Relato: Primera Vez

Al ser este mi primer relato, me presento.

Soy mujer, tengo 20 a�os y soy de Argentina. Soy alta, morocha, no tengo el mejor de los cuerpos pero me defiendo bastante bien, jaja.


Esta es la historia de mi primera vez, de como perd� la virginidad y con uno de mis mejores amigos, con quien despu�s estuve en una relaci�n, de la cual contar� m�s adelante alguna que otra cosa.

Siempre sentimos esa atracci�n rara que una siente por alguno de sus amigos varones, se que es lindo chico y adem�s tiene una personalidad tan extrovertida, que te hace sentir que se te esta lanzando todo el tiempo. Esa noche nos hab�amos juntado en la casa de uno de los chicos, eramos un grupo grande de amigos pero ese d�a eramos pocos. En total ser�amos unos 6 o 7, entre hombres y mujeres.
Cenamos, destapamos un par de botellas y nos pusimos a tono. Empezamos a jugar un juego y para las 2:00 de la madrugada, ya se hab�an quedado dormidos m�s de la mitad, quedar�amos este chico, el due�o de casa, una pareja de novios y yo. El, decidi� ir a la habitaci�n matrimonial a ver tele, y los 4 que rest�bamos nos quedamos jugando a las cartas. Cuando el rato hab�a pasado y el alcohol me estaba adormeciendo decid� acostarme y fui a la habitaci�n matrimonial, suponiendo que mi amigo iba a estar dormido, solamente iba a acostarme en la gran cama, para poder dormir mas c�moda. Al entrar me saludo, me acost� y empezamos a mirar la televisi�n. Pasamos de largo canales de pel�culas hasta que el eligi� una comedia que justamente tenia escenas subidas de tono.

La situaci�n se tornaba incomoda, por lo menos para mi, hasta que el giro sobre su cuerpo y quedando muy cerca de mi cara me dijo:
-�Alguna vez pensaste en estar con alguno de tus amigos?
-No, bah, ser�a raro.
-� Segu�s siendo virgen? Si te estoy incomodando, avisame- dijo, mientras me peinaba el pelo.
-Si, creo que no es el momento a�n - tenia 16 a�os yo - pero bueno, las cosas pueden cambiar, y no, no me estas incomodando.

No pasaron 30 segundos y me beso, despacio, esperando que yo le correspondiera el beso. En cuanto se lo devolv�, not� como la intensidad de su beso iba en aumento, meti� su lengua en mi boca buscando la m�a y cuando la encontr�, se fundieron en una especie de lucha, dentro de nuestras bocas. La humedad ajena, el sabor a cigarrillo, la suavidad de sus labios y lo �spero de su lengua, despertaron en mi un sentimiento extra�o, sent�a un cosquilleo en mi pecho y m�s abajo tambi�n.
Puso su mano derecha sobre mi mejilla, y de a poco fue bajando a mi pecho, manoseo por arriba de mi ropa mi teta izquierda y me estremec�. Aunque hab�a llegado "lejos" con otros chicos antes, esto era diferente porque aunque le tenia amor de amigos, era amor. Me sent�a bien y c�moda. Despacio fue bajando su mano hasta mi estomago, donde encontr� el final de mi remera y meti� su mano por abajo, subiendo nuevamente hacia mis pechos. Me dijo que me ponga boca arriba y sin subir encima mio, comenz� a estimular mis pezones, con mi remera a�n puesta pero sus manos bajo ella. Me estremec� nuevamente, eso era buen�simo, era una sensaci�n muy placentera, mientras me besaba acariciaba mis pezones, que ya estaban duros, y me preguntaba si eso me gustaba, si estaba c�moda y si quer�a que siguiera.
Una de sus manos comenz� a descender, llegando a la bragueta de mi jean, se acerco a mi o�do, sin dejar de besar mi cuello y mi l�bulo y me pregunto:
-�Es la primera vez que haces esto?
-Si.
-�Est�s nerviosa?
-No.

Y con su mano, desabrocho el bot�n y bajo el cierre de mi pantal�n. Comenz� a acariciar mi vagina por sobre mi ropa interior. Mi coraz�n iba a mil por hora, se notaba que sab�a lo que hacia porque en cuanto aument� la velocidad comenc� a sentir un placer que no se puede comparar con nada.
Se posiciono sobre mi, con sus piernas abiertas y con una mano bajo mi bombacha y con la otra segu�a acariciando mis tetas, ahora sobre la remera nuevamente. Delicadamente separo los labios de mi vagina y estimulo mi cl�toris como si acariciara algo sumamente delicado, yo sent�a humedad y placer, y el tambi�n lo noto ya que se acerco nuevamente y me dijo:
-Te esta gustando, ya lo s�.

