Mi padre cumpl�a 50 a�os, lo llame para saludarlo, lo note
triste, estaba como acongojado, estaba triste porque estaba solo, su esposa
hab�a salido de viaje, cuando se fue discutieron, y no lo llamo en toda la
semana, ni si quiera el d�a de su cumplea�os, la �nica llamada que hab�a
recibido era la m�a.
Yo vivo en otra ciudad, a 3 horas de avi�n, no pensaba
viajar, pero al verlo tan mal, le dije que lo visitar�a el fin de semana. Se
emocion� al escuchar esto, pues el sabia que no pod�a pedirme nada. Me hab�a
abandonado cuando ten�a 5 a�os al separarse de mi madre y me visitaba alguna
navidad cada dos o tres a�os.
Luego cuando yo cumpl� 18 a�os comenz� a relacionarse conmigo
mas frecuentemente Ahora a mis 20 a�os la relaci�n era cordial, pero distante,
el tiempo perdido no se recupera.
Llegue en el vuelo del S�bado por la ma�ana, estaba solo en
la casa preparando unas pastas. Nos sentamos a almorzar y conversamos de temas
triviales, hasta que en un momento se puso serio y me dijo:
Hijo, sabes una cosa, me siento muy distante de ti, y se
que no puedo recuperar el tiempo que no te dedique.
Si, es verdad, padre, no se puede hacer mucho, solo
tratar de mantener la buena relaci�n que tenemos hasta ahora.
Si, pero es que yo quisiera que podamos hacer algo para
acercarnos un poco mas, dijo.
Lo siento, pero no se me ocurre nada, no creo que sea
posible hacer nada, dije.
Si, es que yo pensaba, bueno, que hay cosas que acercan a
las personas mas, no se como por ejemplo el sexo, dijo.
Si, aunque algunas veces las aleja, conteste.
Es verdad, pero yo ya estoy alejado, tomar�a el riesgo,
no se, creo que si tu fueras mujer y tuvi�ramos sexo, se podr�an achicar las
distancias, no crees?
Jajaja, claro, es posible, pero no soy mujer.
En ese momento se produjo una pausa, deje de mirarlo a los
ojos, estaba entendiendo bien hacia donde apuntaba, solo atine a hacerme el
distra�do. Soy cien por cien heterosexual, pero siempre tuve alguna que otra
fantas�a con hombres, pero solo eso. Estaba seguro que el d�a que se presentara
la ocasi�n no iba a aceptar.
Ahora se ven�a una propuesta muy fuerte de digerir, y pens�
que con mi indiferencia el no se atrever�a a formalizarla.
Pero finalmente ese silencio tuvo fin, y lo no deseado, lo
inevitable, lo temido ocurri�.
- Bueno, no eres mujer, pero si simulamos que lo eres, ese
acercamiento podr�a producirse, no?
Lo dijo, no pod�a creerlo, se cumpl�a una de mis fantas�as
mas anheladas, no sab�a que hacer, no contest�, mi rostro se sonrojo, y el
coraz�n me lat�a como si fuera a estallar.
Vamos hijo, hagamos algo por acercarnos, se que no puedo
pedirte nada, pero esto es algo que estoy seguro que nos har� sentir mejor,
tendremos mas confianza.
Sin pensarlo mucho, mov� la cabeza en se�al de
consentimiento. Me sorprend� de hacerlo, dude luego, pens� en decirle que me lo
deje pensar, pero luego de un momento decid� dejarme llevar por el v�rtigo de la
situaci�n. Pensar talvez implicaba rechazar la propuesta, y probablemente al
volver a mi casa me arrepentir�a.
El me mir� con una mueca de conformidad, se levant� de la
mesa y fue a su cuarto a buscar algo, luego entro al ba�o por un instante, intu�
que hab�a ido a tomar una pastilla tipo viagra. El pensar en eso me provoc� una
erecci�n total, inmediata, estaba caliente, deseando revolcarme en la cama con
el.
Se sent� a la mesa nuevamente y me dijo:
Hijo, quieres hacerlo ahora, o luego de almorzar?
Ten�a cerrado el est�mago, hab�a perdido el inter�s por la
comida, pero si mi hip�tesis del viagra era correcto, el necesitaba media hora
para que surta efecto.
Terminemos de almorzar, contest�.
Seguimos almorzando en silencio, pod�amos sentir como
respir�bamos en forma agitada, lo m�o era casi jadeo. Luego, sirvi� el postre y
saco un par de temas triviales a los cuales respond�, eso era mejor que el
silencio.
