Comadre borracha y nalgona.

Les contare como me cog� a mi comadre al terminar la fiesta de tres a�os de mi ahijada.

Yo me llamo Daniel tengo 34 a�os, mi esposa se llama Mayra tiene 29 a�os y llevamos 7 a�os de matrimonio y no tenemos hijos, el nuestro ha sido un matrimonio normal, con sus altas y sus bajas una vida sexual satisfactoria y en general yo nunca me hab�a planteado serle infiel a mi mujer, pero a veces la vida te da oportunidades que no puedes desaprovechar.

Hace casi tres a�os, nos hicimos compadres de una pareja que yo no conoc�a y que labora en la misma empresa que mi mujer, fuimos los padrinos de bautizo de una hermosa ni�a.

Mi comadre se llama Marisol, le decimos Mary de cari�o y desde que la conoc� me gusto mucho, bajita pero generosamente formada con un culito grande y redondo que se esfuerza en escapar del pantal�n que ella usa tan pegado que parece pintado en su cuerpo, una cinturita breve, pero pronunciada, unos senos medianitos, pero paraditos y apetecibles, pelo casta�o oscuro cortito, una carita de facciones finas y ojos alegres y luminosos, ella tiene 37 a�os muy bien llevados, su peque�o tama�o la hace parecer mas llenita de lo que es en realidad, pero su culito grande redondo y generoso, hace olvidar cualquier peque�o defecto que le puedas ver.

Mi compadre es un tipo normal, muy alegre y dicharachero, le lleva mas de diez a�os a mi comadre por lo que ya va entrando en los cincuenta y a �l si se le nota la edad, es su segundo matrimonio por lo que tiene otros hijos de los que ocuparse, lo cual junto con su car�cter alegre para con todas las mujeres cercanas de la empresa, le ha ocasionado varios disgustos con mi comadre, que por el contrario tiene la reputaci�n de ser muy seria y hasta algo hura�a en su trabajo.

En la fiesta en la que nos hicimos compadres, casi todo fue muy normal y tranquilo, mis compadres me cayeron bien y se ve�an felices y se llevaban muy bien, nos echamos el par de copas de rigor para brindar y baile un par de veces con mi comadre, en la segunda vez que bailamos su culito se poso un momento sobre mi pene provoc�ndome una tremenda erecci�n que tuve que disimular como mejor pude el resto del baile, Mary mi comadre se dio cuenta por supuesto y me obsequio con una sonrisa picara que hizo que se me parara mas todav�a, regrese a mi mesa con todo el disimulo que pude y aunque me mor�a de ganas de sentir ese culito otra vez, me daba pena que la erecci�n se me notara, ya que la tela del pantal�n que llevaba puesto era bastante delgada, por lo que no baile otra vez con mi hermosa comadre, transcurri� el resto de la fiesta sin ninguna otra cosa digna de menci�n, salvo una mirada algo pensativa que me dirigi� Mary al darle un abrazo de despedida, o quiz� fuera s�lo mi imaginaci�n.

Transcurri� el tiempo y tuve poco contacto con mis compadres, asistimos a las fiestas de uno y dos a�os de mi ahijada, pero no baile con Mary n ninguna de las dos fiestas, nos invitaron a comer a su casa en una ocasi�n en la que estuvo toda su familia y aparte de mirar disimuladamente el culo de Mary, no paso nada fuera de lo normal.

Las noticias que tuve de mis compadres las obten�a a trav�s de mi esposa y me dieron a saber que mis compadres ten�an cada vez m�s problemas en su relaci�n:
-Que si Jorge cela Mucho a Mary-

-Que si Mary atrapo a Jorge coquete�ndole a la secretaria-

-Que Mary ya esta harta de tener que atender su trabajo, a su hija y a un esposo que se la pasa mirando a otras mujeres y no le ayuda en nada-

En fin, muchas cosas as�, yo no le pon�a mucha atenci�n a las platicas de mi mujer salvo para imaginarme las nalgas de mi comadre y para pensar que si yo tuviera una hembra as� en casa la tendr�a mucho mejor atendida, no es que estuviera mal en casa, mi esposa es guapa, pero muy delgada, y pues siempre se antoja probar algo nuevo.