Un gemido se desprendi� de mi e intente silenciarme, ya que nadie pod�a saber lo que estaba pasando. Trate de aferrarme a una almohada o a las sabanas pero el placer que sent�a era incontenible y mis gemidos se volvieron largos suspiros.
De lo excitada que estaba, apenas si note cuando introdujo un dedo dentro de mi conchita, mojada e hinchada, no dejaba de estimular mi cl�toris cuando sent� su dedo dentro, fue como elevarse, mis sentidos volaban y no los pod�a controlar, mi pelvis se mov�a sola, y el me controlaba ya que estaba sobre mi. Adelanto su cuerpo para quedar sobre mi estomago, saco su dedo de ah� abajo y antes que pudiera darme cuenta, tenia sobre mi estomago y a cent�metros de mis pechos su miembro. Un miembro de tama�o normal, pero que me daba curiosidad, tomo mis manos y las puso sobre este, con un movimiento delicado comenc� a moverme por sobre su pene, ve�a como su cara iba cambiando, entonces decid� animarme a m�s. Sal� de abajo de el, me saque el pantal�n y me arrodille en el piso, dej�ndolo sentado en la cama. Introduje su cabeza en mi boca, y no pude evitar notar que m�s de la mitad de su miembro entraba en ella, sin vueltas de rosca, me lo met� entero. Su reacci�n inmediata fue tomar mi cabeza desde la parte de atr�s y comenzar a bombear mi boca. Las arcadas que sent�a solamente lo excitaban m�s, me lloraban los ojos por la presi�n en mi garganta, pero la estaba pasando genial. Tenia un pene en mi boca y me acababan de manosear de una manera incre�ble. En ese momento y todo, no pod�a evitar pensar que iba a venir despu�s.
Sent� un liquido tibio en mi boca y por cortes�a y por no quedar como una chiquita est�pida, lo trague. Vi su cara de satisfacci�n y su pene, todav�a erecto. Me miro y despu�s de una mueca dijo:

-Por lo que veo, tan inocente no eras, esa mamada fue perfecta.
Entre risas, me beso apasionadamente de nuevo mientras manoseaba mis pechos, ahora rebosantes afuera, ya que me hab�a sacado la remera y el corpi�o. Solo en bombacha y m�s excitada que nunca, me hizo subir a la cama, abri� mis piernas y se posiciono sobre mi. Comenz� a moverse como si me estuviera penetrando, pero solo apoyaba su miembro contra mi vagina. El roce de ese bulto contra mis hinchados y h�medos labios hacia que cada vez deseara m�s y m�s tenerlo dentro mio. Sent� como corr�a mi bombacha de lugar y tanteaba, nuevamente el hoyito de mi vagina y le dije susurrando:
-Si me duele, te voy a decir que pares. Por favor para, porque es mi primera vez.

Sonr�o tiernamente, apoyo su boca en la m�a y me beso, introdujo su lengua en mi boca y a la vez sent� la cabeza de su pene en mi vagina, gem� medio de placer y medio de dolor y el continuo bes�ndome cada vez mas apasionadamente, mientras introduc�a todo su pene en mi vagina virgen, sin dejar de besarle gem� un poco m�s alto, pero esta vez de placer. Dej� de besarme solo para ver que no estuviera sintiendo dolor o algo parecido. Comenz� a moverse como antes, pero esta vez si me estaba penetrando. Sent�a como lentamente entraba y salia de mi, generando en mi vagina una sensaci�n �NICA, generando en todo mi cuerpo estremecimientos de placer que nunca antes hab�a sentido. Mis pezones estaban duros sin siquiera tocarlos y mis piernas abiertas de par en par, sin necesidad de que el me diga nada. Se inclino y puso sus brazos a mis laterales, como si hiciera una flexi�n, y su cabeza quedo casi hundida en la almohada, mientras segu�a metiendo y sacando su pene de mi vagina, una y otra vez, siempre al mismo ritmo, cada vez se sent�a m�s rico. Aproveche que tenia su cuello cerca y comenc� a besarlo, solo tuve que decir un par de palabras para que el, hiciera volar mi cabeza:

-Me encanta, �Podr�as ir m�s r�pido? - susurre, entre gemidos.

Levanto la cabeza, me mir�, saco su pene de mi vagina, mordisqueo mis pezones por unos minutos, giro sobr� su cuerpo y me puso sobre el, como si cabalgara un caballo, humedeci� con saliva la cabeza de su amigo y lo introdujo lentamente dentro de mi. Una vez adentro nuevamente, tomo mi espalda y me hizo descender hasta su rostro, con todo mi cuerpo y comenz� a moverse, r�pidamente, entrando y saliendo y tap�ndome la boca con su mano, como si supiera que iba a gemir mucho mas que antes. Era alucinante sentir el grosor de su cabeza por mi punto-G, ver su cara de placer mientras me tapaba la boca. Creo que genero alg�n morbo en el, ya que me imped�a hablar, gemir o respirar por ella. Su cadera se mov�a rapid�simo y mi orgasmo se acercaba a gran velocidad. De repente, todo el placer que estaba sintiendo comenz� a subir por mi cuerpo, quise gritar pero no me dejo, comenc� a respirar mas deprisa y sent� como sus embestidas eran mas lentas, pero mas profundas, y antes que nos di�ramos cuenta, un liquido comenz� a escurrir por mis piernas y sobre las suyas. Me hab�a echo eyacular. Retiro su pene y medio confundida por todo, lo coloque entre mis pechos y el comenz� a moverse de nuevo hasta que eyaculo sobre mis pezones duros.

Nos miramos, nos besamos y nos acostamos a dormir, desnudos uno sobre el otro. Nos levantamos de madrugada e intentamos algo m�s pero eso es cosa de otra historia. Al otro d�a nos fuimos juntos y me acompa�� a mi casa. Nos vimos durante unos meses m�s, fue mi primer y mi mejor amante, hasta el momento.

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