Mis movimientos se hac�an cada vez mas fuertes, chupaba sus tetas con locura segu� por 5 minutos o mas mamando sus tetas, hasta que la acomode de a perrita viendo como su pucha sal�an jugos vaginales...
Jam�s, Daniela, hab�a tenido una noche tan ajetreada como con su acosador, que sin haberle visto el rostro, por la dulzura de sus murmullos en sus o�dos y sus suaves caricias en todo su cuerpo, m�s la delicadeza con que usaba su larga lengua y por �ltimo el maravilloso miembro... ��enorme!!..incansable, con una fabulosa carga de liquidos seminales que la dejaron satisfecha como jam�s nadie lo hab�A HECHO... AUNQUE TAMBIEN SIN PENSARLO sinti� los placeres con Carozo y el marido de su mama...