Pero no quiero aburriros con mi vida, yo s�lo quer�a
comentaros lo que me sucedi� un s�bado del verano pasado: mi hija celebraba su
cumplea�os y hab�a salido con sus amigos y con el chico con el que estaba
saliendo por aquel entonces. eran las cuatro de la ma�ana y yo no paraba de dar
vueltas en la cama. me preocupaba que mi hija tardara tanto en volver. a pesar
de mis preocupaciones por mi hija yo sab�a que tendr�a que resignarme ya que
ella acababa de cumplir 18 a�os y tampoco pod�a exigirla demasiado pues siempre
hab�a sido una chica responsable.



Por fin, aproximadamente a las 05:50 de la ma�ana o� la puerta de entrada y
pens�: "por fin est� aqu�...".

me levant� de la cama y me acerqu� para poder verla entrar en la habitaci�n ya
que nuestras habitaciones est�n un enfrente de la otra.

Cuando estaba justo a la entrada, v� que mi hija no ven�a
sola. la acompa�aban dos chicas...una rubia alta que yo no conoc�a y otra chica
llamada mar�a que era amiga de mi hija desde la infancia y a la que yo conoc�a
muy bien.

Una de ellas sujetaba a mi hija de un lado y mar�a la
sujetaba del otro. la rabia que cog� en ese momento cuando supe lo que ocurr�a
casi me hace salir de la habitaci�n dando gritos: cuando v� que sus dos amigas
la sujetaban cada una por un lado y ve�a que mi hija no andaba, sino que
arrastraba los pies,-ayudada por sus amigas,-por supuesto,comprend� que mi hija
ven�a completamente borracha.

Estuve a punto de salir de la habitaci�n dando un grito y con
idea de darla una buena bofetada por venir en ese estado pero cuando la o�
hablar, eso si, con una voz gangosa y casi ininteligible, me detuve y escuch�:

"-me ha deggado, el cabr�njjj me ha deggado..."- cre�
entender que dec�a mi hija.

"-chiss...c�llate tia, que nos va a oir y no querras que te
vea como una cuba"-la dec�a mar�a.

Tras escuchar esas palabras me qued� observando en la
oscuridad de mi habitaci�n viendo c�mo la llevaban a la suya.

Debido a la situaci�n de las dos habitaciones y a que a esa
hora ya los primeros rayos del sol se filtraban entre las rendijas de las
persianas, pude ver lo que ocurr�a en el interior de la habitaci�n de mi hija:

Entre las dos la quitaron la cazadora de cuero que llevaba,
la tumbabaron en la cama y mar�a la quit� las botas. despu�s salieron en
silencio de la habitaci�n.

Cuando las dos amigas sali�ron de mi casa entr� en la
habitaci�n de mi hija.

Estaba tumbada boca abajo, no se si durmiendo profundamente o
m�s bien totalmente incosciente por la borrachera. vi que se hab�a vestido con
un microminifalda de esas que no llegan a las rodillas y me qued�
contempl�ndola.

Mi hija llevaba puesto por arriba un top blanco muy ajustado.

- hija....-la llam� sacudi�ndola suavemente. estaba
profundamente dormida.





Yo...y cuando recuerdo eso no sabr�a explicar por qu� lo hice(ya que fue el
comienzo de la acci�n m�s reprochable de toda mi vida pero que he repetido m�s
veces desde aquella noche y sin remordimientos)...empuj� el cuerpo dormido de mi
hija y la puse boca arriba en la cama contempl�ndola de nuevo.

Pude comprobar sin ninguna duda que debajo de ese top blanco
no hab�a nada m�s debajo...solo sus pechos redondos y sus pezones, que se
marcaban claramente.

- pero hija...c�mo puede ser que vayas vestida como un
buscona cualquiera...no te he educado para que vayas por ah� vestida de esa
forma, exhibiendo tu cuerpo a cualquiera...-le reproch� �sto a su cuerpo
dormido.

Entoces, al recordar lo que hab�a o�do decir a mi hija con
voz gangosa, comprend� lo sucedido... mi hija se hab�a puesto guapa para dar ese
paso definitivo en una relaci�n de pareja: la relaci�n sexual.

