Esta es la historia de Lorena y Aurelio, ella de 18 y el de 20 a�os respectivamente. La actividad sexual de ambos se inicia e su infancia cuando descubren revistas porno de sus tios, y por logica ponen en practicas esas apacionantes poses.
Al pasar los a�os con el despertar de la adolescencia de cada uno, el maduramiento de sus cuerpos aumento el deseo de unirse en uno sola carne. Aprovechaban cada ocacion e que quedaban solos en su casa para pasarse los trapos. El la seducia con aricias y masajes, a los que ella no podia negarse por mas de cinco minutos, se cambiaba a ropas sexis y probocativas e iniciaban un juego, como el jefe y la secretaria donde el jefe acosaba e imponia el sexo en el trabajo, comenzaba sobandole el culo, luego las tetas, se dirigia al critoris y pedia tomar el rico elixir de su vagina, lo lamia y saboreaba como el mas delicioso helado, al cabo de un rato ella imploraba que le meta ese majestuoso pene oscuro reventado de venas, ella se ponia encima y comenzaba a cabalgar que delicia, le ofrecia el culo, el cual con muchos problemas era atravesado, no usaban ni condon ni lubricantes y el pene era muy grueso, pero en el sexo todo se puede y al final entraba, se movian freneticamente hasta que ese ano se tragaba toda la leche de su hermano mayor.
Hasta hoy el no consigue que ella se lo mame, pero en la siguiente entrega les contare lo que pas� hace poco.

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