--�Qu� suave, pap�!

�l me retir� la mano y me dijo que lo dejara para luego.
Entr� en la ba�era, y a los pocos minutos entr� mi padre pregunt�ndome se quer�a
que me frotara la espalda. De ni�a me lo hab�a hecho muchas veces, aunque al ir
creciendo dej� de hacerlo. Le dije que s�, que me gustaba. Se puso detr�s, se
ech� un poco de gel en la mano y comenz� a frotarme suavemente la espalda, los
hombros. Luego me hizo ponerme de pie y sigui� frot�ndome el culo, las piernas,
Volv� a sentarme en la ba�era y sigui� sus manos por mis clav�culas, llegaron a
mis pechos y ah� se quedaron unos momentos, mientras con uno de sus dedos
masajeaba suavemente mis pezones. �stos se iban poniendo cada vez m�s duros y
notaba un ardor en mi sexo. Le dije a mi padre y me contest� que enseguida me lo
calmar�a. Seguidamente baj� su mano por mi est�mago hasta llegar a mi sexo.
Pegu� un bote y me dijo que estuviese muy tranquila, que no me iba a hacer da�o
y que esas caricias me encantar�an. Mientras su mano segu�a all�, uno de sus
curiosos dedos, encontr� el botoncito er�tico y empez� a masaje�rmelo. Yo estaba
estremecida y empec� a gemir y a jadear de placer. Al poco pap� me dijo que me
hab�a corrido por primera vez. Que hab�a anhelado hacer esto hac�a bastante
tiempo. Sal� de la ba�era y me sequ� r�pidamente.

Pap� me esperaba en su habitaci�n. Me sent� cohibida y me
abraz� fuertemente, dici�ndome palabras cari�osas. Me tumb� en la cama y me
bes�. Sentir sus labios pegados a los m�os, su lengua suave jugueteando con la
m�a, me volvi� a excitar. Baj� mis manos por su torso y agarr� su pene. Era tan
suave, y estaba tan grande, y tan dura que al principio me asust� al pensar que
al penetrarme me iba a partir en dos.

Pap� me tranquiliz� dici�ndome que mam� tambi�n se hab�a
asustado la primera vez, pero que luego le ped�a continuamente que se lo
volviese a meter. Eso me tranquiliz�. Se tumb� a mi lado y me pregunt� si quer�a
saborearle. Le dije que s� y me meti� su hermosa polla en la boca. Le fui
lamiendo poco a poco y notaba como se iba hinchado m�s hasta que explot� dentro
de mi boca. Me tragu� su semen y me gust�. Luego me volvi� a tumbar en la cama
boca arriba y se puso encima y empez� a bajar sus labios por mi cuello, hasta
llegar a mis pechos. Me los chup�, lami� y sabore� todo lo que quiso y sigui�
bajando sus labios por mi est�mago hasta llegar a mi sexo. Me dijo que si con la
mano me hab�a dado placer, con la boca iba a disfrutar m�s. Estaba muy caliente
y seg�n not� su lengua por mi sexo, entrando en mi vagina, explot�.
Instintivamente apretaba con las manos la cabeza de pap� contra m� cuerpo. Ve�a
mis jugos en su cara, en su boca. �l volv�a a estar totalmente empalmado. Se
coloc� entre mis piernas yse meti� de un golpe. Grit� de dolor, pero me calm�
con suaves caricias y palabras cari�osas. Empez� a moverse lentamente al
principio, para ir sacando y metiendo con m�s fuerza cada vez. Me grit� que se
iba a correr y en cuanto sent� su semen fluir por mi cuerpo explot�. Nos
quedamos tumbados, sin aliento, durante un rato mientras recuper�bamos la
respiraci�n, �l todav�a con su pene dentro de m�, sudorosos, mientras nos
bes�bamos suavemente. Al rato, se volvi� a empalmar y entonces me penetr� por
detr�s, mientras que sus dedos jugaban con mi cl�toris. Fue fant�stico.
Posteriormente, me ense�� muchas posturas y maneras de hacer.

De esa primera vez, me qued� embarazada. Como al poco de
llegar a la nueva ciudad alquilamos un peque�o apartamento en un barrio que
seg�n le dijeron a pap� en la empresa, no era muy aconsejable para m�, nos
cambiamos de barrio. All� nadie sab�a nada de si �ramos padre e hija o �ramos
pareja, no nos import� que yo estuviese embarazada. En la calle le llamaba por
su nombre. Tuvimos tres hijos y una hija a cada cual maravillosos.

Han pasado varios a�os y en la vecindad ha cambiado bastante
gente. Tengo ahora 42 a�os y pap� aunque era joven todav�a muri� tras una larga
enfermedad. Har� cosa de un par de a�os m�s o menos, vi a una pareja, �l tiene 4
a�os m�s que yo y ella, una jovencita, bes�ndose apasionadamente en el portal.
No le di importancia pero a los pocos d�as sin querer, ya que las paredes de las
dos casas est�n pegadas, o� que ella le llamaba pap�.

Al poco un conductor borracho la atropell� y la mat�. El
padre qued� desconsolado y un d�a seg�n sub�amos en el ascensor empezamos a
hablar. Le pregunt� si quer�a tomar una copa en mi casa a lo que accedi�.
Comenzamos a hablar y entre sollozos, me confes� que hab�a mantenido relaciones
con su hija durante a�os y que ahora no sab�a qu� hacer. Yo le confes� lo m�o
con mi padre. Despu�s de eso, empezamos a mantener una amistad que ha ido
convirti�ndose en amor. �l no hab�a tenido hijos con su hija. Les coment� a mis
hijos y me contestaron que adelante, que yo era muy joven para vivir el resto de
mi vida sola, y adem�s mi hija me dijo que incluso era joven para tener m�s
hijos.

Los cuatro me confesaron que ya sab�an que su padre era a la
vez su abuelo, que �l les hab�a confesado todo antes de morir. Se lo dije a
Ernesto que es el vecino en cuesti�n y me dijo que estaba encantado, que siempre
hab�a querido tener hijos. No nos hemos casado, aunque vivimos juntos. Estamos a
punto de tener gemelos, dos chicos. Estamos encantados. Y en la cama... Aunque
distinto de mi padre, Ernesto es fant�stico. He aprendido algunas cosas con �l
que nunca hab�a hecho con pap�.

Espero que os guste la historia.