Fue hasta la fiesta de tres a�os de m� ahijada que las cosas tomaron un rumbo totalmente inesperado. Nos pidieron que lleg�ramos un poco antes para ayudarlos a llevar algunas cosas al sal�n donde seria la fiesta, que resulto estar a una media hora de su casa, llevamos las cosas con gusto, pero como mi auto es peque�o la cajuela quedo llena a reventar de varios trastes, y tuvimos que meter un par de mesas plegables y algunas sillas en el asiento de atr�s del auto por lo que solamente quedo libre el asiento del copiloto, por lo que se decidi� que Mary me acompa�ar�a para mostrarme el camino, mientras que mi esposa ir�a en la camioneta de el hermano de mi comadre con mi compadre, la mama y el papa de Jorge mi ahijada y un par de sobrinos, y aunque tambi�n estaba hasta el tope de cosas para la fiesta, pudieron hacerle un espacio a mi esposa.
Cuando le abr� la puerta para que se subiera al coche fue la primera vez en ese d�a que pude echarle un buen vistazo a mi comadre Mary, llevaba una blusa blanca pegadita que dejaba ver el comienzo de sus senos, un saco color gris con rayas rosas, y lo principal un pantal�n a juego con el saco gris a rayas tan pegado que dejaba a ver a las claras que el culo de mi comadre se hab�a puesto mas rico aun que como lo recordaba. Durante el camino le pregunte por mi ahijada, por su mama y me platico varias cosas de que si se hab�an enfermado, de lo latosa que era en fin, lo com�n en este tipo de platicas, cuando le pregunte como estaba mi compadre le cambio el semblante, puso cara de disgusto y me respondi� con un simple �bien� sin darme mas detalles, se notaba a leguas que su relaci�n no estaba en su mejor momento, como el ambiente se puso algo pesado y no se me ocurr�a nada que decir le dije lo que estaba pasando por mi mente desde el principio.

-Te ves hermosa Mary-

A lo que sigui� un largo silencio que no supe como interpretar hasta que sonri� seductoramente y me contesto.

-Gracias-

En esos momentos me indico que ya hab�amos llegado y proced� a estacionar el auto y a bajar las cosas, la camioneta que tra�a a mi esposa, a mi compadre y dem�s, llego inmediatamente cosa que agradec� por que ese sencillo �Gracias� dicho con aquella sonrisa hab�a disparado mi coraz�n que ya lat�a a mil por hora.

Ya en la fiesta note claramente que mis compadres estaban distanciados, cuando uno nos acompa�aba en nuestra mesa el otro se ausentaba y viceversa, nunca bailaron juntos y en general trataban de evitarse.

En un momento dado mi compadre me llamo aparte para brindar y platicar, mientras mi esposa se quedaba platicando con Mary.

-Salud compadre- me dijo Jorge mientras me ofrec�a una copa con tequila.
Note que Jorge ya andaba bastante tomado, pues hablaba un poco cortado y se tambaleaba ligeramente al caminar, yo por mi parte nada mas me hab�a tomado un par de copas por lo que andaba bastante sobrio.

-Salud- Le respond� � por el gusto, ya que no te dejas ver pinche compadre-

-Tu eres el que te escondes compadre- me contesto � y la verdad me caes a toda madre, por lo que seria triste que se acabara el compadrazgo-

-No te entiendo pinche compadre- le dije- primero me dices que te caigo muy bien y luego que quieres acabar el compadrazgo �Pues quien te entiende?

-No es por ti compadre � dijo- es por mi vieja que ya no la aguanto, me cela mucho y me anda vigilando como polic�a la cabrona, adem�s no se si me esta poniendo el cuerno con alg�n cabr�n, yo creo que nuestro matrimonio ya vali� madres y no s� como deja eso nuestra relaci�n de compadres-

-Pues seg�n s�, seguiremos siendo compadres por que la relaci�n es por mi ahijada que nunca va a dejar de serlo y tu y mi comadre nunca van a dejar de ser sus padres aunque se separen �le dije- Adem�s seg�n me cuenta Mayra, mi comadre tiene reputaci�n de ser muy seria en su trabajo, en todo caso el que tiene reputaci�n de coscolino eres t� compadre.

-�Eso te dice? � Me pregunt�- yo creo que entre mujeres se cuidan y tu mujer no te va a contar lo que hace tu comadre, y en cambio si te va a contar pestes de mi.

-�Entonces no es cierto compadre?- Le pregunt�- �A poco muy santo pinche compadre?

-Jajajajaja No la verdad no compa- me dijo- pero no es para que lo anden divulgando jajajaja, la verdad he tenido mis aventuras con varias secretarias y un par de chicas de la limpieza de la empresa jajajajaja, pero tu no vallas a ir de chismoso pinche compadre-

-No compadre- Le respond�- lo que me cuentes es como si se lo contaras al cura compadre, tus secretos est�n seguros conmigo.

