Relato: El secreto de Do�a Gabriela





Relato: El secreto de Do�a Gabriela

Ya hab�an pasado algunos d�as desde que Gabriela aceptase la
propuesta de matrimonio de Fernando, el ex-marido de su hija Norma.


Esto tuvo como consecuencia que las amistades de su futuro
esposo hac�an frecuentes visitas a la hacienda, especialmente el matrimonio
formado por Armando Navarro y Rosario Montes.


Armando era el due�o del bar Alcal�, un antro de mala muerte
con actuaciones musicales en directo, de las que Rosario, su esposa, era la
principal estrella.


En una de sus visitas Armando propuso a Fernando y a Gabriela
visitar el bar, pues iban a hacer una fiesta en su honor como agradecimiento por
haberlos incluido en su selecto grupo de amigos.


Fernando acept� encantado y Gabriela, mujer de una recta
moral, lo hizo a rega�adientes por no desairar a sus amigos y a su prometido.


Y lleg� la noche de la fiesta, a la que tambi�n hab�an sido
invitados amigos de Armando y Fernando, hombres de negocios de dudosa reputaci�n
con sus acompa�antes.


Comenz� el espect�culo y Rosario sali� a cantar subida encima
de la barra, con la indumentaria que utilizaba habitualmente: Unas botas, una
minifalda, un top min�sculo y un sombrero. Rosario mov�a r�tmicamente sus
caderas al ritmo de la m�sica� Qui�n es ese hombre, que me mira y me desnuda,
una fiera inquieta que me da mil vueltas�



Gabriela estaba fascinada por la belleza de Rosario. A sus 49
a�os no pens� que se le pod�a encender la llama del deseo de esa manera, mucho
m�s fuerte de lo que le hab�a ocurrido con Fernando, o con Bernardo, su difunto
esposo.


Cuando Rosario termin� su actuaci�n se dirigi� al camerino.
All� estaba Gabriela esper�ndola para felicitarla.




Me ha encantado tu actuaci�n. Eres toda una artista.


Gracias, Gabriela, me sorprende o�rte decir eso. Cre� que
no te gustaban estos espect�culos.


Hasta que te he visto actuar. Me has emocionado. Quer�a
pedirte un favor, ya que empezamos a ser buenas amigas. �Podr�as ayudarme
con los preparativos de la boda?


Me encantar�a, pero no se si debo. Tus hijas podr�an
molestarse.


La opini�n de mis hijas no vale nada desde que se fueron
con esos delincuentes de los hermanos Reyes. Adem�s ellas no aprueban mi
matrimonio con Fernando.


Entonces te ayudar� con mucho gusto.




Esa noche Gabriela apenas pudo pegar ojo. La imagen de
Rosario se le aparec�a por todas partes, obsesion�ndola de una manera enfermiza.
No era posible que estuviera perdiendo la raz�n por una mujer, que adem�s ten�a
la edad de sus hijas.


Unos d�as despu�s Armando y Fernando salieron unos d�as de
viaje por asuntos de negocios. Gabriela cit� a Rosario en la hacienda con el
pretexto de la boda para estar a solas con ella. Le hab�a dado el d�a libre a
Dominga, la empleada, y Don Mart�n (el padre de Gabriela) no supon�a en
principio ning�n problema pues estaba impedido en una silla de ruedas y
confinado en el piso de arriba.


Cuando lleg� Rosario, Gabriela la hizo pasar a la sala. All�
hab�a preparado t� y algo para comer.


Se sentaron en el sof�, una junto a la otra, y empezaron a
comentar las fotos de los vestidos, las flores, el men�� etc.


Rosario acariciaba suavemente el pelo de Gabriela




Tienes un pelo precioso. Gracias a Dios que por fin te
deshiciste ese mo�o de institutriz alemana que llevabas antes.




Gabriela se ruboriz� y comenz� a re�r. Rosario ten�a raz�n.
La simple acci�n de deshacerse de aquel horrendo peinado la hab�a quitado 10
a�os de encima.




Adem�s no se como haces para conservar ese tipo, quien
nos viera y no nos conociera dir�a que somos hermanas.




