En tierra salvaje
La anciana miraba con tristeza a Magdalena, la choza estaba a
punto de caerse... La chica era su primera visita en a�os.
-�Tienes hambre?
-No
Magdalena pens� que huir era lo mejor, no se atrev�a a mirar
a los ojos a Teresa.
-Demasiado delgada
-Llevo mucho viajando
-No importa... Servir�
Agarra de la mano a la chica y la lleva a una estancia mas
oscura y tetrica.
-Cumplea�os... Tu servir para banquete de cumplea�os
-Desea que la ayude a cocinar
La anciana mueve la cabeza en�rgicamente.
Acaricia el tostado cuerpo de ella, desnudo de ropa aunque no
de tatuajes...
-Buena chica... Bien formada
La anciana r�e mientras pasa sus manos sobre Magdalena.
-Guisar
Hace movimientos de remover el caldero
-�Si se guisar?
La anciana mueve, de nuevo, la cabeza en�rgicamente.
La anciana se mueve r�pido, llena un enorme caldero con
agua... Luego enciende el fuego.
Magdalena la siente abandonar la habitaci�n... La oye
preparar los cuchillos para degollarla...
Ve una ventana... Huye en instantes por ella... Aquello son
tierras salvajes... Todo ser se alimenta de otro para sobrevivir, te comes a tu
vecino antes de que otro ser vivo se lo meriende antes... La comida no sobra...
Se aleja de aquel lugar... casi 200 metros sin lugar a donde
ir... el suelo cede a sus pies... el golpe la hace perder la conciencia.
Despierta y ve aquel miembro desproporcionado, ella cuelga
boca abajo...
-�Te gusta mi polla?
No va mentirle.
-Si... �Que hago aqu�?
-Ca�ste en mi trampa
-�Y ahora que?
-Me gusta tu cuerpecito... sobre todo tu culo
El t�o la da un par de azotes en el trasero, sonr�e.
-Una piel de buena calidad... Suave y tersa.. Valdr� un buen
precio
Magdalena se asusta... �D�nde co�os ha ido a parar?
El t�o la besa la espalda mientras tienta su piel en busca de
imperfecciones...
-Que belleza de nalgas tienes
Siente el cuchillo pinchando sus carrillos....
Decide distraerle hasta que consiga desatarse...
Desde muy peque�a ha tenido que saber mamarla
magistralmente... Ese t�o no rechazara la caricia... Atrapa el miembro entre sus
labios... el t�o tiembla de placer al sentir lo c�lido de la boca... La sorpresa
es continuada con una follada de la boca oferente...
La desata y la deja caer violentamente al suelo... Abra sus
piernas y la penetra, todo en dos tiempos... 27 cm entran de golpe dentro de
Magdalena... Nadie la preparo para esto... Grita y llora como hizo la primera
vez que la follaron...
Intenta mantener, pese al dolor, la concentraci�n... Alcanza
el cuchillo... Introduce de un solo golpe la hoja en el pecho del cazador... Su
grito rompe el silencio de la sabana...
... Aqu� la ley es matar o que te maten, comer o que te
coman.