Todo encajaba ya...su borrachera, las palabras que dec�a
cuando lleg�, la forma de vestir...quer�a estar guapa para su chico y �ste la
hab�a dejado, por eso regres� a casa borracha.

Cuando comprend� los motivos que la hab�an llevado a hacer
eso todo mi cabreo se esfum� y sent� l�stima por ella. yo conoc�a a muchas
personas que cuando hab�an decidido entregar su virginidad a su amor, �ste las
hab�a dejado.

Me sent� en la cama junto a ella y la acarici� el cabello
largo, oscuro y sedoso mientras la miraba con tristeza al saber lo que la hab�a
pasado.

mientras la acariciaba el cabello desvi� mi mirada a su pecho, que se mov�a
suavemente de arriba abajo y no pod�a dejar de asombrarme ante el tama�o de sus
senos...por supuesto herencia materna.



Entonces no se que ocurri�, ni como ocurri�...pero dej� de acariciarla el
cabello, desliz� suavemente mi mano a lo largo de su cuello y la pos� suavemente
sobre la curva de sus senos. mi coraz�n comenz� a latir con fuerza y mi
respiraci�n se hizo agitada y acelerada...ten�a miedo de despertarla. mi mano
apret� ligeramente esos senos tan grandes y cuando constat� que estaba
profundamente dormida, la mano que ten�a libre se pos� tambi�n sobre sus senos.

Santo dios...�qu� estaba haciendo...? estaba comportandome
horriblemente mal...pero no pod�a evitarlo. en cuanto mis dos manos se situaron
sobre los senos redondos de mi hija y pude tocarlos y masajearlos con total
impunidad no tard� mucho tiempo en bajarla el top descubri�ndo esos senos
rosados, redondos y perfectos. los latidos de mi coraz�n aumentaban y doblaban
su velocidad, pero a pesar de eso tuve la osad�a de inclinar mi rostro sobre los
pechos de mi hija y lamer suavemente sus pezones.

Desde que me separ� de mi c�nyuge no hab�a vuelto a tener
ningun tipo de relaci�n sntimental o sexual con nadie y creo que esa fue la
excusa que puse a mi conciencia para justificar lo injustificable.

Dej� de lamerla los pezones y aunque el miedo ya no era lo
que sent�a en ese momento, mi coraz�n segu�a latiendo con fuerza y velocidad.
aquello era lo peor que pod�a hacer, la m�s horrenda de las abominaciones
posibles...pero me estaba excitando por momentos y no pod�a detenerme ahora...

Dej� de acariciarla los pechos y me qued� un rato contempl�ndola, dormida...con
sus senos descubiertos. tras observarla durante unos minutos, desliz� mis manos
desde sus pechos a lo largo de sus caderas y las desliz� hasta la parte inferior
de su minifalda para cogerla de los bordes de la prenda y sub�rsela hasta que
pude ver su prenda �ntima...un delicada braga negra tipo tanga. estaba claro que
mi hija deseaba entregarse a su chico plenamente...yo sab�a que lo que estaba
haciendo a mi hija era abominable, perversi�n absoluta...pero esos pensamientos
no me impidieron contemplar la braguita de mi hija y mientras la miraba, al
mismo tiempo me quitaba el camis�n qued�ndome tan solo con las bragas. mis
pezones estaban endurecidos y comenz� a acarici�rmelos y a pellizcarlos
suavemente. tras unos minutos as� desliz� la mano hacia la braguita de mi hija y
se la fui bajando hasta que se la saqu�.

Justo inmediatamente despu�s de quitarla las braguitas a mi
hija, �sta movi� a un lado la cabeza y me qued� paralizada por el miedo y el
terror que sent� en esos momentos: si mi hija despertaba �qu� la dir�a cuando
viera que no llevaba bragas?�y qu� la dir�a cuando viera a su madre inclinada
sobre ella vistiendo tan solo una bragas?.

Con gran alivio por mi parte, mi hija no hizo nig�n gesto m�s
ni se despert� y yo continu� con mi depravaci�n, convencida de que a pesar de
que lo que hac�a estaba muy mal, yo deseaba continuar hasta el final...

