Despu�s de ponerme el supositorio Marga, me dijo Silvia, voy a hacer la cena,
�te parece? Claro Marga, har� unas verduras con pollo y te vendr� muy bien ya
que no has comido nada. Si necesitas algo me das una voz. Vale Marga, eres
estupenda gracias.

Mientras Marga se encontraba en la cocina preparando la cena, me dispongo a
ir al ba�o, ten�a inmensas ganas de orinar. Una vez lo hice, me siento en el
bidet y llen�ndolo de agua templada por la mitad aproximadamente, me siento y
procedo a asearme mi lindo co�ito. Me puse unos guantes de latex, por miedo a la
infecci�n que me encontr� el doctor. Echo un gel de ba�o y me lavo
concienzudamente mis partes �ntimas. Pensaba en Marga, cuando llegara la hora de
acostarse, deseaba fervientemente contemplarla en toda su desnudez junto a mi en
la cama, entrelazadas las dos y d�ndonos m�ltiples caricias. Me encontraba
excitada deseando que llegara ese momento, no pude por menos que masturbarme
suavemente introduciendo mis dedos enfundados en el guante de goma.

Pasa Marga al dormitorio y como el cuarto de ba�o lo tengo dentro del
dormitorio, casi me pilla in fraganti. �Te ocurre algo Silvia? No Marga, estaba
ase�ndome un poco. Sobre la c�moda hab�a dejado la bandeja con la cena.
Acu�state Silvia no cojas fr�o. Yo llevaba puesto un camis�n cortito junto con
las braguitas. Me meto entre las sabanas y sentada en la cama, me puso la
bandeja de la cena. Voy a ducharme Silvia. Se desvisti� completamente, no pude
por menos que decirle que adoraba su bonito cuerpo. La ropa la puso
cuidadosamente sobre una silla. Llevaba un conjunto de braga y sujetador del
mismo color.

Silvia, ve cenando t�, de acuerdo Marga no tardes mucho. Al rato sale de la
ducha cubierta con la toalla. �No tendr�s un pijama Silvia? Por supuesto Marga,
abre el caj�n de la c�moda y te sirves a tu gusto. Ve un camis�n cortito y
ense��ndomelo me dice, �me lo puedo probar? Por supuesto Marga. Se quita la
toalla mostrando sus lindos senos y se pone el camis�n. Te queda de cine Marga,
gracias cari�o me dice. Pero te sugiero que te cubras con la bata no vayas a
coger fr�o.

Yo pr�cticamente acababa de cenar, me estaba tomando una
fruta. Ella se dispuso a tomarse unos s�ndwiches de jam�n y queso luego un
yogur. Terminando de cenar se fue a llevar la bandeja de la cena a la cocina.
Tenia puesta la tele en el dormitorio y una vez regresa de la cocina se despoja
de la bata y tapaditas entre las sabanas, nos disponemos a ver una pel�cula. Me
estaba dando sue�o y le digo Marga, pon el despertador para las 7.30 a.m. ya que
Paula vendr� temprano a inyectarme. Ahora me tengo que poner los supositorios
vaginales. Es uno todas las noches durante siete d�as. Marga se ofreci� a
aplic�rmelo, se levanto a lavarse las manos y me dijo que me sacara las
braguitas. Echo las ropas de la cama hacia abajo y me pongo acostada con los
pies apoyados en la cama. Como si estuviera con mi ginec�logo.

Se puso unos guantes de latex y con los muslos separados me
lo introdujo despacio. Luego me puse una compresa y me coloco las braguitas.
Marga pasa al aseo un momento y se acost� junto a m�. Me excito notando sus
senos pegados contra mi espalda. Notaba mi vagina como se iba deshaciendo el
supositorio dentro, a la vez me daba picor. Estaba haciendo efecto el
medicamento. Me quedo dormida. De madrugada me despierto agitada, al parecer
tenia una pesadilla. Marga se despierta, perdona cari�o no se que me pasa,
tranquila Silvia, voy a por un vaso de agua. Al ratito me quedo dormida,
lamentando que la hubiera despertado.