-No esperaba menos compadre �Respondi�- �Y tu cabr�n? �Cu�ntas veces le has puesto el cuerno a la comadre?

-Ninguna compadre- le dije- y no es por santo, es que no ha habido oportunidad jajajaja-

-No es por que te quiera mal aconsejar o llevar al mal camino compadre �Me dijo- Pero la vida es corta y es solamente una no dejes pasar la vida sin haberla gozado, si tienes oportunidad aprov�chala compa.

En ese momento mi mujer nos hablo para que fu�ramos a sentarnos y ya no seguimos platicando, pero me quede pensando en las palabras que me acababa de decir mi compadre, ninguno de los dos nos imagin�bamos que pronto podr�a hacerle honor a sus consejos de una forma que de llegar a enterarse no le causar�a la menor gracia.

Nada mas llegar a la mesa Mary me tomo de la mano y me saco a bailar.

�Me prestas a mi compadre?- Le dijo a mi mujer-

-Claro comadre- Le respondi� mi esposa.

Y sin preguntarme me tomo de la mano y me llevo a la pista de baile, yo por supuesto estaba encantado al poner mis manos sobre una hembra tan deliciosa aunque fuera solamente para bailar, note tambi�n que Mary ya andaba tambi�n con unas copas de mas pues se tambaleaba al caminar, y adem�s se pegaba a mi un poco mas de la cuenta durante el baile, lo que me pon�a a mil por hora.

Al terminar la m�sica hice el ademan de llevarla a la mesa, pero ella me detuvo supongo que por que Jorge aun estaba sentado platicando con mi esposa. La pieza que empez� era una pieza mas tranquila, por lo que inmediatamente me pegue m�s a mi comadre y empezamos a bailar, su rajita se le notaba en su pantal�n pegadito y de vez en cuando me arrimaba para rozarla con mi pene que en esos momentos ya tenia una erecci�n de campeonato, cosa que a Mary no pareci� importarle en absoluto, y a mi la verdad ya un poco entonado, tampoco me importo disimular.

-�Que tanto platicabas con Jorge compadre?- Me pregunto Mary-

-Cosas del trabajo- Conteste- La verdad es que no platicamos mucho.-

-�No te platico que nuestra relaci�n ya vali� madres? � Me pregunto-
sorprendi�ndome con un vocabulario que nunca espere que ella usara.

-Algo de eso me dijo- Admit�- pero no entiendo por qu�- le dije.

-�Qu� es lo que no entiendes compadre? -Me pregunto poniendo cara de perplejidad.

-No entiendo a mi compadre- Le respond�- Si yo tuviera una mujer tan bella como tu a mi lado la cuidar�a todos los d�as y principalmente todas las noches.

Mary se sonrojo hasta las orejas, pero pude notar que se pego a m� un poco mas restregando su rajita contra mi pene de manera deliciosa.

-Pero tu tienes a Mayra- me dijo- �Acaso no la quieres?

-Quiero a mi esposa -le dije- pero no esperes que ante una mujer tan hermosa como tu me quede indiferenteeces eres una mujer extraordinariamente bella y sensual- yo ya estaba envalentonado y algo embriagado tanto por las copas que me hab�a tomado y por el perfume de esa deliciosa hembra que tenia en mis brazos y que en esos momentos me parec�a la mujer mas deseable del mundo.

La m�sica termino en esos momentos y con profundo pesar tuve que llevar a Mary a la mesa a reunirnos con mi esposa y con Jorge que ya llevaba mas copas encima y no hab�a notado nada fuera de lo com�n, mi esposa distra�da como es tampoco noto nada raro y ambos atribuyeron quiz�s el acentuado sonrojo de Mary a las copas que hab�a bebido.

El resto de la fiesta transcurri� r�pidamente, mi esposa ya no me solt�, y por otra parte Mary sigui� bebiendo de mas por lo que ya no estaba en condiciones de bailar o siquiera de platicar con coherencia, paso la partida de pastel y algunos juegos infantiles a los que no les preste atenci�n.

La celebraci�n llego a su fin y mi esposa y yo nos quedamos al final para ayudar a recoger todo lo de la fiesta, nuevamente llenamos mi carro hasta el tope y solamente quedo libre el asiento del copiloto, lo cual planteo un peque�o problema para retirarnos, ya que el hermano de Mary el que tra�a la camioneta se hab�a retirado hacia un rato con unos familiares dej�ndole las llaves de la camioneta a mi compadre para que fuera a dejar las cosas.

