Relato: de tal puta tal astilla Esta es la primera vez que escribo un relato, que por cierto es cien por ciento real:
soy un adolescente de 15 a�os, no soy tan alto, ni tan bajo , me llamare juan para el anonimato.
desde que mis padres se divorciaron que fue ya ase mucho tiempo, yo viv�a con mi mam�, todo tranquilo que despu�s mi padre pidi� que viviera con �l, �l tiene una esposa y una hija que llega hace como mi media hermana.
yo acepte vivir con �l, viaje a donde el viv�a, yo nunca hab�a conocido a su esposa, era una morena envidiable, pose�a un cuerpo infartante, pechos de regular tama�o pero un trasero como para ser penetrada por diez a la misma vez, realmente hermosa; su hija una ni�a de 11 a�os triguella, con un cuerpo empezando a tornarse.
mi padre salio a saludarme junto con su esposa, menos su hija pues estaba en la escuela, me dio la bienvenida y me llevo a un cuarto que hab�an acondicionado para mi, me ayudaron a desempacar mis maletas, me dieron un ropero y all� puse todas mis cosas, salieron yo me quede a terminar de arreglar y me quede dormido por el cansancio del viaje, cuando llego la tarde me despierto me dirijo a ba�arme veo a la hija de mi pap� que estaba en la sala con sus cuadernos de estudio me saluda y yo le digo hola despu�s de eso cenamos, conversamos un rato.
Yo ya me hab�a ilusionado con penetrar ese hermoso trasero desde mi llegada, paso dos semanas y ve�a a la se�ora que por cierto no tenia mas de treinta, en tanga que por cierto era cuando me la espiaba despu�s de que se ba�aba, la cosa era que mi padre no paraba en la casa pues su trabajo lo imped�a trabajaba en otra ciudad cercana pero se quedaba all� por d�as, aveces semanas, por lo cual yo aprovechaba para espiar a su mujer en su habitaci�n cambi�ndose.
cierto d�a yo me puse a lavar mis zapatillas, era muy temprano y a ella le gustaba dormir con una bata que le daba hasta las rodillas o un poco menos semitransparente, bueno yo lavaba mis zapatillas ella llega y empieza a lavar sus tangas pero que tangas parec�an hilos dentales, diminutas prendas, yo puse las zapatillas en un tina de lavar las puse en el suelo y yo me agache para lavarle, cuando me di cuenta fue mi sorpresa extrema el gran TRASERO de mi madrastra casi me pegaba en la cara se ve�a todo no se si se daba cuenta o no, pues se le ve�a todo solo la vagina era poco tapada por la tanga, pero ese co�o estaba a diez cent�metros de m� provocandome cada vez mas, ese momento estaba con la leche que se me salia por los ojo yo solo no dejaba de hacerme que lavaba las zapatillas mientras mis ojos estaban fijos en esa maravilla, en co�o de mi madrastra con algunos bellos que le salia cerca a la vagina, era una vista hermosa la tanguita blanca era diminuta y eso me facilitaba la vista, as� paso como diez minutos, luego dijo que ya termino y se fue y yo aun all� con la verga parada a mil.
me fui a mi habitaci�n y me saque los pantalones y me puse a masajear mi pene, en ese momento escucho la risita de la hija de mi papa que me dice que haces, yo realmente asustado en p�nico y avergonzado le digo es que me duele y le estoy sobando ella, me dice entre risitas te la puedo ver de mas cerca, yo no sabia que decir, y sin que dijera nada se me acerco cerro la puerta de la habitaci�n, prendi� las luces y se me acerco, tomo mi verga y se puso a masturbarme, ella me dio yo te ayudo hermano, yo asustado no ni murmure ella me dijo que sabia lo que estaba asiendo pues uno de sus compa�eritas le hab�a contado. yo asuntado empece a disfrutar que despu�s de un rato me corr� en sus manos, salio sin decirme nada mas que no se lo dir� a nadie descuida.
almorz�bamos ella como sin nada yo a�n asustado por lo ocurrido
bueno es no es ni el principio de la historiaseguire escribiendo espero que les guste:::
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Relato: de tal puta tal astilla
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