Los halagos de Rosario la hac�an re�r y al mismo tiempo la
excitaban, no pod�a apartar su mirada de ella.




Bueno, yo creo que en la puerta de la iglesia pod�amos
poner unos claveles blancos y� Gabriela, �te pasa algo?


No, no me pasa nada. Disc�lpame, por favor.




Gabriela estaba tan absorta contemplando aquel cuerpo
escultural que no estaba atendiendo en lo m�s m�nimo a la conversaci�n.




Y en el altar pod�amos poner unas rosas y unos tulipanes�
Gabriela! �Me est�s escuchando?




Gabriela, al verse sorprendida hizo un movimiento brusco y
dej� caer el t� sobre Rosario.




Dios m�o! Lo siento, soy una torpe!


No pasa nada, un accidente lo tiene cualquiera.


Acomp��ame a mi cuarto, all� podr�s cambiarte. Creo que
hay algo de ropa de mi hija Jimena, puede que te sirva.




Comenzaron a subir por la escalera y a mitad de camino
Rosario agarr� a Gabriela desde atr�s y la dio un beso en el cuello. Gabriela se
gir� y la dio un largo beso en la boca. Ambas se quedaron un momento mir�ndose a
los ojos, viendo el reflejo de la una en la otra.


Continuaron bes�ndose y acarici�ndose, y ri�ndose por los
malabarismos que ten�an que hacer, pues al mismo tiempo estaban subiendo por la
escalera.


Entraron en el cuarto y comenzaron a desnudarse lentamente la
una a la otra. Gabriela acariciaba y lam�a los pechos de Rosario, que se
endurec�an debido a la excitaci�n.


Rosario despoj� a Gabriela de su ropa, dejando al aire su
piel blanca y pecosa, y unos pechos que a pesar de la edad se manten�an en su
sitio. Las pecas encend�an el deseo de Rosario, que acariciaba y besaba a
Gabriela por todas partes.


La tir� encima de la cama y empez� a lamerle el co�o con gran
avidez, como si eso le fuese a quitar el hambre y la sed de por vida. Gabriela
se retorc�a de placer, mientras sus manos agarraban la almohada con fuerza.
Nunca hab�a sentido nada parecido con Bernardo y mucho menos con Fernando, que a
pesar del gran cari�o que le ten�a era un in�til en la cama.


La lengua de Rosario hac�a r�pidas pasadas sobre su cl�toris
y el placer que esto le hac�a sentir apenas la dejaba respirar.


Rosario se dio la vuelta y puso su co�o en la cara de
Gabriela, que comenz� a pasarle la lengua, devolvi�ndole as� el favor a su ahora
mejor amiga.


Ambas perdieron la noci�n del tiempo pues a pesar de que
llevaban casi una hora y media sin parar, ellas ten�an la sensaci�n de llevar
as� apenas unos pocos minutos.


Rosario se levant� de la cama y tom� su bolso.




Rosario, por favor, no te vayas.


Espera, que a�n tengo cosas que ense�arte.




Sac� del bolso un extra�o objeto. Era como un cintur�n con un
enorme pene de goma. Se lo puso, lo lubric� con aceite y abri� a Gabriela de
piernas, penetr�ndola acto seguido.


Rosario comenz� a mover las caderas fren�ticamente, de forma
similar a como lo hab�a hecho infinidad de veces en el bar Alcal�. Gabriela
cre�a que iba a explotar, sintiendo aquel objeto entrando y saliendo de ella.


En ese momento comenz� a sentir espasmos por todo el cuerpo y
a gritar de placer como una descosida, mientras ara�aba con fuerza la espalda de
Rosario, que tambi�n gritaba por esa mezcla de intenso placer y lacerante dolor
que estaba sintiendo.




Las pelotas del marrano!!! �Qu� demonios est� pasando ah�
dentro? Gabriela, hija, contesta �est�s bien?




Era Don Mart�n, el padre de Gabriela, que al o�r los gritos
fue a llamar a la puerta. A pesar de su edad y de estar impedido de las piernas,
consigui� abrir la puerta de un pu�etazo, pues su hija no contestaba.


