Relato: DESVIRGADA A LOS 12 POR UN PERRO LLAMADO ROJO
Hola,me llamo DANA, 25 a�os,1.70mts de estatura,trigue�a de ojos verdes,bonito cuerpo y bastante caderona. Soy veterinaria porque me apasionan los animales y la zoofilia.
As� como algunos hombres se enamoran de otros hombres, y algunas mujeres de otras mujeres, me parece normal que a algunos hombres y mujeres nos gusten los animales y tengamos con ellos verdaderas relaciones de amor y sexo.
Este relato, y otros que contar� m�s adelante, es aut�nticamente verdadero porque no tengo ning�n inter�s en mentir. Lo hago para dar a conocer mi condici�n zoofilica y para animar a cualquiera que lo quiera hacer a que lo haga sin tabues, prohibiciones, ni falsos moralismos.
La Hacienda de mis padres est� muy cerca de la ciudad. All� hay ganado,caballos, burros,cerdos, y por consiguiente,perros,de diversas razas.
Nunca he tenido sexo con hombres porque no me apetece hacerlo y as� se lo promet� a mi primer perro cuando me desvirg�, pero de vez en cuando me consigo un novio para evitar comentarios.
Me desarroll� a los 11 a�os y a los 12 tuve mi primera relaci�n zoofilica y fu� desvirgada por un perro llamado ROJO, que se convirti� en mi preferido y en mi primer gran amor canino porque yo tambien lo desvirgu� a �l.
Todo comenz� en vacaciones escolares de mitad de a�o. Sal� una semana antes que mi hermano menor (s�lo somos dos) y de inmediato me llevaron para la hacienda. Yo quer�a llegar para ver a los caballos culiar a las yeguas, los burros a las burras y a los perros pegados a las perras porque me excitaba much�simo y fantaseaba imagin�ndome clavada por cualquier animal que fuera macho.
Al otro d�a de mi llegada, s�bado y quincena, los obreros quedaron libres y se fueron al pueblo a farrear o a visitar a sus familias. En la casa no qued� nadie a excepci�n de Isabel,la esposa del capataz o administrador ya que mi madre todav�a estaba la ciudad esperando a que mi hermano saliera a vacaciones para llevarlo a la finca y mi padre se fue con el capataz a la ciudad a hacer algunas diligencias y regresar�an bien entrada la tarde.
Yo ten�a 12 a�os e Isabel como 22, bonita, algo pasadita de kilos, pero hermosa. Se encargaba de cuidar los cerdos y los perros. Ese d�a ella ten�a una falda azul claro bastante corta y una blusa roja. Yo por mi parte ten�a unas braguitas rojas, un short beige bien apretadito que dibujaba mi cuquita, una blusa anudada a la cintura y unos brassieres tambien beige.La acompa�� a alimentar a los animales, cuando de pronto v� a un perro que montaba a una perra ajustandose con ella culo con culo. Isabel se puso inquieta y me pregunt� si me gustaba y le dije que s�, y entonces me pregunt� si me gustar�a hacerlo y le respond� que s� pero que me daba miedo. Ella me tom� de la mano y me condujo a la casa diciendome:
-Ven conmigo y no teemas, ya ver�s lo delicioso que la vamos a pasar.
Silb� y llam� a dos grandes y hermosos perros por sus nombres, "NEGRO" y "ROJO", y los entr� a la habitaci�n.
- Yo lo hago con NEGRO y t� lo haces con ROJO (me dijo), que tambien es v�rgen como t�, lo ten�a reservado para m�, pero no importa, te lo cedo a t�.
Al ver semejantes perros me encend� de calor por todo el cuerpo y sent� que mi cuquita aun v�rgen comenzaba a mojarse con ese l�quido viscoso que siempre me moja cuando me excito porque lubrico en grandes cantidades.
Isabel se sent�, se subi� la falda y NEGRO comenz� a olfatearla por los muslos y a meter su hocico buscando su cuca y su vagina. ROJO me miraba y se paseaba nervioso. Isabel me sent� a su lado y comenz� a tocarme mis teticas cuyos pezones de inmediato se endurecieron. Ella se quit� los panties y pude ver su cuca regordeta y rasurada, siendo lamida por NEGRO quele met�a la lengua por la raja mientras ella se retorc�a de placer. Me desaboton� mi short, me baj� la cremayera y me toc� mi cuquita por encima de mis panties diciendome:
- Oh Dios, qu� cuquita tan bonita tienes y toda ser� para ROJO, verdad que s�?
Asent� con la cabeza y ella me quit� mis panties, meti� un dedo en mi rajita, luego meti� otro, los empap� con mis l�quidos y se los pas� a ROJO por la nariz, lo que pareci� electrizarlo porque mov�a la cola andando de un lado para otro a mi alrededor. Isabel segu�a acariciando mis teticas y mi cuquita diciendome que para que dilatara y no me doliera mucho cuando ROJO me penetrara y me desvirgara. Suavemente me abri� m�s las piernas indicandole a ROJO que se acercara y �ste de una vez comenz� a lamerme desde mis entrepiernas hasta llegar a mi cuquita aun v�rgen, pero que ya ped�a a gritos que la desvirgaran. Rojo me lam�a y met�a su lengua como carrasposa dentro de mi rajita cada vez m�s adentro y yo me abr�a m�s de piernas para que el me diera placer y y lubricara y saboreara lo que pronto se iba a comer.
Yo no pod�a m�s, deseaba ser pose�da por aquel enorme animal cuya verga ya comenzaba a asomarse. Ya no me preocupaba si me har�a da�o o no. S�lo quer�a que me montara y me hiciera suya, que me poseyera y me pre�ara.