Tras el p�nico que sent�, volv� a estar segura de que mi hija
estaba profundamente dormida y no despertar�a facilmente asi que tras contemplar
unos minutos el vello oscuro que cubr�a su pubis la sujet� suavemente por los
tobillos y comenz� a separarla las piernas poco a poco hasta que pude ver
claramente su almeja rosada frente a mis ojos.

Yo estaba con la boca abierta, contemplando aquel templo de
placer, un templo nunca profanado, segun creo...un templo que iba a ser
profanado por mi. desliz� mi mano hacia la vulva de mi peque�a ni�a y comenz� a
juguetear con los pliegues de su sexo hasta que pude ver al fin aquella juvenil
almeja en todo su esplendor:completamente abierta y rosada.

Me recorri� por mi esp�ritu una alegr�a y felicidad casi
indescriptible al saber que yo iba a ser la primera en saborear aquella
maravilla. sin remordimientos y con un fuerte deseo de hacerlo...gir� mis dedos
suavemente sobre el sexo de mi hija introduci�ndolos poco a poco en su co�o.
mientras hac�a �sto, desliz� mi otra mano debajo de mis bragas y comenz� a
acariciarme el sexo.



Cuando me toqu� la vulva me qued� estupefacta al comprobar que mi sexo ya estaba
completamente h�medo...estaba cachonda como una vulgar adolescente, con las
hormonas desbocadas.

-��mmmnnnn...!!-gem� en cuanto sent� mis dedos en la vulva.
yo me hab�a masturbado muchas veces a lo largo de mi vida pero puedo jurar que
jam�s sent� tanto placer en la primera caricia como el que sent� ese dia,
masturbandome mientras deslizaba los dedos en el sexo de mi hija.

mientras agitaba suavemente los dedos en el co�o de mi hija,
con la otra mano me introduc�a los dedos en mi sexo.

Debido a la humedad de mi co�o, mis dedos se deslizaron
suavemente en el interior de mi vagina y me estremec� gimiendo de placer.

al mismo tiempo de sentir mi co�o chorreando de placer, sent�
que a pesar de que mi hija estaba dormida, su co�o se humedec�a mojando mis
dedos introducidos en su vagina.

Dej� de masturbarme para pasar a hacer cosas m�s excitantes
con el cuerpo de mi hija.

Me quit� mis bragas qued�ndome totalmente desnuda y comenz� a desabrochar la
minifalda de mi hija desliz�ndola hacia abajo hasta que se la saqu� y la arroj�
a los pies de la cama para immediatamente despu�s llevar mis manos a su top,
acariciarla de nuevo sus pechos enormes y subirla el top, deslizarlo por los
brazos suavemente y sac�rselo. ahora mi hija tambi�n estaba desnuda.

Tras contemplar unos minutos su cuerpo desnudo, me inclin�
sobre ella comenzando a mordisquearla los pezones y sin comprender c�mo era
posible que no se despertara. cuando me cans� de ese juego, desliz� mis labios
hacia su vientre y los pos� con delicadeza sobre su almeja rosada. en cuanto
sent� los c�lidos labios de su vulva sobre los mios, saqu� la lengua comenzando
a lam�rselos.

El sabor de aquella vulva era deliciosamente dulce y me
sorprend� al saborearlo, puesto que estaba convencida que ser�a amargo y
repugnante...aunque bien es cierto que ninguno de los amantes que tuve dijera
nada negativo de mi co�o mientras se lo com�an. pero bueno, volviendo a la otra
parte de mi historia...no se cu�nto tiempo estuve lami�ndo la almeja jugosa de
mi hija, s�lo s� que en un determinado momento mi lengua dej� de lamer la vulva
de mi hija y se desliz� dentro de su co�o. justo en ese momento mi hija sufri�
un espasmo y su cuerpo se agit�. imaginaros el terror que pas�...estaba
convencida de que mi hija se hab�a despertado. la verdad es que afortunadamente
no se despert�...quiz�s sinti� placer pero estaba inconsciente a�n.

