Les contaba que a mis 7 a�itos y con la segunda penetraci�n
que mi t�o me hac�a, ya me gustaba lo que sent�a cuando me la met�a. Tal vez
porque en la segunda ocasi�n me lo hizo con mucha calma y lubricando primero mi
culito para despu�s irlo abriendo con un dedo, luego con dos y finalmente
ensart�ndome su vergota con mucha calma, haciendo que yo la sintiera cada
mil�metro al entrar y luego al salir, resbalando ricamente por mi culito.

La noche siguiente, aprovechando que mi t�o Pablo segu�a
fuera, mi t�o Pedro ni siquiera fue con su novia. Normalmente yo me acostaba muy
temprano, cosa que hice. Al poco rato lleg�; como se estaba haciendo costumbre,
yo me hac�a el dormido, recostado sobre mi costado derecho. Esta vez yo ya
estaba seguro de lo que iba a ocurrir, de modo que esperaba ansioso a que mi t�o
se acostara atr�s de m�, me abrazara y me hiciera sentir la tibieza de su
cuerpo� para empezar.

Eso no tard� en ocurrir, con la variante de que cuando se
acost� fue directamente sobre m� pero ya sin su ropa interior; r�pidamente me
quit� la m�a �yo cooper� levantando un poco mi cadera para que le fuera m�s
f�cil- y empez� a frotarme su verga en mis nalgas. Me dec�a que le encantaba
c�mo le apretaba la verga con mi culito y que le gustaba m�s estar conmigo que
con su novia, que la otra noche le hab�a parecido muy bonito como me escurr�a su
leche de mi ano a mis muslos y que quer�a que yo tambi�n sintiera bonito, que
nuestro secreto deb�a ser agradable para los dos. Me parece que fue la primera
vez que habl�, y le dije que s� me gustaba, que sent�a bonito que me abrazara y
me hiciera "esas cosas".

Pareci� darle mucho gusto que yo aceptara que me gustaba,
porque avent� las sabanas a un lado y empez� a acariciar todo mi costado, desde
mi muslito hasta mi mejilla, pasando por mis costillas, mi axila y mi brazo. Eso
hac�a que la piel se me pusiera "chinita"; de verdad que sent�a rico. Luego, me
puso en cuatro, como la noche anterior, me dec�a que lo disfrutara, que iba a
hacer que sintiera muy rico. Se par� al lado de la cama, detr�s de m� y yo
sent�a que por momentos tocaba mi culito con la punta de su vergota, s�lo me
tocaba y se retiraba. Yo no entend�a qu� pasaba, hasta que comprend� que lo que
hac�a era mene�rsela para sacarse lubricante y luego me lo embarraba en el
hoyito.

Despu�s de un buen rato de jugar as�, finalmente me meti� un
dedo, luego un segundo y finalmente empez� a ensartarme su manguera. Por primera
vez exclam� un "aaahhh" cuando sent� que llegaba hasta los pelos y mov�a su
poronga adentro de m�. Me empez� a bombear, lento pero firme y yo me sent�a
encantado. Luego, me la sac� y se sent� en la orilla de la cama, me levant� de
donde yo estaba y, abri�ndome las piernas, de frente a �l, me puso encima de su
camote. Lo apunt� otra vez a mi agujerito y lentamente me sent� en su tubo�
���hasta los huevos!!! Me levantaba y luego me volv�a a bajar, desliz�ndome
sobre su barra de carne. De vez en cuando se escup�a en la mano y se ensalivaba
la verga. Una y otra vez me dejaba caer, ensart�ndome ricamente.

Cuando parec�a que iba a terminar, ocurri� lo inesperado�
��entr� mi t�o Pablo al cuarto!! Yo no sab�a qu� estaba pasando, ya que estaba
ensartado por mi t�o Pedro, con mi espalda hacia la puerta. Me enter� hasta que
lo o� hablar, dici�ndole a mi t�o Pedro que qu� estaba haciendo, que me iba a
romper el culo y que lo iban a meter "al bote" (a la c�rcel).

El t�o Pedro me dej� caer sobre su pepino y con �l adentro de
m�, le dijo al t�o Pablo que no hab�a problema, que ya me hab�a abierto el
hoyito y que ya ni me dol�a. Que no fuera a rajar y que si quer�a, lo dejaba que
�l tambi�n me cogiera. T�o Pablo dijo �no mames wey� y se sali� del cuarto; Hoy
d�a pienso que esa interrupci�n-descubrimiento debi� ser algo muy grueso para el
t�o Pedro, pero la verdad es que s�lo pasaron unos cuantos segundos para que
empezara a levantarme y bajarme otra vez, enterr�ndome su pitote. As� como
estaba, se par� y, sin sac�rmela, me acost� de espaldas, el encima de m�, con
mis piernitas dobladas sobre mi pecho y sigui� cogi�ndome de lo lindo. A los
pocos segundos la puerta se abri� y el t�o Pablo volvi� a entrar� pregunt� que
si de verdad no hab�a bronca y cuando el t�o Pedro le dijo que no, se acerc� y
se hinc� junto a la cama para ver c�mo entraba y sal�a aquella vergota en mi
culito. Despu�s de unos segundos m�s, el t�o Pedro me llen� el hoyito de su
tibia leche. Me la sac� lentamente, dej�ndome las piernas dobladas sobre mi
pecho y le dijo al t�o Pablo ��ves c�mo no pasa nada?�. El t�o Pablo para esto
ya se hab�a bajado el pantal�n, empuj� a Pedro a un lado y me apunt� la cabezota
de su verga. La tiene m�s o menos igual de larga que Pedro, pero es m�s gruesa;
supongo que el semen de Pedro sirvi� como lubricante, porque debo reconocer que
no me doli� en absoluto. S�lo sent� que mi esf�nter se estiraba un poquito m�s y
luego un gran placer cuando cedi� (tal vez deba decir �se dio�) y la cabezota
entr� en mi recto.

Sin tanta delicadeza como Pedro, el t�o Pablo empez� a
bombear como desesperado, d�ndome una verdadera y bestial cogida. No tard� mucho
en venirse, llen�ndome a�n m�s el agujerito con su leche. Esa noche descubr� que
sent�a muy rico que algo entrara en mi hoyito, pero que el m�ximo placer se
repart�a entre sentir que algo muy gordo abr�a mi culito, dej�ndolo cerrar
aunque fuera un poquito despu�s (como cuando la cabeza es m�s gorda que el resto
de la verga), y la sensaci�n de la leche caliente llen�ndome por dentro.

Esta fue la primera vez con el t�o Pablo. Ya les contar� de
las dem�s con Pablo, con Pedro y con los dos juntos.

Espero sus comentarios

Ramiro