Las sorprendi� en plena faena. Rosario cogi� la s�bana y se
taparon r�pidamente.




Don Mart�n, que pena con usted!


No importa, a m� no ten�is que darme explicaciones. Lo
�nico que le pido a mi hija es que mande al demonio al in�til ese de
Fernando Escand�n.




Don Mart�n se retir� y las dos quedaron solas.




Ven a vivir aqu� en la hacienda conmigo.


Pero, �y qu� pasa con Armando? Estoy casada con �l.


Ya o�ste a mi padre. M�ndalo al demonio, que es lo que
pienso hacer yo con Fernando en cuanto se digne a aparecer por aqu�.




Y las dos rieron al un�sono:


- Que les den por el culo!!! JAJAJA


Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .


Número de votos: 0
Media de votos: 0


Si te gusta la web pulsa +1 y me gusta






Relato: El secreto de Do�a Gabriela
Leida: 1116veces
Tiempo de lectura: 5minuto/s





Participa en la web
Envia tu relato







Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Encuestas

Afiliados




























relatosxxx de naufragos e indiecitasrelatos autobusRelato erotico mi hijastra y su manitarelatos eroticos desvirgada por mi hermano mayorRelatos gay motorizadohistorias de sexo con ni hijastacuidando a mi sobrina relatos eróticosmi papi me consiente relatos pornorelatos caliente ijo q bergonrelatos sobrinitasmaduras relatos eroticospadre desvirga sin piedad a su hija relatosrelatos porno mi hermana tiene la cuca granderelatos eroticos y videofollada por mis ahijados relatospprno lesbianasrelatos de incesto con madresesposas en ofertarelatos porno de amor filialRelatos calientes de zoofilia hombres con cachorrasrelatos porno curas y noviciasRelatos eroticos hija adolecente y papaRelatos mi pequeño hijo me embarazami hijita de 9 añitos relatosexo con el padrastro de mi amiga relatos historias porno mi papa mi quito la virginidad me cogiero borracha relatos sexualesmi nieta pequeña relatos xxx/relato20249_La-hija-caliente-de-papa.htmlrevista clima pornovideos pornos lluvia doradarelatos porno cuidando a mis spbrinas del csmpoporno madre e hija relatoRelatos eroticos asi comenzo todo primera partenenita fea relatos eroticosrelatos eroticos me envorrache y mi sobrino me folloRelatos gays culito buenoun consolar de doble puntar y lo rozaba por mi vaginaterapia marido relatos eróticorelatos de cacahndo a la huerfana de mi sobrinita relato erotico gay sobrinitoRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatohija secundari relato xxxrelatos pornos le pregunto a mi esposa si quiere ver la vergota del compadrerelatos filiales xxxRelatos porno amor filial descubri a mi hija parte 2 bdlol.ruRelato abuela espiandodespués de tener relaciones con mi hermana me follo a mi sobrina relatos eróticossuegro follarelatos eroticos viole a mi primarelatos pornos yo mi tia y mi primitaRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelato se la coge el almaceneroRelatos cojiendo con mi pequeña hijarelatos eroticos desvirginada por el pastor dela iglesiaTodorelatos trasero de balletswinger en familia relato pornorenzo mi sobrinito gay relatosRelatos porno la nena Relatos xxx infidelidad por borrachaRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatoancianos gay pprnrelato gay mi tio medio heladorelato mi madre me espia xxxIncesto con la abuela relatadosRelatos pornos con mi primita menor por el culoterelatos porno de apuestasRelatos eroticos gratis incesto sobrina de 13 añitos primera vezrelato me preño mi sobrinorelatos cachondos de abuelos con sus nietasSexosintabues incesto mi sobrinito queria saber que era la lecheIncesto con la abuela relatadosmaduras follando al fontaneroentre hermanos violamos a hermanita relatos eroticosViolada por mi profesor relatoRelatos eroticos gratis incesto sobrina de 13 añitos primera vezmi hijita de 9 añitos relatoel culo de mi primita de 10 relatoslas mejores foyadas