Llegamos, pedimos una copa, y nos pusimos a ver el show,
hab�a dos t�as y un t�o contorsion�ndose, fue muy cachondo, sobre todo al ver la
reacci�n de algunas amigas, que con los bailes sensuales las hab�an puesto
cachondas, y las copas, les quitaron las inhibiciones, por lo que la mayor�a se
acercaron a la pista, e incluso manosearon al t�o y a la t�a.
Entre ellas se encontraba Natalia, que estaba bastante
cachonda, era una compa�era de trabajo a la que le ten�a puesto el ojo desde
hace mucho tiempo, rubia, 175, unos 60 kilos, y hermosos pechos y culo que
destacaban con el mono negro de cuero que llevaba con unas botas altas tambi�n
de cuero, ella participaba en el juego como la que m�s, y los t�os que est�bamos
en segunda fila est�bamos calent�simo por el show y por la reacci�n de las
compa�eras. Al rato, Natalia, se dio cuenta que no le quitaba ojo de encima, y
eso le gustaba, le hacia ponerse aun m�s tonta, se sent�a sensual, su ropa
entallado y bien amoldada a su cuerpo, su cabello totalmente suelto y lacio le
hac�an muy atractiva, y ella segu�a jugando con el t�o y las chicas entre el
revuelo general.
El show termin� y lleg� la calma, me acerqu� a ella, me sent�
a su lado y le di conversaci�n, ella me segu�a el juego, es m�s me permiti� que
le acariciara su pierna para que sintiera la textura del cuero. Despu�s de un
tiempo, quise alargar la mano, para llegar m�s arriba, cosa que permiti� a
medias, luego empec� a insinuarme m�s descaradamente, pero ella me par� en seco,
dici�ndome que en ese momento lo �nico que ella quer�a era estar con una mujer.
Me qued� pasmado, nunca esperaba esa respuesta, pero le segu�
el juego y le pregunt� por lo que hac�a una lesbiana en un sitio as�, ella
cambi� la cara, y respondi� que no era lesbiana, que le encantaban las pollas,
que era bisexual y que en este momento, solo le apetec�a una mujer. Eso me
encendi� m�s, mi pene crec�a bajo el pantal�n, y cual fue mi sorpresa, que
supongo que con los efectos del alcohol, no se reprimi�, supongo que para que no
me sintiera mal, y puso directamente su mano sobre mi verga. Tom� mi mano, la
que ten�a en su pierna, y la llev� un poco m�s dentro.
En ese momento, y como el show ya hab�a terminado, le propuse
que nos fu�ramos, y ella acept�, decidimos marcharnos, tras darme un tierno beso
en la boca. La acompa�� a casa, y me invit� a subir, aunque me dijo que no la
iba a tocar ni un pelo, yo le dijo que vale, que me tomaba algo y me iba, y ella
replic� que no, que si sub�a era para disfrutar los dos, para relajar el estr�s
sexual, pero insisti� en que no le iba a tocar, yo confundido acept�. Subimos,
se ech� una copa y me puso a m� otra, me orden� que me sentara en un sill�n,
ten�a en su cara una faz truhana, algo ten�a pensado pero lo desconoc�a, as� que
me sent� y ella se fue al otro lado de la habitaci�n, puso un cd rom�ntico, y
empez� a contorsionarse, imitando a las chicas del pub, era angelical aquella
vista, se retorc�a magn�ficamente. Despu�s de bailar un poco m�s, se desabroch�
lentamente la cremallera delantera que ten�a en el pecho, dejando ver el
sujetador negro que portaba, y continuo danzando. Despu�s delicadamente, se
quit� una manga, para posteriormente bajarse la otra, quedando con el mono solo
puesto de cintura para abajo, y arriba con el sujetador.
Continu� la m�sica, y empez� a bajarse el pantal�n,
tiernamente se quit� una pierna para despu�s terminar con la otra, quedando con
su ropa interior negra, y sus botas altas de cuero. Conforme la m�sica surg�a
ella se encontraba m�s c�moda, y comenz� a desabrocharse el sujetador, quedando
sus hermosas tetas al aire, era perfecta. Yo me desabroch� el pantal�n, y tom�
mi pene en la mano, empezando a masturbarlo lentamente. Despu�s se baj� sus
braguitas suavemente, quedando solo con las botas con ese gran tac�n. Tras un
rato m�s de movimiento, y estar yo muy caliente, pens� que era el momento, por
lo que me levant� y me dirig� hacia ella, ella al verme, me hizo un gesto con el
dedo �ndice de que no, me orden� que me sentara de nuevo, y me dijo, que esta
lesbiana no hab�a terminado aun. Sus dedos segu�an su juego, una mano en su
co�o, la otra retozando en sus tetas, una penetraba su co�ito, y la otra
acariciaba sus senos.
Al rato de hacer este baile, y de yo estar mi caliente y
masturb�ndome cada vez con m�s ganas, ella par�, quit� la m�sica, y se sent�
sobre el parqu�, todos estos movimientos haci�ndolos de una forma muy sexy. Una
vez sentada, se desabroch� ambas botas, y se quit� delicadamente una de ellas,
al momento, se acerc� el tac�n a su boca, recorri� su lengua por el tac�n, lo
humedeci�, y se lo acerc� a su co�o mojado, lo desliz� a todo lo largo, le
gustaba el contacto de la piel con su co�o, se excitaba. Despu�s cogi� y
continu� jugando, le encantaba, se quit� la otra bota, la desliz� por su cuerpo,
introdujo el tac�n en su boca, y una vez humedecido, intent� introducirse el
tac�n en su co�o, se deslizaba muy f�cil, suave, entraba y sal�a f�cilmente, le
gustaba, disfrutaba, lo hac�a recorrer toda su raja, desde el cl�toris hasta el
culo.
Al llegar al culito, se detuvo m�s tiempo en esta zona, el
tac�n mojado, lubricado, lo intentaba introducir por su culo, se resist�a, y
para lubricarse m�s y elevar la excitaci�n, con el otro zapato, con su tac�n, se
acariciaba su cl�toris, su co�o se humedec�a m�s, y se introduc�a el tac�n sin
problemas en su co�o, entraba y sal�a f�cilmente, continuaba jugando, un tac�n
perforaba su co�ito, y el otro lo intentaba con su culito, hasta que al fin, el
otro logr� su objetivo, y perfor� su culo, los dos tacones estaban dentro, uno
en el co�o y otro en el culo, era una escena maravillosa. Despu�s de que
funcionaba la doble penetraci�n, tom� ambos zapatos con una mano, continuando
con el mismo ritmo y con la otra acariciaba y pellizcaba su cl�toris. En este
momento yo estaba a punto de correrme, me masturbaba muy r�pido.
Continu� as� un rato, hasta que de pronto, desde el fondo de
sus entra�as, sali� un gemido de placer, ocasion�ndole una serie de
contracciones que tensaban sus piernas, espasmos de placer recorr�an su cuerpo,
estaba teniendo un gran orgasmo, y yo no pude aguantar m�s y me corr�, soltando
una gran lechada al frente, cayendo al parqu�.
Al momento ella me mir�, se ri�, y me dijo, no ves como no me
ibas a tocar y soltar�as el estr�s sexual, le dije que era verdad, ella me dijo
despu�s, que no veas como es la lesbiana entre risas, y yo me re�. Despu�s me
vest� y me fui a mi casa, maravillado por la escena.