Despu�s del postre, me mir� y me hizo una se�a con la cabeza
para que lo siga. Entramos a su cuarto, me puso sus manos en mi cara y me dio un
beso en la boca. Me meti� la lengua hasta la garganta. Se comenz� a sacar la
ropa, y me mir� en se�al que haga lo mismo. Nos quedamos totalmente desnudos,
nuestras erecciones eran tremendas. Su pene totalmente recto apuntaba hacia m�,
ten�a la cabeza mas grande que el resto, como un hongo, era largo, pero
sobretodo grueso, y se notaba sus venas hinchadas.
Ya lo hiciste?. Me pregunt�
No con un pene real, a mi novia le gusta ponerme un
consolador mientras me chupa, pero no es de ese tama�o, dije, un tanto
sonriendo.
El tambi�n se sonri�, y me pregunt� si quer�a usar alg�n
lubricante. Yo le contest� que si, entonces me invit� al ba�o para buscarlo. No
ten�a nada especial para la ocasi�n, empec� a buscar en las cremas de su esposa,
era raro estar los dos en el ba�o buscando un lubricante, desnudos con los penes
erectos. Era como si estuvi�semos jugando, pero no era para nada un juego.
Finalmente tom� una crema de enjuague para el cabello y una toalla, y me dirig�
al cuarto nuevamente, el me sigui�.
Apoy� la crema enjuague en la mesita de luz y me sent� sobre
la cama, el se par� en frente a mi y se tom� su pene con la mano, era una clara
invitaci�n a que lo chupara. Lo hice sin meditar, estaba rico, salado, duro,
caliente. El primer gemido de placer sali� de su boca. Segu� chup�ndolo y el
gimiendo. Luego me retir� la cabeza, me acost� de espaldas, frente a �l, me
levant� las piernas y comenz� a chuparme el ano. Era riqu�simo, me sent�a en las
nubes.
Luego de un momento, abri� el pote de crema de enjuague y me
lubrico, meti� un dedo y luego otro, y me masajeaba, y entraba y sal�a con sus
dedos, luego puso mas crema de enjuague y meti� tres dedos, los mov�a en
c�rculos, los sacaba y los pon�a. Me mir� como pregunt�ndome si estaba listo, le
hice una se�a afirmativa con la cabeza. Entonces se lubric� un poco su pene, se
sec� las manos con la toalla, me abri� un poco m�s las piernas y apoy� su cuerpo
sobre el m�o.
Tuve una �ltima mirada sobre su pene, que parec�a que crec�a
minuto a minuto, lo ve�a enorme, era mucho m�s grande que el consolador de mi
novia. Pens� por un instante que no iba a poder con �l, pero no era momento de
arrepentirse.
Cerr� los ojos, lo abrac� y le dije:
Ven padre, d�melo
El apoy� la punta del pene sobre mi ano, e hizo un a leve
presi�n, estaba un poco cerrado, y no pudo avanzar.
Vamos hijo, me dijo, ya voy
Y comenz� a presionar suavemente, mi ano se estaba dilatando
un poco, a medida que el avanzaba.
Por favor, papi, despacio, le dije
El se detuvo un poco, la cabeza estaba dentro, dol�a un poco,
pero era soportable, luego de a poco, comenc� a abrirme, y yo mismo lo tom� de
las nalgas y lo empuje hacia m�.
Vamos, le dije, ven, ven dentro de mi.
Y lentamente, pero de una vez, me penetr� profundamente,
dol�a un poco, pero sab�a que iba a pasar, me sent�a cerca de el, me sent�a
suyo. El dolor comenz� a ceder, y estaba invadido de un placer incre�ble.
Vamos, le dije otra vez, dame, d�melo todo, d�melo.
Ah� comenz� a bombear, primero lentamente, luego m�s, y m�s
fuerte, hasta que me dijo:
Hijo, ya estoy, no aguanto, ya estoy
Si, papi, dame que yo tambi�n ya estoy, hag�moslo juntos.
Me tom� de los hombros, y me dio unas embestidas mucho mas
fuertes a�n, me dol�a un poco cuando llegaba al fondo, y finalmente en un grito
animal, primitivo, de ansiedad y desahogo terminamos juntos.
Se qued� un poco dentro de m�, hasta que comenz� a irritarme
y le ped� que lo sacara. Se qued� de todas formas sobre m�.
Ahora estamos m�s unidos, me dijo.
Seguro, yo le contest�.
Cuando te vas?, me pregunt�.
En el vuelo de ma�ana a la noche, le dije.
Bueno, tengo una caja entera de viagra, me dijo
sonriendo.
Lo hicimos toda la tarde, y durante la noche, y al otro d�a
hasta que me fui.
Lo hicimos unas 9 o 10 veces, pero esa ocasi�n fue la �nica.
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