Relato: A CIEN Hoy he recordado como Ram�n con su gran verga me rompi� el culo. era adolecente y como es normal, llegaba a jugar diferentes casas de amigos, algunos mas grandes que yo y generalmente hab�a quien te quisiera coger, especialmente si tienes un culito parado y un par de buenas nalgas. Como ocurre los papas se ivan a trabajar y nos quedabanos solos. Esa tarde llegue a la casa de ram�n, habia una griter�a en el gran patio, pues era centro de reun�on de ni�os de todas las edades, incluyendo los a los mas grandes. Ram�n se notaba que desde hacia tiempo me quer�a meter la ermosa verga que se andaba, ya lo hab�a intentado en por lo menos dos acaciones, la primera vez me llevo al inodoro de la casa y me iso sentarme en su vergota, pero no me entro, porque entonces to tenia unos siete a�os, la segunda vez me llevo a su cuarto, me bajo el pantal�n y me escupio el culo, me lo sobo rico, me encantaba, cunado se puso encima y me apunto su verga en el mero orificio, no entro nada, nada. de echo yo deseaba sentir esa cosa dura dentro de mi, pero no fue posible.
por cuestiones de estudios, me fui del barrio y por los menos cinco a�os despu�s lo volv� a encontrar, entonces yo hab�a sido cojido por dos amigo de la casa, quienes me ensa�aron a tragar verga. cuando vi a ram�n el culo autom�ticamente se me mojo, se lubric� solito. Despu�s de hablar un poco, note que la verga de rampon le levantaba el pants. me puse a cien, me llevo a establo en donde ten�an un aballo y quedaba detr�s de la casa. me dijo patojo cerote hoy no te me vas a escapar, te preparaas porque te voy a meter la verga, veo que te creci� mas el culo y ahora si te vas a tragar este tronco de verga que antes no te entraba. La verga de ram�n era las m�s fruesa y larga de las que hab�a visto y de las dos que ya me hab�a tragado y en realidad me gustaba pensar que por fin esa verga dura seria metida entre mis nalgas rodondas y paradas. Se sac� la verga, me agarro la cabeza y me hiso agacharme, le la puso en la boca y me la metio, yo ya hab�a probado el sabor del atolio o acabadura y enpece a chuparcela, pero no me cabia en la boca. me bajo el patalon y se puso detr�s mio, enpeso a restregarme su vergota en mi ano desnudo y palpitante, su verga parec�a un brazo, me dijo que no me iva a doler, empeso a hacer precion en mic lo y me empez� a doler. te agunatas puta, mi puta, me dijo dio un buen empujos y sent� como mi culo epezaba a ceder, empujo y empujo, sent� que de mis ijos bajaban lagrimas de dolor pero quer�a trag�rmela toda, despu�s de un momento me empujo y me jalo, sent� que me estaba muriendo, decanso un tatito y luego empeso a meterla y a sacarla suavemente , pero a medida que lo hacia me la metia sin ninguna compasi�n, empece a sentir lo mas rico que abia sentido. se tendio entre la paja y iso que me montara sobre su verga dura y deliciosa, mi culo ya se hab�a acomodado a su gran tama�o. despu�s de mas o menos media hora de estarme cogiendo, sent� como me atrapaba como remolino y sent� como su verga bombiaba gran cantidad de leche caleintita, me cojio tan rico, que me gusto. Algunas veces mas regrese para ponerme de cuatro y experimentar de nuevo esa deliciosa y �nica verga de Ramon, que siempre me pon�a a cien
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Relato: A CIEN
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