Isabel se coloc� en 4 patas y me dijo que hiciera lo mismo delante de ella, quedamos frentre a frente,muy cerca y cara a cara. NEGRO la olfateaba y lam�a su cuca por atr�s. ROJO comenz� a hacer lo mismo conmigo y como si estuvieran de acuerdo, los dos nos montaron al mismo tiempo y comenzaron a buscar la entrada de nustras vaginas. NEGRO penetr� a Isabel de una porque ya estaba acostumbrado, mientras que ROJO me segu�a buscando y soltando chorritos que no sab�a si eran de orines o de semen, lo �nico que sab�a es que me excitaba cada vez m�s y quer�a sentirme ensartada por aquel animal y que me hiciera suya para entregarle mi virginidad y �l a m� la suya.
La verga de ROJO tocaba mis nalgas y a veces llegaba a la entrada de mi vagina penetr�ndome un poquito. Isabel, ensartada como estaba por NEGRO, me dijo:
- Apoyate en los codos y sube m�s tu culito.
Eso hice, y ROJO me embisti� de nuevo clav�ndome de un jal�n la mitad de su verga. Sent� un ardor enorme y me quise soltar pero result� inutil porque con sus patas delanteras se aferr� m�s a mi cintura y me embisti� con m�s fuerza penetr�ndome completamente. Aaaaaayyyyy grit� sintiendo tres sensaciones al mismo tiempo: dolor, temor y placer.
Aquello fue de locura porque ROJO comenz� a embestirme a r�pido y poderosamente que sent� como si una pero en sentido contrario se hubiera metido por mi vaginita recien desvirgada. Yo lloraba y gritaba pero Isabel me acariciaba y me besaba mientras permanec�a clavada por NEGRO que la bombeaba sin cesar y a la vez< ve�a c�mo ROJO me clavaba haciendome se�ora, o perra, arranc�ndome mi virginidad, entreg�ndome la de �l y depositando dentro de m� cantidades indescriptibles de semen caliente. A estas alturas ya hab�a alcanzado 4 orgasmos, no me importaba el dolor que sent�a, mi vaginita esstaba a punto de rebentar y pod�a sentir el �mbolo que ella formaba alrededor de la bola de la vergota de aquel enorme perro que me ten�a clavada y que no me quer�a soltar.
Esto que estaba viviendo era impresionante: Una mujer y una ni�a recien desvirgada, sometidas, humilladas, dominadas y clavadas por dos enormes perros que hac�an con nosotras lo que a ellos les daba la gana y nosotras simplemente nos dobleg�bamos a su voluntad.
Rojo se qued� un momento quieto y yo sent�a su verga palpitando dentro de m�. Sent� que su bola o pera invertida se engrandec�a y me llenaba por dentro toda mi cavidad vaginal y de pronto explot� en grandes cantidades de semen en mi vientre que a pesar de que mi vagina estaba taponada y sellada por su verga y su bolota alcanz� a filtrar hacia afuera chorreandome muslos abajo revuelto con mi propia sangre. Yo apretaba y aflojaba mi vagina de tal manera que ROJO volvi�o a eyacular y tuve otro orgasmo que disfrut� al m�ximo porque los dos estabamos acabando juntos.
Cuando reaccion� me d� cuenta que NEGRO se hab�a girado y estaba culo con culo con Isabel, pero ROJO segu�a con todo su peso encima de m�. Pasados como 10 minutos tambien hiso lo mismo, pas� una de sus patas delanteras por encima de mi espalda y se gir� quedando tambien culo con culo y abotonado a m�. Isabel me dijo:
- Qu�date quieta, que ellos se desabotonan solos.
Aunque me dol�a yo segu�a comprimiendo y aflojando mi vagina, algo que pocas mujeres hacen y sent� c�mo ROJO de inflam� otra vez y me dispar� su carga de leche que yo recib� con un placer inmenso ya que junto con �l alcanc� otro orgasmo.
Qu� espect�culo, Isabel y yo en 4 patas, frente a frente, mir�ndonos, y aquellos dos perros ensartados en nuestras cucas y mirando a extremos opuestos a nosotras. As� permanecimos como 30 minutos hasta que NEGRO se saf� de Isabel y se fue a un rinc�n a asearse la verga con la lengua y Isabel chorreando semen por su cuca y a 4 patas se coloc� detr�s de m� para mirar c�mo ROJO segu�a empotrado en m� y as� permanecimos como 10 minutos m�s hasta que trat� de safarse y me remolc� pero no pudo, un nuevo tir�n y otra remolcada en vano, un nuevo tir�n y P L O P, se saf�, brotando por mi vagina ya no v�rgen, manantiales completos de semen de ROJO mezclados con mis propios jugos y sangre de mi desvirgada.
Permanec� en 4 patas mirando a ROJO aseandose su vergota como de 20 cms., luego se me acerc� y comenz� a asear mi culo y mi cuca con su lengua mientras NEGRO hac�a lo mismo con Isabel. Ella me dijo:
-Deja que te limpie porque as� jam�s se olvidar� de t�, ni t� te olvidar�s de �l, y as� fue porque me enamor� perdidamente de aquel perro y jam�s lo he podido olvidar a pesar que me prostitu� con perros, caballos, burros y hasta con cerdos.
Nos entramos a la ducha e Isabel me dijo:
- Mi ni�a, nadie sabe lo que hago con los perros y tampoco tiene nadie que saber lo que ha pasado aqu�. Este ser� nuestro secreto y siempre que quieras ven y lo hacemos juntas.
Una vez aseada, adolorida, pero feliz, me vest� y me dispuse a esperar que mi padre regresara de la ciudad.
Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .
Número de votos: 945
Media de votos: 7.66
Relato: DESVIRGADA A LOS 12 POR UN PERRO LLAMADO ROJO
Leida: 137760veces
Tiempo de lectura: 20minuto/s
|