Suena el despertador y necesitaba ir al ba�o. Lo apago
r�pidamente y Marga al parecer no lo hab�a sentido. Se encontraba placidamente
dormida. Me levanto de la cama y paso al ba�o, necesitaba hacer de vientre. Me
bajo la braguita, observando que la compresita estaba manchada del efecto del
supositorio. Cosa normal. Me notaba dolor en el vientre y apenas pude hacer
nada. Orino y paso a lavarme en el bidet con agua calentita. Una vez aseada me
meto en la cama. Marga se levanta y se mete en el ba�o a ducharse. A la media
hora se viste y pasa a hacer el desayuno. Una vez desayunamos, le dije que no se
preocupara que al no tener fiebre. Podr�a quedarme sola y estar�a pendiente
cuando viniera Paula a inyectarme.

Por fin me quedo sola, ya que Marga deb�a ir antes a su casa
y abrir la peluquer�a. Aproximadamente a las 9 de la ma�ana tocaron a la puerta.
Me pongo la bata y salgo a abrir.

_Buenos d�as Paula, pasa por favor.

_Buenos d�as Silvia. �C�mo has pasado la noche? Un poco
regularcilla pero vamos al dormitorio y me vas preparando la inyecci�n. Me quito
la bata y me meto entre las sabanas. Paula va preparando el vial detenidamente.
Le comento que me sent�a un poco con estre�imiento. Le digo si es recomendable
aplicarme alg�n laxante. Me dijo que no seria problema, en el armario de ba�o
tenia unos supositorios de glicerina. Con la inyecci�n preparada, me coloco boca
abajo deslizando mi braguita, mostraba todo mi culo desnudo. �D�nde te la pongo?
Donde desees Paula. Me aplica el spray con el alcohol y me da con el algod�n.
Vi�ndome toda relajada, introduce la aguja y poco a poco va administr�ndome el
contenido, �duele? Ya lo creo Paula, pero aguanto el dolorcito. Listo Silvia, me
aplica el algod�n y fue al ba�o a por los supositorios. El producto no estaba
caducado as� que muy delicadamente separa mis nalgas y me introduce el
supositorio. Si no te da resultado, te aplicar�a un enema. Por cierto, a la
noche vendr� Antonio a pincharte. Yo tengo guardia en el hospital y te dejo en
buenas manos. Gracias Paula, me has inyectado muy bien. Me quedo acostada. Por
supuesto Silvia, hasta luego.

Al ratito de marcharse Paula, me levanto de la cama y
cubri�ndome con una bata, entro a la cocina a prepararme algo caliente. Me tomo
una infusi�n, estaba preocupada por mi estre�imiento. El supositorio al parecer
no hizo efecto y ya hab�a pasado un rato de hab�rmelo aplicado Paula. Me dirijo
al dormitorio y decido darme un ba�o relajante. Abro el grifo de la ba�era y
decido prepararme un ba�o relajante. Echo sales de ba�o y dejo que poco a poco
se fuera llenando. Me desvisto completamente y me meto en el agua templadita,
masajeando mi cuerpo con una manopla y pensando en como se portar�a Antonio el
practicante. Me daba algo de morbo mostrarle el culo a un hombre, al mismo
tiempo estaba deseando que pasara r�pido el d�a. Despu�s de darme el ba�o, me
salgo de las ba�era y toda relajada me visto y al no tener fiebre decido salir a
la farmacia a comprar unos enemas. En la farmacia de al lado de casa, consulto
mi problema de estre�imiento con mi amiga farmac�utica Mari. Me dijo que me
aplicara uno seguidamente. Los enemas estaban dispuestos para su uso. Dos
envases de pl�stico de � de litro cada uno.

Simplemente hab�a que romper la punta del envase, ya venia
preparado con una canulita, dispuestos a met�rmelo en el agujerito de mi
espl�ndido culazo. Toda excitada, me dirijo r�pidamente a mi domicilio. Una vez
en casa paso al dormitorio y me desnudo completamente. Me pongo unas toallas
sobre la cama y cojo un tubito de vaselina del caj�n de la mesilla de noche.
Aplico vaselina en el dedo y me lo meto despacio en el agujerito de mi lindo
culazo. Tomo el enema preparado y colocada de costado en la cama me lo meto
despacito, procuro aguantar todo el contenido. Me levanto r�pidamente y voy
corriendo a sentarme en el water. Evacuo todo el enema y me siento en el bidet
para asearme los genitales. Ahora estaba en mi mente en montarme un numerito con
mi amiga Marga, deseaba iniciarla en el placer de los enemas. Habr�a que esperar
la ocasi�n para cumplir con mi fantas�a

Desnuda totalmente me acuesto en la cama y me masturbo. Me pongo el camis�n y
me arropo con las ropas de la cama qued�ndome dormida al poco rato. Sobre el
mediod�a vino Marga, al parecer necesitaba que la visitara el Dr. Kassab. Al no
encontrarse bien le dije que se quedara en mi domicilio, pues su familia se
encontraba fuera. Pasamos al dormitorio y le digo: desn�date y enseguida te saco
un camis�n. Veo su lindo cuerpo en braguitas y sujetador y le doy un camis�n.

