le dije a Gabriel lo que habia pasado con su padre y
nunca tuve la oportunidad de volver a jugar con ese bicho que me habia cautivado
en forma tan especial a los 8 a�os. Don Luis nunca me ense�� de nuevo su bicho y
nunca me invit� a que jugara con este, sigui� comportandose como el hombre
amable y cari�osos que siempre habia sido. Creo que con los pensamientos que ya
se habian empezado a despertar en mi , mis tierna y peque�as manos, mi boca
peque�a y virgen al igual que mi culito peque�o y ya listo para se roto le
podrian haber dado muy buenos momentos de placer .
Fue por una condici�n de juego que tambi�n pude gozar con una
de las hermanas de Gabriel, Anita. Esta ten�a la edad de mi segunda hermana 11
a�os y estaba ya bien desarrollada para su edad. Para ese tiempo yo ten�a 9 a�os
y mi hermana me dijo que si jugaba con ella y otras amigas de la misma edad. El
juego era el clasico de papa y mama con ni�os en la escuela y yo tenia que hacer
de papa junto con Anita ya que era el uico varon. La idea no me gusto mucho ya
que eran todas ni�as y prefer�a mejor jugar solo. Mi hermana insisti� y yo le
dije que con la �nica condici�n que jugaba era que Anita jugara conmigo de
verdad a papa y mama. Para ese tiempo ya sab�amos que jugar de verdad a papa y
mama era que nos acostaramos junto y nos pusieramos a chingar. No se como fue
que se ocurrio esto pero creo mas que nada era una salidad para que no me
obligaran a jugar solamente con ellas. Mi hermana se qued� extra�ada y dijo que
no se atrev�a a decircelo a Anita y yo le dije que esa era mi condici�n de lo
contrario no jugaba. Mi hermana se decidi� y se o dijo a Anita y esta dijo que
estaba bien que lo podiamos hacer.
En los terrenos de la casa de mis padres habia una peque�a
estructura de madera que consist�a de un cuarto donde mi padre reposaba y
descansaba para estar solo, tambi�n donde le�a...le gustaba mucho leer sobre
espiritismo. No se si tambi�n era su refugio para hacerse pu�etas pero nunca lo
cog� haciendolo como descubr� una vez cuando ten�a yo 4 a�os metiendoselo a la
muchacha que nos cuidaba. Era muy joven y dicen que mi padre la desvirg�.
Rrecuerdo haber visto un sangre en la cama pero no se si era que ella estaba en
regla y mi padre era vampiro o que coincidi� con el d�a que la desvirg� yo y mis
hermanas estabamos espiando mienstra chingaban, Tambi�n se que se lo met�a a la
mama de Gabriel y Anita porque una vez lo fui a buscar a casa de la vecina y se
lo estaba metiendo en el cuarto del matrimonio.
Bueno regresando al cuento de como chingu� con Anita al esta
acceder para poder jugar con mi hermana y sus amigas. Nos metimos al cuarto
donde mi padre se pasaba y nos desnudamos. Anita como ya dije estaba
desarrollandose muy bien y ya ten�a tetitas y algo de pelo en la chocha. Le
toque la chocha con mi mano y empec� a meterle un dedo en el chochito que lo
sent�a calientito. Entonces me dijo que si se lo iba a meter mejor era
acostarnos en la cama asi que ella se acost� y yo me le trep� encima. Me
restregu� por unos momentos por su cuerpo y manosee sus tetitas. Met� la manos
entre nuestros cuerpo para dirigir mi bicho hasta su chochito. Puse mi bicho
dentro de su chocho y empec� a menerame como sab�a que hab�a que hacer para
meterselo. Estuve un rato y sent�a un calent�n en mi bicho y cosquillas a la
vez. Seguimos as� hasta que me dieron ganar de orinar y se lo dije Anita haber
si me dejaba que se la metiera en el chochito tambi�n a lo que me dijo que no.
Estuve otro ratito hasta que no pude mas y me tuve que salir del chochito de
Anita para ir orinar. Fui a la puerta trasera de la estructura y mee rapido sin
ir al ba�o de la casa. Cuando volv� Anita me dijo que ya hab�a cumplido con la
parte del trato que nos pusieramos a jugar con mi hermanas y sus amigas que nos
estaba esperando a fuera.
No se present� otra oportunidad de estar con Anita pero se
enteraron en mi calle porque las amigas se encargaron de comentarlo porque
tuvieron que esperar por nosotros. Uno de los hermanos de una de las muchachas
que ya ten�a como 17 a�os me estuvo interrogando por largo rato para saber como
lo habia conseguido y como de verdad era chingarse a Anita. No se si alguna vez
el trato de chingarsela pero lo que si supe el d�a que le rajaron Anita su
chochito de verdad. Esto fue por un muchacho que ten�a como 20 a�os...Pablo, y
que era amigo de mi padre que para entonces tendr� unos 47 a�os. La amistad con
mi padre hizo que conociera a nuestros vecinos y de ahi que viera a Anita que ya
ten�a 13 a�os y estaba toda desarrollada. Un d�a lleg� a mi casa a darme un
mensaje de mi padre que llegar�a mas tarde. Yo me encontraba en casa de Gabriel
y Anita y �l se fue buscarme all� para ese entonces ya le estaba tirando Anita y
como solo estamos los tres aprovech� para mandarnos a Gabriel y a m� a la tienda
a comprar dulces y quedarse con Anita. Cuando volvimos Gabriel y yo nos dimos
cuenta que Anita y Pablo estaban en el ba�o chingando pero no pudimos ver nada
pero si oir los gritos de placer que ambos hac�an. Parece que cuando lllegamos
era que etaban terminando porque al poco tiempo salieron. No comentamos nada y
Pablo se qued� hablando como si nada unos tres minutos. Despu�s nos dijo que no
dijieramos nada y nos di� mas dinero y se volvi� a meter al ba�o con Anita para
empezar a chingar nuevamente contando conque Gabriel y yo no ibamos a decir
nada, lo cual hicimos. Lo que si creo que Pablo le coment� algo a mi padre
porque despu�s ve�a como mi padre miraba a Anita y le hac�a comentarios
sarcasticos para ver si se la pod�a chingar como a la madre. Nunca me enter� que
esto se le diera y lo dudo porque la madre de Anita no se lo hubiera perdonado a
mi padre.
Buenos estos fue mi vida sexual con esta familia que fueron
mis vecinos desde los 5 a�os hasta los 11 a�os cuando nos mudadmos y seguir�a mi
descubrimiento de la sexualidad en otro pueblo rodeado de toda la familia
paterna que la mayor�a son hombres. Se han quedado detalles que no estan
relacionados con esta familia o son muy circunstanciales pero todo lo que he
comentado es real y forma parte de mi confesi�n de como me empezaron a gustar
los hombres y el sexo. Si quieres comentar o te reconoces en la historia por los
eventos no por los nombres porque los cambi� puedes escribirme a
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO.
Bellaco como siempre y listo para coger por el culo y
mamartelo. David