Tras el miedo pasado, decid� que no pod�a demorar m�s lo
imposible de demorar cuando est�s tan caliente y tan cachonda como yo lo estaba
en aquel momento. asi que, sin m�s espera, me inclin� despacio sobre el cuerpo
incosciente de mi hija colocando mis caderas entre las piernas abiertas de �sta.

-lo siento hijita mia,se que est� mal lo que hago pero no
puedo evitarlo...est�s tan hermosa as�, desnuda...

Tras decir estas palabras a mi hija, me tumb� despacio sobre
ella y s�lo el hecho de sentir mis abundantes senos aplastados sobre los de mi
hija me excit� y gem�.

Despu�s comenc� a mover el cuerpo procurando que mis pezones
endurecidos se frotaran contra los de mi peque�a. tras unos minutos frot�ndome
los pezones con los de mi hija y sintiendo como mi coraz�n lat�a con furia, la
cog� de la cintura, la separ� las piernas lo m�ximo que pude e inmediatamente
despu�s agit� mis caderas hasta que sent� c�mo mi co�o h�medo se pegaba con
fuerza a la jugosa almeja de mi hija.

Cuando mi co�o roz� la vulva de mi hija no pude evitar gemir
de nuevo. rapidamente comenc� a agitar mi cuerpo frotando mi co�o contra el de
mi hija.

-�siii...si...me gusta hija, me gusta...mmnnn!- yo gem�a mientras sacud�a mis
caderas y empujaba mi pelvis contra la almeja de mi hija.

Era maravillosa la sensaci�n de follarme a mi peque�a sin que
se diera cuenta...totalmente inconsciente. yo agitaba mis caderas sintiendo qu�
estaba violando a mi hija...solo el hecho de pensar en eso me excitaba cada vez
m�s y agitaba mi pelvis cada vez m�s deprisa, gimiendo y excit�ndome cada vez
m�s y m�s, frotando mi almeja h�meda contra su co�o caliente y h�medo...�dios
que placer sent�a!.

Mientras frotaba mi almeja h�meda contra el co�o de mi hija,
desee fervientemente tener una enorme verga con la cual penetrarla hasta el
fondo de su vagina destroz�ndola con violencia la virginidad. cerr� los ojos
dibujando en mi mente mi cuerpo poseyendo un enorme verga y desgarrando con
violencia el co�o de mi hija. mientra yo me imaginaba violando a mi hija,
agitaba deprisa y violentamente mis caderas...cada vez m�s y m�s deprisa. mi
cuerpo ya se agitaba en incontenibles espasmos y mis caderas empujaban m�s y m�s
fuerte contra el sexo de mi hija y mis gemidos aumentaban hasta convertirse en
fort�simos gritos de placer cuando me acercaba al orgasmo.

Cuando ya mi cuerpo no pudo aguantar m�s la intensida del
placer, sent� que con violentos espasmos en todo mi cuerpo, me corr�, alcanc� un
orgasmo y mi co�o se desbord� de fluidos mezclandose los mios y los de mi hija.

Tras el orgasmo, todo mi cuerpo se relaj� y me tumb� despacio
sobre el cuerpo de mi hija bes�ndola los pechos y dici�ndola lo mucho que la
quer�a. antes de volver a ponerla las bragas a mi hija, la acarici� de nuevo
esos senos enormes y sent� que volv�a a excitarme. a pesar de la excitaci�n
decid� que ya era bastante...no quer�a arriesgarme a que despertara. la puse las
bragas y la camiseta. no ser�a dificil explicarla al dia siguiente que estaba
as� porque la vi borracha y la met� en la cama.

yo me puse las bragas y el camis�n y sal� de la habitaci�n de mi hija
sonriendo...recordando lo bien que lo hab�a pasado con mi peque�a. cuando entr�
en mi habitaci�n supe que con ayuda de mi hermana, que era propietaria de una
farmacia, y un potente somnifero, podr�a pasar muchas noches de placer con mi
hija.

Ma�ana ir�a a hablar con mi hermana. seguro que me podr�a
ayudar...