Se quita el sujetador contemplando sus maravillosos pechos, Con el camis�n
puesto se mete bajo las ropas de la cama. Paso a aplicarle el term�metro,
deslizo el cobertor y se lo aplico en la ingle. Mantenlo durante unos minutos y
no te muevas Marga, podrid romperse. No te preocupes Silvia, no mover� un
m�sculo de mi cuerpo. Le subo la sabana un momento, no fuera a coger fr�o. Lo
mantuvo el term�metro unos cinco minutos y proced� a retir�rselo. Tienes fiebre
cari�o, voy a llamar al doctor para que a ser posible venga lo antes posible.
Llamo por tel�fono, coment�ndole a la enfermera que Marga tenia 38 grados de
temperatura. Al instante toma el tel�fono el doctor, le doy las se�as y le digo
que era para mi amiga y compa�era Marga. Me dijo que en unos 15 minutos estar�a
en casa.

Tenemos la suerte que su consulta la tiene muy cerca de casa, en concreto en
la misma calle. Tuvimos la suerte que el Dr. Kassab vino enseguida. Salgo a
abrirle; buenas tardes
doctor, que tal Silvia. Ya ve mi compa�era Marga se encuentra bastante
fastidiada. Pase al dormitorio por favor.

Le confirmo que tenia fiebre, no obstante el nuevamente le dijo que le
aplicar�a el term�metro. Marga se abre el camis�n, mostr�ndole esos lindos
senos, de aureolas sonrosadas y pezones erectos.

Delicadamente el doctor le aplica el term�metro en la axila. Una vez retirado
el term�metro pudo comprobar que ten�a fiebre alta. Bueno Marga le dijo el dr.
Kassab, voy a ponerte un inyectable para bajarte esa fiebre. Abri� el malet�n y
se dispuso a prepararle la inyecci�n. Una ampolla de 2 ml., intramuscular
profunda. Ella se puso boca abajo en la cama, Silvia le sube el camis�n y le
baja la braguita.

Dr. Kassab.- Pude contemplar ese maravilloso culito y seguidamente tomo
el algod�n y el frasco del alcohol y una vez impregnado desinfecto su nalga
izquierda. Al introducir la aguja Marga dijo: �ay! se�orita es un pinchacito de
nada. Aplico suavemente el inyectable y lentamente introdujo el contenido de la
jeringa en su nalga izquierda. Le doy con el algod�n nuevamente en ese lindo
culito y le digo que se incorpore en la cama y se suba el camis�n.

La ausculto por detr�s en la espalda, aplicando el estetoscopio en la zona
renal; seguidamente procedo a auscultar el coraz�n, pulmones, etc. Le ruego a
Silvia que saliera un momento de la habitaci�n, por �tica profesional. En unos
minutos te llamo Silvia, disculpe, pero debo hacerle algunas preguntas a Marga.
No se preocupe Dr., me dice Marga, puede quedarse. Muy bien Marga, �si as� es tu
gusto? Examino suavemente los senos efectu�ndole un tacto, pregunt�ndole si
notaba dolor. No noto nada Dr. De acuerdo Marga.

Acostada en la cama le digo se descubra el vientre, procedo a palpar ese
lindo vientre, llevaba las braguitas bajadas, sobresaliendo unos suaves rizos
negros sobre el pubis. Procedo a extenderle la receta.

6 ampollas de 4 ml, intramuscular profunda. 1 aplicar seguidamente. Las
restantes cada 12 horas.

Supositorios para la fiebre, envase de 4 unidades. � 1 cada seis horas.

Una vez terminado el reconocimiento le dije a Silvia que fuera a por los
medicamentos y que llamara al practicante. Ma�ana por la tarde regresar�a de
nuevo para reconocerla nuevamente. Me despido de Marga y salimos juntos hacia la
calle. Silvia se dirigi� a la farmacia del barrio a por los medicamentos.
Asimismo, a llamar al practicante. De regreso en casa y una vez avisado el
practicante, esperaron a Antonio.