-�Como le hacemos?- le dije a Jorge- �Vamos a tu casa a dejar las cosas Y yo de ah� ya me voy con mi esposa?

-No compadre, si me haces favor dejas las cosas en mi casa por que pasan a recogerlas ma�ana y yo dejo las que traigo en casa de mis papas por que son de ellos- me respondi�-con voz estropajosa.

-�Pero como le hago? -Mi esposa no cabe en el coche y yo la verdad necesito que alguien me guie y que me abra la puerta, vamos r�pido y luego ya llevas las cosas a casa de tus papas-.

-Hoy pienso quedarme en casa de mis papas �respondi� mi compadre- hoy no duermo con esa cabrona, si me haces favor de ir a dejarla junto con las cosas te lo agradecer� compadre.

-�Pero como le hago con mi esposa? �Repet�- Ni modo que la deje aqu� en lo que voy y vengo.

-Si me lo permites yo la paso a dejar a su casa compadre-me dijo Jorge- Queda de paso a la casa de mis papas, la paso a dejar en lo que tu dejas a Mary y te regresas.

-�Estas de acuerdo?- Le pregunte a Mayra que en esos momentos regresaba de acompa�ar a Mary al ba�o y hab�a escuchado parte de la conversaci�n.

- Si no queda otro remedio si -me respondi�-Mary ya esta algo tomada y tampoco quiere quedarse a dormir con Jorge, nada mas con mucho cuidado.

-�D�nde esta mi ni�a �Pregunto de repente Mary- �Qui�n la tiene?

-Yo la tengo �respondi� su suegra- Ma�ana te la llevo, ni tu ni Jorge est�n en condiciones de cuidarla ahora.

-Pero si esta tan borracho �C�mo va a manejar mi compadre? � Les pregunte- Va a ser peligroso que maneje tan lejos.

-No se preocupe joven yo manejo- Respondi� el papa de Jorge- yo voy en mi juicio y paso a dejar a su mujer no se preocupe por eso.

-Entonces as� le hacemos �dije- Se van con mucho cuidado.

-Tu tambi�n -me dijo mi compadre-

Ayude a subir al coche a Mary que ya no dec�a nada y Sal� detr�s de la camioneta, pero tras un corto tramo ellos doblaron en otra direcci�n y yo segu� derecho hacia la casa de mi comadre.

En el camino note que Mary estaba mucho mas borracha de lo que pensaba, se quedaba dormida por ratos, y no me daba indicaciones de c�mo llegar, por suerte record� bien el camino, y sin trafico alguno llegamos a su casa en poco m�s de 15 minutos.

Cuando llegamos me baje del coche y pase al otro lado para ayudar a bajar a Mary.

-Comadre ya llegamos �Le dije- pr�stame las llaves para abrir.

-Si compadre -me respondi� con voz entrecortada- nada mas ay�deme.

Le abr� la puerta y la tome del brazo, Mary bajo con paso mas o menos firme, pero en cuanto le dio el aire frio en la cara sus piernas le fallaron y la tuve que sostener para evitar que se cayera, Mary ya no pod�a ni hablar y como pude saque las llaves de su bolsa despu�s de varios intentos encontr� la correcta, y logre abrir la puerta de la reja, entre casi cargando a mi comadre por un tramo de escaleras que hab�a que subir para pasar al interior, durante la breve subida le acaricie las nalgas como no queriendo en parte por calentura y en parte para ver su reacci�n, pero Mary no reacciono ni a favor ni en contra, por lo que al llegar arriba le agarre descaradamente su delicioso culito mientras ella me abrazaba para no caerse, la �nica reacci�n de Mary mientras la manoseaba fue dejar escapar uno que otro suspiro. Por fin temiendo las miradas de alg�n vecino indiscreto, me entretuve en buscar nuevamente la llave correcta y pase con Mary al interior, la sent� en la sala mientras r�pidamente regresaba a cerrar el auto y las dos puertas, al regresar un par de minutos despu�s vi que Mary se hab�a recostado en el sill�n y al parecer se habia dormido.

-Comadre Mary- La llame- d�jeme llevarla a su cuarto para que se acueste.
-Mmmmffff- Dijo por toda respuesta-

La sacud� un poco y sigui� sin responder, por lo que la tome en mis brazos y la lleve hasta su habitaci�n, mientras la cargaba la sosten�a por las nalgas y le iba dando besos en sus labios cerrados.

