Bueno la historia que voy a contar es verdadera, y espero que
les guste.

Un amigo me invito a ir a su ancho en el estado de Hidalgo,
Mex. , estando ah� empezamos a platicar sobre el sexo con animales, mismo que se
da mucho en provincia, me cont� como hab�a encontrado a chicos con burras,
chivas, borregas, con perras, esa platica quiera uno o no te excita, as� que yo
tambi�n me excite.

Pude observar que tenia varios perros pastor alem�n en su
rancho, lo que m�s me llam� la atenci�n es que tenia a una perra encerrada con
malla cicl�nica, le pregunte �l por que de esa situaci�n, y me dijo que no
quer�a que perros que no ten�an raza se la tronaran, si no que guardarla para un
perro de raza pura.

Al pasar el rato seguimos tomando unas copas, yo me interese
mucho por la perra, as� que la saco de donde estaba y la llevo con nosotros. La
estuve acariciando, ella muy d�cil se dejo acariciar, al rato mi amigo se fue a
ver los asuntos de su rancho, y yo me quede con la perra, as� que entre las
caricias que le hice, le toque su vulva, ella se dejo, me pude dar cuenta que se
me mojo la mano de sangre, al ver eso me di cuenta que estaba en sus d�as de
celo, la segu� acariciando y ella dej�ndose, desde luego cuidando que nadie me
viera.

Paso el tiempo, y regreso mi amigo, me explico que tendr�a
que salir a otro pueblo cerca, que no me preocupara por nada que siguiera yo
ah�, entonces al irse me met� a la casa y la perra detr�s de m�, para ese
entonces estaba yo muy excitado , as� que segu� tocando a la perra en su vulva y
yo a darme cuenta si hab�a gente cerca, cosa que pude comprobar que no hab�a
nadie, habiendo tomado mis precauciones segu� tocando esa puchita rica, la perra
se dejaba cada vez mas, as� que intente meterle mi dedo, pero me costaba trabajo
que entrara mi excitaci�n era al mil, me saque mi verga se la empec� acomodar
ella se dejaba d�cilmente, aparte de que jadeaba, yo se la empec� a empujar,
ella se acercaba hacia m� le fue entrando poco a poco, lo que es mas simio, yo
segu� metiendola hasta que estaba toda adentro, ella se quedo muy quieta al
sentir toda la verga dentro, empec� con el mete y saca hasta que me vine, sent�
como mi semen se derramaba dentro de ella, termine, empec� a sacarla y ella se
empujaba hacia mi como queriendo mas.

Despu�s la perra no se iba de ah�. �nicamente se lam�a su
vagina, al ver eso se me puso dura la verga, la llame y se acerco, le puse la
verga en su hocico y la lami�, le toque su vulva de nuevo y se dejo, as� que se
la acomode de nuevo y la met� de un jal�n, la perra se trataba de safar pero yo
segu� como si fuera perro y me vine de nuevo en ella.

Fue algo inolvidable, nunca lo he vuelto hacer pero me excita
el pensarlo.

Ojala y les haya gustado mi relato, espero sus comentarios,
gracias.