Al llegar al cuarto la recost� sobre su cama y con el coraz�n martille�ndome en el pecho pens� por un momento en lo que estaba a punto de hacer, record� las palabras que mi propio compadre me hab�a dicho hace apenas unas horas antes acerca de aprovechar las oportunidades que te ofrecia la vida, pero tambien me pesaba la conciencia por mi esposa y por aprovecharme de una persona en estado de ebriedad, y a punto estaba de dar media vuelta e irme, cuando Mary se dio la vuelta en la cama y al tener frente a mi ese delicioso culito que me tra�a loco, las copas y el deseo decidieron todo en un instante.

Sin pensarlo m�s comenc� a besar y a oler aquel rico trasero de hembra con el que tanto hab�a so�ado, enterraba mi nariz en su rajita y la besaba lo mas hondo que pod�a, mientras con las manos le acariciaba toda la esplendida redondez de sus nalgas, Mary seguia dormida pero lanzo un par de suspiros y paro su culito tal vez por instinto.

Despu�s la enderece sobre la cama arrodill�ndola y apoy�ndola en mi, y con la mano derecha me entretuve unos momentos en el frente de su pantal�n acariciando su rajita que se dibujaba tan claramente en su apretada prenda, pero mi objetivo principal no era ese, por lo que tras un par de minutos le desabroche su pantaloncito y aproveche para desabrochar su blusa y su brasier, para acariciar sus senos que ya ten�an los pezones paraditos, se los estuve chupando un rato,y despues la estuve besando en la boca mientras le sobaba su culazo, pero como estaba dormida no respondia a mis besos, asi que pasados unos minutos la volv� a recostar boca abajo en la cama para sacarle sus apretados pantaloncitos, que se resistieron un poco, pero por fin salieron revelando una tanguita color rosa semitransparente que me calent� todav�a mas, mi pene estaba tan parado que resultaba casi doloroso, pero decidido a disfrutar por completo ese manjar de mujer, me entretuve en quitarle los zapatos y sacarle completamente el pantal�n, yo tambi�n me desnude completamente y acto seguido la puse sobre sus rodillas y la incline poni�ndole un par de almohadas por debajo, por si se derrumbaba. El espect�culo de mi comadre empinada mostrando toda la redondez de su enorme culo es una de las mas bellas im�genes que recuerdo sum�ndole el morbo de que era un culito que no deber�a estarme a punto de comer me pon�a mas caliente de lo normal.

Inmediatamente comenc� a besar y a chupar el abundante trasero de Mary, por sobre la tanguita, o haci�ndola a veces a un lado lamia y besaba de arriba abajo su rajita de la que sal�a un olor almizcle�o que a mi me parec�a un perfume exquisito mientras mi comadre se quejaba quedamente y paraba mas su redondo trasero, pasado un rato me tome un minuto en sacarle completamente su tanguita para poder tener por fin al natural ese pedazo de culo.

Teniendo ante mi el trasero desnudo de Mary, me pregunte si mi compadre ya se la habr�a cogido por el culo mientras le met�a mi lengua por su fruncido hoyito mientras Mary dejaba escapar m�ltiples quejidos de placer mientras mi lengua inspeccionaba lo mas profundo posible el agujero de su culito entrando y saliendo y besando su parte tan intima, los quejidos de Mary eran cada vez mas fuertes y me pregunte por un momento si estar�a despierta, pero no me importo y segu� saboreando su enorme y redondo trasero.

Por fin no pude aguantar mas y me decid� a cog�rmela de una vez por todas, me acomode detr�s de Mary y se la met� de una sola embestida por que ya no me pod�a contener, Mary dejo escapar un profundo quejido al recibir toda mi verga de golpe, pero mantuvo el culo firme mientras yo met�a y sacaba mi verga una y otra vez de su h�meda conchita mientras mi comadrita meneaba su culito de atr�s hacia adelante acompa�ando cada embestida que le daba con un quejido que cada vez se iba pareciendo mas a un grito de placer despu�s de un rato de estarme cogiendo fren�ticamente a mi comadre por atras eyacule dentro de ella con un grito final tanto m�o como de Mary.

Mi comadre se derrumbo completamente boca abajo con el culo exhausto con lo que se libero mi h�meda verga tambi�n exhausta despu�s de su visita a la panochita apretada de mi comadre. Me recost� al lado de ella mientras le acariciaba suavemente su trasero, despu�s de descansar un rato, la cubr� con sus cobijas, la limpie r�pidamente con un paquete de Kleenex que hab�a en su buro y despu�s de comprobar que dorm�a y respiraba suavemente, me vest� con rapidez, y recordando las cosas que aun estaban en mi carro tome las llaves y baje hasta mi auto para bajar las cosas de la fiesta.

No me tarde m�s que unos 15 o 20 minutos en sacar las cosas del carro y acomodarlas en el patio, pero cuando termine ya tenia parada nuevamente la verga al recordar el pedazo de mujer que estaba aun lista para ser cogida en la habitaci�n de arriba, as� que sin dudarlo un instante sub� corriendo las escaleras y entre r�pidamente al cuarto de Mary quit�ndome la ropa por el camino, nuevamente desnudo me subi a la cama y destape completamente a Mary.

Me quede completamente petrificado, Mary me observaba completamente despierta con los ojos muy abiertos por el asombro, yo completamente desnudo y con mi verga parada hincado en la cama y ella desnuda de la cintura para abajo y arriba solamente su blusa desabrochada dejando descubiertos sus senos.

Del susto me quede pasmado unos momentos sin saber que hacer o decir a continuaci�n, Mary me observaba fijamente pero tampoco dec�a nada, no parec�a asustada ni enojada, s�lo sorprendida.

As� que pensando que las cosas ya no pod�an ponerse peor, decid� ir por todo, me incline sobre ella y la bese en los labios tierna pero decididamente.
Mary se resisti� unos momentos, pero al fin me correspondi� apasionadamente el beso, nos abrazamos y nos besamos como si nos quisi�ramos comer, y al fin nuevamente me monte sobre ella, le abr� las piernas y me la cog� de nuevo, esta vez por el frente y con ella despierta, me la cog� mientras nos bes�bamos y ella me acariciaba la espalda y lanzaba quejidos de placer entrecortados por el beso que nos segu�amos dando, la penetre por mucho rato dejando caer todo mi peso sobre ella besando su boca y acariciando sus piernas que me apretaban fuertemente como si nunca fueran a soltarme.

Por fin despu�s de un buen rato eyacule nuevamente dentro de ella mientras ambos lanz�bamos un nuevo grito de placer, nos quedamos bes�ndonos un rato mas mientras aun estaba dentro de ella, despu�s me recost� a su lado aun bes�ndola y acarici�ndola.

Alg�n tiempo despu�s me percate de la hora que era y me incorpore de la cama.

-Ya tengo que irme Mary �le dije-

-Si- Me respondi� simplemente.

Fue el primer sonido aparte de los quejidos que la hab�a o�do pronunciar desde que llegamos a su casa, pero fue suficiente para convencerme de que ya estaba bastante lucida para saber lo que hab�a pasado.

Me vest� r�pidamente mientras ella me miraba atentamente.

-�Qu� le vas a decir a tu esposa?- Me pregunto-

-Lo pens� un poco y le respond�- Le dir� que te quedaste dormida en el camino y que tarde un tiempo en encontrar tu casa, al fin que es en parte verdad, pero tengo la impresi�n que de ahora en adelante no me va a costar tanto trabajo llegar hasta ti.

Me obsequio con una encantadora sonrisa y se levanto de la cama, se puso su ropa interior con coqueter�a y saco de un caj�n un sexi camis�n de dormir que se puso lentamente.

-Te acompa�o a la puerta �me dijo- tom�ndome de la mano caminaba aun un poco insegura, se�al de que aun estaba bajo los efectos del alcohol, pero al llegar a la puerta me dio un firme y apasionado beso en lo que yo le acariciaba por ultima vez su redondo culito despu�s de un rato que se me antojo muy corto me dio las llaves y me dijo que cerrara bien la puerta del patio y le arrojara las llaves por la ventana.

Regrese a mi casa pensando en que deb�a de frecuentar m�s a mis compadres para fortalecer la relaci�n de compadrazgo. Al llegar a mi casa mi esposa estaba profundamente dormida y ni siquiera me pregunto la hora que era cuando me acost� a su lado.

Solamente he vuelto a ver a mis compadres una vez mas despu�s de eso, durante una comida en casa los papas de Mary a la que nos invitaron, y no hubo mas oportunidad que en una escapada a la cocina para ir por refrescos le toque su culito redondo ella sonri� p�caramente, me planto un r�pido beso en los labios y me susurro -Pronto- Mientras sal�a r�pidamente de la cocina.

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